[Estará "ligeramente" alterado debido a que esta trama la vi otro libro. Yo me doy cuenta cuando se basan de otros escritores. 👀😂]

Entendía perfectamente que YoonGi estuviese estresado hasta la médula con el adelanto de su último álbum y junto con las promociones del grupo se le volvía como una tarea fácil de realizar. En lo habitual Kristal siempre iba al estudio de YoonGi para corroborar que él estaba con vida y llevarle algo para que siguiese existiendo, pues, aunque le molestase comer mientras trabaja; debía hacerlo por su propia salud física (además de Kristal explicando científicamente los beneficios que le trae comer para que su cerebro continúe trabajando). Y si YoonGi no quería oír un sermón suyo debía hacerle caso, o moriría en el intento.

El trabajo de Kristal estaba algo atareado en los últimos meses, y aunque se esforzara para cuidar y tratar de ver que YoonGi seguía con vida se le hacía muy difícil y en efecto sólo lograba verlo en muy poco tiempo, como también en hablar con él por mensajes o llamadas, prácticamente no eran atendidas cuando lo hacía. Por lo que preocupada pidió que HoSeok junto a TaeHyung lo mantuvieran con vida y con los pies sobre la tierra en todo momento. Ellos aceptaron y le enviaban mensajes sobre el estado de su amigo a Kristal para mantenerla tranquila.

—¿Estás segura que no quieres que te acompañe? —preguntó Lucas una vez que salía del edificio donde ambos trabajaban. Colocándose la chaqueta de invierno.—Está oscuro. Aparte puedo llevarte.

—Deja de presumir tu auto, Lucas. —habló Kristal sin despegar la mirada de su celular mientras tecleaba un mensaje. La apartó y miró a su compañero observarlo divertido.—Además quien me quiera robar lo único que se llevan en un bolso con papeles.

—Diagnósticos de pacientes clasificados. —corrigió él comenzando a caminar hacia su vehículo negro estacionado. Desactivó la alarma del auto y este respondió con un titileo de luces.—Vamos, te llevo.

Kristal suspiró exasperada y arrastró los pies a regañadientes. Su amigo se sintió triunfante por primera vez en la vida. Ella rodeó el auto hasta finalmente abrir la puerta y meterse dentro siendo imitada por Lucas quien luego colocó las llaves en el encendedor y el automóvil se prendió sonando su motor casi como en un ronroneo.

Lucas hablaba y contaba chismes de sus compañeros médicos mientras ella lo oía atentamente y reía por lo que el castaño caoba decía. Conducía por las calles transitadas y llenas de otros vehículos que iban y venían en todas direcciones, con las farolas y las personas desfilando a los costados de ambos haciendo grandes destellos de luces amarillentas que contrastaban su color con el clima frío. Observando los grandes edificios uno alado del otro de distintas estructuras y formas llenas de carteles luminosos.

Kristal le había pedido a Lucas para en un supermercado para así llevarle algo de comida a los chicos que habían estado entrenando toda la tarde, pues tanto TaeHyung como HoSeok contestaban sus mensajes y en resultado el resto de los chicos tampoco lo hicieron, asique, por haber sido un Viernes por la noche creyó que sería grato llevarles un premio por su esfuerzo.

Lucas carcajeó estruendosamente cuando vio la cantidad de bolsas de comida que cargaba, pero aún así no fue impedimento ayudarla a meter siete bolsitas de comida dentro del auto sin que se aplastaran entre sí. Luego de aquello continuaron su camino hasta la empresa donde estaban los chicos y Lucas la ayudó (como todo buen amigo), a llevar la recompensa a los chicos. Saludó a la recepcionista y al guarda de la puerta cordialmente junto con Lucas y continuó su paso hasta la sala de ensayos que estaba a unas cuantas plantas más arriba. Kristal decía que no era necesario haberla ayudado con las cosas pero él insistió diciendo que no tenía problemas en ayudarla en esto, a lo que ella agradeció felizmente.

Las puertas del ascensor se abrieron de par en par y ella siguió su camino hasta llegar a una puerta blanca de la cual se escapaban unas cuantas risas reconocibles del otro lado. Tocó la puerta con los nudillos—como puedo—y esperó paciente unos segundos antes de que esta se abriera mostrando a SeokJin desarreglado y algo sudado.

