★ Reaction »pedido«
( ⭐ ) es algo larguito.
A Kristal en definitiva no le agradaba las fiestas pero esta vez había sido necesario y muy importante, además, su amiga amenazaba con llevar la fiesta a su departamento y era preferible que no sea así o ella una a sufrir un colapso nervioso al ver las cosas sacadas de lugar, el piso manchado de bebidas alcohólicas o migajas de comida esparcidas por el suelo. Lo más posible que haga es poner a todos a lo puse cada rincón de la casa o que ella termine tomando una escoba con la cual echaría a todos y estuviera limpiando, en medio de una fiesta.
Era el cumpleaños de su amiga y no quería que se sienta mal así que, aceptó la salida con sus amigos a aquella discoteca donde estaban en este momento bailando y pasándola bien entre ellos mientras bebían descontrolados hasta que en cualquier momento amenazaran con vomitar ena cara a alguien, o acabar en un coma etílico.
A Kristal tampoco me gustaban las bebidas alcohólicas así que la posibilidad de acabar en mal estado o intoxicada por alguna sustancia eran muy bajas, además había aprendido gracias a su país que no era recomendable tomar del vaso ajeno o no ver lo que él barman estaba preparando, pues podrían contener alguna sustancias tóxicas como las drogas.
-Kris, ¿Vas a tomar solamente agua? -habló divertida su amiga mientras se movía de lado a lado, en un improvisado baile.
-¿Tengo otra opción?
-Sí, beber esto. -le extendió Noah su tarro de bebida y ella miró el contenido oscuro lleno de cubos de hielo, y luego observó a su-rubio de cabello enrulados-amigo.-Te hará bien. Además, no es fuerte.
Kristal hizo una mueca tomando el vaso de plástico que su amigo le extendía, lo llevó a su nariz sumamente desconfiada y ya haciéndose una idea de que aquello era como probar la orina de un jabalí. Lo olfateó tal cual un perro hace con otro buscando algún olor desagradable que le asqueara, pero no lo encontró.
-Si me muero por esto. Noah, te llevo conmigo al infierno.
Su amigo rió.-Hecho.
Inclinó un poco el vaso hacia su boca dejando paso al líquido oscuro deslizarse dentro, pasando por su garganta dándole un increíble escarmiendo por lo frío que estaba la bebida y luego cayó a su estómago y fue cuando alejó el vaso de ella con una cara de desagrado mientras se quejaba.
-Puaj, parece que tragué soja. -sus amigos rieron, ella abrió la botella de agua y rápidamente comenzó a ingerir agua descontrolada pata quitarse el sabor de la boca.
-Ya. Acompáñame a pedir una bebida.
Su amiga Amanda la tomó del brazo cruzándolo con el de ella para comenzar a arrastrarla había la barra, pero Lucas le gritó que le trajera uno también a lo que-únicamente-Amanda aceptó ya que Kristal se había negado. Se hacían paso entre las personas mientras Kristal comenzaba a perder la cordura cuando las personas chocaban accidentalmente con ella o estaban muy cerca, pues había algo llamado espacio personal y Kristal lo respetaba notablemente con las pedonas desconocidas. Llegaron hasta la barra que estaba infestada como si hubiera un descuento en una tienda de ropa de marca, la gente desesperada por tomar y embriagarse como locos, algunos más que otros.
-Otro de... De esto. -señaló el vaso a medio beber que sostenía ella.
El otro chico que estaba allí atrás miró a Kristal con una sonrisa esperando que le diga que quería. Amanda volteó a verla y la codeó en las costillas casi ganándose un golpe en la cara por parte suya.
-Sí, a mí también hazme uno de esos. -señaló lo que él otro chico estaba preparando y él río debido a lo poco que desconocía de bebidas, pero aún así no fue inpedome para preparársela.
Esperaron unos minutos más y acabaron las dos bebidas que pedían, se las entregaron educadamente y ambas se largaron rápidamente de allí haciéndose paso entre las personas para volver con su grupo de amigos.
¿Era idea de Kristal o esto parecía un nido de cucarachas amontonadas bajo el pórtico de una casa vieja? Quizá tenga gran parte de razón, y al mismo tiempo estaba exagerado. Pero aún así, ella creía que esto no estaba muy lejos de la realidad.
