Capitulo 17


Llegamos al capitulo 17de esta historia aún sin tener en mente ningún final, lo cual meindica que esta historia no va a terminar pronto. No sé si eso esalgo bueno o malo, al menos, para vosotros, que tenéis queaguantarme.


No tengo ni la másmínima idea de en qué momento voy a dar por concluida la historiani a lo que tengo que llegar para que eso pase. ¿Haré que se casenlas tres parejas y, en ese momento, daré por concluida la historia?¿Haré que se casen algunos y otros solo estén viviendo juntos? Notengo ni la más remota idea. Supongo que, llegado el momento, lamisma historia me lo dirá.


Pero.....¿qué osgustaría a vosotros? ¿Querríais ver la boda de los 3, os gustaríaverlos conviviendo como pareja o donde pondríais vosotros el cierrede esta historia? Y no me vengáis ninguno con la Superfamily. Aunqueme parece muy tierno Spiderman, aquí no va a aparecer. Ademas, seríael hijo adoptado, porque, de otra manera..... Vamos, quebiológicamente no podría ser. A no ser que idearan algo como en elmanga de Sex Pistols. Sin embargo, después de ver el trailer deSpiderman Homecoming, me he reído como una idiota viendo las escenasde Tony y Peter. ¡Por favor, adóptalo ya oficialmente!


De momento, no os voy adar más el coñazo, os dejo con el capitulo, así que disfrutadlo yseguimos hablando luego.


CAPITULO 17


..........................


Por la noche, mientras Sam estaba estudiando en la mesa de la cocina,Bucky estaba sentado en el sofá del salón, viendo la televisióncon los hermanos de este. En realidad, tenía a Sarah recostadacontra él, pero, a pesar de volver la vista hacía Sam para ver siel gesto le molestaba, este no había levantado la vista de loslibros.


Solo volvió la vista hacía él cuando su móvil empezó a sonar,como hicieron los miembros que había en el salón.


Tras conseguir sacárselo del bolsillo y echar un vistazo a lapantalla, volvió la vista hacía los que le observaban.


-Perdonad un momento. Tengo que cogerlo.


Se puso en pie y se dirigió al cuarto de Sam, el lugar mástranquilo de la casa en aquellos momentos donde podría hablar.


-¿Qué pasa, Steve?- saludó Bucky tras coger la llamada.-¿Cómo haido el día?


-Fatal. Pero no llamaba para eso. ¿Cómo van las cosas entre Sam ytú? Antes te he tenido que colgar.


-Pues.....van, supongo. Ya sabes como es y parece molestarle todo loque hago.


-Bueno.....prácticamente te has colado en su casa sin avisar.


-¿Reaccionarías tú igual?


-Sabesque conmigo no haría falta ni que llamaras a la puerta. Podríasdecirle al portero que te dejara entrar y lo haría. Lo que tambiénme llevó a pensar...... ¿por qué te has colado en casa de Samcuando sabias que podías entrar aquí?


-Tengo mis motivos.


-¿Y tus motivos tienen algo que ver con que te molestes con el hechode que Sam te trate de esa manera tan suya que tiene?


-De momento, no diré nada más.


-No, tampoco es que haga falta. ¿Qué pasa últimamente?


-¿Con qué?- preguntó Bucky, frunciendo el ceño.


-Con los hombres. Parece que ocurre algo con casi todos los que estána mi alrededor.


-Steve, sabes que lo que yo siento......


-Sí, sí, lo sé. Pero, no has decidido hacer algo hasta ahora.


-Porque tal vez no tenga ocasión de hacerlo más adelante- le contó.


-¿Qué quieres decir?- murmuró Steve, tras unos instantes desilencio.


-Mis jefes están comprobando unos terrenos en un lugar del que no tepuedo hablar y planean mandarme con una unidad hasta allí. Al menos,si las cosas siguen llendo como hasta ahora.


-Pero.....ya te habían mandado a misiones antes.


-Sí, de reconocimiento. Entrar y salir con el mayor sigilo posible,sin que nadie me viera. Esto no es lo mismo.


-Bucky.


