Secreto no tan secreto

El partido contra el equipo Akuma y su justa victoria por parte de Los Zorros de Konoha ya eran parte del pasado, un simple recuerdo y un obstáculo menos hacia las semifinales. Ahora la única preocupación de todo aquel estudiante de la prestigiosa Universidad Konoha era aprobar los exámenes intermedios del semestre.

Hinata se encontraba en la biblioteca, al igual que siempre, su mesa se encontraba repleta de libros acomodados en pila al frente de ella y, esta vez, una sola libreta. En ella anotaba cualquier punto importante o cualquier cosa que le llamase su atención.

—Estoy rendida —levanto ambos brazos y se dejo caer en el respaldo de la silla.

“...Yo sin ti estoy perdido.” Su rostro se puso rojo ante aquel recuerdo.

—Vaya, si es Hinata-san —una voz conocida musitó.

La azabache levanto la vista encontrándose con la presencia del chico ojos color de luna, Otsutsuki Toneri.

—Oh... T-toneri-kun.

—¿Puedo acompañarte? —ella asintió y él se sentó en la silla de a lado—. ¿Te sorprende verme?

—N-no —agito la mano a su frente negando rotundamente—. Solo que... me exalte al escucharte, ya que... —hizo una pausa—. Toneri-kun.

—¿Si?

—¿C-cómo es tu novia?

—¿Ah? —quedo atónito—. ¿Por qué la pregunta?

—Cuando estoy a tu lado yo... —llevo las manos al rostro quitando sus anteojos y dejándolos sobre la mesa—, siento que puedo ser yo misma, lo mismo me pasa con Kiba-kun y Shino-kun. Pero cuando estoy con él yo... creo que lo arruinare todo.

Hinata apretaba fuertemente las palmas de sus manos sobre las rodillas. Se mantenía cabizbaja y nerviosa. Era la primera vez que hablaba de ese tema, en especial con un chico con el que había hablado una vez ya hace tiempo.

—Ella es una chica fuerte que sabe llevar las cosas por si misma —sonrió de lado—, puede ser muy orgullosa y vengativa, inclusive molesta pero... —la azabache lo miro a través de los cabellos que caían por su frente—, toda ella es única y especial para mi. Después de todo, eso es lo que me hizo enamorarme de ella.

La Hyuga levanto la vista y miro el rostro de Toneri, el cual estaba envuelto en una gama de tonos carmesí por todas sus mejillas y sus ojos resplandecían, al igual que su nítida sonrisa de felicidad. A leguas se notaba que en verdad se encontraba enamorado de aquella chica.

—Cuando estés con él _prosiguió el Otsutsuki—, solo actúa natural. Si en verdad te ama, apreciara cada aspecto tuyo.

—¿Eh? —el color subió por su cara—, a-ama... ¿¡Amarme!?

El peliblanco la miro confundido.

—Por eso preguntaste por mi novia, ¿no? —sonrio nervioso y se rasco la sien—. ¿No estas preocupada por cómo actuar frente a tu novio?

—¿¡N-novio!? —estaba totalmente roja y parecía echar humo por las orejas.

Hinata se puso de pie dándole la espalda a Toneri. Tenso las manos haciéndolas puño y con una voz que parecía quebrarse saliendo de sus labios ligeramente curvados, le dijo:

—Naruto-kun es mi mejor amigo, cualquier sentimiento diferente podría herirme y separarme de su lado. Aun así él... Es capaz de decirme lo importante que soy —murmuro lo último.

“—El partido no es importante, todo lo que me importa eres tú, Hinata. Pero el que tu estuvieses en cama después de un trabajo tan duro, me hacia sentir despreciable.

—Naruto-kun...

—No se que es pero, te necesitó en mi vida. Yo sin ti estoy perdido.”

—Por cierto —la ojiperla giro mirándolo con una forzada sonrisa y la intención de cambiar de tema—, no me has dicho el nombre de la afortunada chica que es tu novia.

La chica volvió a tomar asiento. Toneri reposo su cabeza sobre el brazo que este a su vez recargaba el codo en la mesa.

—Shion.

En un solo soplo dijo el nombre.

—¿S-shion? —pregunto nerviosa.

Toneri asintió.

Plegó la comisura de sus labios y bajo la cabeza hasta que el flequillo le cubrió sus aperlados ojos.

“¿Podrá ser acaso la misma Shion?”