Llegaron hasta sus amigos y Kristal le extendió el vaso a su ido Lucas que al parecer había ido al baño-pues tenía el cabello mojado y hechado para atrás-. Su amigo le agradeció y Kristal volvió a abrir su botella sedienta y beber el agua.
-¿Y qué fue de ti y YoonGi? -preguntó inocentemente Noah con una pisca de curiosidad. Amanda volteó a verla y ella desvío la vista hacia la botella jugando con la tapa roja de la misma.-Oh, lo siento. No quise, yo-eh...
Kristal levantó la vista con una sonrisa claramente fingida.-No pasa nada. Solo terminamos.
-Pero, ¿Por qué? ¿Fue algo grave? -preguntó intrigada Amanda-Si se puede saber.
-Ahm... -aclaró la garganta algo nerviosa-Bueno, tenía pensado planear una fiesta sorpresa para YoonGi junto a JiMin pero él sospechó mal y me acusó de engañarlo con su mejor amigo. -mordió su labio inferior evitando sollozar en medio de una fiesta-Me dijo cosas muy desagradables que me hirieron, y me fui de allí. Y ya no supo más nada de él así que di por terminada nuestra relación, nunca me buscó y eso significa que no le importó y que tampoco se arrepiente de haber dicho las barbaridades que dijo.
-Ya pasaron... ¿Cuánto? ¿Cuatro, cinco meses ya? Desde que se separaron. Ahora debes divertirte y echarle en cara que tú estás bien sin él. -le dijo Noah tomándola por los hombros-Ánimos Kris, tú tienes un poder de atracción... El cual es raro, pero simpatizas rápido a las personas.
-Sí. Noah tiene razón, ahora toma de esto. -Lucas le extendió su tarro de alcohol casi lleno hacia ella. Lo miró unos segundos y luego agarro aquél vaso bebiendo de él como si la vida le dependiera de aquello dejando a sus amigos completamente perplejos y helados. Dejó de beber cuando el aire se volvió una necesidad y lo alejó de ella notando que había tomado una gran cantidad de alcohol muy rápido y quizá le llegase a caer muy mal.-Dije que tomes, no que te lo tragues.
Habló atónito Lucas viendo el interior de su bebida haciendo que sus amigos rieran.-Iré por más pero no te daré. Ya te buscas los tuyos.
Se alejó del grupo rumbo a la barra mientras los tres individuos hablaban y bailaban entre sí felices, pasándola bien como Kristal de merecía después de estar encerrada y deprimida unos cuantos meses gracias a su ex pareja. Todo marchaba bien y Kristal estaba feliz-lo cual era extraño viniendo de ella-. Pasó una hora y Amanda necesitaba una bocanada de aire fresco pues, repentinamente se sentía asfixiada por el olor al humo de los cigarrillos allí adentro. Así que Kristal la acompañó, pues, comenzaba a sentirse mal y con mucho calor. Su vista de hacía muy nubosa como si tuviera en medio de la neblina.
Ambas salieron afuera y Amanda inhaló aire exageradamente, llenando por completo sus pulmones. Kristal se apoyó en la pared rocosa detrás suya mientas intentaba regular su respiración e intentaba no desfallecer.
-¿Kristal te sientes bien? -Amanda se percató de que algo no andaba bien, pues,estaba sudando y se notaba mucho. Kristal negó levemente con la cabeza y comenzó a deslizarse por la pared hasta terminar sentada en la acera. Su amiga se preocupó por el estado de ella.-Voy a buscar Lucas para que te lleve al doctor u algo. Te ves muy mal.
Su amiga de alejó de Kristal metiéndose dentro de la discoteca apresurada y sumamente preocupada buscando a su amigo-papá oso-para que la llevara a casa o al hospital.
Kristal tragó saliva con mucha dificultad mientras sentía como todo a su alrededor parecía estar dando vueltas a quince mil kilómetros por minuto, dándole unas gratas ganas de vomitar todo lo que había tomado o ingerido. Tomó su celular de su bolsillo mientras intentaba marcar al número de su amiga, Emma-una nicaragüense que había venido de estudio de medicina avanzada a Corea-. Cuando quiso llamar al número las intenciones de vomitar se hicieron realidad por lo que rápidamente se inclinó hacia un lado provocando que su celular resbalara de sus manos y cayera al suelo dándose la pantalla contra el cemento, porque una de las leyes de la vida es: pantalla-suelo.
