Capitulo 56


Buenas a todos losMarvelitos de nuevo en este, válgame la redundancia, nuevo capitulo.


Sé que las cosas entreTony y Steve se quedaron bastante interesantes en el capituloanterior (o todo lo interesantes que se podía imaginar sabiendo loque iban a hacer esos dos a continuación. Sé que sois todos unospervertidos y estabais deseando ver otra escena Stony. No hace faltaque os hagáis los locos conmigo).


Pero, mientras Sam yBucky están disfrutando de sus momentos de soledad en el piso de losWilson y Tony y Steve están en su escapada de fin de semana, tenemosque recordar que Thor y Loki se encontraban en casa de sus padres yque, a pesar de que Frigga pareció tomárselo estupendamente, porqueya se lo había visto venir, aún faltaba por contárselo a Odín ytenemos que ver como el Padre de Todos se toma esa relación.


A lo mejor, a algunosles da igual o creen que las demás parejas tienen mayor relevancia.Error. Aquí trato de dar un trato justo a todo el mundo, aunque laprincipal principal sea el Stony. Así que, ya que os he dado doscucharadas de WinterFalcon y otras dos de Stony, acompañadme a verqué va a pasar con los nórdicos.


No os puedo avisar deque os preparéis para algo porque, si no, os estaría haciendo unspolier incluso antes de empezar, así que tened la mente abierta yesperad cualquier cosa que pueda llegar a pasar. Ya me diréisdespués si os ha gustado o no.


Ya no me voy a ir máspor las ramas y os dejo con el capitulo, así que disfrutadlo yseguimos hablando al final, como siempre. Hasta pronto.


CAPITULO 56


......................................................................


Después de aquella fatídica noche, en la que Frigga había estado apunto de descubrirles en una situación muy íntima, la mañananuevamente llegó y, teniendo en cuenta que era muy posible que no levieran en todo el día, a Thor y Loki les tocó madrugar para poderdesayunar con su padre.


En realidad, Loki madrugó y tuvo que ir al cuarto de Thor asacar a este de la cama, no sin luchar, ya que el enorme vikingo seaferró con ferocidad a las sábanas y se negó durante bastantetiempo a despertar.


-Oh, chicos. ¿Os habéis levantado para ver a vuestro padre?-les preguntó Frigga cuando les vio aparecer a ambos en el comedor.


-Tenemos que hablar con él, ¿no? Mejor hacerlo cuanto antes- lerespondió Loki.


Tenían que contarle a Odín que estaban juntos y mejor que fueraya, antes de que en la empresa alguien viera sus entrevistas ohicieran algún comentario que este oyera.


-¿Seguro que esto es lo que tenemos que hacer?-le preguntóThor.


No era el número uno cumpliendo órdenes, pero sabía que Odín,a pesar de ser un buen padre, era un hombre estricto, basado envalores antiguos que se originaron tanto tiempo atrás que nisiquiera podían determinar cuando.


-Tenemos que hacerlo- le dijo Loki, sentándose en la mesa.-Anteso después se acabara enterando. Mejor por nosotros que de otro modo.Nosotros le contaremos las cosas como son y no tergiversadas, comopodrían contárselo otros.


Thor asintió y se sentó frente a él en la mesa, ocupando loslugares que se les habían asignado desde que eran niños solo pormera inercia.


-¿Crees que se lo tomara bien?


-¿Conociéndole? No tengo ni idea. Pero no nos queda de otra.


En realidad, Loki estaba mucho más asustado respecto al tema delo que parecía a simple vista.


Desde siempre, había tratado de agradar a Odín, sacando unasnotas excelentes, siendo el favorito de los profesores....el problemaera que siempre había acabado metiéndose en algún tipo de lío quehacía que este le dirigiera una de sus duras miradas.


No quería ni imaginarse como reaccionaria o lo que les diríacuando le aclararan lo que había entre ellos.


-No pongáis esa cara-les dijo Frigga.-Como habléis con élluciendo así, se pensará que ha muerto alguien.


-Posiblemente nosotros-comentó Thor por lo bajo.


Su madre le puso una mano en el hombro para darle ánimos, pero,en ese momento, Odín hizo acto de presencia, entrando en el cuarto ydirigiéndose directamente hacia su lugar en la mesa.


-¿Qué hacéis ya levantados, chicos? Ha sido un largo viajehasta aquí. Deberíais dormir más.


-Pero hacia mucho que no estábamos todos juntos- le dijo Thor,dirigiéndole una sonrisa que pretendía ser de calma.


No le quedó tan bien como el rubio pensaba.


