Buenas a todos losMarvelitos de nuevo, en otro capitulo. Menuda sorpresa, ¿verdad?Seguro que nadie se esperaba esto.

En fin. Creo que nodebéis hacer mucho caso de lo que estoy escribiendo ahora mismoporque tengo algo de sueño. Me he levantado temprano para ir a unascitas medicas, y ahora mismo son las 11 y cuarto de la noche, pero meniego a ir a dormir. Si me acuesto demasiado temprano, después medespierto muy pronto y en mi casa no son de madrugar, así quetendría que ir en plan ninja, sin hacer ruido por todas partes.

Pero sí que queríarecomendaros un anime que está saliendo actualmente y que es posibleque alguno ya haya oído hablar de él. Se llama ''Koi wa Ameagari noYou ni'' y es un anime que trata de una chica de 17 años que seenamora de su jefe en el restaurante donde trabaja a medio tiempo,cuando él tiene 45 años. Sí, sí. Ya sé. Mucha edad dediferencia, pero veros el primer capitulo entero y negarme que oshabéis echado unas cuantas risas. Eso, entre que me gustan losromances entre personas que se llevan diferencia de edad, ha hechoque me enamore de este anime, aunque, actualmente, solo hayan salidodos capitulo subtitulados al español.

Por lo que he podidover, el manga llega hasta el capitulo 45, pues hasta él he podidollegar leyendo. Y, personalmente, prefiero el anime. Pulen cosas queen el manga quedan un poco.... ¿cómo decirlo? Meten cosas que nohace precisamente que el personaje quede mejor y como que te hace másdifícil ponerte en la piel de la protagonista. Pero, si como os pasacomo a mi y no podéis conteneros a saber sobre qué pasará en lossiguientes capítulos, leedlo. No lo estructuras todo exactamenteigual, pero se asemeja bastante.

Y.... después de estaimpresionante publicidad, ya que hacía mucho que no me veía unanime que me enganchara tanto desde el primer capitulo, pasemos a loque realmente importa aquí; el tema sobre el que vamos a tratar aquíy que vosotros habéis venido a leer.

Bien. Para empezar,como me he dado cuenta que hace bastante que los he dejado de lado,os traigo de vuelta un poco de thorki, después de que Jane pusieraen su sitio a esos dos niños grandes que son Thor y Loki. Aunque,por lo que he podido ver que he escrito, estaba bastante suave ycariñosa cuando me he puesto a escribir de ellos.

La otra mitad delcapitulo, como ya sabéis que divido con linea de puntos, es algo queseguro que os va a gustar; el primer amanecer de todos los miembrosde la Torre Stark y, por tanto, esas primeras horas como familia, queseguro que estáis deseando tener más momentos con ellos como lasuperfamily. Y, ¿a quién demonios miento?, yo también quieroescribir de ellos juntos y ver como se van desarrollando las cosasporque, llegados a este punto, yo ya no sé donde pondré el punto yfinal en esta historia.

Espero que me tengáispaciencia hasta el final.

Y, después de soltarossemejante rollazo, os dejo con el capitulo. Disfrutadlo y seguiremoshablando después.

CAPITULO 83

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Para cuando Loki abrió los aquel amanecer, sintiéndose cálido yarropado, sin saber demasiado bien porqué, solo tuvo que bajar lavista hacía el brazo masculino que envolvía su cintura y lomantenía lo suficientemente cerca del cuerpo que aún dormíatranquilamente a su espalda.

Aquel simple detalle, dormir de aquel modo con alguien, era algo queLoki jamás se había permitido durante su época adolescente, pueshabía creído que, si les concedía semejante honor a sus compañerosde cama, creerían inútilmente que eran los elegidos para manteneruna relación sería con él. Cosa que nunca había ocurrido.

Para cuando se dio cuenta de su atracción hacía su mismo sexo, elhecho de tener un hermano no consanguíneo que podía pasearsetranquilamente por casa en toalla, sin importarle el estado denervios que creaba en las criadas, hizo aún más difícil el hechode comportarse normalmente con este, procurando que, en ningúnmomento, este pudiera ser consciente de que se sentía atraído hacíaél.

El único modo que encontró de protegerse a sí mismo de aquellaatracción fue recurrir al orgullo, mostrándose altanero con él,como si fuera alguien superior.

