- ¡Wille!

Wilhelm volteo dejando de caminar, dándose cuenta de que se había perdido en la conversación con Henry nuevamente. Este frenó delante de él y se lo quedó observando, esperando a que se diera cuenta de que estaba ahí. Cuando el príncipe heredero volteo vio que el chico rubio frente a él levantaba una ceja.

- Entonces ¿No vamos a ir más al grupo? - Volvió a preguntarle.

- No creo que... - Wilhelm volvió a voltear tratando de ver de donde habían llamado a su nombre.- No puedo permitirme esos errores de nuevo. - Terminó de decir mientras respiraba con fuerza y empezaba a caminar de nuevo.

- Claro, entiendo. Bueno pero, las fiestas si ¿No?

- Sí obvio, eso sí.

Ambos se rieron, dejando que el silencio se adueñara del resto del tramo. Wilhelm venía sintiéndose algo paranoico desde su llegada. Sentía una voz muy específica llamándolo. No quería admitir aún que era la voz de Eric. Que a veces cuando se reía lo escuchaba reírse también en conversaciones de otros. Cuando August hablaba a lo lejos sentía que hablaba con él y a veces se quedaba escuchando, sintiendo que si no miraba tal vez la ilusión de que estaba ahi seguiria viva.

Sara estaba en la biblioteca cuando entraron y miró a Wille de una forma no muy amigable, pero de todas formas les sonrió a ambos. Hacía días que no se enviaba mensajes con Simon y pese a que las clases estaban por comenzar. Nada sabía de su... ¿Ex? Henry tiró unos libros sobre la mesa donde Wille se había puesto y acomodado con la notebook y unos cuadernos. "Sorry" dijo riendo.

Desde otra mesa, que Wille no había notado, había otras chicas las cuales una de ellas miraba a Henry y se reía divertida. Este le tiró un lápiz y ella lo guardó en su cartuchera.

- ¿Todo bien? - Preguntó Wille mirando a la chica y luego a su compañero.

- Super. - Dijo el chico escondiendo la cabeza en el libro.- ¿Tenes otro lápiz?

- Si, claro - Wille intentó no reír ante la pregunta.- Pero no lo tires, es de la realeza.

Henry lo miró serio ante el comentario pero luego ambos empezaron a reír. Era un lápiz como el que tenían todos, pero la seriedad de Wilhelm lo descoloco y distrajo. "Gracias" le comento al pasar antes de ponerse a estudiar.

×

- ¡Wille! - El príncipe se sobresaltó cuando lo escuchó, esta vez era tan real. Que se helo y no volteo.- ¡Hey! - Dijo alguien que se paró a su lado y le quitó el cigarrillo que tenía en la mano.- No me importa que tan enojado estés si te ve mama se la va a agarrar conmigo.- Wilhelm lo observó, Erik se llevaba el cigarrillo a su boca y le daba una larga pitada.- Odio no poder fumar en libertad en la casa ¿Que culpa tenemos de que papá sea ex fumador?

- Erik... - Susurro observando a su hermano tan vívidamente ahí parado. Fumando. Libre.

- ¡Wille!

El grito lo despertó.

August.

- No lo estoy molestando, tenemos que entrenar y le estoy avisando.

Podía escuchar la voz de Malin diciéndole que deje de gritar. Wilhelm se levantó rápido y abrió la puerta.

- Estoy despierto. En cinco minutos bajo... - Cerró la puerta y enseguida se empezó a cambiar mientras se asomaba a la ventana, buscando su verdadera razón de ir a entrenar.

Simon.

Salió corriendo de la habitación y del lugar, buscando llegar a tiempo a los chicos que empezaban a correr ¿Porque nadie le había dicho que ya empezaba el entrenamiento? Tal vez porque estaba ignorando los mensajes y llamadas de todos.

Correr no le molestaba, era algo que solía hacer antes para liberar estrés. Lo que le molestaba en realidad eran las máquinas y el encierro que las mismas conllevan. Prefería estar ahí afuera, en la naturaleza, remando o nadando que estar encerrado haciendo ejercicio. Algo que August parecía disfrutar de sobremanera.

- Bueno basta maricas, vamos a estirar.

Wilhelm miró enseguida a Simon que rodaba sus ojos ante el comentario y se acercó a él para ser su compañero. El socialista, como le decía August, se sentó en el piso y abrió sus piernas echándose sobre una de ellas para estirar, Wilhelm se sentó frente a él y lo siguió en un movimiento espejo empujando con sus pies, los pies de Simon abriendo más sus piernas. Simon lo miró de reojo aguantando la risa mientras cambiaba de lado, Wille lo imitó. Podía escuchar a otros hablar pero poco le importaba la verdad. Después de todo estaba ahí para estar con él.

- ¿Vas a ir a la fiesta del fogón?

- Hola Simon ¿Cómo estás? - Dijo el idiota poniendose en el medio para estirar mejor.

- Si vas, voy. - Wille lo imito apoyando sus codos frente a él, claramente llegando más bajo que Simon. Este intentó hacer lo mismo pero no llegó.

- Hablamos de esto... - En frustración se volvió a sentar y recogió sus piernas, logrando que las plantas de sus pies se tocaran entre sí y moviendo las rodillas, como una mariposa pensó Wille, aunque si se le decía a lo que estaba haciendo Simon.

- ¿De qué exactamente? No hablamos mucho. - Wilhelm se posicionó de igual forma.

Simon miró con los ojos como platos a Wille frenando el movimiento mientras miraba a todos lados y se reacomodaba cruzando las piernas. Empezó a estirar los brazos, primero uno, Wille lo imitó, luego el otro, Wille empezó a reír e hizo que Simon sonriera también pero ni bien August hablo se volvió a poner serio.