Odín asintió, pareciendo satisfecho, pero antes de quecomenzara a desayunar, tenían que zanjar aquel tema.


-En realidad, estamos aquí porque teníamos algo de lo quehablar contigo, padre- le dijo el moreno, dirigiendo una mirada haciaeste.


Odín alzó la vista hacia él a su vez y, al ver la seriedad desu rostro, dejó los cubiertos de nuevo sobre la mesa y cruzó losdedos.


-Díme. ¿Qué es eso tan serio de lo que queríais hablarme quehabéis logrado que Thor madrugue?


Ambos chicos se miraron, preguntándose el uno al otro quiéndebía de hablar primero y contarle la situación.


Sin embargo, aunque Loki no estaba muy convencido de poderencontrar las palabras, siempre era mejor que hablara él en lugar deThor. El gigantón podía llegar a decir cualquier barbaridad.


-Estamos juntos- confesó el moreno, bajando la vista hacia suplato.


No se atrevía a mirar a su padre a la cara.


Odín se quedó callado durante un instante, pero su silencio noduró mucho.


-¿Quienes?- preguntó este, pues no entendía de quién lesestaba hablando.


-De Thor y.....yo- acabó por decir este.


-Bueno....eso ya lo sabemos. Estáis juntos en América. No metranquilizó mucho que os fuerais tan lejos, pero os cuidáis el unoal otro y....


-Odín- le interrumpió Frigga.-Escucha bien a tus hijos.


El hombre frunció el ceño, sin entender muy bien de qué ibanlas cosas, pero volvió la cabeza hacia Loki de nuevo, manteniéndoseen silencio.


Este sentía como se le estaba formando un nudo en la garganta, pero,o hablaba ya o no sería capaz de hablar nunca. Era ese momento onada.


-Estamos juntos....como pareja.


El ceño de Odín se frunció aun más, con aquella mirada fijaclavada en él.


-¿Cómo dices?- le preguntó el hombre por lo bajo.


-Que somos una pareja. Estamos juntos.....como algo más quesimples compañeros de piso.


-Padre- murmuró Thor, tratando de hablar con este, viendo comoel ambiente en el cuarto iba cayendo en picado.


Pero Odín alzó una mano y este se silenció en el acto, noatreviéndose a volver a abrir la boca.


-¿Se supone que esto es vuestra idea de una broma? Porque no meestá haciendo la más mínima gracia.


-No es ninguna broma- afirmó Loki, atreviéndose a alzar lavista de nuevo hacia él.


Por un momento, el hombre le observó con suma atención y,después de unos instantes que parecieron eternos, volvió los ojoshacia Thor, que no parecía saber donde mirar.


Frigga había permanecido de pie, diciéndole a los criados loque debían de ir colocando en la mesa y donde, pero, cuando habíasurgido ese tema, había hecho que se retiraran, aunque ella aunpermanecía de pie, contemplando toda la escena.


-¿Es que acaso os criamos mal o algo así?- les dijo Odín degolpe.-Porque creo que hicimos todo lo posible para daros una buenaeducación.


-Odín-le advirtió su mujer.


No iba a permitir que las cosas se les fueran de las manos,aunque había esperado una cosa así por su parte.


-¡No!- gritó este, dando un golpe sobre la mesa mientras volvíasu vista hacia ella.-¡Tus dos hijos son pareja, Frigga! ¡Estánliados entre ellos!¡¿Qué clase de abominación es esa?!


-No somos hermanos de verdad- murmuró Loki, aun mirando a supadre.


Se le había subido el corazón a la boca cuando este habíagolpeado la mesa, pero trataba de mantenerse lo más calmado quepudo.


-¡No me vengas con esas!-le espetó este, señalándole con undedo, como si le advirtiera algo.-¡Os habéis criado juntos, llevasmis apellidos y no hemos hecho distinciones entre vosotros! ¡A todoslos efectos, sois hermanos! ¡Y, sin embargo, ¿tenéis ladesfachatez de venir aquí y decirme con esa calma que estáisjuntos?!


-¿Hubieras preferido que no te lo dijeran?-le preguntó Frigga,no luciendo muy contenta con su marido en ese momento, cruzada debrazos como aparecía.


-¡Pues sí, lo hubiera preferido! ¡Así, al menos, habríapodido negarlo si alguien me hubiera dicho algo sobre el tema! ¡¿Cómose supone que voy a manejar esto?!


-No tienes que manejarlo de ninguna- le dijo esta.-Siguen siendotus hijos y han encontrado la felicidad juntos.


-¡Frigga, por los dioses!- le dijo este con disgusto, golpeandola mesa de nuevo y poniéndose en pie, haciendo una mala mueca.-¡Estoes una aberración ! ¡Deniego de todo esto!