—¡Kristal! —exclamó de manera estruendosa casi dejando sordos a Kristal y Lucas.—¿Qué traes?

—Comida. —sonrió y SeokJin se hizo paso dejando entrar a los dos individuos en la sala de prácticas, donde estaban sentados en el suelo en una pequeña ronda con botellas de plásticos vacías y algunas medias llenas.—Un estimulante inconsciente para que continúen así.

—Traduciendo seria: un premio al esfuerzo.—habló Lucas y Kristal rió mientras se acercaba a la pequeña ronda que miraba a los dos occidentales algo tensos. Ella comenzó a repartir las bolsas de comida mientras ellos agradecían a cambio al igual que Lucas.—Me sobra uno.

—¿Eh? —ella volteó a verlo mientras le extendía el último a JungKook. Miró a sus amigos contándolos a cada uno con su mente.—Hay seis, falta YoonGi. ¿Dónde está?

—Dijo que estaba agotado y se encerró en su estudio. —contestó NamJoon abriendo el paquete envuelto.—Dámelo, se lo alcanzo luego.

—No, está bien. —sonrió y caminó hasta tomar el faltante de las manos de Lucas, y con su brazo libre lo cruzó con su amigo.—Iré a dárselo yo.

—Bien. Pero ten cuidado, quizá esté de mal humor. —habló JiMin mientras acababa por tragar un pedazo de su premio.

—Soy su novia. Sé lidiar con él.

Se despidió de sus amigos junto a Lucas y volvieron al ascensor para—nuevamente—subir unos pisos más altos donde estaban los estudios de los chicos. Lucas hablaba diciendo que prefería esperarla en la salida del elevador ya que no quería que lo insultara a él por igual a lo que ella rió y no se opuso aquello.

Volvieron a salir pero esta vez Kristal caminando sola por los pasillos cruzando los estudios de HoSeok, JungKook hasta que finalmente se topó con la puerta de madera con una placa de "Genius Lab". Suspiró aliviando su tensión y con la comida en la mano izquierda, a punto de tocar con los nudillos aquella puerta tan conocida para ella.

Gemidos.

Entonces a unos cuantos milímetros de sus huesos, se detuvo en seco, casi en un estado de shock donde sus ojos se abrieron completamente de la sorpresa y su corazón comenzaba a latir exageradamente rápido amenazado por salir expulsado por su boca y huir a saltos del lugar.

—Te amo. —oyó.

—Yo también te amo, YoonGi. —volvió a oír.

Tragó en seco pasando la saliva por su garganta con mucha dificultad.

Retrocedió.

Aún en estado de shock, retrocedió como si de pronto frente a sus ojos se encontraba su peor pesadilla jamás vista, como si aquella puerta sería la entrada a un infierno para Kristal. Donde todo lo que odiaban se encontraba allí dentro y como resultado proyectaba en ella una angustia que se acumulaba como pelota en su garganta y la desesperación se escapaba como lágrimas de dolor por sus ojos. Tiró lo que tenía en manos y salió allí, valía más su orgullo que sus sentimientos en este momento. Caminó apresurada por el pasillo del que había venido, a pasos ensanchados casi huyendo de allí.

—¿Kristal, qu- —el tirón de su brazo por parte de ella lo obligó a callar mientras lo arrastraba dentro del elevador. Su rostro de confusión se plasmaba como pintura en la cara de Lucas al ver como ella se desmoronaba por dentro y por fuera. Kristal apretó el último botón de la planta más baja y las puertas automáticamente se cerraron, en un silencio caso sepulcral.

Kristal era muy delicada ante la traición y el engaño, ella misma había luchado con eso, e inevitablemente se habían convertido en unos miedos de los cuales no podía liberarse, y menos en la sociedad en la que se vivía. Cuando jugabas con los sentimientos de ella, automáticamente desaparecía de tu vida de la misma forma que entró. En silencio y de una forma completamente brusca dejando en los demás, el sentimiento de culpa y vacío gracias a la desaparición de Kristal de sus vidas. Si pegabas en su orgullo, por seguro tenías que no volverías a verla a menos que sea para destruirte.