- Okay, todo por hoy. Vayanse.

Wille miró a todos lados, todos levantándose y hablando sobre la fiesta, ignorando completamente que para ser mejores deportistas tienen que llevar una vida sana. Algo que Wilhelm siempre tenía en mente pero nunca hacía.

Simon se acomodo la ropa una vez de pie notando que Wilhelm estaba parado frente a él, esperándolo. Se miraron por unos segundos sorprendidos de la comodidad de la situación pese a estar rodeados de personas, Simon se relamió los labios cuando Wille inconscientemente los observaba y cuando noto que él había notado que estaba siendo observado, sonrió y luego empezó a caminar.

- Sé que vas a venir. - Le menciona al pasar Wille.- por Sara, no la dejas sola nunca.

- Y si sabes ¿Para qué preguntas?

- Quiero una excusa para hablarte.

- No necesitas hablarme.

- Pensé que ibas a decir "No necesitas excusas" para hablarte.

- Wilhelm... - Simon iba a empezar a hablar. Pero fueron interrumpidos por August.

- Socialista, que bueno que viniste, necesitas entrenar mucho más que los demás ¿Vas a venir a la fiesta?

Simon lo miró fijo, entrecerrando sus ojos. August borró su sonrisa mirando a ambos, dándose cuenta de que había interrumpido la conversación.

- August - Dijo Simon muy seguro de sí mismo y Wille lo miró aterrado, agradeciendo que la mayoría ya se habían ido.

- Vamos a ir, si ¿Tenes algún problema? - Se apuró a decir Wille.- Podes ir avisando a mi mama si queres, eso te encanta.

- O cuando llegamos podemos posar para unas fotos.

- O un video, creo que esos les gustan más - agregó Wilhelm a lo que Simon parecía estar flotando con esas palabras.

- Se que me mande una cagada y lo siento. - Susurro el chico alto mirando al rubio.- Wilhelm ya te lo dije.

- A mi no me lo dijiste. - agregó Simon.

August observó a Simon como si fuera una cucaracha a pisar.- No, no lo hice.

Simon apretó la mandíbula, sabía que no iba a sacar nada del tema "Rich people" susurro en inglés y rodó los ojos iniciando una caminata rápida lejos de esa situación.

- ¿Por qué mierda sos así con él? Nunca te hizo nada.

- ¿Nunca? Me vino a matonear con unos amigos y me golpeó, ¿Eso es nada? Debería denunciarlo a la dirección para que lo saquen.

- Siempre lo odiaste... - Wille empezó a caminar muy lento.- Estás celoso... Es entendible.

- ¿Celoso de que? - August se carcajeo - Wilhelm si de verdad te importara no lo arrastrarias a vivir esta situación que ambos sabemos es imposible.

Wille volteo - Después de todo lo que hice por vos y lo NADA que hiciste por mi, lo minimo que podes hacer es dejarnos tranquilos.

- No deberías estar con él Wilhelm. - Le gritó cuando él comenzó a irse tras Simon.

×

Una vez que salió de una ducha fría, la necesitaba, Wilhelm se tiró en la cama y agarró el celular. Sabía que quería escribirle a Simon pero las palabras no le venían a la mente. Entró a IG y empezó a mirar historias de todos. Felice con sus caballos, la realeza y momentos de falsedades, algunos cantantes, otros actores.

Y luego Simon. El imbécil.

WS

¿Tu primo?

Simon

Mi nuevo amante.

*Visto*

Wilhelm tuvo que dejar el celular por unos minutos. Solo lo volvió a tomar cuando vibró nuevamente.

Simon

Dios, amo boludearte.

*visto*

Wille se sentó en la cama, observando los cuadernos y libros sobre el escritorio. Llevó su mano a la boca, mordiendo la comisura de sus uñas. Perdió la noción del tiempo y cuanto estuvo haciendo lo que hacía, el vibrar del celular lo volvió a traer a la realidad.

Simon

No es divertido si te enojas.

WS

No estoy enojado, estaba estudiando

¿En instagram?

Exacto.

*visto*

Wilhelm gruño en frustración, no por las palabras de Simón, sino las de August que le daban vueltas en la cabeza ¿Y si tenía razón? ¿Y si seguir atrás de Simon era en realidad un acto egoísta y lo condenaba a una vida de mierda?

WS

Perdón por lo de August hoy.

Simon

No te disculpes por lo de hoy, fue divertida tu contestación. Me gusto.

*visto*

El pecho empezó a dolerle a Wilhelm. Si, pensaba, August tenía razón. Lo estaba condenando.

Simon

¿Qué vamos a hacer durante la fiesta? ¿Vas a bailar conmigo?

O te da miedo que te vean conmigo...

*visto*

Wilhelm tuve que leer varias veces los mensajes de Simon. El dolor en su pecho desapareció la tercera vez que los leyó. Wille sonrió y sus mejillas se sintieron más calientes, Simon definitivamente lo estaba condenando a él. 

WS

Cuando estamos juntos no me decis esas cosas.

Simon

Soy vergonzoso, ¿No se nota?

Para nada.

Es más...

Si estuvieras conmigo ahora no dirías esas cosas.

Tenes razón.

Pero, sabes que...

No estaríamos hablando tampoco.

*visto*

Wilhelm se dejó caer en la cama. No podía quitarse la sonrisa del rostro.

WS

Nos vemos el viernes Simon.

Simon

Nos vemos Wille.

Wilhelm se llevó el almohadón a la cara y gritó repetidas veces.

×