Si los pensamientos mataran Han ya hubiese muerto por ellos, habían pasado algunos días y su mente seguía volviendo a la noche que tuvo muy cerca a su princesa y como ella no lo había apartado ella también quizo tenerlo cerca de el, que le estaba pasando por su mente pero tenía muchas ganas de verla otra vez solo para confirmar lo que pasó unas noches atrás bajo esas luces multilcolores, ahora arreglando un chasis su mente jugueteaba con la idea verla, de sentirla cerca suyo y percibir su dulce aroma, ninguna otra mujer lo había tenido así tan pendiente, tan ilusionado, cuando el era el que ilusionaba y dejaba pero ahora, ahora el necesitaba llenar ese anhelo, esa ilusión de ver su sonrisa su sonrisa y su carita enojona..

— Han, ¿Estas bien?.— Chewie habló al ver como Han giraba de más ese tornillo.

— Am si,— dejando la pinza de inmediato.

— Estos últimos días te eh visto demasiado como lo diría despistado.— cuidando sus palabras para su amigo.

— Se nota mucho.— secando sus manos de grasa de auto.

— Es por esa chica, la hermana de Luke, Leia— le pasó una franela limpia.

— Es que ella es tan distinta al resto de chicas que halla conocido antes.— secando el sudor de su frente y secando sus pensamientos.

— Lo dices porque es rica o algo así.— tomando una bebida y sentándose sobre un neumático.

— No es eso.— le lanzo la franela llena de mugre, tomando asiento frente de su amigo.— me refiero que es distinta en otro sentido en uno al cual no estoy acostumbrado.

— ¿Te gusta?.— se atrevió a preguntar.

— No lo se en realidad.— se encogió de hombros.— ella es muy linda y...

— Y te gusta.— completó su oración.

El solo respiró y miro hacia otro lado tratando de esquivar la mirada de Chewie como si quisiera escapar de la verdad inminente, si algo en Han quería estar cerca de Leia pero sabía que eso era caso perdido ella era otro nivel, el mismo Chewie lo dijo ella tenía plata.

— Ella no es mi tipo.— mintió en parte.

~

En la escuela Leia anotaba algunas de las tareas finales además de que pronto tendría que empezar con la tesis, jugando con su lápiz su mente inconscientemente escribió Han en su cuaderno, cuando reaccionó a lo que acababa de escribir lo trató de borrar la más rápido que pudo, pero Mara ya lo había visto.

— H A N.— leyó Mara entre líneas.

Leia se sentía tan infantil escribiendo el nombe de un chico en su cuaderno como niña de secundaria sus mejillas se tornaron rosadas sobre su piel blanca, tomó el borrador y terminó borrando todo.

— Te gusto el mecánico ¿verdad?.— Mara conocía muy bien a Leia.

Ella miro la pizarra y anotó las palabras que dictaba el profesor quería ignorar a su amiga.

— Leia.— insistió al ver la negatividad de su amiga.

— No me gusta.— mirando la pizarra sin mirarla a la cara.

— No te creó.— le advirtió. — te conozco desde el jardín de infantes y jamás jamás te había visto hacer garabatos de ese tipo en tus libretas.

Leia dejó de escribir de inmediato Mara la conocía lo suficiente como para saber hasta los mínimos detalles, suspiro y miro a su amiga.

— Pueda que me guste solo un poco— dijo sin ánimos.

— Un poco.— solto una risa.

— ¡Si solo un poco!.— alzando la voz.

El profesor noto eso de inmediato y llamó la atención de Leia quien nunca recibía llamados de atención ó regaños en clase ahora estaba el doble de apenada.

Al salir del aula Leia caminó muy rápido no tenía ganas de hablar con Mara y menos sobre Han Solo.

— ¡Hey!— la tomó de la mano.— no tienes porque huir de mi, ¿que te pasa?.— le exigió.

Leia se giro de mala gana mirando a su amiga la razón una parte de ella no quería responder sus preguntas sabía que no podía mentir no podía frente a ella.

— ¿Que quieres?.— con sus cuadernos en mano y una cara de molestia.

— Lo siento, solo quería saber si te gustaba o no Han tampoco era para que te molestaras así conmigo somos amigas y nos contamos nuestras cosas.— dijo muy sentida la actitud de Leia aveces podía ser exagerada.