-¿Qué estas diciendo?- le preguntó Frigga cuando escucho esasúltimas palabras, al mismo tiempo que Thor y Loki volvían la vistahacia él.


No recordaban haber visto a este tan enfadado ni cuando Lokigastó una broma pesada a los profesores en su zona de descanso.


-¡Lo que digo es que no quiero saber nada de ellos mientrascontinúen con esa aberración!


-¡Odín Odison, son tus hijos!- le gritó Frigga a su vez.


-Ahora mismo no-le respondió el hombre, antes de abandonar elcuarto.


Su madre les miró un momento, pero no tardó en salir tras este.


Thor y Loki se quedaron solos en el comedor, con este últimoconcentrado en el plato vacío que tenía delante.


No había esperado que se lo tomara bien y les hiciera una fiestapero....esas palabras que les había dedicado....


-Bueno....no ha salido tan mal, ¿verdad?- le dijo Thor, tratandode dirigirle una sonrisa.


Agradecía que este tratara de sacar un lado cómico a todoaquello pero, en esos momentos, todo lo que quería hacer Loki erahundirse en su silla y desaparecer.


Ser parte de la familia Odison le había salvado de permanecer enun orfanato hasta que hubiera sido lo bastante mayor como para que lolanzaran al mundo. Gracias a ellos, había recibido la mejoreducación que se podía pagar y Frigga había estado siempre ahípara él, siendo su apoyo y su paño de lágrimas.


Que Odín le hubiera dedicado semejantes palabras era como sialguien se hubiera dedicado a clavarle un puñal tras otro en elpecho.


-Se lo ha tomado mal, eso es verdad. Pero era difícil que no lohiciera. Ahora está enfadado, pero se le pasara. Sabes que es muytemperamental- le dijo Thor, viendo que este no alzaba la vista.


-Yo no estoy tan seguro de eso-murmuró el moreno.


Odín podía ser temperamental, pero había visto decepción ensus ojos. Sabía que aquello le había dolido, seguramente porquehabía esperado nietos desde que ambos entraron en la adolescencia.


-No se había esperado que le contáramos algo como eso. Esnormal que no se alegre por nosotros ni se ponga a dar saltos.Además, le hemos pillado con el estomago vacío. ¿Cómo se nosocurre darle una noticia antes de que haya comido algo?


-Porque era mejor eso que algo llegara a sentarle mal después-le dijo Loki.


Thor frunció los labios y, poniéndose en pie, rodeó la mesahasta colocarse a su lado y acuclillarse a su lado, sujetando lasmanos de este entre las suyas para obligarle a mirarlo.


-Entrará en razón, ¿de acuerdo? Esto se le pasara y podremoshablar con más calma.


-¿Y si no se le pasa? ¿Qué hacemos entonces? ¿No volver acasa jamás? ¿Separarnos?


-¡Eh!- exclamó Thor, apretando sus manos con más fuerza.-No sete ocurra hablar de abandonarme tan a la ligera. Estás conmigoahora, así que vas a cargar conmigo para siempre. Que te quedeclaro.


-Eres siempre tan romántico- ironizó este, elevando los ojos alcielo por un momento.


-Puede ser, pero te ha encantado oírme decir que vas a estarconmigo para siempre, ¿verdad?


-Tal vez- comentó este.


Frigga volvió al cuarto en ese momento, haciendo que ambosvolvieran la cabeza hacia ella.


-¿Has conseguido hablar con él?- le preguntó Loki, preocupado.


Frigga los observó con atención a los dos, pero tuvo que acabarnegando con la cabeza.


-Ha llegado al coche antes de que pudiera detenerlo.


-Tal vez es mejor así- comentó Thor.-Ahora está enfadado.Dejemos que pase todo el día pensando en otras cosas y más tardevolvamos a hablar.


-De todas formas, por muy enfadado que esté, no es excusa parahaber hablado a sus hijos de esa manera tan cruel-les dijo esta.-¿Quéclase de padre hace eso?


-¿Uno que está muy enfadado?- comentó Loki.


-Nada es excusa para lo que os ha dicho. Sabíamos que no se lotomaría bien, pero, ¿esto?


-No se esperaba que le dijéramos algo como eso. Es normal-siguió diciendo Thor.


Al parecer, el gigante rubio realmente creía que las palabrasque les había dedicado Odín habían sido algo que había dicho sinpensar, que les había soltado lo primero que se le había pasado porla cabeza por el enfado.


Ojalá Loki pudiera estar tan seguro de eso.


