Un rato después de que los demás llegaran al 1408 pues se encontraban reunidos con alrededor de una mesa para cenar y en eso Hyun-soo salía del baño.

Siéntate--.le dijo el tipo.

Mario le señalo el espacio que se encuentra junto a el para luego el se pusiera a su lado.

Buen provecho--.dijo el.

Los demás comenzaron a comer pero notaba que lo hacían de manera apresurada y pues el tenía la costumbre de comer un poco más lento.

¿Cómo se llaman?--.le preguntó a los niños

Mi nombre es Su-yeong--.se presentó la niña.

Mi nombre es Yeong-su--.se presentó el niño.

Sus nombres suenan casi igual, de seguro se llaman así para que estén siempre juntos--.dijo el.

Papá...nos puso asi--.dijo Su-yeong con voz temblorosa.

Papá--.decía Yeong-su a punto de llorar.

Mario noto el ambiente un poco tenso y pues tomo parte de su comida para luego darle un poco a los chicos.

Gracias--.dijeron los dos.

¿Cómo se llama usted?--.le preguntó Mario.

Han Du-sik--.dijo el.

Un placer--.dijo Mario.

Es un buen muchacho, lo conozco desde que se mudó al edificio hace casi un año y medio--.aseguro Jae-Heon.

Yo también pienso lo mismo--.dijo la señora dando un sonrisa.

En eso Du-sik estaba ofreciendo cerveza a los demás pero Mario pues no tomaba porque no le gusta y pues la única que le aceptó era esa chica llamada Ji-su que la verdad no le sorprendió que hiciera eso.

Poco después Mario había ayudado a la señora a lavar los platos y que a su misma vez arropo a los niños para que pudieran dormir.

Se sentó un momento de la cual pudiera descansar un poco ya que de verdad a todo eso fue un día bastante largo. En eso de su mochila sacó su cuaderno para poder escribir para distraerse.

Muchas veces al haber vivido tantas experiencias ya son cosas de las cuales consideras normales, pero uno no es nadie para andar juzgando las acciones de otros.

Las acciones se provocan por el hecho de que algunos deben tener sus razones, sus experiencias, su pasado e incluso ciclos de los cuales no han podido cerrar.

Justo ahora cuando Mario había terminado de escribir pues sintió que le tocaban el hombro y vio que era Ji-su.

Oye, es tu turno--.dijo ella.

Claro--.dijo el mientras se incorporaba para salir.

¿Sabes que estoy infectado?--.le preguntó Mario.

Lo se, al igual que el otro--.dijo ella.

Solo quería asegurarme--.dijo Mario antes de salir.

Mario que estaba afuera pues fue a explorar entre los pasillos a buscar en diferentes apartamentos lo esencial ya sea comida, medicinas, productos de higiene y también buscaba herramientas para el mantenimiento de las armas.

Lo que se tiene que hacer para poder sobrevivir--.dijo el mientras que continuaba.

Al día siguiente los demás se habían despertado y veían que Mario no había vuelto de hacer guardia.

¿No volvió Mario?--.decia Hyun-soo preocupado.

En eso aparece el mencionado pero vieron que tenía la camisa un poco rasgada.

¿Dónde estabas?--.le preguntó Hyun-soo.

Buscaba algunas provisiones--.dijo Mario mientras que señalaba la mochila que tenía.

¿Acaso todo el mundo quiere morir?--.se quejó Ji-su.

Se lo que hice fue imprudente pero es mejor estar preparados a lo que se viene ¿No?--.dijo Mario.

Mario tiene razón--.lo apoyo Jae-Heon

En vez de estar resongando deberías de estar agradecida de que tuvo la iniciativa de que estuviéramos preparados--.le regaño Du-sik.

Ji-su solo resoplo y también que con el poco orgullo que tenía no admitiría que el tenía razón.

Mario por otro lado había ido al baño para cambiarse la camisa ya que por suerte se trajo un poco más de ropa ya que la que tenía estaba rota y con manchas de sangre.

Además cuando se cambiaba pues vio que sus ojos se encontraban negros pero también se le estaban marcando las venas en los ojos pero también sintió como sus sentidos se agudizan, estaba ido hasta que todo paro al escuchar algunos toquidos haciendo que saliera del trance y sus ojos volvieran a la normalidad.

Mario, ¿Estás bien?--.dijo Hyun-soo al otro lado de la puerta.

Si--.le respondió un poco aturdido mientras terminaba de cambiarse.

Mario estaba afilando su machete ya que en el encuentro del semigigante había perdido filo.

¿Podrías hace lo mismo con mi espada?--.le preguntó Jae-Heon.

Claro--.dijo Mario mientras que dejaba su machete de lado y empezar con la espada.

¿Dónde aprendiste hacer eso?--.dijo Ji-su que venía.

Mi familia es de campo y me enseñaron desde los doce años el uso y  el mantenimiento de las herramientas de filo y primeros auxilios--.le contó mientras afilaba.

Eres el más fuerte entonces--.dijo ella.

En eso se escuchó una música por el edificio de la cual se encendiera la bocina.

Sobrevivientes del edificio, tomen su comida, medicina y armas, y vengan a la planta baja.

La planta baja está asegurada y será mejor si nos agrupamos

Los sobreviviente...debemos agruparnos.

Por favor, bajen.

Por favor

¿Será cierto?--.dijo la señora.

No perdemos nada con intentar, además conozco a la persona que habló--.dijo Mario mientras le entregaba la espada a Jae-Heon.

Yo no confío en ese mensaje--.dijo Du-sik.

Pero no nos queda otra opción, además ya no queremos seguir abusando de su hospitalidad--.dijo Ji-su.

Será mejor que nos preparemos--.dijo Jae-Heon.