— No lo sientas.— se relajo un poco y tomó su mano.— vamos atrás.

Sentadas tomando un jugó de caja Leia parecía estar más relajada.

— Aveces me siento muy presionada por todo el mundo lo siento no debi descargar mi enojo contigo— de verdad se sentía mal.

— Sabes que soy tu amiga y siempre podrás contar conmigo.— le sonrió.

Leia hizo una mueca y la abrazo por un momento ella era una buena amiga.

— Es que mi padre, Anakin sigue intentado que me valla con el a América pero no quiero.— dijo mirando al suelo.

— Habla con el, explicale que no quieres irte de Londres.— le aconsejó.

— Luke si se quiere ir.— mirando la expresión de Mara ella sabía que a ella le gustaba su hermano.

— El sabe lo que hace.— sonando fría pero como ella la conocía muy bien Leia también noto su pesar.— y hora, que ¿pasa con Han?.— cambiando de actitud.

Leia lo pensó un poco divago entre lo que quería decir lo que quería responder.

— Es guapo y no es tan odioso como pensaba.— se encogió de hombros.

Mara sonrió calculando la situación.

— ¿Y te gusta?, porque mira me cayó muy bien.— dándole una palmadita en la espalda.

— No puedo decir si me gusta o no porque solo hemos hablado dos veces no es posible que me sienta segura y diga que me gusta.— parecía frustrada.

— Ni con todas las pláticas o citas del mundo podrás estar segura de algo sobre temas el corazón, así que si solo has hablado con el una o dos veces pueda que sean la suficiente para que ese corazón se llene de sentimientos por el o cualquier otro.— las palabras de Mara parecían refrescantes y calidas ella tenía razón.

— Tal vez tengas razón, tal vez si me gusta, tal vez me parece lindo y guapo aunque parezca un patán.— Leia divagaba entre sus palabras.

— Valla Leia te gusta.— sonrió ante ello.

— Creó que me gusta,— finalmente lo aceptó.— bailamos tan cerca.— mirando a su amiga.— y bailaba tan mal.— rio ante el recuerdo.— pero no me importó, era algo algo debajo de toda esa fachada que no me detuvo si no que me mantuvo cerca.— la mirada de Leia tenía un brillo uno que Mara jamás había visto en ella.

— Porque no hablas con el.— le sugirió.— Luke debe tener su dirección o algo así no crees.

— No creerás que lo buscaré o si.— mirando incrédula a su amiga.

Esta sonrió maliciosamente.

— Oh no Mara Jade no buscare a Han Solo, si el no me a buscado es porqué no le interesó que haría yo buscándolo es tan egocéntrico y presumido que obviamente cree que yo.— parandose frente a Mara.— iré tras de el, pues no señor.— se sentó bruscamente de nuevo.

Mara ladeo la cabeza en negación y sonrió de nuevo, tomó su mano y se levantaron para caminar.

— Si tal vez ir tras de el no sea una buena idea pero no puedes negarte ese gusto.— le guiño un ojo.

Leia solo soltó una carcajada.

— No tendré sexo con el.— le afirmo.

— Espero que tu primer hijo sea varón.— se rio a carcajadas.

— Tonta.— le jaló un mechón de su hermoso pelo rojo.

~

Han su mordió una uña y miro hacía el edificio lo meditó, tarareo la idea y bajo del auto camino cerca de las escaleras y se sentó cerca de una banca se quitó sus lentes, jugó con sus pies y miro su reloj pronto darían las tres de la tarde y ella saldría en cualquier momento, esta idea había estado en su cabeza desde el día que había hablado con Chewie acerca de ella y hasta ahora había tomado la decisión de hacerlo tenía miedo, ¿miedo? de cuando acá el tenía miedo el era el galán, el que podia con las chicas, pero ahora era el miedoso, un sonido lo aturdio la campana de salida sonó y Han se levantó de inmediato cuando comenzó a ver a los jóvenes universitarios, tomó sus lentes y camino hacia su auto no estaba listo para ver a Leia que le diría.

— Han.— escucho una voz que el ya conocía.

— Leia.— le sonrió tímido.

Ella le sonrió alegremente verlo aquí era raro, pero después su seriedad volvió a su rostro.— ¿Que haces aquí?.

— Yo.— miro hacia otro lado.— vine a buscar....