El celular comenzó a marcar a un número y se podía saber aquello debido al típico sonido marcando un número el cual estaba esperando por ser atendido. Tuvo unas cuantas ahorcadas con las intenciones de vomitar pero no sucedió nada, de hecho, eso la frustró más ya que si había ingerido algo tóxico debía devolverlo.
-¿Hola?
Kristal miró hacia el celular de cara al piso el cual estaba-literalmente-hablando. Lo tomó en manos ho llevó así oreja mientras respiraba pesadamente y hacia un esfuerzo por mantener los ojos abiertos.
-Kristal, ¿Eres tú?
Ella cerró los ojos mientras se maldecía internamente por no haber borrado su número de la lista de contados. Llevó una mano a su frente quitando el sudor de su cara.
-Yoon...Gi, -por poco casi decía el apodo que ella usaba. Tragó saliva mientras respirar se había un trabajo difícil.-Ayúdame.
-¿De qué hablas? ¿Estás bien? No me digas, espera donde estas. Iré por tí. -parecía repentinamente exaltado y preocupado-Dime donde estás.
-No encuentro a Lucas ni a Noah. -salió Amanda apresurada del edificio y miró a su amiga media muerta en el suelo. Se acercó a ella-Llamaré a Emergencias.
Amanda sacó su celular dispuesta a marcar el número del la ambulancia del hospital cuando Kristal habló y fue cuando su amiga pelirroja levantó la vista hacia ella:-E-estoy en el Blu-blueLight. -gesticuló en un susurro y de pronto las ganas de vomitar volvieron.
-Estaré ahí en unos minutos.
Kristal asintió levemente, aunque no pudiese verla. Y fue cuando Amanda tomó el celular de ella en manos pata sentarse a su lado, totalme exasperada y preocupada por su amiga. Comenzó a hablar con YoonGi a través del celular quién únicamente hacia preguntas completamente desconcertado y preocupado, lo cual era extraño pues eran ex paletas y usualmente no se vuelven a ver más ese tipo de personas. Pero es que a diferencia de los demás, ellos tenían algo que los distinguía, y era que aún, había algo oculto muy en el fondo de su corazón y es que aquella chispa que ambos poseían seguía encendida aunque los dos preferían apagarla a base de grande galones de agua, y a pesar de que hubiese funcionado gratamente, la mecha se había encendido apenas el llamado accidental del celular había sonado.
El vehículo negro característico de YoonGi frenó rápidamente a un lado de la acera, así que Amanda levantó como pudo a Kristal del suelo mientras YoonGi bajaba del auto apresurado y se acercaba para ver a Kristal en un estado deplorable, esto no era un coma etílico, lo conocía bastante bien.
La subieron a la parte trasera del auto y Amanda subió junto, sosteniéndola mientras YoonGi se disponía de dirigirse rápidamente al hospital más cercano al lugar. YoonGi interrogaba a Amanda sobre el estado de Kristal pero las preguntas era las mismas: no lo sé.
-Kristal, ¿Qué tomaste? -preguntó Amanda.
-¿Será una intolerancia? -cuestionó YoonGi.
-¿O quizá una droga? -gesticuló Amanda y YoonGi la miró por el espejo retrovisor.-Pudo a ver una droga en el vaso de Noah y es por la razón que no los encontraba, estaba revorgitando lo que tomó.
-¿Puede matarla?
-Depende qué es. Cómo lo tomó. Y en qué cantidad. Y lo más importante, si es tolerante. Porque si es alérgica... esto puede empeorar.
Luego de una internación e intervención de emergencia por parte depa doctores lograron-después de varias horas-hacer que Kristal se sintiera mejor con el estado en el que se encontraba. Y había resultado ser verdad las deducciones de Amanda, Kristal había ingerido una droga llamada codeína o metilmorfina. Es un alcaloide que se encuentra de forma natural en el opio. Se utiliza con fines médicos como analgésico, sedante y antitusígeno. También se le considera un narcótico, la cual en un uso excesivo puede matarte-como naturalmente todas hacen-.