Steve sonaba preocupado, sin saber qué decir. Ya había perdido a unpadre en unas circunstancias parecidas. No sabría qué hacer si unamigo pasaba por lo mismo.


-No te preocupes, grandullón. Que me manden a una misión nosignifica que obligatoriamente tenga que morir. Solo que noquería.......no quería dejar nada sin hacer, solo por si acaso.


-Oh, Bucky.


-Eh. Deja de hablarme de ese modo. Me haces sentir como si yaestuviera muerto.


-Yo..... Oh, joder. Lo siento. Yo.....no sé qué decir en un casoasí.


-¿Qué tal ''Te voy a montar un fiestón en cuanto vuelvas''?Desde luego, eso me animaría mucho.


-¡Desde luego! ¡Dalo por hecho!- afirmó Steve.-Con suerte, paracuando vuelvas, habremos vendido algún disco y podremos organizarteuna buena fiesta.


-Asíme gusta. Eso era lo que quería oir- afirmó Bucky, sonriendo.-Pero,antes de que te soltara todo este rollo de mi posible muerte, teníala sensación de que tú también tenias algo que decirme.


-No. No tiene importancia.


-¿Seguro que no?


-¿En comparación al hecho de que te quieren mandar a una misión aun lugar del que no me puedes hablar y no sabemos lo que puedeocurrir? Desde luego. No tiene ninguna importancia.


-Siempre has sido muy melodramático- comentó Bucky.


Pero se perdió la respuesta de Steve al oír un ruido a su espalda,volviéndose hacía la puerta entreabierta del cuarto.


Se dirigió hacía esta en unas rápidas zancadas y la abrió degolpe, encontrándose cara a cara con Sam, que parecía habersequedado congelado mientras iba a abrir la puerta.


-Steve, te llamo más tarde.


-De acuerdo. Pero no tardes en hacerlo- le dijo este, con aquel tonode madre que ponía en ocasión.-Y tenemos que quedar más antes deque tengas que irte.


-De acuerdo- aceptó Bucky. Y colgó el teléfono sin perder de vistaa Sam.-¿Cuanto has oído?- le preguntó.


-¿Te mandan a una misión? ¿Cómo es eso de que podrías morir?- ledijo este, alzando la cabeza hacía él.


-En realidad, lo que he dicho a Steve es que no me trate como si yaestuviera muerto, pero....


-¿Cuando pensabas decírmelo a mí?- le soltó Sam al mismo tiempo,interrumpiéndole.-¿O es que, acaso, no pensabas decírmelo?.


-¿Por qué? ¿Te hubieras comportado conmigo de otra forma al saberde esa misión?- le dijo Bucky, endureciendo la expresión de sucara.-¿Habrías sido tan hipócrita, fingiendo ser de una manera queno eras?


-¡No es eso!- le gritó Sam.-Pero, ¿tanto te costaba contármelo?Parece que para decírselo a Steve nunca hay ningún problema.


-Mis jefes me lo han confirmado hace poco. Mi visita a la ciudad erapara organizarnos y que conociera a la unidad con la que iba a viajarsi los planes seguían en marcha.


-¿Y por qué motivos iban a cancelar la misión?


-Por muchos motivos. Porque el objetivo desapareciera, porqueestallara una guerra civil que nos entorpecería el paso, porquealguien que no debería se enterara de la misión y les mandarancancelarla......


-Así que, en realidad, en cualquier momento, pueden llamarte paradecirte que no hay misión.


-O mañana mismo podrían llamar para decirme que tengo que coger unavión y salir de aquí antes de que pudiera despedirme de alguien.


-¿Para qué has venido aquí, Bucky?- le espetó Sam.-¿Por qué,sabiendo todo eso, te has empeñado en colarte en mi casa de esamanera?


-Porque, como ya le he dicho a Steve, no tengo ninguna garantía devolver.


-¡Eso no explica nada!- le espetó Sam.-¡Nunca hemos sido tanamigos como para que tengas la necesidad de venir a mi casa y pasartiempo aquí, con nosotros!


-Claro. No se trataba de eso- admitió Bucky.


-Entonces, ¿de qué se trataba?


