Dipper se limitó a mirar el piso... de nuevo. No era necesario mirar al rubio para saber que éste lo miraba satisfecho, y vaya que estaba satisfecho, pues por fin, después de esperar dos años que se hicieron terriblemente eternos, tenía todo lo que siempre había querido, riquezas inimaginables, el poder de gobernar el mundo entero, y lo más importante, a la persona que amaba gobernando junto a él... Bueno, lo último no era totalmente cierto, pero faltaba poco para que lo fuese.

Por otro lado, Dipper todavía intentaba asimilar todo lo que había pasado. No dejaba de mirar el piso, pensando en lo que se había metido... Pero por lo menos ahora su familia estaba segura, por lo que todo valdría la pena... O eso es lo que el castaño no dejaba de repetirse, convenciéndose de que mientras su familia estuviese bien, poco importaba lo que le pasara a él.
Sin embargo, aún le costaba creer todo lo que había pasado... Acababa de atarse a Bill por el resto de su vida, sin ninguna posibilidad de escapar de este destino.

-yo...- dijo el castaño poniéndose de pie- voy al baño.
Lentamente caminó hacia el baño del avión, ya adentro, se lavó la cara, y luego se quedó mirando su reflejo. Se veía cansado, con grandes ojeras negras bajo sus ojos. Aún no entendía la razón de Bill para quererlo a su lado... Ya le había dicho que lo amaba, pero, ¿realmente lo hacía con tanta desesperación, hasta llegar al punto de mantenerlo a su lado contra su voluntad?... Aunque bueno, Bill era Bill, y como ya había dicho anteriormente, no era una persona común.

Al salir del baño, se dio cuenta de que habían dos guardias vigilando la puerta, los miró extrañado, ¿en verdad creían que era capaz de escapar de un avión en pleno vuelo? De pronto, el avión comenzó a sacudirse.
-una turbulencia- pensó el castaño.
El avión se movía cada vez más bruscamente, Dipper intentaba mantener el equilibrio, y al parecer, los guardias también.
De repente, el avión se sacudió hacia un lado, haciendo que el castaño perdiera el equilibrio, apoyando su espalda en una pared del avión. Pudo ver que, al igual que él, los guardias estaban haciendo un gran esfuerzo por mantenerse en pie, sin embargo, uno de ellos, no lo logró cayendo al igual que Dipper, quedando frente a éste.

-¿qué mierda es esto?- dijo una voz a su izquierda.
El castaño, congelado, miró a Bill y y luego al guardia. A simple vista, se veía como si el guardia estuviese acorralándolo contra la pared. El guardia pareció darse cuenta de esto, pues rápidamente se alejó del menor, mirando al rubio con miedo.
-no es lo que parece- se apresuró a decir Dipper- fue culpa de la turbulencia, se cayó encima mío.
-oh, ¿en serio?- dijo Bill mirando al guardia con los ojos entrecerrados.
-s-si señor- dijo el guardia, se notaba que estaba aterrado- no fue mi intención, lo juro.
-no... claro que no- dijo el chico de ojos ámbar lentamente, acercándose al tipo- y dime, ¿lo disfrutaste?
-¿q-qué?- respondió el hombre nervioso.
-¿disfrutaste tener a mi Pino tan cerca?- dijo mordiendo cada palabra.
-n-no, por supuesto que no, señor.

Dipper se sintió muy mal por el hombre, que no debía tener más de veinticinco años... Tenía que ayudarlo de alguna manera.
-Bill- dijo el castaño agarrando el brazo del mencionado- fue un accidente.
El rubio dirigió su mirada al menor, quien pudo ver sus ojos llenos de ira... Tenía que hacer algo, sino... Esto no terminaría muy bien.... Tenía que pensar rápido.
-¿en verdad crees que sería capaz de traicionarte?- dijo Dipper, viendo el cómo estas palabras provocaban que la expresión del rubio demostrara mucha menos ira que anteriormente- es una de las reglas, ¿lo recuerdas?, ¿en verdad crees que sería capaz de siquiera pensar en traicionarte?