~♥~

Los pasillos concurridos, los inaguantables gritos y el movimiento lento de las agujas del reloj ya eran rutina. Las nubes grises que cubrían por completo el cielo sobre todo el instituto, amenazaban con fuertes estruendos. Un escenario así podría significar un mal día.

Al abrir su taquilla saco unos cuantos libros y dejo la mochila en su lugar. Hinata tenía la intención de seguir estudiando antes del siguiente examen. Se dirigió al patio y se sentó debajo de un árbol desnudo.

Fuertemente agarraba las hojas para que no se cambiaran con ayuda del viento.

Leyó unos cuantos párrafos y por curiosidad miro a su alrededor, estaba sola. Nadie se encontraba fuera, solo ella. Observo el cielo y una pequeña gota cayo en el cristal izquierdo de sus lentes. Cerro el libro y cargo con los demás levantándose del lugar. No dio ni tres pasos y la lluvia la rodeo. Ella no insistió en cubrirse, solo dejo que el agua la bañara.

—No puedo ir en contra de la corriente —murmuro—, solo puedo esperar a que tome su curso.

Una sensación cálida rodeo sus hombros. Hinata levanto su vista y miro hacia los azulados ojos del Uzumaki. Él cubrió a la azabache con su suéter y, al tomarla de la mano, la encaminó dentro del instituto.

—Vaya Hinata —coloco su mano sobre la cintura—, si que estas empapada.

—Al igual que tú, cariño.

La Hyuga se separo del agarre del rubio y se abrazo a si misma al escuchar a Shion hablar.

—¿Esto? —Naruto señaló su playera—, solo esta un poco húmedo.

Shion tomo un poco de la camiseta de su novio y la exprimió dejando caer una gran cantidad de agua, provocando una risa nerviosa en el ojiazul.

—Deberías cambiarte o te enfermaras —dijo preocupada.

—Yes, my lady —emitió Naruto posando como mayordomo—. Por cierto —miro hacia donde la azabache—, ¿podrías prestarle ropa a Hinata?

La pronunciada dio un ligero brinco y por acto seguido miro a la ojilavanda nerviosamente.

—¡Claro! —afirmo sonriente y se acerco a dicha chica—. Dejamelo a mí. Vamos Hina-chan.

Shion tomo a Hinata de la muñeca y se la llevo en dirección contraria a la que el rubio se dirigió. Mientras caminaban, no hablaban, ni siquiera sus miradas se cruzaron.

Llegaron a los casilleros. La rubia camino y abrió su locker, de el saco un pantalón corto rojo y una sudadera amarilla, los cuales ofreció a Hinata.

—Gracias —dijo al tomarlos.

—Bien, vamos a que te los cambies.

La ojiperla se dispuso a vestir las prendas dentro de uno de los baños, mientras Shion la esperaba al otro lado de la puerta. Ella, la rubia, se miro al espejo del tocador y de uno de sus bolsillos saco un brillo labial.

—Si que te quedan bien —a través del cristal observo que salía—, puedes quedarte con la ropa si te ha gustado —junto ambos labios y esparció el brillo.

—Gracias, pero prefiero devolvertela.

“Shion.”

—Como tu quieras —guardo la pintura y se dirigió a la salida—. Ah, se me olvidaba —se detuvo y giro para observar a la Hyuga-—debes alejarte de Naruto, su amistad arruina nuestro noviazgo. Y es algo que no voy a permitir.

Hinata apretó los dientes. Si no decía nada, sería como decirle que estaba de acuerdo con ello. Pero si lo hacia, no dejaría que las cosas “tomen su curso.”

—Olé¹ —musitó.

Los ojos lavanda de Shion se abrieron como platos al igual que su boca. La chica a su frente la había dejado sin palabras.

El sonido del timbre interrumpió el momento entre ellas. Era hora de volver a clases y seguir contestando los exámenes.

—Ya es hora —sonrio de lado—. Gracias Shion, te devolveré la ropa después.

La azabache salio de los baños con su ropa y libros mojados sobre los brazos, dejando a la novia de su mejor amigo sola.

Continuará...

You Belong With Me
Publicado
23/Diciembre/17

~♥~

¹Aunque generalmente esta palabra se utiliza para animar o aclamar. Yo quise darle en sentido al arte español del Toreo, ya que:
"El toro ataca por los cuernos."