Pero todo lo que consiguió con ello fue que Thor aquello lepareciera un juego divertido y siguió permaneciendo a su lado entodo momento, bajo cualquier circunstancia, hasta que sussentimientos habían acabado por estallar.

Y hasta allí habían llegado; al punto de que eran una parejareconocida por todo el mundo y, aún así, Loki aún se comportabacon él como si fuera necesario recurrir a su carácter paramantenerlo alejado.

La discusión que habían mantenido delante de la joven Foster habíahecho que fuera consciente de ello y se avergonzara de esecomportamiento.

Ninguno de los dos eran ya unos chiquillos. Sabían muy bien comocomportarse cuando debían, y, aún así....

El hecho de que la señorita Jane se hubiera visto obligada ainterferir en su discusión y recordarles lo mucho que se queríantendría que haber hecho que se le cayera la cara de la vergüenza,quedándose ambos contemplando la puerta por donde esta se habíamarchado, queriendo dejarles solos.

-Nos ha dado una buena lección, ¿eh?- comentó Thor, soltando unarisilla un tanto avergonzada, consciente de que se habían comportadocomo críos.

-Desde luego- murmuró Loki a su vez.

-Pero me alegro de que lo haya hecho- comentó Thor de nuevo,volviendo la cabeza hacía él.-Podríamos habernos pasado toda lanoche peleando.

Loki asintió, dándole la razón, pero no comentó nada más.

Había sido tan humillante que alguien de fuera los hubiera vistocomportarse de esa manera y que se hubiera visto obligada aintervenir...

Lo sacó de aquel pensamiento la presencia de Thor, que lo abrazópor la espalda y apoyó su cabeza en el hombro del moreno.

-Esto demuestra que no tenemos que volver a pelearnos- comentó elrubio, como si aquella fuera la conclusión más simple a la quehubiera podido llegar.

-Lo dices como si nos peleáramos porque quisiéramos- le soltó Lokia su vez, algo refunfuñado, pero apoyando sus brazos en los de Thor.

-No, desde luego que no peleamos porque queramos. Pero seguro quepodemos encontrar un modo de parar cuando las cosas se salgan decontrol.

-¿Y qué método sería ese?

Aquella pregunta hizo que el rubio se sumiera en un silencioprofundo, pareciendo concentrado de verdad en encontrar una soluciónpacifica a su problema de pareja.

-¡Lo tengo!- exclamó de repente, sobresaltando a Loki.-¡Ya sé quéhacer!

-A ver, genio. Dime qué se te ha ocurrido- le pidió el moreno.

-A partir de ahora, cada vez que iniciemos una pelea y queramosterminarla sin más, nos besaremos y dejaremos el tema correr.

-¿Ese es tu gran plan? ¿Besarnos cada vez que peleamos?- le soltóLoki.

-¿No te parece el mejor plan de toda la historia?

-Lo que me parece es que solo estabas pensando en besos y por eso sete ha ocurrido un plan tan absurdo como...- ''ese'', quiso decir.

Pero se vio interrumpido por los labios de Thor, ya que el rubio lehizo volver la cabeza hacía él y lo silenció sin demasiadadificultad.

A pesar de haber tenido anteriores experiencias con hombres, losbesos de Thor siempre se había sentido tan diferente.... Lograba quetodo su interior se agitara como nunca antes lo había hecho,despertando sensaciones que ni siquiera creyó que podría llegar asentir. Lo hacía sentirse alguien inexperto, incluso tímido, que seveía completamente incapaz de escapar de su toque. Aunque, enrealidad, este era lo que había estado deseando toda su vida.

Para cuando Thor se apartó, Loki se acordó de abrir los ojos, puestodo su cuerpo se había excitado y relajado al mismo tiempo.

-¿Ves? Un excelente modo de parar peleas- comentó Thor, sonriendo.

-Bueno... si te llevara la contraria, volveríamos a discutir- lesoltó Loki, dirigiendo su vista al frente para que este no vieracomo le hacía sentir.

-Entonces, todo lo que tendría que hacer sería besarte de nuevo.¿No es un plan magnifico?- afirmó el rubio, sintiéndose bastanteorgulloso de su elección.

-Bueno... para lo que suelen ser tus ideas, esta no está mal deltodo- fue lo máximo que consiguió arrancarle a Loki.

