[17]
Namjoon llegó corriendo a la oficina del Rey, quien estaba leyendo unos documentos del estado, el oficial se hincó de un solo—Mi rey—susurró casi en un hilo de voz. El rubio subió su mirada para fruncir el ceño—Le tengo...noticias graves—comentó con un tono muy triste, el rey dejó a un lado el documento que leía.
Ji Eun tenía a su hijo entre sus brazos, Taehyung se encontraba a su derecha, era bastante noche así que pronto dispondrian para dormir. Escucharon unos sonidos fuera del cuarto, MoonByul fue a ver, al abrir la puerta, apareció el oficial Namjoon, quien se hincó con sumo respeto.
—Mi sentido pésame, mi Reina...
Ji Eun no comprendió aquello.
—¿Q-qué sucede?—preguntó de un solo Taehyung.
—Nos acaban de avisar, que sus padres, han muerto.
Ji Eun al escuchar aquello abrió los ojos en par y cuando se iba caer de rodillas, sus dos doncellas la sostuvieron a tiempo. Taehyung retrocedió sin poder escuchar lo que estaba diciendo Namjoon, se acercó al chico y lo tomó del cuello de la camisa.
—¿Cómo?
—Los señores Lee...fueron encontrados muertos, en su cuarto. Se dice que fue suicidio...
Ji Eun pegó un grito desgarrador sentándose mientras abrazaba a su bebé. Los demás sirvientes se hincaron y agacharon su rostro, pegando su frente en el suelo para estirar las manos sobre la cabeza—Le damos nuestro sentido pésame a la Reina—comentaron en coro.
Taehyung salió del cuarto y se puso la máscara, empezó apresurar sus pasos, queriendo alejarse de aquel lugar, haciendo a un lado a las personas. Se detuvo al ver al Rey que ingresaba por el portón de la entrada de aquel palacio, el chico se hincó de un solo al ver aquel tipo. Yoongi suspiró para desviar su mirada, cargado con mucha pena.
—¿A qué se refiere que fue suicidio?—preguntó de un solo el omega.
—Encontraron una daga sostenida en la mano derecha de la señora Lee, le cortó el cuello a su esposo y después ella se mató-...
—¡Miente!—gritó el omega. Todos al escuchar que el chico le había alzado la voz al Rey se hincaron—¿Por qué haría eso? ¡La señora Lee no es ese tipo de mujer!
—Hace un tiempo atrás que se sospechaba que el Señor Lee estaba haciendo apropiación del dinero que se le fue entregado para la escuela...además, hace unas horas la escuela y el orfanato fueron consumidas por el fuego. Sospechan que fue el señor Lee para ocultar pruebas, su esposa lo descubrió y de la vergüenza-...
—¡¿Se cree eso?!—Taehyung tomó de la túnica al alfa mientras no dejaba de llorar—¿Usted cree en eso? El señor Lee no era ese tipo de persona...¡Él jamás haría algo así!
—Hay testigos que lo vieron salir de último que sucediera el fuego...murieron los 15 niños que habían allí junto a la cuidadora-...
—Mi rey ¡Mi rey!—gritó de forma desgarradora aquel chico, soltó la prenda del tipo, pegó su frente al suelo para pedir por su súplica—. Alguien los incriminó...y los silenciaron—el chico subió un poco su rostro con un nudo en la garganta—¡Son inocentes!
—Joven Maestro—alzó la voz el Rey con un nudo en la garganta y respiró con profundidad—debo...ver como está la Reina...deme permiso.
Taehyung se hizo a un lado, viendo en cámara lenta aquel tipo pasar y dirigirse al cuarto de su esposa. EL joven omega bajó su mirada viendo sus manos para luego subir su rostro, notando la espalda de aquel tipo y en como se iba siendo cada vez más pequeño en la lejanía.
