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Eun-Yu estaba avanzando mientras que trataba de seguir la pista de Ah-yi y con Park Chan-Yeong pisándole los talones, pero al mismo tiempo aun tenían una disputa acerca de que era bastante riesgoso en que ella hubiera salido de esa manera y al mismo tiempo en que en medio de su discusión habían caído en una trampa de la cual era un gran hoyo y que en el fondo había unos grandes picos de madera al fondo y al mismo tiempo Eun-Yu estaba colgando de ahí, pero Cha-yeong estaba sosteniéndola a que no cayera en esos picos, pero al final ambos cayeron al suelo y tuvieron suerte en no caer en los picos.
Eso fue en una noche y de ahí pues tuvieron que pasar la noche ya que al parecer las paredes del hoyo se encontraban bastante húmedas haciendo que se volvieran demasiado resbaladizas como para escalar.
Genial...no hay salida --. dijo Eun-yu molesta.
¿Ahora me dirás cuál es tu razón de la cual sigues a esa niña? --. dijo Cha-Yeong
Eso no te incumbe --. dijo ella.
Lo hago, porque es mi deber a proteger los sobrevivientes del estadio --. dijo el.
No debiste seguirme en primer lugar --. le dijo
Tenía que saber tu secreto, y ver que si ponías en peligro al estadio --. dijo Cha-Yeong.
¿Tanto te interesa? --. dijo Eun-Yu con fastidio.
Es mi deber estar en el bienestar del estadio, además es el único lugar que queda para que los demás queden a salvo --. dijo Cha-Yeong.
Eres un fastidio --. dijo ella.
Pensamos igual --. dijo el --. además, no somos tan diferentes en el sentido de que te importa el bienestar de alguien que esa niña menciono.
Cha-yeong estaba a punto de incorporarse, pero se quejó porque al parecer se había lastimado el tobillo.
Diablos --. decía el que trataba de incorporarse, pero no resulta bien.
Déjame ver --. decía Eun-yun mientras que se agachaba hacia el tobillo de Cha-yeong.
Ella se puso a revisar el tobillo de este mientras que comenzaba a vendar el tobillo con un trozo de tela que tenía consigo y para luego le ayudaba a acomodar mejor el tobillo para evitar que se pusiera peor y al mismo tiempo en que lo ayudaba a posicionarlo bien para que pudiera caminar mejor.
En eso cuando se incorporaron se apegaron en la pared de tierra ya que el suelo comenzó a temblar mientras que se ocultaban ya que de ahí cerca se encontraba caminando un monstruo y aparte guardaban silencio porque este estaba gruñendo cerca de ahí.
Si seguimos aquí, terminaremos siendo el bocadillo de algún monstruo --. decía Cha-yeong.
Eun-Yun no decía nada ya que estaba pensativa, porque de verdad quería encontrar a esa persona que la ha estado protegiendo durante un tiempo y de verdad no le importaba si ahora se había vuelto un infectado...solo deseaba con todas sus fuerzas volverlo a ver.
Por otro lado, Mario había traído a Jae-Heon a la cabaña en la que probablemente se encuentre Hyum-soo, pero estaba como temía, se encontraba vacía, pero en eso ambos se quedaron un rato ahí por el hecho en que tenían que descansar por el largo recorrido que habían dado.
¿Entonces es aquí donde se encontraban antes? --. le pregunto Jae-Heon.
Si, tuvimos que irnos por el hecho en que los soldados se acercaban a nuestra ubicación --. le conto Mario.
Han hecho bien...dudo que los humanos hubieran tenido piedad contra nosotros --. dijo Jae-Heon.
Bueno...lo importante es que ahora el resto se encuentra a salvo --. dijo Mario mientras que servía dos vasos de agua.
Oye si Hyun-soo no se encuentra aquí... ¿Dónde más podría estar? --. dijo Jae-Heon antes de beber agua.
Creo saber dónde se encuentra ahora...y aparte me estoy dando cuanta ahora en que Hyun-soo lleva un tiempo en que no viene a la cabaña, ya que su hedor no se siente tan fuerte aquí --. decía Mario que inspeccionaba un poco la cabaña.
¿Su hedor? --. decía Jae-Heon sin entender.
¿Recuerdas que cuando estábamos en el edificio, yo explique que la infección puede aumentar nuestros sentidos? --. le dijo Mario.
Si, lo recuerdo --. decía él.
Bueno...ahora tengo el olfato muy agudo y puedo percibir el hedor de una persona...como si fuera un perro --. dijo Mario un poco apenado.
¿Eso también me puede pasar a mí? --. le pregunto un poco sorprendido.
Mario notaba que Jae-Heon aun usaba sus gafas, entonces se acercó a él para luego quitárselas un momento y en eso no pudo evitar sonreír por ver la reacción sorprendida al notar que miraba muchos mejor.
¿Apenas te diste cuenta de que podías ver mejor sin esto? --. le pregunto Mario un poco divertido.
Perdón es que es mucho por asimilar --. decía el avergonzado.
No te preocupes, por ahora se está haciendo un poco tarde y lo mejor es que pasemos la noche aquí...Mañana iremos por Hyun-soo --. dijo Mario.
Bueno, te tomare la palabra...la cabaña es mucho más cómoda que en el estadio de beisbol en donde me encontraba --. dijo Jae-Heon.
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