Cuando lograron estabilizarla ya había amanecido y YoonGi no tenía ni la más mínima idea de irse del hospital hasta asegurarse que ella realmente se encontraba bien y ya no corría peligro su vida. Amanda también estaba junto a él, pero se había ido a una cafetería para compartir un desayuno pata ambos, pues desde que estaban allí no había hecho las que beber agua del dispensador de agua a un lado de las sillas plásticas negras. Y ya eran casi las ocho de la mañana, llevaban allí unas tres horas y media aproximadamente.
-¿Familiares o conocidos de la paciente Kristal? -preguntó en doctor y YoonGi casi saltó de su asiento para ponerse de pie.-Ya puede verla.
Él asintió y una enfermera que acompañaba al doctor le indicó la habitación en la cual ella de encontraba. YoonGi no dudó en ir y visitarla pero al llegar al frente de la puerta blanca cerrada lo pensó dos veces antes de abrirla y entrar allí, no sabía la reacción que tendría ella al verlo repentinamente. No habían terminado especialmente en buenos acuerdos, él la había acusado erróneamente y se arrepentía de ello, definitivamente pero su egocentrismo y orgullo se lo impedía.
«YoonGi, si ella te llamó es porque quería que estés aquí» pensó. Y con ese pensamiento en la cabeza fue el impulso suficiente para que él entrara a la habitación blanca hasta encontrar a Kristal con los ojos cerrados reclinada en aquella camilla. Caminó unos cuantos pasos hasta acercarse hasta el cuerpo de ella y tomar torpemente una de las manos de Kristal. Ella abrió perezosa los párpados notando quien estaba allí. Y aunque hubiera deseado apartarse de él sutilmente, era inútil de innecesario ya que él se había tomado el tiempo de buscarla y traerla al hospital, sería egoísta hacerlo.
Una pequeña sonrisa peredoza se formó en el rostro de Kristal cuando YoonGi comenzó a dar pequeños masajes con si dedo pulgar en el dorso de la palma de ella.
-Lo siento. -susurró YoonGi y ella movió la cabeza a su dirección, la cual se posaba en la mano suya que sostenía la de Kristal.-Te juzgué mal, y lo siento. -suspiró pesadamente-Estaba celoso. Celoso por pensar que estabas con alguien más que no sea yo y te estuviese dando lo que yo no fui capaz de darte. Me sentía impotente al saber que estabas saliendo por mis espaldas y me engañabas porque... -soltó un resoplo mientras evitaba soltar sus lágrimas, las retenía a la fuerza en sus ojos-porque eres muy importante para mí. Y me odiaría toda la vida si te perdiera por mi culpa. -levantó la vista hacia el rostro de ella, dejándole notar los ojos cristalinos al borde del llanto-La cual hice. Y no sabes el infierno que estuve sufriendo. -desvió la vista hacia la sábana blanca de la camilla, arrepentido y afligido al mismo tiempo. Tragó saliva y finalmente dijo:-Me gustaría... volver a estar contigo, nuevamente.
Kristal soltó un resoplo, casi irónico al oír las últimas palabras y YoonGi levantó la vista hacia ella quien desvío la vista a la ventana a las espaldas de él, viendo los ojos llenos de gotas de lágrimas acumulándose en sus párpados.
-Yo tampoco puedo vivir sin ti. -YoonGi pestañeó un par de veces antes de entender lo que ella había dicho. Entendiendo que Kristal correspondía sus sentimientos como lo hacía antes de que todo acabara.-Lo digo literalmente, no puedo vivir sin tí. Mírame, bebí del vaso de Noah y casi me mata.
YoonGi rió ante su payasada.-Ya estás mejor y se nota. -ella sonrió mostrando una hilera de dientes-¿Lo nuestro también está bien?
Ella asintió.-Todo está bien.
~~~~~~
2690 palabras
No me rompan las pelotas con los errores de ortografía y gramática, son las 00:16 de la noche.
Y la droga que dice allá arriba es true, *tuve que preguntarle a mi amigo porque lit yo no sé nada alv*
Datazo:
-Noah es español, estudiante de Psiquiatría.
-Susana es Venezolana, Nutricionista.
-Emma es Nicaragüense, Doctora General.
-Lucas es Chileno, Psiquiatra.
-Kristal es Argentina, Psicóloga Clínica.
-Amanda es Mexicana, Nutricionista.
-Micaela es Peruana, Youtuber.
Esta es mi forma de honrar a mis lectores.
-Homicidal_Bloody
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