Bueno......de perdidos al río, fue lo que pensó Bucky en esemomento, sujetando el rostro de Sam y arrastrándolo hacía él,hasta que consiguió besarlo, dejando al halcón gruñón con losojos abiertos como platos, incapaz de decir o hacer nada.


Bucky lo mantenía bien sujeto contra él y, aunque hubiera podidoenzarzarse en una pelea con este, tratando de liberarse de susbrazos, de apartarle de su cuerpo, conforme más tiempo pasabanaquellos labios sobre los suyos, más notaba como las fuerzas leabandonaban, como si se estuviera rindiéndose progresivamente a él.


-¡Bucky, ¿vas a seguir viendo la película con nosotros?!- gritóSarah por el pasillo, dándoles el tiempo justo a ambos para quepudieran separarse antes de que ella se asomara al cuarto.


-¿Habéis estado esperándome?- le preguntó Bucky a esta con unasonrisa.


Sarah asintió, pero se fijó en que su hermano le había dado laespalda en cuanto había entrado en el cuarto.


-¿Os habéis peleado?- preguntó.


-Más o menos- le contestó el castaño, cogiendo a esta por loshombros para sacarla del cuarto.-Será mejor que volvemos al salónantes de que Gideon se impaciente demasiado.


Sarah trató de decir algo más, de invitar a su hermano aunque fuerapara que viera lo que quedaba de película con ellos, pero las manosde Bucky sobre sus hombros la sacaron de allí tan rápido que apenasle dio tiempo a abrir la boca antes de darse cuenta de que ya estabade camino al salón.


-A por la peli, a por la peli- canturreaba Bucky, como si nada.


Pero Sam, aún de espaldas a la puerta, seguía lo suficientementedesconcertado para no moverse del sitio, con una mano contra loslabios, preguntándose si lo que había ocurrido allí había sidoreal o solo se lo había imaginado.


Desde luego, si aquel beso había sido real, explicaría porque Buckyse había empeñado en quedarse en su casa cuando sabía que le ibana mandar a una misión arriesgada. Y también que conociera tantosdetalles de su vida que había ido recabando durante todos los añosque se conocían mientras que él mismo apenas le había prestadoatención hasta hacía bastante poco.


Pero......¿porqué él? ¿Qué había hecho para llamar la atención de Bucky deese modo? Este mismo había dicho que le gustaban las mujeres, asíque......¿le gustaban las mujeres y él?


No, no, no. Era mejor que dejara de pensar en ello. Tenía cosas queestudiar, cosas en las que concentrarse. Lo más seguro era que Buckysolo hubiera hecho aquello para molestarlo. Si, eso era lo másseguro.


.......................


Días después, Thor y Loki volvieron al grupo como si nada hubieraocurrido entre ellos, como si su pelea nunca hubiera tenido lugar. Enrealidad, volvieron de mejor humor que nunca. Steve no recordaba laultima vez que había visto a Loki tan sonriente, ya que ver algigante rubio sonriendo no era algo tan extraño de ver.


Rick se mostró encantado con la nueva actitud que parecían tenerlos hermanos y, aunque Steve también estaba contento por ellos y porel hecho de que volvían a ser un grupo unido que volvían a tocarjuntos, tenía temas que le preocupan en la cabeza.


El tema de Bucky y esa misión a la que podía embarcarse encualquier momento era uno de los temas. Pero también estaba el temaStark y las palabras que le dirigía, las cuales siempre conseguíansacudirlo tanto por dentro como por fuera.


Ya había querido mantenerse alejado de él y le había dicho que eraimposible que pudieran ser amigos. Entonces, si esas dos cosasestaban claras, ¿por qué él no dejaba de darle vueltas? ¿Por qué,a pesar de que Tony Stark le había dejado claro que él quería unarelación carnal con él, Steve no se lo sacaba de la cabeza? ¿Quéestaba mal con él? ¿En realidad le gustaban los hombres y no sehabía dado cuenta hasta ahora?


No. Sabía perfectamente de que nunca se había sentido atraídohacía otros hombres y que las mujeres siempre le habían llamado laatención, aunque nunca había tenido mucho trato con ellas.Entonces, ¿qué era lo que sentía por Stark? ¿Era una especie deatracción única? ¿Había una química especial en sus cuerpos quese atraían?


