[07]

Aquel tipo de enfrente frunció el ceño al notar como los ojos de un sirviente se habían enfocado sobre los suyos y le miraban por demasiado tiempo, tanto así,que lo hizo sentir molesto e incómodo, por lo que golpeó la bandeja que Taehyung tenía sobre sus manos.Al hacerlo, también lastimó una de sus manos en el proceso.

¿Cómo se atrevía ese sirviente a verlo a los ojos?

Taehyung pegó un pequeño quejido y tocó su mano derecha, acariciando sobre ella, asustado.

En sus cortos años de vida, nadie se había atrevido a poner una mano encima, mucho menos la señora Lee, bueno, tal vez una vez le pegó en la cabeza con un abanico por que le sacó la lengua en un pequeño berrinche; pero de allí. Nada.

—¿Quién te dio derecho a verme directo a los ojos?

¿Y para qué se supone que tenía los ojos entonces? ¡Si los tenía sanos, podía ver! ¿Quién se había creído ese tipo?

La doncella que estaba a su derecha abrió los ojos en par miró al joven de su lado por breves segundos para luego bajar la mirada al suelo, temblorosa. Dioses, ese chico había cavado su propia tumba, no tenía salvación, así que dentro de su corazón, encendió una velita por el joven.

Otro tipo apareció tras el que reclamaba, puso una de sus manos sobre el hombro izquierdo de su hermano mayor, para avisarle que se tranquilizara.

—Primer príncipe...—comentó aquella voz. De las sombras salió un rostro que Taehyung había visto unos minutos antes de que fuera secuestrado por un viejo de barba, llevado a una cocina, puesto una bandeja y tirado cual sirviente cualquiera a un pasillo para ser guiado a saber donde—Mantenga la calma, molestarse le hace daño a su salud—el joven contempló al chico hincado.

—¿¡Se puede saber quiénes son tan ruidosos e interrumpen mi paz mental?!—se escuchó un grito de molestia completa, por el marco de visualización de Taehyung, apareció un tipo de cabelleras rubias, su vestimentas eran negras con bordados de dragones en su lados laterales de la manga y el pecho ¡Era hilo oro!

Sin saber porque, el omega bajó su rostro de un golpe, había un halo de poder tras ese tipo, una bestia reina que caminaba sin temor entre los peores monstruos que la humanidad podía imaginar, el menor apretó los labios, si ese tipo era una bestia, él se convertiría rápido en una simple presa.

Y rostizada con su mala suerte.

Maldijo en bajo, siendo su cabello que hizo la función de cubrir más de él,

Namjoon abrió los ojos en par al reconocer parte de los rasgos del chico y apretó con fuerza sus labios: ¿Era en serio? ¡Era el primer día jovencito y ya estabas haciendo estragos en el palacio! Lo peor del caso con el primer príncipe.

¡El preferido de todos en ese maldito lugar!

Min Yoongi se puso enfrente del primer príncipe bloqueando la vista de los que estaban atrás, le miró con una sonrisa ladina. Namjoon al ver que podía aprovechar la situación, posicionándose detrás de su amigo, estiró su pie con disimulo, dando suaves pataditas por las rodillas al ajeno hasta llamar su atención. Taehyung subió su mirada asustado viendo el rostro del alfa Namjoon haciéndole un gesto de: Escapa.

¡Escapa y corre por tu vida, se libre como un caballo salvaje cabalgando en su libertad!

Taehyung comprendió y con disimulo, al tener aquellos dos tipos dentro del cuarto distraído con el rey, empezó a gatear y luego patitas para que te tengo: Mejor aquí corrió, que aquí murió.

Claro que la doncella no se quedó atrás y también se levantó en silencio para alejarse de allí.

Min Yoongi chasqueó la lengua, haciendo un movimiento de su cabeza, lado a lado, para luego soltar una risilla que heló la piel de su medio hermano:—Primer príncipe:...si sigues en este palacio, es porque daría una mala cara de mi parte si te echara, cómo te comportas, vive en parte mi reputación, así que sé agradecido y no hagas nada que me saque de quicio.

—¡Ese sirviente-...

—¿Sirviente?—Yoongi se giró y la mirada de los dos príncipes restantes se enfocan en cierto punto, Namjoon sonrió feliz por dentro; pero por fuera solo había un semblante serio—No veo a nadie aquí, dígame ¿Cuál era la situación por la que estaba tan enojado y alzar de esa forma el tono, destruyendo la paz del palacio?