Comenzó a sollozar con más fuerza y fue cuando Lucas entró en acción y la atrajo a él en un abrazo que ella aceptó. Temblaba brutalmente entre sus brazos rodeando su espalda con fuerza. Lucas se sintió fatal y por si fuera poco, también comenzaría a llorar junto a ella aún sin saber la razón del por qué Kristal se encontraba así. Por razonamiento obvio tendría que ver con YoonGi, pues, otra cosa allí no podría afectarle tanto.

Las puertas del elevador se abrieron el vestíbulo de la empresa donde los chicos acababan de salir por la gran puerta de cristal a unos cuantos metros a su frente.

Kristal se alejó de su amigo rápidamente y se secó las lágrimas con el puño de su suéter negro para eliminar el rastro de su tristeza bajo la mirada expectante de Lucas sobre ella. La oyó reírse levemente y cuando Kristal levantó la vista para verlo sus ojos levemente rojos la observaban dolidos y la sonrisa ensanchada de ella hacía el mayor contraste que jamás había visto. Lucas se sintió peor al verla, estaba fingiendo algo que realmente no debía hacerse.

La tomó por los hombros y la atrajo a él con su brazo detrás de su nuca para comenzar a caminar para salir de allí a un paso casi fatigado.

—Kristal, ¿podrías- —se interrumpió cuando ella se volteó a verlo y entonces la preocupación de TaeHyung aumentó.—¿Por qué lloras?

Caminó hasta ella con Yeontan en manos. Ella lo observó con una sonrisa de una hilera de dientes y negó con la cabeza de lado a lado.—No es nada.

Su voz salió en un pequeño hilo de voz que alertó más a TaeHyung y este a consecuencia frunció el ceño con un semblante serio. Desvió la vista a Lucas y él se encogió de hombros sin entender tampoco.

—Suga-hyung, ¿le hirió? —preguntó. Haciéndose una idea del por qué se encontraba así. Ella pareció romperse en pedazos como su de pronto una pelota se estrellara contra una ventana y entonces las lágrimas de ellas volvieron a salirse de sus ojos con un sollozo más sonoro que estrujó el corazón de TaeHyung con fuerza. Ella se despegó de Lucas intentando buscar consuelo en él. El cual encontró y V la envolvió en sus brazos con cuidado de no asfixiar al pequeño perro en sus brazos. El canino repartía lengüetazos en las mejillas de ella secando las saladas gotas que se escurrían de sus ojos logrando que ella riera por las cosquillas que le daba el pelaje del animal.

Se alejó de TaeHyung y llevó su mano sobre la cabeza del pequeño perro y lo acarició en señal de gratitud. V sonrió ensanchado y secó una última gota que se columpiaba por la mandíbula de ella, la cual secó pasando su dedo índice hasta quitarla y Kristal lo observó con una pequeña sonrisa que aún portaba la tristeza en su sistema. Lucas sugirió ir a su departamento para pasar la noche del viernes juntos, a lo que Kristal dudó de aceptar pero TaeHyung convenció y al final accedió.

Con el tiempo Kristal realmente se alejó de YoonGi como si en algún momento algún artista hubiese tomando un borrador y la hubiera hecho desaparecer de un segundo al otro. YoonGi se extrañó de ya no recibir llamadas o mensajes de ella, aún así continúo su trabajo. Kristal se sentía claramente engañada e incluso utilizada como un plato del cual habías acabado de comer y no te importó limpiar luego.

TaeHyung había contado lo sucedido a sus amigos más cercanos, HoSeok, JiMin y JungKook de la harmatia* que YoonGi había hecho con Kristal. Todos claramente se sorprendieron pero aún así la molestia y la indignación florecía en ellos como una flor con espinas llenas de veneno.

Lucas había estado animado a Kristal expresar su dolor en algún papel, dibujo o foto con tal sólo lograr que ella quitara esa espina de su herida que aún no había detenido su sangrar y la herida continuaba abierta y expuesta a cualquier otra flecha se pegara contra ella.

—Tengo una idea. —habló TaeHyung sentándose en el colchón del cual Kristal no se había movido todo el día. Su tono de voz profundo pero relajante caló por los oídos de ella, con un tono de sugerencia y alegría en él. Ella se volteó para observarlo con unos ojos cansados.—Vamos a escribir una carta donde expreses todo lo que sientes. —ella lo miró con desgana y no se movió de su lugar.

