Había pasado una semana desde que las familias se habían reunido, dicha semana paso como un borrón para todos.

En este momento acababa de aterrizar el avión que los regresaría a su hogar.

A pesar de que les encantaba pasar el tiempo juntos, todos tenían pendientes por su cuenta; como descansar debido a la hora.

Cansados del viaje cada uno de ellos se dirigió a su casa. Con los Mejía se había improvisado una pequeña cuna para los bebés, sin embargo, estos solo gorgoteaban y daban vueltas dentro de ellas sin futuros planes de dormir.

- Roby, ya apaga la luz, mañana tengo cita con el doctor - se quejo Christian con todo el cuerpo debajo de sus cobijas.

- ¡UY! ¿Tan rápido olvidaste a Franky? - bromeó Andrés.

- ¡No seas payaso! CITA MÉDICA - grito Chris.

- No peleen - regaño Roby - y Mati aun no quiere dormir - término,  jugando con las manitas del pequeño.

- Vamos, aparte mañana empiezan como ayudantes de Paúl en EGG - El pelinegro prácticamente rogaba por que se apague la luz.

- ¿y? Podemos cargarnos temprano - canturreo Andrés.

- Ashh -

- ¿Que pasa chicos? - pregunto Margarita entrando a la habitación.

-  Es que ya quiero dormir y Roby no quiere apagar la luz, y Andrés esta haciendo chistes malos - respondió Christian.

- Es que Mati no se quiere dormir - se defendió Roby.

- Vamos, yo te ayudo a dormirlo -

El castaño tomo al bebé en brazos y salió junto a Margarita.

- Quita esa sonrisa Andrés que mañana aparte de EGG tendrás que ayudarme en el cyber - dijo Margarita antes de cerrar la puerta.

- JaJa -

- Callaté Chris -

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A la mañana siguiente los pequeños androides se encargaron de ser la alarma de sus padres, tíos y abuelos, rompiendo en llanto a las 6:37 am. Inmediatamente todos comenzaron su rutina matutina y se prepararon para sus compromisos del día. Paúl, Andrés y Roby se irían a trabajar a EGG, Margarita y Christian con el doctor y Delfina, Dulce y los mellizos atenderían el Cyber Byte.

Mientras las chicas atendían Franky y Támara cuidaban a los niños mientras mantenían una divertida conversación, al menos para Franky.

- Ya deja de reirte androide -

- Es que no puedo - hablo mientras continuaba riendo.

- ¿Que es tan gracioso? - cuestión molesta, haciendo pucheros.

- Támara Franco celosa de Andrés Ramirez - rió.

- No estoy celosa, y menos de esa chatarra - contraatacó.

- ¡Ay Támara! Ibas tan bien - pronunció negando con la cabeza.

- ¿A que te refieres? - Alzo una ceja.

- A que acababas de admitir que te gusta Andrés, y fue obvio que te pusiste celosa de Aria -

- Es que...- rasco su nuca con nervios.

- Decidete ¿te gusta o no te gusta Andrés? -

- si - susurro - si me gusta...-

¿Surprise?