—Mi rey—interrumpió el tercer príncipe, con mucho respeto—me disculpo por el desorden, mi hermano últimamente solo está un poco estresado.

—Busca a ese chico, para ser castigado—ordenó el primer príncipe.

—¿Qué pecado cometió?—preguntó Yoongi con una gran sonrisa surcada en su rostro.

—Me miró a los ojos.

—Pobrecito, de tanta fealdad de seguro se asustó—rió Yoongi—Primer Príncipe...todos dicen que eres esplendoroso, sabio y el mejor para gobernar; pero la verdad que entre tú y los antiguos reyes, no veo una gran diferencia ¿Te molestaste solo porque un sirviente te vio a los ojos? ¿Te crees inmaculado? ni los dioses son tan ególatras como tú—Yoongi tomó de la barbilla al tipo, apretándole, su mirada se había vuelto fría—no me hagas perder cara.


Taehyung tuvo que saber diferenciar entre cómo vestían algunos sirvientes y con suerte, pudo encontrar el cuarto elegido para su señorita. Al ingresar, pudo ver el baúl donde estaban sus vestimentas.

Las otras dos sirvientas que la señorita Ji Eun llevó consigo, al reconocerle le sonrieron.

—Joven Taehyung ¿Qué se había hecho?

—¡Es una larga historia que ni se imaginan! se las contaré más tarde, me despegué de mi señorita...este palacio es muy grande, demonios.

—Escuché que en el norte del salón del trono, se encuentran las residencias reales, donde se encuentran los cuartos separados del rey, la reina, las concubinas, los herederos y las concubinas.

La segunda agregó:—No solo eso, joven Taehyung este palacio posee 330 edificios y 5,792 habitaciones. Taehyung casi se atragantó con su saliva al escuchar aquellos gigantes números ¡Le faltarían más de 20 años para saber todos los que viven en ese lugar!

Pero no tenía tiempo para pensar en eso, pronto sería la selección y él ayudaría a su señorita a la hora de mostrar los talentos, así que tocaría un instrumento mientras JiEun hacía un baile, pasaron días practicando con exhaustivo detalle. Rebuscó entre las cosas hasta que encontró una máscara, sonrió y se cambió rápido de ropa con ayuda de aquellas chicas.


La joven Ji Eun ya se encontraba en aquel enorme salón, era la única sola, mientras las demás habían hecho sus pequeños grupitos. La cortesana lo notó, algo que le pareció un poco sospechoso, llamó a uno de los ayudantes con una ceja enarcada.

Serena agregó a preguntar:—Dime, eunuco...¿Quién es esa joven?—su vista se posicionó sobre la chica, quien tenía su mirada baja y apretaba sus manos nerviosa.

El hombre contempló a la joven para luego fruncir el ceño:—Es la joven Lee Ji Eun, hija de una antigua sirvienta del palacio que formaba parte del grupo de costura y el maestro Lee, que desde sus 25 años empezó a dar clases al antiguo rey y a los príncipes por igual.

—Lee Ji Eun—la cortesana sonrió, de todas las mujeres de ese salón, parecía la más humilde y sencilla. Agradable a la vista,las otras, si bien habían jóvenes damas preciosas, eran demasiado extravagantes y eso no estaba mal, se notaba su posición social; pero según las indicaciones del rey y gustos, eso ya les había bajado puntos.

Se ordenó a los minutos que se pusieron en fila de nuevo, la antes cortesana, porque Yoongi la había nombrado: Maestra de las bellas artes dentro del palacio, empezó a contemplar a cada una, se detuvo en una alta y le miró de pie a cabeza.

—Tú—sacó su abanico, dándose aire—fuera—se acercó a otra para tomar las manos de la chica—¿Qué es este color y por qué las uñas son de largas? debes tener manos delicadas y si bien puedes tener las uñas largas, deben tener cierto corte, puedes lastimar en el proceso la piel de nuestro rey ,eliminada.

Según los estándares de belleza, las mujeres debían tener una imagen pulcra, inocente, elegante, ser esbeltas y hermosas. Fue así como la fila empezó a reducirse en números de jóvenes damas que cuando eran expulsadas, los guardias las sacaban, algunas maldecían, otras lloraban y una que otra, se atrevían a verla de menos; pero eran humilladas siendo arrastradas de allí.

Por supuesto que la selección no se trataba solo de belleza, también había otras categorías: Inteligencia, poesía y por supuesto talento. Algo que se hacía por primera vez en toda la historia del palacio, al parecer el rey no solo se iría por el físico. Necesitaba alguien competente a su lado y no un- una cabeza hueca.