—Tae, sé que hacen esto para ayudarme pero realmente no quiero moverme ni pensar, —se giró volviendo a darle la espalda.—sólo quiero llorar y llorar.

Lo oyó suspirar y la cama se movía a producto de que TaeHyung se acomodaba mejor sobre la cama. Escuchó la voz profunda de TaeHyung sobre su oreja y sus vellos de su piel se erizaron.—Cuando estés lista, me dices. —susurró suavemente y luego besó sobre su oreja.—Que descanses.

Luego volvió a moverse hasta bajarse de la cama y salir de la habitación dejándola sola con sus pensamientos y la soledad abrazándola con sus frías manos sumiéndola cada vez más en la profundidad de su mente. Se volteó hacia la puerta por donde TaeHyung había salido y seguramente estaba reunido con Lucas y Amanda en la sala. Sus ojos picaron como espinas que se incrustaban cruelmente allí y la hacía llorar. Mordió su labio inferior con fuerza, mentalizándose y repitiendo una y otra vez las mismas palabras hasta que cerró los ojos negándose a la realidad y fue cuando sus lágrimas salieron desesperadas por sus ojos ya enrojecidos por el llanto de la tarde.

Se levantó de la cama con desgana, caminando hacia su escritorio donde estaba su computadora cerrada sobre el mueble. Abrió el único cajón y de allí sacó una carpeta gris donde guardaba todos los dibujos que ella hacía cuando se sentía demasiado atacada por una emoción de la cual necesitaba plasmar. Quitó los elásticos negros y abrió la carpeta aquella revelando el último plasmado. En la parte inferior se encontraba su lápiz, una goma de borrar y un bolígrafo negro.

Hurgó entre las hojas buscando una en blanco, la cual no encontró y suspiró frustrada. Miró su último dibujo y cerró los ojos negándose ante la idea. Su pulso estaba acelerado y al parecer su llanto no se detenía por lo más mínimo. Buscó detrás del último escrito y sacó uno de sus dibujos.

Lo puso sobre la carpeta y lo volteó del otro lado. Tomó un lápiz con toda la intención de escribir sus sentimientos en papel, era buena haciéndolo. Pero ahora más que nunca se sentía bloqueada y asustada, completamente incapaz de plasmar sus emociones en papel de la misma manera que lo hacía con sus dibujos.

Su pulso temblaba, incluso sudaba con el lápiz entre sus dedos. Aterrizó la punta sobre la hoja blanca lentamente hasta que dio con ella y comenzó a trazar las letras como lo hacía con los dibujos, dejándose guiar por sus sentimientos y recuerdos y dejando de lado la realidad que la rodeaba todo el tiempo. Olvidándose que aquello era una carta donde plasmaba sus más dolorosos sentimientos y reflejaba todas sus emociones en papel, trazando y dibujando conectores entre ellos. Sin querer hacerlo, soltándolo todo sobre aquello como su cascada que se descongelaba en invierno gracias a los cálidos rayos del sol de los inicios de la primavera.

Cuando acabó se alejó con el lápiz aun en su mano, observando como aquella hoja estaba enteramente escrita. Secó sus ojos que había derramado unas cuantas lágrimas en el camino. Tomó el papel dejando el lápiz sobre el escritorio y lo dobló por la mitad dos veces.

Caminó a la puerta y la abrió con cuidado, observó desde el umbral el pasillo del departamento de TaeHyung. La pared blanca de pisos de cemento alisado eran sofisticados y modernos. Sin embargo, en su mente parecía que aquel lugar era sumamente peligroso y desconocido para ella, como si aquella puerta fuese la entrada a un bosque encantado donde rondaban los seres sobrenaturales. Suspiró nuevamente inhalando una gran cantidad de aire y al mismo tiempo se armaba de valor.

Cruzó el umbral abandonando su fuerte y protección del mundo. Apareció por la sala ganándose la mirada de Amanda que estaba frente a Lucas y TaeHyung, sentados en un sofá. Al ver que la mexicana desviaba la vista los dos chicos hicieron lo mismo.