Ambos sabían de sobra como era el otro y, desde luego, Loki nuncahabía sido de esos que regalaban alagos a los demás solo porque sí.Su propio carácter se lo impidió.

-Me tomaré eso como el mejor de los cumplidos- comentó Thor,abrazando más a este y sonriendo, pues conocía de sobra como eraLoki y también sabía que aquello sería lo mejor que sacaría deél.

En cierta firma, Loki odiaba ser así, mostrarse tan frío y bordeincluso cuando no quería hacerlo, pero parecía algo que era incapazde evitar.

Todo lo que pudo hacer por su parte fue estrechar más fuerte losbrazos que lo envolvían para que este fuera consciente de que no tedesagradaba su cercanía.

-¿Qué tal si cogemos el postre que has preparado y lo llevamos a tuhabitación?- le dijo Thor, volviendo la cabeza hacía él, tratandode ver su expresión.

-¿Y pringar todas las sábanas con el dulce?

-Hombre, no podemos pringar nada si nos lo comemos sentadoscómodamente en la cama. ¿Qué estaban pensando hacer tú con eldulce?- le preguntó Thor.

Loki evitó sonrojarse porque, al parecer, su lado pervertido sehabía puesto en marcha ante una insinuación inocente.

-También en comerlo, idiota- protestó el moreno, tratando dedefender su orgullo a como diera lugar.-Pero, si se me cayera algo,ensuciaríamos la cama.

-Entonces solo tendríamos que cambiar las sábanas. Entre los dos,no nos llevaría ni un minuto- comentó Thor a su vez.

-Ese no es el punto- protestó Loki.-¿Por qué tengo que arriesgarmea que ensucies mi cama, cuando podemos comernos el dulce aquí? Songanas de buscar problemas y hacer que yo me caliente la cabeza deeste...

Pero, antes de que Loki pudiera terminar nuevamente esa frase, loslabios de Thor estaban de nuevo sobre los suyos, dispuesto a detenercualquier tema de conversación que pudiera acabar desembocando enuna nueva discusión.

-Vas a hacer esto mucho, ¿verdad?- le preguntó Loki, cuandoconsiguió tomar aire de nuevo, tratando de guardar la compostura.

-¿Sabiendo que funciona tan bien y es tan satisfactorio para losdos? Ni siquiera lo dudes- le soltó Thor, dirigiéndole una ampliasonrisa.

-Tendría que golpearte por esto- murmuró Loki.

-Pero no puedes porque me quieres tanto que eres incapaz de hacermedaño- afirmó el rubio, sin el menor rastro de duda.

Loki lo observó por el rabillo del ojo, pensando seriamente en quéhacer con él. Después de todo, sabía que este tenía razón y nopodía hacer nada contra él, así que solo permaneció en silenciomientras Thor seguía abrazándolo, más que contento con poderpermanecer así.

-¿Dónde está ese dulce que tanto quieres comer?- le preguntó elmoreno, consiguiendo soltarse de este y dirigiéndose a la cocinapara poner cierta distancia.

-En el frigorífico, imagino- comentó Thor, siguiéndole hacíaallí.-Pero, entonces, ¿vas a hacer lo que he dicho de comérnosloen tu habitación?

Loki volvió la cabeza hacía él, viendo como Thor parecía uncachorrito expectante y emocionado, solo faltándole mover la colaante una respuesta suya.

-Me parece bien. Y, de todos modos, si dijera lo contrario,seguramente volverías a besarme para que no tengamos que discutir.

Thor asintió y sonrió más ampliamente.

Pero, como Loki había imaginado, para cuando estuvieron en lahabitación del moreno, Thor no se enfocó precisamente en el postrey los dulces acabaron olvidados sobre una mesilla mientras ellos doscomenzaron a besarse y a deshacerse de la ropa, que, en aquellosmomentos, empezó a estorbarles.

Y así era como habían llegado a aquella situación aquella mañana.

Loki se volvió en la cama hacía la figura de Thor con el mayorcuidado posible, sin querer despertarlo, y contempló como este, apesar de encontrarse profundamente dormido, apretó el brazo quetenía alrededor de su cintura para atraerlo aún más cerca, comosi, incluso en sueños, temiera que se le escapara.