Ingresó un soldado que miró a la nueva maestra:—Maestra, traemos a los omegas que quedaron seleccionados.

Las chicas que aún quedaban se giraron con sorpresa, curiosas de saber quienes eran los finalistas. Los ojos de Ji ub brillaron emocionada, inocente y curiosa por igual. Por el marco de la puerta, apareció primero un joven hermoso, a tal punto de considerarse andrógino, meneando con delicadeza, lentitud un abanico que tenía en su arte, hecho a tinta negra, la imagen de una montaña y sobre este, un dragón. Su aura era increíble, a tal punto que algunas chicas se hicieron al lado cuando ese joven se posicionó, quedando recto para menear un poco su cabellera.

Luego apareció otro chico, con una nariz muy respingada y también de bellos rasgos, alto, que parecía tener un aura más dominante a su alrededor, ni siquiera pareció enfocar su mirada en las chicas, seguro de sí mismo. Ji eun se sintió intimidada, como deseaba tener esa fuerte autoestima y seguridad en ella misma. Y por último, apareció otro joven más alto, ojos grandes casi comparados con los de un ciervo, expresivos y una aura muy alegre, simpático a primera vista, quien lo viera por primera vez, no podría evitar ofrecer una sonrisa a la primera.

Habían quedado 10 chicas y solo...¿3 omegas?

—Soldado—habló la maestra de bellas artes—¿Solo ellos quedaron?

—Si ,señora—respondió con sumo respeto aquel tipo, haciendo un gesto de despedida de 90 grados.

Al parecer la jefa Kim había sido más estricta con los omegas, ya que ella había sido la que se encargó de los chicos.




La señora Kim frunció el ceño, habían entrado 20 omegas; pero solo 3 le parecieron adecuados para el amigo de su hijo, les hizo preguntas, ella consideraba primero la inteligencia, comportamiento sobre la belleza. Y esos 3 seleccionados fueron los más aptos.El rey necesitaba a su lado, una espada brillante, no una sin filo que lo opacara. Y con eso de que se había reducido la selección de concubinas, la riña...iba ser muy distinta.

La siguiente sesión ya estaría el rey, ella y la nueva maestra de bellas artes, por lo que escuchó una antigua Gisaeng. Si Min Yoongi la había elegido para algo así, debía confiar en el rey, conocía al chico muy bien, conocía la maldad en primera fila.

Ya que la maldad fue lo primero que conoció desde pequeño. Se levantó orgullosa para bajar las escaleras de donde se encontraba, sus 4 sirvientas le siguieron con respeto mas dos guardaespaldas, se sentía gustosa de ver como antes la pisotearon, se burlaron por su bajo puesto; pero ahora...tenían que inclinarse a ella, sobre todo esas mujeres que le tiraron miradas de desprecio.

Pero la señora Kim era una mujer que también tenía sus pies sobre la tierra.


Ji Eun se encontraba afuera, viendo a los lados, notó a lo lejos una máscara de un demonio, frunció el ceño y sonrió cuando reconoció aquellas vestimentas , extendió su mano para saludar a Taehyung, quien apresuró su caminar. Al llegar donde ella, la chica arregló parte de los cabellos que habían salido de su lugar. La maestra de bellas artes, notó aquel gesto, pensativa.

Ese chico, tenía una cinta en su cuello, avisando que era omega; pero uno de clase baja. Notó a la señora Kim ingresar, ella era guapísima elegante y se veía joven. Ambas se saludaron con respeto para sentarse en unas sillas, las chicas estaban nerviosas, preparándose mentalmente para mostrar sus talentos.

Ji Eun y Taehyung ingresaron, el chico se sentó al lado de los sirvientes, sujetando en su mano una flauta de bambú transversal que utilizará para la música, no se podía ver; pero tras esa máscara, estaba sonriente, viendo a su señorita Ji Eun nerviosa. Sin embargo su sonrisa se borró con lentitud.

Al notar que se veía ella al mismo tiempo, un poco miserable. Ninguna de las otras 8 chica seleccionadas, le hablaban, ni siquiera se atrevían verla. El chico sintió su corazón comprimirse, como deseaba quitar ese rostro triste de quien consideraba su hermana, no gustaba que la mantuvieran a lo lejos, como si su existencia fuese en vana.