Yeonwoo se encontraba en una reunión con los otros dos omegas, conversaban sobre la preparación de la fiesta del príncipe. Una de las doncellas personales, llegó y miró a cada uno—Su alteza—habló la servidora.—Tengo noticias—Yeonwoo bajó el té caliente, haciendo un gesto de que hablara—. Los padres de la Reina...fueron encontrados muertos—los tres omegas miraron de un golpe a la chica y se miraron desconcertados entre ellos.
—¿Cómo?—preguntó el Consorte Noble Imperial, miró a los lados pensativo—Tenemos que ir donde la Reina...—ordenó—Vamos.
—No creo que ahorita ella nos quiera ver—habló con tristeza Hyun Sik—visitemos a su majestad en la mañana.
Yeonwoo suspiró y se sentó con lentitud.
—Que extraño—comentó el chico que miró a la doncella—¿Sabes más al respecto?
Ella se acercó a su amo y le susurró algo en el oído, el omega le miró de un solo—¿Suicidio?—preguntó abriendo los ojos en par. Los otros dos se quedaron también impactados por aquella noticia.
Hwanhee se encontraba quitando sus arreglos del pelo, su hermana se hallaba de visita en su palacio—¿Se puede saber por qué hay tanto ruido?—preguntó molesta viendo a su sirvienta de primera clase—¡Dile a los guardias que hagan silencio!
Su hermana mayor le miró en silencio.
—De seguro ha sucedido algo—comentó la mayor.
—¿Y qué tan importante será, para que estén tan ruidosos?
El guardia de la chica ingresó para hacer una reverencia e hincarse con respeto.
—Mi señora—comentó aquel hombre—traigo noticias—Los padres de la Reina, han fallecido.
La chica dejó de tocar una horquilla para subir su mirada con lentitud, su entrecejo se frunció—¿Y de qué murieron?—preguntó ella dando un manotazo a la criada que le estaba arreglando su cabellera para dormir.
—Suicidio.
Shin Hye miró a su hermana muy sorprendida, la chica se cruzó de brazos para enarcar una ceja—Es una lástima, eran tan jóvenes—comentó para luego suspirar viendo a su hermana mayor—serán unos largos días de pesadumbre en este lugar—Ahora la Reina, se llevará toda la atención—comentó para poner los ojos en blanco.
Su hermana le dio un sorbo a su té, notando que su hermana siguió en lo suyo como si aquella noticia no le fuera gran cosa.
Taehyung corrió rápido y se quitó los zapatos, vestía de blanco en demostración de luto. Se estaba llevando el funeral y cayó hincado al ver dos ataúdes sobre una mesa larga, empezó a caminar usando solo sus rodillas. Ji Eun ingresó después con su bebé en mano, afuera se había decorado de blanco y lo que antes fue la sala de invitados, era un cuarto vacío con unas velas alrededor y donde se estaba llevando aquel funeral.
El omega llegó cerca de la mesa baja contemplando aquellos dos ataúdes,notó a la señora Kim a un lado junto a su esposo, ella al ver al chico bajó su rostro con mucha tristeza—¡Mamá, Papá!—gritó Ji Eun corriendo en dirección de aquel lugar, se hincó con su hijo en brazos, sus sirvientas quisieron detenerla; pero no les fue posible—No pueden irse...—dijo la chica entre lágrimas—¿Cómo pueden dejar a su nieto y no verlo crecer? ¡Me prometieron que lo verían convertirse en un adulto...aún...no pueden irse!—Taehyung dejó caer sus lágrimas.
Min Yoongi contemplaba aquellas dos personas sobre la alfombra y agachó su rostro. Namjoon respiró con profundidad, el nudo en su garganta le impedía hablar. Ji Eun cayó inconsciente—¡Mi reina!—gritaron todos al unísono—Llamen a un médico—ordenó el omega con tono serio. Taehyung la había logrado sostener a tiempo junto al bebé en sus brazos. Un guardia tomó a la chica entre sus brazos y la sacó para llevarla a otro cuarto a descansar junto con las dos sirvientas, siendo Solar que llevó al príncipe. Taehyung contempló aquellos ataúdes, Yoongi vio pasar a su esposa inconsciente, luego contempló la espalda de aquel chico, Namjoon notó a su amigo ir atrás de aquel guardia en silencio. El oficial contempló al joven omega que seguía hincado.
