— ¡Feliz aniversario! —llegaron a la sala donde el pelirrosa y el castaño esperaban esa sorpresa que les habían prometido. Tom le extendió los brazos a Marco, de inmediato éste no dudó en abrazarlo con fuerza, llenando su rostro de besos mientras susurraba un "te amo" en su oído, una y otra vez.

Por otro lado, Dipper como pudo se agarró del sofá para poder quedar, más o menos, a la altura del rubio, quien lo cargó por los muslos, llenando sus labios de besos con amor, estaba feliz de por fin volver a estar con su hermoso castaño adorado, de que por fin él lo quisiera de nuevo.

— Yo te hice un regalo —habló, sacando de debajo de un cojín una cajita hecha a mano con las bolsas de papel acartonado, estaba hermosamente decorada. Cuando el rubio la abrió, sus ojos se inundaron de lágrimas mientras lo volvía a abrazar con fuerza, era un cuadro con un collage de fotos de ellos juntos.

— Es un regalo hermoso Dippy lindo —besó sus labios suavemente —Yo te traje esto— de su bolsillo sacó una caja de una fina tela azul, con un listón blanco. Al abrirlo, el menor miró impresionado el collar que había en su interior. La cadena que lo sostenía, y el dije, eran de oro puro.

— No debiste gastar tanto... —

— Nada es demasiado cuando se trata de ti mi amor —besó su frente cortamente, separándose para seguir mirando películas a su lado, viendo como la otra pareja se iba a su habitación.

Después de un año con él, Dipper sentía realmente que amaba al rubio que tanto había hecho para estar con él, por lo que después de un mes, dejó de poner resistencia, aceptando las muestras de afecto de Bill, quien siempre lo llevaba a dar paseos al exterior e incluso lo ayudaba a poder movilizarse por la casa. No podía dejar de pensar que, a pesar de sentirse un inútil por no tener piernas, el rubio lo cuidaba con total devoción, lo amaba con locura, y eso no le desagradaba, le gustaba sentirse tan querido y tan único para alguien.

Finalmente, Bill siempre le había repetido en su preparatoria, una y otra vez, "Tú siempre serás mío". 

Y así sería, él estaba dispuesto a lograr que eso sea una realidad.