— A Luke.— términando su oración.

— Si.— dijo rápidamente mientras se rascaba su cabeza sonriendo.

— Hoy tiene clase de Química Industrial así que saldrá hasta las cuatro.— tomando su mochila.

— ¿Te irás sola?.— pregunto dudoso de su respuesta.

— Mara también saldrá tarde, Luke la llevará a casa pero yo me iré en el autobús.— sonriendo de lado.

— Yo podría llevarte.— sugirió Han de una manera convincente.

Leia lo miro muy asombrada la había ofrecido llevarla a casa o se trataba de otra cosa, algo revoloteo en su estómago, tomó el valor y lo miro de la manera más natural que podía no quería demostrar que si quería ir.

— Esta bien.

— Bien.— sonrió ante la respuesta no creyó que Leia diría que si pero lo había hecho.— el auto esta por acá.

Ambos caminaron hacia su auto plateado, Han se apresuró y le abrió la puerta a Leia, ella se sintió muy halagada y Han pensó que estaba siendo tan caballeroso que se veía ridículo pero Leia lo hacía sentir así, no ridículo si no diferente.

— ¿Tienes hambre.?.— preguntó Han mientras Leia se ponía el cinturón de seguridad.

— Comere en casa,— lo miro con una leve sonrisa de disculpa.

Han parecía derrotado pero le devolvió la sonrisa.— Muy bien.— y prosiguió en el camino.

— Gracias de todos modos Han.— Leia dijo dulcemente.

Han le sonrió ampliamente y Leia devolvió la sonrisa valla que era linda cuando sonreía pensó Han.

Después de un momento silencioso y algo incómodo, Leia comenzó a reír fuertemente alarmando a Han, él se asustó y aparcó el auto en una banqueta cercana.

— ¿Pasa algo?.— mirandola cuando ella se limpiaba las lágrimas de la risa.

— Es.... solo que no te eh....— riendo de nuevo.— no te eh dicho donde vivo.— finalizó.

Han miro hacia el frente y comenzó a reír y Leia también lo hizo.

— ¿A donde pensabas llevarme Han Solo?.— le acuso en broma.

— Dios Leia lo siento.— se compuso para mirarla.— es solo que.— calló no podía ir tan rápido con ella, ella era especial.

— ¿Solo que?.— ella se acomodo mejor en el asiento ya que las palabras de Han la hicieron escuchar.

Han la miro y luego miro al frente y nuevo la miro.

— Ciertamente me pones nervioso.— dijo sin más.

Leia se ruborizo un poco y apartó su mirada de la de el, Han pensó que había cruzado un límite y tratando de restaurar algo que aparentemente había roto, Leia parecía sorprendida Han era un galán sin remedio pero en el fondo la hizo sentir algo especial.

— Yo no quize decir eso.— queriendo su llamar atención y que la mirara a la cara.

— Sabes,—  dijo más segura.— pues si me gustaría comer algo.

Han sonrió y Leia agachó la mirada.

— Muy bien.— con los mejores ánimos.— conozco un lugar donde la comida es muy delicioso y no encontrarás ni una sola mosca.

Leia hizo una mueca de desagradó.

— Es una broma Leia.— mirando su expresión.

— Bueno suena rico ahora que lo pones de ese modo.— tapando sus risitas.

En el restaurante de nombre Yavin, Han bajo con Leia esta se veía muy asombrada del lugar era muy no sabía exactamente como describir el lugar, era muy verde, un edificio con tejado color café y de color verde parecía una casa vieja.

— Aquí trabaja una amiga mía.— abriendo la puerta para que Leia entrara.

— ¿Amiga?.— Leia estaba algo preocupada que clase de amiga era pensó.

— Si,— mirando dentro para ver si la podría divisar.— es un poco.....

—¡Han!.— un grito lo alertó y lo hizo maldecir por lo bajo.

— Hola Maz.— rascando su cabeza, Leia parecía confundida pero sonriente como siempre.

— No te esperaba por aquí,— le acusó.— tu eres de papas fritas y hot dogs,— su mirada paso de Han a Leia y sonrió.

— Ella es Leia.— le presentó,— Leia ella es Maz una.....

— Una hermana para el.— interrumpió Maz.— un gustó Leia.— sin pensarlo le abrazó, Han puso los ojos en blanco.