-Creo que....me iré a mi cuarto- comentó, soltando sus manos delas de Thor y poniéndose en pie.


-¿Te encuentras bien, cielo?- le preguntó Frigga.


¿En serio se le ocurría hacerle una pregunta como esa?


-Sí. Solo que aun me encuentro algo cansado. No he dormido todolo que me hacia falta-le dijo, tratando de tranquilizarla.


Esa situación no les afectaba solo a ellos, si no que su madreestaba por medio también, tratando de poner paz entre ambas partes.


-Está bien. Ve a acostarte. Si necesitas algo, llámame.


-Lo haré- afirmó este, dándole un rápido beso en la frenteantes de abandonar el cuarto.


Se encontró con unos cuantos criados pululando cerca delcomedor, seguramente porque habían permanecido cerca mientras teníalugar aquella conversación, escuchándolo todo.


Se preocuparía realmente si el servicio no fuera algo cotilla,pero, en aquellos momentos, no podía soportar miradas de lastima ocuriosas. No estaba de humor como paraeso.

.........................................................

Almismo tiempo, mientras veían como Loki se marchaba, Thor y Friggapermanecieron en el cuarto, mientras el rubio miraba con airepreocupado el camino que este había seguido.


-Estoy preocupado por él- admitió.-Siempre se ha tomado a latremenda cualquier cosa que hiciera padre, así que esto......


-Eso es porque tu padre se ha pasado en esta ocasión. No hasabido medir bien sus palabras, por muy enfadado que estuviera.Cuando llegue a casa hoy, ten por seguro de que los dos vamos a teneruna charla muy seria.


-¿No crees que Loki se pondría aun peor si viera que los dosdiscutís por nosotros?


Aquellas palabras hicieron que Frigga volviera la vista hacia suhijo, dándose cuenta de que este tenía razón.


Si ella se enfrentaba a Odín en aquellos momentos, solo haríaque la situación se recrudeciera.


Dejó escapar un suspiro.


-Y, si no hablo con él, ¿qué se supone que vamos a hacer? Nopodemos dejar las cosas de este modo. No se va a arreglar nada sipermanecemos de brazos cruzados.


-Creo que lo mejor que podemos hacer es dejar distancia a papáahora mismo. Estaba claro que no se esperaba para nada que ledijéramos algo así. Ni siquiera me ha dejado hablar. Creo que loestá asumiendo. Pero que necesita su espacio para hacerlo.


-Eres siempre tan positivo. Siempre he envidiado eso de tí-afirmó Frigga.


Thor le dirigió una pequeña sonrisa a su madre y abrazó a estacontra él.


La mujer parecía una niña entre los brazos de su hijo, solologrando que esta se diera realmente cuenta de todo el tiempo quehabía pasado.


Aun podía recordar perfectamente la primera vez que habíatenido a Thor en brazos.


Había sido un niño precioso, grande y rosado. Lloraba con tantafuerza que sus llantos siempre se escuchaban por toda la planta delhospital donde le había dado a luz. Frigga lo había tenido enbrazos cada vez que había podido, observándole continuamente,maravillada porque algo tan frágil hubiera podido salir de ella yparecer tan fuerte al mismo tiempo.


Y, sin embargo, ahora a penas podía abarcarlo con sus brazos.Sus niños habían crecido demasiado rápido, tanto que ni siquierasabía cuando había ocurrido.


Loki también había llegado siendo pequeño, pero él siemprehabía parecido más frágil, más vulnerable. Continuamente, susojos estaban sobre él para asegurarse que estuviera bien.


Por mucho que este se mostrara seguro ante el mundo, ella sabíalo vulnerable que era en su interior, sabía que unas palabras maldirigidas podían hacer que todo él colapsara. Y, sin embargo, nohabía logrado parar a su marido.


No había notado cuando se había puesto a llorar hasta quesintió la mano de Thor sobre el cabello, tratando de que setranquilizara.


-Todo va a acabar arreglándose. No tienes de lo que preocuparte-murmuró este.


¿Qué estaba pasando allí? ¿Por qué era ella la que estaballorando? Eran ellos los que habían acabado destrozados frente Odín,los únicos con derecho de tirarse al suelo y ponerse a llorar comoniños. Y, a pesar de ello, allí estaba ella, sollozando como unaniña de tres años.


Debería ir al cuarto de Loki, estar a su lado en aquellos durosmomentos, tratar de recomponer los pequeños trozos en los que lehabía convertido Odín. Pero no se sentía con las fuerzasnecesarias para ayudarle. No sabía como hacerlo. No en aquellasituación.


-¿Tú estás bien?- le preguntó Frigga a Thor, alzando elrostro hacia él.


