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Poco o nada podía recordar de su infancia.

A veces duda de tener una, apenas puede recordar una explosión amarilla pálida junto a la voz suplicante de alguien.
Posteriormente solo tiene el recuerdo de ser recogido por The Sheep, y a partir de ahí empiezan los recuerdos de su adolescencia.

La cual no fue lo más feliz del mundo, pero rodeado de a quienes fue tan fiel como sí de su familia se tratase, sin lugar a dudas, fue más feliz que otras de Port Mafia como pueden ser los hermanos Akutagawa.

O en todo caso su propio esposo, porque Osamu bajo la tutela del jefe de la Mafia portuaria no tuvo fortuna ni vida fácil aunque fuese solo un niño.

Un niño maltratado pero también manipulador y cruel, sin embargo, debían aprender a soltar el pasado.

Así lo aprendieron tras toda esa mierda de la rata bastarda esa junto al viejo militar con problemas de salud mental severos, inclusive si él mismo no es el mejor en salud mental. Neh, simples detalles, unas sesiones de terapia y listo.

Seguía siendo todo producto del cruel mundo lleno de injusticia que el pequeño Nakajima deseaba corregir, poco a poco quizás, pero confiaba en que puede.

Chuuya tenía la ilusión de creer que el joven tendría la oportunidad de evitar que más niños acaben como los usuarios de habilidades en general solo por ser… bueno, usuarios de habilidad.

──Después de todo, son pequeños niños malditos. ──. Añadió a la oración el castaño, despreocupadamente consumiendo unos cuantos postres.

──Exacto, y no quiero que más niños acaben como nosotros.

Igual seguiría deseándole tal maldad a Mori y Dostoyevsky, con todo respeto. ──Tendrían bastantes traumas no deseados.

──Seh– ¡¡Y déjate de comer, hará daño al bebé!!

Chuuya se abalanzó sobre su esposo, discutiendo por la dieta que el castaño insistía en adoptar mientras que el mafioso lo prohibía.

Era bueno saber que ciertas viejas buenas costumbres no se pierden.

Ni Chuuya ni Osamu habían tenido una familia como tal, no sabían que era, en el caso del primero pudo sentirlo tres veces antes, la primera vez concluyó mal gracias a una traición mientras que la segunda vez concluyó con la muerte de sus queridas The Flags.

La tercera es con algunos integrantes de Port Mafia como lo son Kouyou, los hermanos Akutagawa, Kyuusaku y otros.

En cambio Osamu pudo sentirlo brevemente con Odasaku y Sakaguchi, cosa que terminó muy mal para los estándares de Port Mafia. No fue hasta que pudo superar su trauma con respecto al Buraiha Trío que finalmente aceptó a la Agencia como su familia.

Y ahora ellos están formando su propia familia, como un matrimonio. Sin importar lo excéntricos que pudiesen llegar a ser, podían contar con el otro.

──Solo un postre más, Osamu, por el bien de nuestro bebé. ──. Determinó, cediendo a los ojitos de cachorro de su esposo.

Obligándolo a sentarse encima de varias mantas en el patio, estaba bien ver el anochecer así, era lindo.

Chuuya se sentó al lado de su Osamu, entrelazando sus manos a la vez que el detective apoya su peso en el más bajo, ventajas de ser liviano y su esposo muy fuerte físicamente, pudiendo descansar en comodidad.

Recordando como ninguno de los dos tuvo una buena infancia, tampoco una familia estable por mucho tiempo ya sea por dificultades no propias o propias.

Pero por ello se prometieron darle la mejor infancia a sus futuros hijos.
Juraron que nada les faltaría, ni amor, ni calidez, ni padres, ni paz, no les iba a faltar nada, no pasaran ninguna penuria.

Lo han jurado, porque son familia.

──¿Como quieres que se llame el bebé? ──. Interrumpió Osamu, cálido y dulce, como pocas veces solía mostrarse.

Él miró amoroso a los preciosos ojos castaños de su querido esposo. ──Uhm, Fumiya o Sakunosuke de ser niño.

Y observando las estrellas en las asombradas joyas de Osamu, Chuuya decidió.

──Yuuko de ser mujer.

──Kagayaki--Hikari-Nyx

Only soukoku soft <3