Yoongi jadeó de sorpresa cuando bajo él ya no estaba aquella chica que se había ligado en el bar, sino que sólo veía a Jungkook.

Ese mismo día por la tarde había discutido con su ahora ex novio.

—Me dijiste que te amara hasta que murieras, Yoongi. Y eso hago —balbuceaba Jungkook mientras veía al mayor con dolor. —Intentó alejarme y solo me sigues manteniendo aferrado a ti. Soy el único que ha dado algo en esta relación. ¡Dime que me quieres fuera de tu vida!

—Eso es lo que quiero —contestó, indiferente. Su corazón dolía, solo un poco. Pero creía que ya no quería a Jungkook lo suficiente.

—Bien, está bien —murmuró Jungkook, su voz rota y su rostro destrozado por las lágrimas. —Dejé todo por ti, y así me lo devuelves —balbucea, secando sus mejillas. —Bien. Me iré, pero espero que cada vez que te beses con alguien me veas a mí.

Yoongi se quitó del lugar sobre la chica, asqueado consigo mismo y con ganas de llorar. Se tambaleó, borracho, hacía su pantalón arrojado en el piso y tomó su celular, marcando al único número que sabía de memoria: El de Jungkook.

Le envió pronto a buzón y Yoongi sollozó. Quería a Jungkook de vuelta en su vida, lo necesitaba casi tanto como necesitaba respirar.

Había acabado arruinándose a sí mismo, al sacar la chispa que Jungkook era de su vida.

¡Feliz San Valentín! Más tarde probablemente suba un one shot que sí sea bonito💜