Parecía la explicación más probable.


Pero, para estar seguro del todo de ello, tenía que comprobarlo. Y,para comprobarlo, tenía que ir al único lugar en el mundo dondeStark parecía estar aislado del resto del universo.


La Torre Stark.


A pesar de que los de seguridad ya deberían haberse dado cuenta deque él no tenia porque pasar más por allí, no parecía queestuvieran haciendo muy bien su trabajo cuando Steve consiguióllegar al ascensor sin problemas por tercera vez.


Tony tendría que hablar con estos para que hicieran bien sutrabajo.


Aunque, claro, su incompetencia a él le habia venido de perlas.


Como parecía ser la costumbre, las luces del piso estabanapagadas para cuando él llegó. Sin embargo, en vez de ver comoestas se encendían a lo lejos, mientras Jarvis se acercaba, todopermaneció en silencio y penumbras.


¿Acaso el fiel mayordomo no se encontraba en la casa? ¿Cómoera eso posible? Pero, a pesar de preocuparse brevemente por elestado del anciano hombre, tambien se dijo que aquello era algo buenopara él.


Como no supo bien qué hacer en el piso ajeno vacío, hizo lo quesiempre habia hecho con Jarvis; se fue a la cocina, aunque en estaocasión no se sirvió nada. No iba a trastear en la impecable cocinadel mayordomo y tenia el estomago demasiado cerrado por los nervioscomo para obligarse a tomar algo.


Permaneció allí, solo rompiendo el silencio del lugar con eltamborileo de sus dedos sobre la encimera de la cocina,sorprendiéndose al descubrir que ningún ruido de la torre, ya fuerade personas u otra cosa, llegaban hasta allí. Tony se habiaencargado de aislar pero que muy bien su refugio del ruido exterior.


Cuando oyó el ruido del ascensor, se puso en pie en el acto,rogando porque Tony hubiera llegado solo al piso mientras se dirigíaal salón.


Al llegar al cuarto, vio como este se dejó caer sobre el sofá,de espaldas a él, colocándose el brazo sobre los ojos, como si noquisiera ver luz alguna.


Pero, de algún modo, habia notado que habia alguien más en ellugar.


-Te dije que te fueras a descansar, Jarvis- soltó Tony depronto, sobresaltando a Steve.-Estas enfermo y a tu edad es mejor quereposes.


-No soy Jarvis.


Fue el turno de Tony de pegar un bote en el sofá, poniéndose enpie en el acto, volviéndose hacia él.


-¿Qué estas haciendo aquí?- le preguntó este, pareciendo deverdad sorprendido por su aparición.


Desde luego, estaba claro que Steve parecía el ultimo ser sobrela tierra que Stark parecía haber esperado ver en su piso aquel día.


-Quería comprobar una cosa- le dijo Rogers, rodeando el sofápara acercarse a este.


-¿Una cosa? ¿Qué cosa?- preguntó Tony.


Por su expresión y por su tono, parecía que fuera a echar acorrer en cualquier momento.


-Tú solo.......no te muevas- le pidió Steve, tan nervioso comoél o más, alzando las manos para sujetar su rostro.


Tony solo lo observó con los ojos más abiertos que habia vistonunca, haciendo creer a Rogers que, de un momento a otro, podríacaerse dentro de aquellos dos orbes oscuros. Pero trató deconcentrarse, sabiendo que, si no, no tendría valor para hacer loque le habia llevado allí.


Notando como el corazón le latía como nunca antes, Steve empezóa inclinarse hacia Tony, dándole a este el tiempo suficiente comopara apartarlo u oponerse.


Pero, claro, ¿Cómo iba a apartarlo cuando habia sido el propioStark el que habia dicho que se sentía atraído por él y ya lehabia besado en una ocasión?


Para cuando sus labios se unieron, parecía que habia pasado unaeternidad mientras se habían acercado.