Taehyung junto sus dos manos para ponerlas sobre su vientre, luego sin separarlas, las levanto hacia la altura del pecho con los codos estirados. Colocó ambas manos en el suelo, doblando un poco más sus rodillas, arqueó su espalda y su frente tocó la parte posterior de la mano. Se levantó para luego hacer aquel gesto 3 veces más entre lágrimas. La última vez, dejó postrada su cabeza sobre las manos, la señora Kim agachó su rostro.
—Mira—comentó la señora Lee con una sonrisa, mostrando a su amiga un bebé entre sus brazos—¿Qué te parece? lindo ¿Cierto? ahora será mi hijo...
—¿No es muy orejón?
—¡No seas grosera! ¡No lo es, celosa!—reclamó sacando la lengua a su amiga—es bonito , ciega—alzó la voz su amiga cubriendo las orejitas del niño y haciendo mala cara a su amiga—no tienes que escuchar esas palabras bebé, la Tia Kim no midió sus palabras.—la chica sonrió con dulzura.
—¿Y cómo se llamará, ya le pusiste nombre?
—Taehyung—susurró la joven.
La señora Kim alzó el rostro, su amiga había criado a un chico con amor muy filial. Crió dos chicos con un gran corazón; pero los había dejado tan rápido. Las horas pasaron y las personas empezaron a irse de aquel lugar, quedando el chico y aún agachado. La señora Kim contempló al joven desde lejos, ayudándose con sus doncellas para bajar las pequeñas gradas.
Yoongi pasó por aquella puerta viendo al joven Maestro en la misma posición que hace diez horas, ni siquiera había almorzado o cenado ¿Cuánto tiempo más pensaba pasar así? ya era tarde, sería hora de cremar los cuerpos. Ingresó en silencio viendo aquel cuerpo pequeño en forma de súplica, su corazón se rompió ante aquella imagen—Joven maestro, debe descansar...es muy tarde—comentó y se acercó para poner su mano sobre el hombro del chico, cuando lo hizo, el cuerpo del omega cayó de lado, inconsciente.
Yoongi abrió los ojos en par y tomó el cuerpo del chico entre sus manos. A pesar que el chico era unos centímetros mas alto, al ser omega, su peso era mas bajo que el de un alfa y no le fue problema cargarlo entre sus brazos—¡Guardias!—llamó rápido a uno de sus ayudantes. El hombre que ingresó quiso tomar al chico; pero él se lo impidió—Llamen al médico—ordenó para dirigirse a un lugar, Solar que iba donde su joven amo, al ver al Rey con el chico, se asustó.
—¿Dónde está el cuarto?—preguntó Yoongi de un solo.
—Sígame—pidió ella para apresurar sus pasos por igual.
Después de unos minutos llegó el médico ya que andaba en otro cuarto descansando, al hacer la revisión al chico, se giró con una sonrisa—Mi Rey, el joven se encuentra bien, pudo haberse desmayado debido a la falta de alimento y el cansancio, por lo demás...no corre peligro—afirmó aquel hombre, contempló a Solar—es mejor que descanse...cuando despierte, debe entregar una sopa de verduras—pidió, la chica afirmó de un solo—eso lo ayudará a fortalecer su energía.
El Rey despidió al médico, contempló el cuerpo del chico—Mi rey, ordenaré que hagan la sopa, ya regreso—comentó la chica, Yoongi afirmó viendo a la joven alejarse. Cuando ella ya había salido de aquel cuarto, el rubio se acercó con curiosidad, notando el cuerpo dormido sobre aquella cama.
Acercó su rostro al de Taehyung y juntó su frente; pero solo sintió el frío de la madera de aquella máscara—Joven Maestro...—susurró acariciando las mejillas del joven—Lo siento...—el rubio puso sus manos sobre la máscara para quitarla, cuando iba hacerlo, escuchó unos pasos, así que se alejó rápido, apareciendo Namjoon, quien miró a su amigo de forma sospechosa.
