mi destino

"esta seguro de lo que dice doctor" —pregunto una señora de pelo verde con preocupación.

"si señora, yo mismo verifique la información y revise dos veces los análisis" —su vista vería fijamente a un pequeño peliverde que estaba sentado junto a su madre.

"deberías rendirte niño, nunca seras un heroe"

la madre del pequeño salio con el rumbo a su casa con los animos abajo por la noticia dada pero en el camino algo llamo la atención del pequeño

'quien hablo de rendirse' —era el titulo de un libro que recién salio al mercado y justamente hoy era el dia de su estreno—

"izuku que ocurre" —pregunto su madre extrañada por lo que giro su vista hasta donde veia su hijo.

"mamá, puedo tener ese libro" —la madre se sorprendió por la pregunta, apenas era un niño de cuatro años y ya queria leer literatura avanzada a su edad.

"seguro? ese libro se ve demasiado complicado para ti"

"seguro muy seguro" —afirmó el pequeño peliverde con seriedad por lo que ella solo acepto para luego entrar los dos a la tienda.

[...]

residencia midoriya

el pequeño se encontraba sentado en el sofa leeyendo el libro que por extraño que parezca lo entendia muy bien

"sigues leyendo" —pregunto con sorpresa su madre por encontrarlo todavía con ese libro pues juraba que desde hace tres horas su hijo se sentó para leerlo.

"si, no es tan complicado como pense" —respondió sin quitar sus ojos del libro.

"puedo saber de que trata" —se acercó para poder ver de que tema hablaba el libro.

"es sobre como no rendirnos a pesar de las dificultades que nos ponga la vida, además de que tiene una guia de autoconfianza" —respondio con emoción pero su madre sabia a que se debia todo esto.

la pliverde mayor solo suspiro para coger el libro de su hijo y cerrarlo para que el la viera fijamente a los ojos

”escucha izuku, se que te duele que no tengas un quirk pero no intentes ocultarlo, lo se porque puedo notar tu dolor" —a este paso el pequeño empezó a soltar lágrimas de dolor.

"pero quiero que sepas que no importa que camino escogas yo siempre te estare apoyando" —el peliverde solo salto abrazar a su madre;queria dejar salir ese dolor que traia con el y haci lo hizo.

"que te parece si hago tu platillo favorito" —ella solo le dedico la sonrisa que toda madre sabe dar.

"si mamá" —se limpio las lágrimas para sonreirle a su madre que se sentía mejor de que su hijo por fin dejara salir ese peso.

"entonces ve guardando tu libro y ve a la mesa porque no tardare nada" —el solo asintió para coger su libro y irse a su habitación.

al entrar a su cuarto pudo notar toda la mercancía de all might esto lo hizo solo dolerle un poco el pecho pero fue más fuerte y dedico una sonrisa

"te pondré aqui para que no olvide donde te deje" —rio para el mismo pero cuando fue a ponerlo debajo de su cama noto que habia una punta blanca en las paginas amarillas del libro.

"que es esto" —abrio su libro para ver que era lo qué vio pero fue grande su sorpresa al encontrar una carta de gran elegancia.

abrio la carta pero después de leerla empezó a llorar de nuevo, solo que en está ocasión no era de tristeza sino de felicidad

[...]

"me alegra que te sientas mejor" dijo su madre mientras le ponia la comida al plato de su hijo

el pequeño solo sonrio sin responder pero dentro de el habia ahora una gran motivación que nadie podria quitarle por el resto de su vida

"mamá puedo preguntarte algo"

"hmm" —asintio su madre por tener comida en su boca.

"puedo ir a una escuela de ingeniería?" —pregunto con nervios pero su madre solo se atragantaria.

"po-porque quieres ir a una escuela de ingeniería?"

"pensé en lo que me dijiste por eso quiero ir a una" —respondio firme pero su madre se vio insegura ante la respuesta.

"esta bien, mañana iré a buscar una por acá cerca pero eso no significa que no seguirás yendo a tu actual escuela" —el pequeño solo asintió feliz para luego seguir comiendo.

[...]

los días pasaron y el pequeño izuku midoriya al fin pudo entrar a la escuela que el tanto pedía aunque era difícil entrar pues para poder conseguir un cupo el pequeño debía superar notas de 8.0 en los exámenes, algo complicado pues la edad del pequeño era solo de cuatro años y tener esas notas era algo que parecía imposible para alguien de su edad pero no para sus capacidades y disciplina. inko ya sabia esto por lo que le informo a su hijo y este junto ella empezaron a estudiar

oficina de la academia de ingeniería

izuku junto a inko esperaban sentados en las salas de espera sin decir que ambos se encontraba nerviosos por los resultados

midoriya izuku!" —llamo una señora de edad al pequeño peliverde que sin esperar tanto se levantó en compañía de su madre para entrar a la oficina.

al entrar sus ojos se agrandaron de la sorpresa al igual que sus nervios ¿la razón? pues mas de 10 maestros sentados con la mirada seria cada uno portaba una bata de laboratorio y lentes sin decir que unos eran calvos pero no era un dato relevante

"izuku midoriya ¿cierto?" —asintio el joven ante la pregunta de uno de ellos.