La señora Kim al ver a la joven Ji Eun, sonrió orgullosa ¡Por supuesto que sabía que la hija de su amiga, quedaría en la semi-finalistas! adentro incluso la mujer parecía bailar meneando su cuerpo; pero por fuera, estaba rígida, rostro de piedra, dando la impresión de la mujer más dominante y seria, fría que podía existir.

Primero cuidar su imagen ante todo.

Un soldado ingresó, para tocar un bong que sobresaltó a los de adentro, a la señora Kim casi que le manda el alma al limbo o donde fuera ¡Con aviso hombre, era aún muy joven para morir.

El hombre con el bong inhaló al aire:—¡Entra su majestad!

El ambiente pareció congelarse de un momento a otro, las sirvientas se inclinaron y todos miraron en dirección de la puerta. Kim Taehyung que estaba a lo lejos y apenas podía ver un poco por los ojos de la máscara, estiró su cuello, a tal punto que parecía que pronto saldrían sus huesos de la órbita.

Min Yoongi ingresó.

Dando la imagen de un tipo frío, distante. Las damas jóvenes fruncieron el ceño al ver aquella marca sobre su ojo, en cambio los omegas, sabiendo que posición tomar, se agacharon con respeto. Todos se inclinaron, incluso Taehyung que casi dejaba caer la flauta en el suelo y romper el silencio del lugar. Min Yoongi saludó con respeto, para subir las escaleras del salón, se sentó sobre su silla de rey, quedando a su lado Namjoon.

Taehyung se quedó sorprendido.

Ese rostro...se le era muy conocido, después de unos segundos reaccionó: ¡Demonios, era el tipo de vestimentas negras que silenció al mal educado que se quejó sólo porque le vio a los ojos! ojalá no se encontrara de nuevo con ese tipo.

Prendió una velita en su interior, pidiendo perdón a su alma, por si acaso.

Debía haber nacido con la pata izquierda primero, de seguro ni vino de cabeza con esa suerte tan fea que se cargaba. Era su primer día ¡Su primer día, y ya lo estropeó!

Pero después soltó un suspiro de alivio, el tipo no le vio el rostro y gracias al joven Namjoon, pudo escapar a tiempo. La imagen del rey, se veía impecable, poderosa y la cicatriz en su ojo derecho, parecía levantar la curiosidad, y nadie más ni menos metido que él, que ya empezaron a rodar las preguntas en su mente que no podía permanecer quieta en un segundo: ¿Cómo se la hizo? ¿En una pelea con un gran enemigo? ¿Será que fue un castigo donde rompió alguna regla? ¡No, de seguro peleó con algún demonio!

Se fijó rápido en la señorita Ji Eun, quien tenía los ojos brillosos, Taehyung sonrió en sus adentros ¡Perfecto, le había gustado a su señorita! no había problema ya en eso, pero en la otra cara de la moneda, es si al rey le gustaba. Debía, la belleza de Ji Eun era pura, como una flor de loto recién brotada.

—Mi rey—habló la señora Kim con mucho gusto y una sonrisa en su rostro—los rostros que ve, son los que han pasado a la semi-final.

Yoongi frunció el ceño, sus ojos se enfocaron rápido en los omegas, con que los dioses tenían su favoritismo, por sus adentros sonrió ladino. Aún así, no pareció ver aquel que le llamó la atención, no había una pizca de ese aroma a lavanda; pero los tipos poseían un aroma muy dulce , suave. Tendría tiempo para buscarlo.

Por el lado de las chicas...¿Uh?

Se enfocó rápido en una joven que tenía la mirada baja y con sus manos juntadas.

Taehyung notó en donde se había posado los ojos del rey, en su señorita: ¡Andele, suba el rostro, súbalo! chilló por sus adentros.

El chico quería revolcarse en el suelo ante la emoción; pero los nervios: ¡Que suba ese bello rostro, a la diabla! ¡Maldita sea, mujer, sube el rostro!

Taehyung iba desmayarse de la conmoción.

Ji Eun al sentir una fuerte mirada a su presencia, subió con lentitud su rostro, sus ojos con los del rey chocaron, ella sintió que flaqueaba y bajó avergonzada, sonrojada ante esa mirada. Es como si el tipo hubiera visto hasta su alma, pasó con dificultad la saliva en su garganta.

Taehyung dijo en sus adentros: ¡Se firme mujer, no bajes la mirada! ¡AAAAAAAAAAH!

—¿Quién es ella? —preguntó de un solo Yoongi, su tono era bajo y carrasposo. La maestra de bellas artes sonrió, también la señora Kim.