—¿Qué haces?
—Nada—dijo el rubio de un solo negando cualquier acusación que proviniera del ajeno.
—La Reina ya despertó, preguntó por usted.
—Iré a verla—comentó de un solo aquel hombre—Namjoon...
—¿Si, mi Rey?
—¿Qué piensas, sobre todo esto?—el rubio acomodó sus manos tras la espalda—sé que el señor Lee, era un hombre honesto...y que su esposa, jamás le haría daño. La Reina me comentó que ella, a pesar de parecer fría, siempre se preocupaba por su esposo...ella no sería capaz de matarlo para luego cometer suicidio. Y lo de la escuela...—el rubio pasó sus manos con frustración sobre el rostro—esto no se ve para nada bien.
—Quien haya planeado todo esto...es un experto, mi Rey—comentó Namjoon—los únicos testigos que tenemos, son quienes vieron por última vez al señor Lee antes de que se incendiara el Colegio...y de aquí, no hay nadie que pueda admitir que no haya sido un suicidio, el guardia estaba muerto.
—¿Pero por qué acusarían de algo así al señor Lee? ¿Qué ganaban con eso?—preguntó sin comprender—El solo era un Noble maestro.
—Mi rey, hablaremos esto otro día, vaya con la Reina, lo necesita a su lado.
Yoongi contempló al joven maestro para luego afirmar y salir de aquel cuarto. Namjoon salió del cuarto. Taehyung dejó derramar una lágrima, había escuchando todo aquello e incluso cuando el Rey se acercó a su rostro y rogó por sus adentros: que no lo besara. Había estado consciente desde que fue depositado en la cama y el médico lo revisó, solo que prefirió hacerse el dormido porque no se sentía capaz de ver a Yoongi. Mucho menos en esos momentos donde guardaba luto.
El rey había salido del cuarto de la reina, pasó por el cuarto del joven Maestro; pero no lo vio, le preguntó a la doncella, quien comentó que el chico se fue directo al salón donde se llevaba el funeral. El hombre suspiró y se dirigió a pasos silenciosos, había pedido que lo dejaran en paz, así que sus guardias solo lo cuidaban a lo lejos. El rubio al llegar al salón, abrió las cortinas, viendo al chico con su traje de luto e hincado.
—Joven Maestro—habló Yoongi con voz calmada y bastante suave—es muy tarde, debe descansar.
Taehyung se giró y miró al hombre de pie a cabeza para volver a poner su vista al frente. Yoongi se acercó para hincarse sobre uno de los colchones que habían para sentarse en el suelo.
—La señora Lee, aunque no fuera mi madre de sangre...siempre cuidó de mí—comentó aquel omega con un nudo en la garganta—a pesar que no decía sus sentimientos, lo demostraba en acciones.
Un pequeño Taehyung de cuatro años jugaba en el patio de la casa. La señora Lee le contemplaba con una sonrisa, mientras frente a ella se encontraba una visita. El niño atrapó una pequeña mariposa y corrió emocionado donde la mujer, ingresando a la sala de estar—¡Mi señora,mire lo que encontré!—la visita al ver aquello, frunció el ceño.
—¿Cómo dejas que ese niño de baja clase esté en el mismo lugar que nosotros? debería estar con los criados. Educalo.
Taehyung al escuchar aquello, se alejó de la mujer con su cabeza baja.
—Taehyung—habló la señora Lee alzando el rostro—cuando dos personas adultas hablan, es mala educación interrumpir.
—Si, mi señora.
—Ahora que se hinque—comentó la visita—para que aprenda.
La señora Lee contempló aquella mujer y luego dirigió su mirada a sus doncellas—Llevense al niño y cierren la puerta—pidió ella ofreciendo una sonrisa. Cuando el pequeño salió con ayuda de aquella ayudantes y las puertas se cerró. Se giró preocupado para luego ver lo que parecía ser una sombra de la Señora Lee abofeteando a la otra persona—¡A mi no me dices como debo educar a mi niño!—gritó aquella joven para luego tomar del pelo a la visita y abrió la puerta, tirándola de un solo a la tierra.