Loki se permitió una sonrisa ante una idea tan inocente y tonta,pues él no tenía la más mínima intención de irse a ningunaparte, y contempló a este con atención, absorbiendo cada pequeñodetalle en el rostro de Thor, permitiéndose mirarlo desde unadistancia que nunca imaginó posible.

Después de todo, ¿cómo hubiera supuesto él, en su momento, cuandoempezó a ser consciente de lo que sentía hacía su hermanastro, quelas cosas acabarían de aquella manera?

Ni en sus mejores sueños se hubiera permitido imaginar algo así.

-Si me miras con tanta atención, vas a hacer que me sonroje- murmuróThor, sobresaltando a Loki y demostrando que este no estaba tandormido como había parecido.

-¿Y quién te está mirando, idiota?- le soltó Loki a su vez,incapaz de darle la razón ante algo tan vergonzoso.-Solo estabapensando si despertarte o no para que me soltaras.

-Bueno...- murmuró Thor, acercándose más a él, sin abrir losojos, colocando su cabeza contra el cuello de Loki, apretando elcuerpo de este más contra él.-¿Te importa quedarnos un rato másasí? Me encanta como hueles.

Loki tragó saliva, sin saber qué decir a aquello, así que solopermaneció en silencio y colocó una mano sobre el cabello de este,acariciándolo y pensando que, desde luego, no era nada desagradablepermanecer un rato más de aquel modo.

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Porotro lado, en la Torre Stark, después de haber pasado su primeranoche en su nuevo cuarto, Peter se levantó, sin creerse lo bien quehabía dormido sobre aquella enorme cama, y asomó la cabeza alpasillo tras arreglarse y abrir la puerta de la habitación, tratandode averiguar si alguien más se había levantado.

Sí, parecía un fisgón o algo por el estilo, pero aún no se sentíadel todo cómodo en aquel enorme lugar, por mucho que el señorRogers y el señor Stark hubieran hecho todo lo posible porque sesintiera como en casa.

Oyó ruido procedente de la cocina, así que, saliendo del cuarto conla mochila al hombro, se dirigió hacía allí, teniendo cuidado dehacer el menor ruido posible. Sobretodo cuando pasó ante la puertadel cuarto que sabía que compartía ambos, pues suponía que niRogers ni Stark se habrían levantado todavía.

-Que madrugador, señor Parker- la saludó Jarvis cuando entró en lacocina, dirigiéndole una amable sonrisa.

-En realidad, me he levantado porque tengo que ir a clase- comentóel joven, viendo como el mayordomo parecía terminar de preparar eldesayuno.-Si no, aún seguiría en la cama.

-Bueno... los jóvenes viven de noche y duermen de día. Es lo quetoca en esa etapa de la vida- afirmó el hombre, colocándole delanteun plato con tostadas y una tortilla con un acompañamiento defrutas.

-¿Estabas cocinando para mí?- le preguntó Peter cuando vioaquello.

-Por supuesto- afirmó Jarvis,-Se me informó de sus horarios y es miobligación tenerlo todo listo para que usted no tenga quepreocuparse de nada.

-Mi tía May también solía prepararme el desayuno- murmuró Peter,sentándose en uno de los taburetes de la cocina, frente aquel plato,sintiéndose algo nostálgico.

-Y volvería a hacerlo- afirmó Jarvis, colocando junto al plato unvaso de leche y un vaso de zumo, pues dudaba que el joven tomaracafé.-Es solo cuestión de tiempo, señorito Parker.

-Si... si no le importa, ¿podría llamarme solo Peter? Eso deseñorito Parker me suena un poco... extraño.

-Como prefiera- afirmó Jarvis.-El señor Rogers me hizo una peticiónmuy parecía cuando vino a vivir aquí.

-¿En serio?- preguntó el joven, interesado en el acto en ese tema.

-Por supuesto- le dijo el mayordomo.-Si algo tienes en común amboses que, a pesar de las circunstancias que los rodean, no planeancreerse superiores a nadie. Ese es un detalle que os honra a ambos.

-Oh, bueno... No es para tanto- murmuró Peter, sonriendo por elalago, pero algo sonrojado al mismo tiempo.

-Además, gracias a sus presencias, hacía mucho que no veía alseñor Stark tan animado como ahora. La casa está llena de vida.

-Pero... este edificio siempre está lleno de gente- comentó Peter.