—Es la Jovencita Lee Ji Eun, hija de una Noble dama y del maestro Lee.

¿El maestro Lee?

Por supuesto que recordaría a ese hombre, siempre que llegaba al palacio, cuando lo veía, le ofrecía un pedazo de pan, que sería -de seguro- lo único que iba comer en ese día, algunas veces le llevaba dulces, otra veces pequeñas bolas de arroz, fue un hombre muy agradable hasta que después de unos meses, empezó a darle clases en su cuarto, un tipo paciente, que le enseñó las vocales, consonantes, con tranquilidad, amabilidad. Le enseñó a leer, la poesía entre otras materias importantes que solo los eruditos podían.

Agradecia que la hija no se parecía para nada al viejo.

Cuando el rey ordenó, empezó la muestra de los talentos.

La primera en pasar fue una chica de ojos grandes, muy guapa, su pelo recogido y unos ornamentos de oro en su cabello:—Lim Ju eun, mi rey, yo cantaré: La mariposa que se posó sobre la flor y el pájaro que la besó.

Taehyung frunció el ceño tras la máscara: ¿Qué era ese nombre tan largo para una canción?

Como sea, no importaba. La joven empezó a cantar, todos parecían sorprendidos por la hermosa voz, Yoongi quería bostezar, la verdad que deseaba hacerlo; pero solo lo hizo en su interior, tragándose. La chica se veía de un carácter fuerte, decidida.

Su mirada se enfocó de nuevo en Ji eun.

La joven que cantaba lo notó; pero siguió en su trabajo, no podía detenerse por nada en el mundo. Ji Eun al sentir de nuevo la mirada del rey sobre él, sintió que por dentro se encogió e hizo pequeña, como una niña avergonzada. Cuando la canción terminó, la maestra y la señora Kim le hicieron un gesto de respeto, así que pasaron las siguientes. También los omegas pasaron y Yoongi los escuchó gustoso, uno recitó un poema, canto, mas poemas...

La mayoría había decidido: Recitar un poema o cantar. Aunque hubo una por allí desafinada que Yoongi la tuvo que callar en el momento antes de que sus oidos sangraran.

Hasta que tocó la hora en Ji Eun, ella se puso en medio, bajo la mirada de las jóvenes. Taehyung se levantó de un solo y corrió a pasos apresurados, al hacerlo, como estaba descalzo, su pie pareció pegarse en el suelo, acción que lo hizo tropezarse. La joven se giró preocupada y se acercó a Taehyung, para ayudar a quien consideraba su hermano menor a levantarse.

Yoongi enarcó una ceja: ¿Y ese patas flojas, quién era?

Luego de que se acomodaron, Taehyung se quedó parado a una distancia de la joven Ji Eun, quien respiró con lentitud, tratando de calmar sus nervios, se escucharon unas leves risas, algo que molestó a Yoongi y justo cuando el omega de Taehyung ya estaba con todo a soplar sobre la flauta, el rey alzó la mano, haciendo un gesto de :Alto.

—Las que se rieron, pasen al frente—ordenó.

Las chicas se pusieron frías, parecían estatuas y el color de su piel, empezó a desaparecer de su rostro.

—El rey dio una orden—comentó la señora Kim que se había fijado en las que se rieron—¡Pasen al frente!

4 chicas pasaron nerviosas al frente, con su mirada en bajo, Yoongi les miró de pie a cabeza.

—Supongo que a ustedes no se le dio la educación del respeto. Cuando una persona habla, es irrespetuoso interrumpirlo. Creo que mientras mostraban su talento, se le respeto, estuvo un silencio, sin embargo, cuando pasa esta joven, se pusieron a reír—hizo una pausa para luego enarcar una ceja y sonrió ladino, erizando los vellos de esas chicas.

Taehyung sonrió por sus adentros: ¡Si, semejante mal-educadas! quiso sacar la lengua; pero la punta topó con la máscara, así que la metió de nuevo, sintiendo el sabor amargo feo de la madera con la que estaba hecha aquel objeto.

—Sáquenlas—ordenó la señora Kim—no podemos tener en este palacio a mujeres desvergonzadas que se burlan de los demás. Fuera.

Los guardias afirmaron y cada uno, tomó a una chica, que negaron y chillaron, las sacaron arrastradas del palacio, eso era una humillación pública y una vergüenza a su casa.

Ahora, solo habían quedado 6 elegidas.

—Puede continuar, señorita Ji Eun—ordenó la señora Kim.

Ji eun hizo un gesto de agradecimiento. Taehyung sonrió tras la máscara.