Taehyung se sobresaltó, viendo con ojitos asustados a la Señora Lee—Saquenla, no quiero verla de nuevo—comentó para limpiar las mangas de su traje. Las sirvientas afirmaron con una sonrisa para tomar a la visita y sacarla arrastrada del lugar, mientras daba gritos de histeria.
—Todos lo sabían, que mi madre me vendió y era hijo de una esclava. Mi origen eran humildes y por eso fui causa de la burla de los demás niños. Siempre que llegaba a la casa, golpeado, corría a los regazos de ella y lloraba por horas. Ella me decía—Está bien llorar, saca tu dolor...llorar no te hace ni más ni menos persona, no eres débil, te hace más fuerte, porque estás aceptando el dolor y lo estás dejando ir—comentó en susurros—les faltaba muchos años para disfrutar...—el chico contempló a Yoongi—¿Por qué...nos lo arrebataron de nuestro lado?
El Rey al notar la mirada sobre él, miró de un solo al frente.
—Joven Maestro...quien haya sido...sabían lo que hacían. También sospeché que la acusación contra el joven Maestro Lee era extraña; pero...por más que investigamos, todo estaba en su contra, quien haya sido-...
—Usted es el Rey—comentó Taehyung con la voz quebrada—es lo único que le pediré—suplicó—que encuentre...quien hizo esto ¿¡Qué iban a ganar esas personas?!—señaló en dirección de aquellos ataúdes para luego golpearse el pecho con sumo dolor—el día...que encuentre la verdad, quienes anduvieron tras esto...no me importará mancharme las manos de sangre, los mataré...uno por uno.
Min Yoongi suspiró al escuchar aquello.
—¿Y si no los encuentra?—preguntó de un solo—¿Seguirá alimentando más su odio?
Kim Taehyung se acercó al alfa y lo tomó del cuello, se acercó lo suficiente al rostro de aquel hombre, quien abrió los ojos en par por aquella falta de respeto a su persona.
—Mi Rey—susurró con una sonrisa cargada de amargura—usted es el menos indicado para pronunciar semejantes palabras ¿Saben cómo le dicen? El Rey maldito—susurró después en el oído de aquel hombre y lo soltó.
—Joven Maestro—sentenció tomando las manos del chico para quitarlas de su cuello, de su quijada resaltó una vena—¿Usted...aún me odia?—Taehyung al escuchar aquello, desvió la mirada y se levantó para salir de aquel lugar, Yoongi le detuvo, girando al chico—Responda...después de aquella noche...¿No pudo perdonarme?—el omega le contempló con tristeza.
—Lo que sucedió esa noche...no tiene nada que ver con esta situación.
—No; pero desde que regresó al palacio, evita cruzarse conmigo, rechaza las invitaciones de la Reina y siempre que llego algún lugar donde usted está, se retira...
Taehyung se le acercó a unos centímetros del rostro.
—No podría hacerle algo así a la señorita Ji Eun, me críe con ella, ella...lo ama—comentó con un nudo en la garganta. Además, mi Rey...me gusta la palabra libertad—el chico enarcó una ceja—soy un gran soñador, prefiero el vuelo sobre los cielos.
Dicho aquello el chico se retiró dejando al Rubio en un profundo silencio, el Rey contempló al joven alejarse de aquel salón. De todas las personas, ese era el único que no parecía morir por estar a su lado. Taehyung se detuvo después de haber dado unos pasos, se giró viendo la entrada de aquel salón, la verdad que él no podía aguantar estar viendo al hombre que le gustara con otras personas.
Pero era lo normal, los reyes tenían muchas parejas para que le dieran herederos. Pero incluso sabiendo que eso era común, no comprendía como Ji Eun podía cargar con todo aquello ¿No sentiría celos, viendo como el hombre que ama, también comparte cama con otras personas? ¿Qué tal vez esa noche...no será ella a quien favorezca?