-¿Oye algo de todo ese alboroto aquí?- le preguntó Jarvis.

Manteniéndose unos instantes en silencio, Peter fue consciente deque, a pesar de que la Torre Stark estaba lleno de trabajadores portodas partes, aquel piso era tan silencioso que costaba creer quehubiera gente más allá.

-No me había dado cuenta de eso- murmuró Parker.

-Por eso agradezco si presencia aquí- le dijo el mayordomo.-Laultima vez que el señor Stark vivía con más gente fue cuando suspadres aún se encontraban con vida. Y de eso hace ya mucho tiempo.

A pesar de que Peter era muy joven cuando aquel incidente habíatenido lugar, a penas siendo un bebé recién nacido, conocíaaquella noticia, pues siempre que los medios hablaban de este, solíanhacer mención al padre y fundador de Industrias Stark, Howard Stark,mostrando fotos antiguas de este en diferentes eventos y alguna queotra en la que había posado junto a su mujer.

Si pensaba realmente en ello, los que todos en aquella casa teníanen común era el hecho de que todos parecían carecer de padres. Obueno... todos excepto el señor Rogers, pues, por lo que sabía,este aún contaba con su madre.

Era como si todos los huérfanos hubieran decidido unirse.

-¿En qué está pensando?- le preguntó Jarvis, sacándole de suensimismamiento.

-Oh. En cosas sin importancia.

-Entonces, será mejor que se centre en su desayuno. Si no empieza acomer ya, se le enfriará y acabará llegando tarde a clase.

-Sí, claro.

Bajo la atenta mirada del mayordomo, que quería saber si todo seencontraba a gusto, empezó a comer su desayuno, sorprendiéndosecasi en el acto.

-Esto está buenísimo- murmuró Peter, bajando la vista hacía suplato.

-¿Eso cree? Me alegro por ello- afirmó Jarvis, sonriendo.

-Desde luego, teniéndole a él aquí, ninguno de nosotros pasaremoshambre- comentó Steve, entrando en el cuarto con una sonrisa animadaen la cara.

Peter se volvió hacía él en el acto.

-¿Cómo has pasado tu primera noche aquí?- le preguntó Rogers,sentándose a su lado mientras Jarvis se apresuraba en prepararle eldesayuno a este.

-He dormido muy bien. No imaginé que esa cama tan grande pudiera sertan cómoda- comentó el joven, dirigiéndole una pequeña sonrisa.

-Me parece estupendo. Temía que, con lo nervioso que estabas ayer,no te fuera posible dormir- comentó Rogers, apoyando su cabeza sobreuna mano, sonriendo hacía el chico.

-La verdad es que... al principio, yo también pensé que meresultaría imposible dormir, pero, ¿cómo no hacerlo, cuando esacama es tan cómoda?

-Hiciste un muy buen trabajo, Jarvis- comentó Steve hacía elmayordomo.

-Bueno... esa es una parte de mis funciones- le respondió el hombre,colocando delante de él un plato casi idéntico al que le habíaservido a Peter.

-Entonces, es solo cuestión de tiempo que te sientas como en casiaquí- le dijo Rogers al joven.-Y no temas caminar por el pasillohaciendo ruido.

-¿Me has oído?- preguntó este de vuelta, algo avergonzado.

-Claro. Ya estaba levantado y trataba de despertar a Tony cuando heoído como tratabas de pasar junto a nuestra puerta hacer ruido. Perono tienes que preocuparte por cosas así. Esta también es tu casaahora y no me vendría mal que se oyera un poco más de jaleo en lacasa para conseguir sacar a Tony de la cama cuando suena sudespertador. Normalmente, me lleva un buen tiempo el mero hecho deque me responda que está despierto.

-No es mi culpa tener el sueño profundo- protestó este, entrandotambién en el cuarto, lanzando un pequeño bostezo.

-Señor, es todo un milagro que se haya levantado ya- comentó Jarviscon alegría.

-Bueno... ahora que somos algo así como una familia, Steve insistióen que teníamos que desayunar todos juntos.

-¡No tienen que tomarse tantas molestias por mí!- exclamó el jovenParker.

-No es ninguna molestia- aseguró Steve, dirigiéndole una sonrisatranquila a este.-Es algo que tendríamos que haber hecho desdeantes. Me has servido de excusa para sacar a este hombre de la cama-comentó, dándole un ligero golpecito en la espalda de Tony cuandoeste se sentó a su lado, en otro taburete.