A veces se olvidaba de que su pequeño gigante también podíaquebrarse, aunque eso pareciera algo más difícil.


-Sí, mamá. Yo estoy bien. De verdad. No tienes que preocupartepor mí. Estoy convencido de que las cosas se arreglarán.


-Me gustaría estar tan segura como tú- afirmó esta.


-Pues entonces, hazlo. Muéstrate segura- le dijo este,limpiándole las lagrimas.-Tú mejor que nadie deberías saber comoes papá.


Cierto. Odín era temperamental y cabezota como él solo. Suscompañeros empresarios solían temerle cuando estaba enfadado. Pero,sabían que después de unas cuantas batallas en bolsa y para captarclientes, podían salir a beber con él, pues no guardaba rencor.


-Estar en el trabajo le sentará bien. Volverá a casa mástranquilo-murmuró ella.


-Exacto. Así es- afirmó Thor.


-Tal vez debería ir a ver a tu hermano- comentó, mirando denuevo hacia los ojos de este.


-Me parece bien. Te necesita más que yo ahora mismo.


Frigga asintió y, abandonando el cuarto, siguió los pasos deLoki hacia su habitación.


Tocó a la puerta lo justo y necesario, como si un sonido lobastante fuerte pudiera echar toda la casa a bajo.


-¿Quién es?-murmuró Loki desde el interior.


-Soy yo- murmuró Frigga a su vez.


-Pasa.


Entrando en el cuarto, vio que este aún estaba a oscuras, ya queLoki no había abierto la ventana, y que este se encontraba tumbadoen la cama, vuelto hacia ella.


-¿Qué pasa, mama?- le preguntó este, seguramente pensando quesu madre tenía algo más que decir respecto a lo que había ocurridoen aquel día.


Sin embargo, esta se dirigió a la cama directamente y, sin decirpalabra alguna, abrazó a este contra ella, dándole un beso en elcabello.


Por un momento, Loki quedó rígido contra ella, seguramenteporque no se había esperado aquello.


Pero, al cabo de unos pocos instantes, este alzó las manos haciaella, rodeándola y, sin que ninguno de los dos hablara, Loki empezóa llorar contra ella, aferrándose aún más fuerte a su madremientras Frigga le sostenía.


No tendría palabras de consuelo para él en ese instante, pero,al menos, aún podía seguir siendo esa persona en la que apoyarse,incluso aunque el mundo entero se derrumbara a su alrededor.


Findel capitulo 56


Losé. En este capitulo he sido una cabrona sin corazón. ¿Cómo se meocurre que Odín se tome las cosas de semejante manera y destroce asus hijos así? Por un sencillo motivo; porque todos los demáspadres se lo habían tomado demasiado bien.


Apesar de que, supuestamente, vivimos en una sociedad más abierta ydonde cada vez hay que ocultarse menos, siguen habiendo múltiplescasos donde padres, familiares o amigos siguen tomándose estas cosasmuy a mal. Recientemente, una amiga me informo que una chica que lecontó a unos familiares que era lesbiana fue violada por estosporque, según ellos, tenían que hacerlo para ''curarla''.


Cuandome encontró con noticias como esa, mi fe en la humanidad se vahaciendo cada vez más pequeña y, teniendo en cuenta que Odínsiempre me ha parecido un hombre serio, estricto, que siempre hasometido a Asgard con sus reglas de siempre, si había que hacer queun padre se tomara a mal las parejas de este fanfic, sin duda esetenía que ser Odín, a pesar de que Frigga no había tenidoproblemas para ello.


Algunosseguramente conozcáis casos parecidos, en que vosotros mismos oamigos hayan confesado su amor por una persona y haya sido juzgadapor vuestros sexos. Ideas retrogradas y sin sentido en mi opinión.Incluso en la biblia había una nota donde un hombre le decía a otroque era más feliz con él que con cualquier mujer que pudiera teneren su vida. ¡Y eso viene en la Biblia! ¿Cómo es que aún hay genteque, con ella en la mano, vaya en contra de las parejas homosexuales?La gilipollez humana nunca deja de sorprenderme.


Enfin, como noto que me estoy encendiendo mucho con este tema, porquelas injusticias me sientan muy mal y no las entiendo y no las tolero,será mejor que deje de hablar de una buena vez y siga escribiendo.


Esperoconseguir que las cosas se arreglen pronto entre Odín, Frigga y sushijos, aunque, la verdad, no sé bien como voy a hacer eso.


Conla cabeza llena de dudas, me despido de vosotros, Marvelitos, hastael siguiente capitulo. Manteneos sanos y nos seguimos leyendo. Bye.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top