El rubio se volteó hacia Dipper, quedando frente a frente, y con su mano alzó el mentón del menor, quedando un casi inexistente espacio entre sus labios.
-no- dijo el rubio, para luego depositar un beso en los labios del chico- por supuesto que no- una pequeña sonrisa se formó en los labios del mayor, haciendo que Dipper se relajara un poco- sé que no es tu culpa- luego soltó a Dipper y se dirigió a sus guardias- mátenlo- ordenó señalando con la cabeza al aterrorizado guardia .
-¡¿qué?!-dijo el castaño horrorizado- ¡Bill, no fue su culpa!
-puede ser...- dijo el rubio- pero de todas formas se acercó mucho a ti.
Después tomó a Dipper de la mano y se lo llevó de ahí, el chico sólo se quedo viendo hacia atrás, mirando la horrorizada expresión del hombre mientras los demás guardias se lo llevaban.

Ya en sus asientos, Dipper no podía dejar de ver al chico frente a él, que actuaba como si nada hubiese pasado.
-estás demente- dijo al fin.
-por supuesto que lo estoy, ¿cuál es tu punto?
-él no merecía la muerte- dijo firmemente.
-yo decido quién merece la muerte y quién no- respondió el rubio sonriendo de lado.
-eso no es justo- dijo Dipper frunciendo el ceño.
-¿crees que me importa lo que creas que es justo?- dijo sin quitar la sonrisa de su rostro- yo soy el que manda aquí, así que mejor anda acostumbrándote.
-¡pero vas a matar a un hombre!, ¡ése hombre podría tener una familia que lo necesite!, no pensaste en eso, ¿verdad?- dijo el castaño enojado.
-ya me cansé del tema- dijo Bill dejando de sonreír- así que a ti se te va a olvidar.
-¡pero...!
-es una orden- dijo el rubio sonriendo maliciosamente.

El castaño no pudo hacer más que callarse y mirar al mayor con los ojos entrecerrados.
-¿estabas enojado por algo, Pino?- dijo Bill con la misma sonrisa.
-no- respondió el otro sin cambiar su expresión.
-¿qué pasó después de que fuiste al baño?
-nada- respondió mordiendo las palabras.
-¿nada?
-salí del baño y vine directamente hacia acá...
-así me gusta- dijo acercándose y dándole un rápido beso en los labios al castaño.

Dipper suspiró y miró por la ventana... -Este tipo es un monstruo-pensó, sin poder evitar entristecerse al darse cuenta de que el Bill que alguna vez había amado ya no existía.
Ya había visto lo que Bill era capaz de hacer, vio cómo podía ser capaz de asesinar por el más mínimo error...
Lo único que tenía claro ahora, es que a partir de ese momento tenía que ser más cuidadoso...
No iba a permitir que alguien más muriera por su culpa.

Hola!!! ¿Cómo están?, ¿les gustó el capítulo?...
Bueno, como siempre, quiero agradecer a todas las maravillosas personas que leen mi historia, en especial los que comentan jejeje.

Peeeero, en este capítulo quiero aprovechar de agradecer a algunas personillas en específico, que se han pasado por mi historia, y me han dado sus mejor concejos y opiniones, y la verdad es que también son escritores fantásticos de Billdip, bueno... Gracias

JessieJacob
CipherOrigins
RinOrrala
beautiful_dissaster
Bad-End-Friends

Estoy completamente agradecida, la verdad, nunca pensé que un grupo tan genial de escritores fuera a leer mi historia... Espero seguir leyéndolos a través de la historia :)

También gracias a los que me han mandado portadas para la historia!!! Hay algunas muuuuy bonitas, así que voy a cambiar la portada cuando me decida por una (es muy difícil jsjsjs) de todas maneras, si alguien no ha enviado una portada y quiere hacerlo, puede enviarme un mensaje por interno para darle mis correo...

Como siempre agradezco sus votos y en especial sus comentarios!!! ¡Me encantaría saber lo que les pareció el capítulo!

Y bueno... Creo que de mi parte eso es todo...

Nos leemos luego! ❤️