Tony deseó alzar las manos, tocarlo del modo que fuera posible,del modo en el que habia soñado. Pero, ya que Steve le habia dichoque quería comprobar una cosa, prefirió no moverse, dejarle a estehacer, que comprobara lo que quisiera comprobar y acabara de unamaldita vez con la tortura interna que llevaba atormentándolo desdehacia tanto.


Stark hacia mucho tiempo que no esperaba por nadie. Cuando queríaalgo, lo tomaba. Pero,con Steve.....


El beso inició suave, apenas una caricia contra sus propios labios,como si no hubiera la necesidad de tomar, solo de probar, deexperimentar.


Sin embargo, a pesar de ser el beso más dulce que le hubierandado a Tony en la vida, todo su cuerpo se estremeció ante aquellaspasadas, como si los labios de Steve pudieran llegar hasta el ultimorincón de su cuerpo, alborotando sus sentidos, poniendo todo sumundo patas arriba.


¿Cuando había sido la última vez que habia sentido algosimilar? ¿La primera vez que habia besado a alguien? Y llevaba todasu vida esperando volver a sentir esa emoción de la primera vez sinsaberlo, hasta ese instante.


Demasiado rápido, demasiado poco, demasiado pronto, Steve apartósus labios de él, abriendo los ojos lentamente, como si hubierasentido algo parecido a lo que habia sentido Tony. Solo que, en sucaso, empezó a abrirse paso una sonrisa encantadora por su cara,haciendo que el corazón de Stark latiera aun con más emoción.


-Al menos, ahora sé que no me estoy volviendo loco- murmuróRogers, más para sí que para cualquier otro.


Pero Tony tenia un oido excelente.


-Pero me vas a volver loco a mi- afirmó, momentos antes desujetar a Steve por la nuca para volver a besarlo.


Findel capitulo 17


Ufff,UFFFFFF!!!!! ¡¿Dónde están los abanicos?! ¡¿No notáis elcalor?! Porque yo sí que noto mucho calor ahora mismo, después desemejante final. Sobretodo porque ya llevamos tiempo esperando quealgo más ocurra entre ellos dos. Y sí, he dicho ''llevamos''porque yo me incluyo entre esas personas que lo han estado esperando.


Estaréishasta el moño de oírme decir esto, pero yo no soy quién escribe lahistoria, si no que musa se encarga de la mayor parte de eso. Y laotra parte es la historia misma. Supongo que aquellos que tambiénescribís entenderéis de lo que estoy hablando. Y si yo he sabidoexplicarme bien, los que no escriban también habrán acabadoentendiéndolo.


Seve que este era el capitulo especial de los besos, si aúnconseguimos hacer memoria y recordar que, al principio del capitulo,Sam y Bucky también han tenido algo en el cuarto de este. Perdonadsi olvido algún detalle importante que tendría que comentar, perohan pasado días desde que escribí la primera parte y esta mañana(me refiero a la mañana en la que escribí estas palabras) estabacentrada en mi historia Spiderpool.


Algunosdiréis: ''Si yo no he visto ninguna historia Spiderpool en tucuenta. Y mira que lo he revisado''. Eso es por un motivo biensencillo. Porque aún no lo he subido.


Solollevo 6 capítulos escritos hasta el momento y hasta que yo no veaque soy más constante con ella o logro terminarla, no empezaré asubirla. Sabéis que me sienta como el culo dejar historias a mediasy prefiero ser precavida que lanzarme y darme una ostia al final deuna piscina vacía.


O,quien sabe, para cuando yo empiece a subir el capitulo 17, a lo mejorya he terminado la historia y he empezado a subirla. Actualmente,mientras escribo esto, ya tengo subido el 9 de esta historia, asíque......¿quién sabe?


Perovolvamos a Tony y Steve. Sí creéis que la cosa se ha acabado aquí,que Tony se va a contentar con un simple beso, es que no conocéis denada a nuestro Tony. Bueno......yo personalmente tampoco lo conozco.Más quisiera yo. Jajajajaa. ¿De qué hablábamos? Sí, del beso. Yosolo digo que esperéis con ganas el siguiente capitulo >/////<


Ycon esta forma tan particular y encantadora de despedirme, os digoque os mantengáis sanos y nos seguimos leyendo en el siguientecapitulo. Besos. Para todos.

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