La música empezó a sonar y Ji Eun respiró con profundidad, dio dos giros y sacó del interior de sus mangas,dos grandes abanicos, los extendió con delicadeza y los subió meneando aquellos objetos en su mano, la mirada de todos parecío maravillarse ante aquello. Sus manos, subían, bajaban, daba giros e iba al ritmo de la música que salía de la flauta.

La señora Kim y la maestra de bellas artes, estaban no solo sorprendidas por la idea de esconder aquellos abanicos bajo la manga, dando un factor sorpresa, nadie se le iba ocurrir que sacaría de alli esos objetos. Le fascinaba la delicadeza, el movimiento, la elegancia y la bella sonrisa en el rostro de la chica.

Min Yoongi estaba sentado en la cama, su tía bailaba frente a él, en sus manos poseía un abanico que ella hizo a base de tela y bambú, los ojos del pequeño niño brillaban. Sus ojos la seguían por todo aquel cuarto, afuera solo se podía escuchar una música a lo lejos, parecía que celebraban algo en el palacio, dado que ellos no estaban invitados, su tia se le ocurrió hacer un pequeño festejo. Los giros en cámara lenta de su tía, su rostro tan tenue y dulce, lleno de una tranquilidad, sus pestañas largas, mirada melancólica...

El rey volvió en sí, sentía un nudo en la garganta—Alto—ordenó el rey— Se paró, acción que hizo a Ji Eun y Taehyung detenerse. El omega no comprendió que estaba sucediendo. Yoongi contempló a la señora Kim—acabo...acabo de recordar que tengo un asunto pendiente, ya vi suficiente.—La chica Lee sintió una fuerte presión, sus manos temblaron: ¿No había sido lo suficiente buena para gustar al rey su baile de abanicos? Taehyung miró desconcertado a su señorita.

El Rey susurró algo en el oído a la señora Kim, quien afirmó, empezó a bajar las escaleras hasta salir junto con Namjoon de aquel salón. La madre de Namjoon se acercó a la maestra de bellas artes, quien afirmó en silencio.

Al parecer el rey, ya tenía a los elegidos.

Había caído la noche y siendo unas horas más tarde, Taehyung había salido del salón, ya que faltaba una entrevista para la fase final de la selección. Se encontraba sobre un puente, viendo bajo él un pequeño lago, la luz de la luna, reflejaba aquel charco y los peces nadaban de un lado a otro, unos jugueteaban y otros parecían "Hibernar".

El omega había salido con la máscara puesta, ya que consideró que era mejor mantener por el momento su identidad, sobre todo si se encontraba de nuevo con ese "Noble" malhumorado. A un lado, había un cerezo pequeño al lado del puente, que empezaba dejar caer sus pétalos. El Chico al ver que iba caer uno, estiró una de sus manos, queriendo atrapar un pétalo.

Min Yoongi que iba dirigiendo a su cuarto, contempló a un chico con una máscara que estaba en puntillas y parecía que en cualquier momento se iría de bruces a caer contra el agua. Y la verdad que sucedería una tragedia.

Taehyung se impulsó de más y soltó un quejido cuando su cuerpo se balanceo con fuerza en dirección del agua.

El rey reaccionó rápido, enrolló su mano en la cintura del chico y lo atrajo de nuevo a su equilibrio. Taehyung cuerpo aguado, se fue de espaldas con los ojos en par, subió su rostro y al hacerlo, por el cuenco de los ojos de aquella máscara de madera, pudo ver ese rostro.

Chilló por sus adentros, retorciéndose de su maldición cuando nació: ¡De todas las personas que pudieron salvarlo! ¿Por qué el rey?

—se abre la puerta, se escucha el viento y luego entra una pelusa.Silencio total—FIN

¡Hola mis hermosuras, traje un capitulo largo, para compensar los dias que no subí, me disculpo mucho :c perdonen ¿si?~—hace ojitos de cachorrito triste—¡Espero que les guste, que lo hice con mucho amor, pensando siempre en ustedes que están apoyando esta humilde historia, ya veo que somos más y eso me pone alegre, que hayan mas solecitos que ha gustado de esta historia T^T

¡Besitos, en sus mejillitas preciosuras hermosas!sjdhakjsdhadjkshl

[Cualquier error de ortografía, redacción, avisad por favor, esto se corregirá cuando el fanfic pase a edición]

¡Recuerden el lema de la familia!

∞ Somos Sol que calienta; pero no quema 7w7r ∞

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