-No parecía como si quisieras que saliera de la cama anoche- soltóStark de golpe, agarrando al instante el café que Jarvis colocódelante de él.

En el acto, tanto Peter como Steve volvieron la cabeza hacía él,igual de sorprendidos y avergonzados porque hubiera soltado una frasecomo aquella.

-¡No digas cosas como esas!- le soltó Rogers, tratando de nosonrojarse.

-¿Por qué? Si era verdad- siguió diciendo Tony después de dar unsorbo a su café.

-Señor Stark, creo que ese tema no entra en lo que las familiassuelen hablar cuando se juntas por las mañanas, en el desayuno- leindicó Jarvis.

-¿En serio? ¿No suelen hablar de lo que han hecho la nocheanterior?

-Creo que eso incomodaría a los hijos- le siguió diciendo elmayordomo.

-Puesyo siempre sabía cuando mis padres habían hecho algo porque mipadre estaba más cariñoso de lo normal con mi madre.

-Y la señora Stark se sentía igual de avergonzada que el señorRogers y el señorito Parker en estos momentos.

Tony volvió la cabeza hacía ellos, percatándose de que Steve sehabía colocado una mano delante de los ojos, sonrojado, y que Peterno alzaba la visa de su plato.

-Oh. Lo tendré en cuenta- comentó Stark.-Entonces, ¿de quéhablamos?

-¿Qué tal de lo que cada uno va a hacer hoy?- sugirió Steve, aúnavergonzado.

-Pues yo voy a ser nuevamente torturado por la señorita Potts,obligado a trabajar hasta la extenuación y liberado solo cuando ellaquiera- comentó Tony.

-Yo me pasaré toda la mañana en clase, comeré en la cafetería dela escuela y luego iré a la discográfica porque hoy me tocatrabajar.

-Estupendo- afirmó Steve.-Yo tengo que ir allí esta mañana, asíque supongo que nos encontraremos esta tarde.

-Y yo no os veré hasta que todos volvamos a casa- se lamentó Tony.

-Po... podríamos mandarte un mensaje cuando estemos volviendo paraencontrarnos todos al mismo tiempo- sugirió Peter.

-Me parece una buena idea- afirmó Steve.

-De acuerdo entonces. Brindo por esta noche- soltó Stark, alzando sutaza de café, haciendo que los demás sonrieran y unieran el vaso dezumo de Steve y Peter.

Y, de esa manera tan animada, fue como tuvieron su primer desayunojuntos.

Findel capitulo 83

Estoysegura de que queríais ver algo más de la superfamily por aquí,¿verdad? Incluso aunque Tony Stark tenga esa poderosa costumbre deavergonzarlos a todos solo con abrir la boca. Creo que esa capacidaddebería ser contado como otro super poder.

Nopensaba escribir algo parecido como lo que ocurrió en el capituloanterior, pero, es que, cuando escribo sobre ellos tres juntos, loprimero que me sale en escenas es Tony tratando de molestar a losdemás. O, al menos, es lo que consigue, incluso cuando no es esa suprincipal intención.

¿Yqué decir sobre la parte de thorki? Quería que se entendiera porquéLoki siempre ha mantenido esa actitud distante respecto a Thor,incluso ahora, cuando se supone que son una pareja. Pero ahí quién,incluso estando en una relación, no son expresivos, no demuestranafecto como haría cualquier otra persona en su misma situación.

Esolo sé por experiencia porque una amiga de mi grupo trató depedirnos consejo, saber cómo comportarse más abiertamente con sunovio, ya que, a pesar de quererlo, no sabía cómo abrirse a él ydemostrarle de manera natural lo que sentía por él. He de decirosque sigue esforzándose en ello día a día y, por lo que he podidover de ellos dos juntos, son felices, así que las cosas van biensiempre que luches por una relación.

Pero,como ahora mismo no estoy muy centrada en lo que estoy escribiendo,porque estoy pendiente de la tele (lo sé, no debería tenerlaencendida cuando escribo, pero siempre está ahí) será mejor quenos despidamos ya.

Comosiempre, Marvelitos, desearos que os mantengáis sanos y nosseguiremos leyendo en el próximo capitulo. Hasta entonces, bye.