"viniste aquí para consultar tus resultados y ver si podías entrar a la academia verdad"

"si señor"

"antes de darte los resultados respóndeme algo" —su tono frío se hizo notar ante los oídos del peliverde.

"que te impulso a venir a una escuela como esta"

inko quería responder pero su hijo la miro con calma para que ella no interfiera

"lo hago porque quiero ser un héroe" —su vista se lleno de vida, su voz con seguridad y su mirada transmitía pura tranquilidad.

los maestros murmuraban entre ellos pero el que hacia las preguntas los callo

"niño tal vez no lo sepas pero esto no es una escuela de héroes ni nada parecido"

"lo se" —los miro sin inmutarse sorprendiendo a mas de uno.

"por eso quiero hacer esto, quiero ser un héroe que a pesar de no poseer un quirk pueda salvar a las personas y que ellas se sientan seguras"

"izuku" —hablo su madre entre susurros por no saber cual era la idea de su hijo.

"no importa que no sea famoso, lo que quiero es ser alguien que pueda lograr su sueño sin tener un quirk y le demuestre a los demás que ellos también pueden" —a estas alturas los maestros se encontraban sorprendidos por las palabras de un pequeño de cuatro años que hablaba como si ya fuera un adulto.

"por eso pido de todo corazón que por favor me enseñe cada uno de ustedes, quiero demostrar que no solo un quirk hace a un héroe sino también su inteligencia y deseo de serlo" —agacho su cabeza para terminar su discurso.

nadie dijo nada en el momento que el termino a cambio se escuchaban aplausos de admiración por cada uno de los maestros

"me sorprendes niño, en mi tiempo que llevo de vida jamas conocí a un joven que deseara aprender ingeniería para el uso de héroe, incluso puedo decir con firmeza que eres el primero en decirlo —se paro de la mesa con los resultados para ir hasta donde se encontraba el pequeño.

"espero que no nos desilusiónes porque te enseñaremos todo lo que necesitaras si quieres ser el mejor" —sonrió de forma tranquila para darle la mano al par de ojiverdes.

"izuku midoriya, bienvenido a ideas mecánicas avanzadas o también conocido como i.m.a"  —hablo con gran orgullo por ver a tan prometedor joven.

"¡gracias!" —abrazo el pequeño al maestro de la felicidad.

"le prometo no defraudar a cada uno de ustedes" —se solto del abrazo para luego salir con su madre del lugar.

"se le nota la actitud" —dijo feliz el científico por ver salir a ese pequeño de cuatro años.

[...]

en el camino a su hogar ambos peliverdes hablaban de temas triviales pero eso no quitaba el echo de lo felices que estaban pero aun faltaba una cosa, el examen

residencia midoriya

"listo para ver tus resultados" —hablo con un toque de nervios la mayor.

"s-si" —tapandose el rostro para no ver los resultados.

pueda que lo aceptaran pero eso no quita el merito de saber cual fue su resultado y para sorpresa de los dos este fue su calificación

matemáticas y geometría: 8.2

fisica cuantica: 8.0

quimica: 8.5

comprensión analitica: 8.2

creatividad mecánica y automotriz: 8.0

diseño de planos: 8.0

total de resultados: 8.1

felicidades por pasar


izuku midoriya

estatus: aceptado

el rostro de inko solo se mantuvo estetico por un rato antes de sonreir

"¡te fue increíble!" —hablo con felicidad por saber que sus esfuerzos rindieron frutos.

"¿puedo verlos?" —pregunto a su madre que sin problema se los paso.

"que opinas" —hablo inko al ver lo sorprendido que estaba su hijo.

"mamá" —dijo con seriedad.

"si..."

"tengo que mejorar mis notas" —hablo con entusiasmo pero eso solo significaba una cosa, estudiar hasta que su mente se llene por completo.

por que ya lo veia venir —penso una feliz inko por ver a su hijo de esa forma.

fin del capitulo: mi destino.
























































































contenido de la carta.

nadie ni nada tiene el derecho de elegir quien quieras ser,
si tienes un sueño ve tras el, no dejes que las palabras y
acciones de otros te depriman, si quieres ser un héroe entonces
¿que estas esperando? ve y haz realidad tu sueño, no importa
la edad, lo que importa es tu sed de cumplir tus metas y objetivos
y espero con ansias de ver al futuro héroe o heroína que leeyo esto
pueda que no me conozcan pero de algo estoy muy seguro y es que
estoy escribiendo esta carta al verdadero héroe que necesita este
mundo, con o sin quirk seras grande, solo debes buscar la manera.

att: jeremias campbell.

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