TaeHyung inmediatamente se levantó de su lugar dejando el vaso de agua sobre la mesa para caminar hasta ella. Kristal extendió hacia él la hoja doblada que había escrito hacia un par de minutos. Él descendió su mirada al pequeño cuadrado y luego lo tomó en sus dedos en silencio, notando unos trazos en el papel, pero del otro lado se notaban unas palabras escritas.

—Dásela a YoonGi. —habló y TaeHyung asintió con un solo movimiento de cabeza. Ella mostró una diminuta sonrisa y lo abrazó enredando sus brazos en el pecho de él.—Gracias.

Los nervios de TaeHyung aumentaron instantáneamente y la sonrisa particular de él apareció, con una sonrisa nerviosa suya.—N-no es nada.

Al día siguiente TaeHyung cruzó por debajo de la puerta del estudio de YoonGi aquella carta, sólo que debido abrirla ya que en la forma que ella la había entregado no cabía por la diminuta rendija.

«Ojalá no la busques, maldito idiota». Pensó TaeHyung y se alejó caminando de vuelta hacia la sala de ensayos con sus compañeros de grupo. Los cuales preguntaban por el estado de Kristal y él respondía lo poco y necesario que necesitaban saber, todos sabían lo que su amigo había hecho pero aún así no lo tratarían como escoria y simularían no saber nada. Pues, tampoco debían interesarse por ese asunto ya que era entre ellos dos, pero, si tenían que interferir, lo harían sin dudarlo dos veces.

—¿Dónde se aloja ella ahora? ¿Sigue en el mismo departamento que comparte con hyung? —preguntó JungKook una vez que acababa de estirar sus piernas.

TaeHyung negó.—Está con Lucas, pero quiero que venga conmigo para vigilarla de cerca.

—¿Sus cosas siguen allí? —preguntó SeokJin y TaeHyung volvió a negar.—¿Y YoonGi no se dio cuanta aún? Woh, eso sí es despiste.

—No hyung. —dijo NamJoon.—Eso es no interesarte la persona.

"Ya entiendo la razón del porqué no decías la palabra: Te amo> con normalidad... porque ni siquiera sabes a quién amas. Todo lo que creaste en una mentira cubierta por engaños en la cual yo caí y no me di cuenta, siendo yo una persona precavida y meticulosa. Todo lo que decías. Todo lo que me decías. Todo lo que creaste y mentiste. Todo tú, Min Yoon Gi, es una mentira.

Ahora, Min, gracias a ti aprendí que el engaño sigue rodeándome y jamás, nunca en tu maldita vida volverás a verme de la misma manera, lo que era amor por ti ahora es una profunda decepción que hace distancia entre mis emociones y yo. Ojalá no me busques y tampoco quiero que intentes hacerlo, de lo contrario te ganarás una golpiza de Noah y una nariz rota de Lucas.

¿Sabes? Es irónico porque jamás supe odiar una persona, ese trabajo lo hacían mis amigos. Pero ahora, Min Yoon Gi, te ganaste el primer título de la persona odiada por mí. Felicidades y disfruta tu vida.

-K."

El brazo rodeándome la cintura con una mano firme me quitó de mis pensamientos sumidos. Volteé la cabeza hacia arriba, encontrándome con una resplandeciente sonrisa de TaeHyung iluminándome el día, aunque eso tuviese que hacerlo el mismísimo sol. Acercó sus labios a mi frente la besó con delicadeza provocándome una sonrisa tímida e instantáneamente rodeé su estómago con mis brazos para ocultarme del resto de sus amigos. Escuché la risa de JiMin y luego contagió a TaeHyung.

—V, ¿puedes traerme los bolsos aquellos? —habló SeokJin mientras guardaba unos bolsos en el maletero. Él asintió y se despegó de mi par ayudar a NamJoon.

—Espera Hyung, se romperá. —habló JiMin yendo hacia HoSeok que hacía el esfuerzo por desarmar la carpa.

Miré el cielo de un tono naranja gracias a los rayos del sol que se ocultaban en el horizonte, con una sonrisa al haber pasado un buen día de campo con los chicos. Inhalé aire hasta llenar mis pulmones y exhalé lentamente para sentir la paz y el armónico sonido de la naturaleza que nos estaba rodeando y abrazando con cariño entre sus brazos.