Bajó su mirada, era humano y eso no lo hacía ajenos a esos tipos de sentimientos, también sentía celos cuando el Rey tomaba la mano de ella. Por supuesto que amaba a Ji Eun, se habían crecido juntos y quitarle el hombre con el que ella estaba casada, o traicionarla de esa forma, no lo haría tampoco sentirse orgulloso. Pero aún así, no podía evitar esos sentimientos, estaban presentes—Prefiero un vuelo blanco de palomas, sombra y luz, tierra y mar, me gusta la palabra libertad, sombra y luz, tierra y mar, me gusta la palabra libertad—cantó mientras se alejaba.
—Su alteza, concubina imperial—habló un hombre contemplando a una joven chica—Hoy fui el funeral de los padres de la Reina—. Por el momento, todo va de acuerdo al plan.
Una chica se giró con una gran sonrisa, quitando de su pelo una horquilla que tenía el diseño de una Urraca.
—Bien...¿Ya le avisaste a mi padre al respecto?—preguntó con un arqueo de ceja.
—Si, mi alteza.
La mujer contempló un pequeño juego y tomó una piedra negra, terminando por golpear una blanca, la cual cayó al suelo. Su sirvienta personal, le miró con una sonrisa.
—Ahora...esperemos hasta que sea la fiesta del primer mes del príncipe—la chica se empezó a quitar unas joyas de sus dedos—Escuché que la primera princesa, se pone enferma en esta época del año ¿Cierto?—comentó para ver su reflejo sobre aquel espejo frente a ella—sería una lástima...que le diera un ataque.
Dicho aquello, la chica enarcó una ceja para levantarse y empezar a caminar en dirección de su cuarto.
Hola Solecitos hermosos, espero que se encuentren bien—Les entrega besitos y corazones—empiezo avisar que esta historia, será un fanfic largo, unos...35 caps por allí. Así que espero traerles siempre lo mejor, si bien el desarrollo de la relación de la Yoongi y Tae va lento, no es algo que quiero forzar, quiero hacer una buena trama de esta historia y cuando termino de leer el capítulo que escribí, lo vuelvo a releer, para ver si algo no se me pasa. Claro, siempre hay pequeños errores.
Leí unos comentarios que expresaban la molestia por el hecho de que Yoongi estuviera con varias parejas, pero esta historia está basada en una época donde los harén eran muy normales y las conductas que habían en esos momentos, puede que no sean de nuestros gustos. He tenido que leer de las épocas pasadas de corea, sus vestimentas, costumbres entre otros temas; pero también poniendo un poco de ficción en eso.
Entiendo que muchas son fans de esta pareja; pero yo sé como estoy llevando esta historia. No quiero que me están presionando al respecto sobre que se besen, tengan sexo o situaciones así...lo cual si habrá; pero todo a su debido tiempo, si me siguen presionando o quejándose dejaré de sentirme a gusto, me estresaré y la dejaré a un lado. Y no quiero eso, porque estoy amando como me está quedando esta historia, trato de actualizar cada dia, con capítulos largos.
Esta semana no ha sido la mejor para mi y ando lidiando con un problema que por el momento no encuentro solución.
Porque cuando escribo olvido mis problemas, es como una sanación a mi persona y cuando publico siento una satisfacción y cuando llegan a dar su apoyo, no puedo evitar sentirme feliz. Me disculpo por este testamento; pero quería expresar como me sentía.
Cuiden mucho su salud física y mental mis Solecitos, que a pesar que no sepa como son sus rostros no los conozca en sí, aquí dejan parte de su yo existencial, pueden ser muchas veces lo que afuera no pueden ser, pueden meterse en mundos que los haga olvidar el mundo que los rodea. Aquí también hay sentimientos.
Los amo mucho mis Solecitos.
[Cualquier error de ortografía, redacción, avisad por favor, esto se corregirá cuando el fanfic pase a edición]
¡Recuerden el lema de la familia!
∞ Somos Sol que calienta; pero no quema 7w7r ∞
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