— También es un gusto Maz.— dijo Leia muy alegre Maz era una persona demasiado cálida y eso era lindo.

— Vengan los llevó a una mesa y le tomó la orden. — ofreció Maz.

Se sentaron alado de una gran ventana y la vista era un bello jardín con flores de múltiples colores.

Después de pedir algo ligero para la comida, Leía parecía encantada con lo que había comido además de la inusual compañia de Han.

— Todo estuvo muy rico.—  dijo ella mirando por la ventana suspirando la vista era muy campestre.

El jardín es bello.— mirando por la ventana.

— Si es muy bonito y la comida es deliciosa.— volviendo a su mirada.

— Te lo dije.— le acusó.

— Ahora siempre tendrás la razón.— le miro con un falso enojó.

— Posiblemente.— la reto.

Ella negó con la cabeza y rio, Han podía vivir con el sonido de su risa era la más dulce y bonita, cuando estaba seria su rostro no la hacía menos bonita pero su sonrisa era refrescante y mágica, Leía podía pensar que Han la hacía rabiar solo por verla sonreír por sus tonterías algo tenía el que no le molestaban sus bromas tontas.

— ¿Y tu familia?.— pregunto Leia y Han dejó su pícara sonrisa por una cara sería, ella lo notó de inmediato y quizo cambiar de tema.— lo siento.

— No lo sientas.— se apresuró Han.— yo crecí en un Orfanato, no recuerdo a mi madre ni a mi padre.— sonrió de lado.— crecí con Maz.— mirando hacia donde ella sonriendo con algunos clientes.— por eso, eso de hermanos.

— Han yo no quería.— se apeno Leía.

— Te dije que no lo sintieras.— dijo confiado.

Leía tomó su mano sin siquiera pensar en el acto.

— Si te sirve de consuelo mi padre no me quiere.— dijo muy triste.

Han ahora la miro preocupado.

— Larga historia para tan corto día.— soltó su mano y aclaro sus ideas.— ya es un poco tarde me llevas a casa.

De regreso a casa el silencio volvió pero no era un silencio incómodo era una tranquilo después de una agradable comida.

— La pase muy lindo.— comenzó Leia.— no eres tan patán como pensé.

— ¿Patan?.— dejó de mirar al frente para verla.

— Das esa impresión.— le saco la lengua.— pero....

Han no podía mirarla porque hiba conduciendo pero lo que le dijo lo hizo mirar.

— Ciertamente eres encantador Han.— se miraron por un momento fue un segundo pero pareció eterno.— me quedo aquí.— corto la mirada Leia y es que ya estaban frente a su casa.

Silvo.— Valla si que es una mansión.— mirando la gran casa.

— No es una mansión es solo una casa.— abriendo la puerta del auto.

— Pues mi casa es un viejo departamento en los barrios bajos de Londres.— miro como bajaba del auto.— Espera.— se adelantó Han.— la pase bien contigo eres una gran chica.— Leia alzó una ceja.— una muy linda.

Leia solo sonrió.— Un placer.

Algo dentro de ella quería un beso y el también, ella mojó sus labios y lo beso en la mejilla, Han quedó petrificado.

— Adiós.— subiendo las escaleras.

El tardo en reaccionó ante el besó — ¿Nos podemos ver después?.— le gritó desde el auto.

— Ya veremos.— le despidió.

Han hizo un gesto de victoria y subió a su auto, ese "ya veremos" era un si para el, después de cualquier pronóstico negativo lo había hecho.

Leia sonrió para si misma estas actitudes eran nuevas para ella, Han había de alguna manera despertado algo en ella y era lindo el era lindo y carismático, en el fondo tenía miedo de ser engañada pero enterró ese sentimiento en el fondo de sus pensamientos hasta que su sonrisa cayó al ver...

— Padre.— desconcertada al ver al hombre frente a ella.

— Hola hija.— sin siquiera hacer una caricia.

****
Holaaa una disculpa ufff eh tenido unas semanas muy agotadoras!! Pero bueno acá estoy con todo y gripa 🤧...

Espero les guste... Ya saben no olviden votar ⭐ y un comentario 💬 sería genial para mi, quiero saber que tal mi historia... Les gusta la odian jajaja beso.

Un saludo para.

VaniaGale
JudithCortes6
EsmeraldaLezro

💕💕💕💕