—Tenías razón, Kristal. —ella volteó hacia la voz que tanto conocía. Observó a YoonGi con el cabello de un tono grisáceo observándola apaciguado. Ella ignoró lo que había dicho y colocó sus auriculares en sus orejas, para evitarlo.—Sé que aún así me oyes, estás escuchando Chill.

—Qué bueno que lo sepas. —se quitó un auricular y lo miró con unos ojos inyectados en rencor y un odio que jamás había sentido.—Te dolerá más saber que te oigo, pero te ignoro. Ahora si me disculpas, iré a un lugar donde no me moleste tu existencia. Gracias.

Las palabras de Kristal eran demasiado afiladas para la costumbre de él, jamás la había hecho enfadar. Y ahora confirmaba cuando sus amigos decías que Kristal realmente escupía veneno por la boca. Confirmaba en carne propia que aquello dolía demasiado, sabiendo que él mismo se la buscó.

—N-no, espera —rápidamente la tomó del codo y la detuvo. Suspiró.—Déjame disculparme, al menos.

—Tus disculpas no me sirven de una mierda ahora. —jaló de su brazo para quitar su agarre, se volteó hasta verlo con una mirada de odio.—Tampoco me apetece oírte.

—Kristal, por favor. —suplicó, sintiéndose el pequeño toque de dolor y frustración en su voz. Ella lo observó en silencio, sin ademán de irse.—Perdóname, tenías razón en todo. La avaricia y lujuria humana son una mierda, tu siempre lo supiste. El engaño las lideraba en todo momento y caí como imbécil a sus pies. Te perdí, por culpa de una emoción vacía sin duración. Perdí todo lo que era real. Ahora sí vivo en un engaño. Me engaño día a día que tú sí me amas, que sí estás ahí en todos momentos, vivo creyendo que es así. —YoonGi pausó unos momentos y sus ojos comenzaban a cubrirse en una ligera capa de agua para comenzar a lagrimar.—No conozco otra forma de vivir que no sea esta. Kristal, yo te sigo amando, por favor. ¿Puedes corresponder eso?

Kristal lo observó fijamente y en silencio, con un semblante y una seriedad que jamás en su vida él había conocido y visto en ella. Ahora sabía que siendo ella de esta forma realmente era doloroso, le estaba devolviendo las fichas una por una y eso le estaba dañando tanto que ni siquiera tenía una comparación o explicación exacta a lo que ocurría con él.

Kristal desvió la vista sobre el hombro de YoonGi observando a TaeHyung observaba petrificado a unos cuantos metros detrás de él, en silencio observándola a ella con una mirada de dolor y miedo creciendo en su interior. Volvió la vista hacia YoonGi observándolo tan vulnerable y expuesto.

—Aguanté cada mierda tuya por amor. —habló—Ahora, retuércete en tu mierda sólo. Ya no soy un saco de boxeo o catalizador tuyo. Y no sería capaz de engañar a alguien que quiero, no soy como tú.

Caminó cruzando de él dejándolo en silencio con los sentimientos y las emociones echas una terrible pelea y todo lo que él tenía en completa ruinas. Todo.

Se giró sobre sus talones y vio a su menor sonreír enormemente mientras soltaba los bolsos de ropa en sus manos para tomar el rostro de ella entre sus manos y besarla, a lo que Kristal aceptaba y descansaba una de sus manos al costado de la mejilla de TaeHyung.

Una lágrima se deslizó por su ojo al ver a los dos juntos. Sintiendo como una infinidad de flechas se clavaban en su espalda atravesando su pecho.

—Te amo. Gracias por estar aquí. —habló él con una sonrisa sin cortar el contacto visual entre ellos.

—Yo te lo agradezco a ti, TaeTae. Te amo. —contestó en una sonrisa seguida de la sonrisa tímida de ella logrando contagiarlo a él. TaeHyung la atrajo a su cuerpo hasta abrazarla finalmente.

Cada una de las fichas.

~~~~~~
Ndoqkdoodoqm tengo hambre
ayuda

Perdonen si hay errores de ortografía es que acabo de escribir y tiene 4113 palabras ldkapldld

¿Son zurdos o diestros?
Yo soy diestra uwu

-Homicidal_Bloody
ft.
-Son_Hwa14