Roxy: - su expresión siempre es inexpresiva - A ver, a ver, a ver. El Team Yell bloqueó la entrada a Pueblo Crampón, ¿no?

Team Yell: Sí.

Roxy: Pero se os salió de las manos.

Team Yell: Sí.

Roxy: Y otros integrantes del Team Yell más gente de Crampón se pusieron de acuerdo para que nadie pudiera entrar, independientemente de como.

Team Yell: Sí.

Roxy: Por lo que veo, al menos la mayoría de vosotros estáis aquí.

Team Yell: Sí.

Roxy: Vale, y habéis venido a avisarme porque esos sobrutos han estado a punto de matar a alguien.

Team Yell: Sí.

Team Yell ♂️: De hecho, creemos que es "amigo" tuyo.

Team Yell ♀️: ¡Idiota! ¡No era necesario preocuparala más de la cuenta!

Roxy: ¿Amigo mío? ¿En el desafío de los gimnasios...? Oh. Creo que ya sé de quien habláis.

Team Yell ♂️2: ¿Qué hacemos ahora, Roxy?

Roxy: Supongo que iremos a Crampón a poner en su sitio a esos idiotas.
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Los aspirantes que se habían adentrado en Pueblo Crampón estaban rodeados por pokémon, aunque se defendían bastante bien, incluso si les superaban en números.

Aspirante ♀️: Es una pena que no podamos ir al centro pokémon.

Aspirante ♂️: Tranquila, ya hemos derrotado varios equipos enteros, no debería de quedarnos mucho.

Aspirante ♂️2: Eso es cierto. Pensé que sería más complicado.

Paul: No os confíeis, chicos. Sabemos como son esta clase de gente.

Aspirante ♀️: ¿Nadie puede ir ya a buscar una comisaría?

Gloria: ¡¿A ti qué te parece?! ¡Estamos completamente rodeados!

Aspirante ♀️2: ¿Soy yo o a él ya le habíamos derrotado?

Aspirante ♂️2: Es cierto, y a él también.

Gloria: - suspiro - Claro, que nosotros no podamos ir al centro pokemon no significa que ellos tampoco.

Aspirante ♂️: Tengo algunas pociones de sobra. Si necesitáis, pedírmelas.

Aspirante ♀️3: ¿Cómo vamos a ganarles si pueden curar a sus pokémon infinitamente?

Paul: El Team Yell dijo que buscaría a Roxy. Si ella viene, seguro que se calman.

Aspirante ♀️: Estás seguro.

Paul: No mucho, la verdad. Pero seguro que al menos la situación se calmará bastante como para que alguien vaya a comisaría.

Aspirante ♀️3: Pues nada, veamos si podemos aguantar el rato suficiente.

Gloria: Seguro que sí.

Paul: Eso, todos nosotros hemos conseguido seis medallas. No tenemos porque tener miedo de ellos.

Todos los aspirantes asintieron con determinación, motivados a aguantar hasta que la ayuda llegue.
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Victor: ¡Muchas gracias por traerme!

Aspirante ♂️: No tienes que dármelas. Venga, date prisa y entra en el centro pokémon.

Victor: ¡Sí!

Corrió hacia dentro del centro pokémon y fue a entregarle sus pokeballs a la enfermera Joy. La enfermera Joy las colocó en la máquina de curación y en unos segundos le devolvió cinco de ellas.

Joy: Joven, uno de sus pokémon necesitará de más cuidados para recuperarse. Espere aquí, no tardaré mucho. Oh, y revise una de sus pokeballs, estaba vacía.

La enfermera se marchó y Victor salió del centro pokémon y sacó a los pokémon que pudo. Estaban todos menos Robin y Tinkle. Por las prisas se lo olvidó en las afueras de Crampón. Le preocupaba mucho su compañero, pero sabía que él podía cuidarse solo y ahora mismo Robin lo necesitaba más.

Nuestro protagonista devolvió a todos a sus pokeballs y entró al centro pokemon para sentarse en la cafetería. Mientras se tomaba un zumo de bayas, se preguntaba si Robin se recuperará lo suficientemente rápido como para participar en la Liga Pokémon. Obviamente le gustaría que así fuera, pero la salud de su pokémon va por delante y no le importa si tiene que capturar un pokémon a último momento o afrontarla con un equipo de cinco.

Mientras se preguntaba qué estaría haciendo Tinkle, alguien entró al centro pokémon y se sorprendió por su presencia.

Valeria: ¿Victor? ¿Qué haces aquí?

Victor: ¡Hola Valeria! ¿Cómo te va en la guardería?

Valeria: Pues, ni mejor ni peor.

???: H-Hola...

Victor reconoció su voz, era la chica encapuchada de Ciudad Pistón. Entonces no pudo ver su rostro, pero ahora puede observarlo por completo. Parecía tener dos o tres años menos que Victor, es decir, entre 11 y 12 años. Su pelo era de color azul y rojo, pero no se podía distinguir cual era el tintado o si los dos lo eran. Además, llevaba unas gafas redondas que resaltaba sus ojos grisáceos.

Victor: Hola. Tú debes ser la amiga de la que Valeria me habló.

???: - espera unos segundos para después asentir - Yo soy Noa, e-encantada.

Victor: No te pongas nerviosa, ya nos conocemos de hace un tiempo.

Valeria: Déjala, es algo tímida, pero no es mala chica.

Noa: No hables como si no estuviera aquí.

Valeria: Como puedes ver, a veces se enfurece rápido.

Noa: Lo has vuelto a hacer.

Victor: A todo esto. ¿Qué hacéis aquí?

Valeria: Queríamos ver tu combate contra Roy, además de hablar sobre... tú ya sabes que.

Victor: ¿Por qué habéis venido tan pronto? Aún queda más de una semana para mi combate.

Noa: Eso mismo le dije yo.

Valeria: Bueno, de uno de los huevos sin dueño salió un pokémon que habita por los alrededores y no iva a dar más viajes de la cuenta.

Victor: Entiendo.

Noa: ¿Y tú? Se supone que deberías de estar en Pueblo Crampón.

Victor: - suspiro - Surgió un problema y tuve que venir a que atendieran a mi pokémon.

Valeria: - asustada - ¿Está bien?

Victor: La enfermera Joy lo está tratando, así que probablemente ya esté mejorando.

Noa: Parece que tú tampoco saliste ileso - señalando al brazo vendado de Victor.

Victor: ¿Esto? No es nada. Solo es que me golpearon unos pedacitos de cristal.

Noa: ¿Qué carajos estabas haciendo?

Victor: Digamos que no fui muy bien recibido en Crampón.

Noa: Ya veo... ¿Les habías hecho algo?

Victor: ¿Por quién me tomas? Claro que no. Simplemente no quieren que nadie que no sea Roxy complete el desafío de los gimnasios.

Noa: ¿Sabes? Yo vengo de Paldea, una región no muy lejana a aquí. En la escuela a la que iva pasaba algo parecido. Gente atacando a otra sin motivo que lo justifique...

Victor pudo ver como la chica apretaba los puños con fuerza.

Victor: Vaya, eso es una pena...

Noa: Sí...

Hubo un silencio que perduró más rato de lo que a Victor le hubiese gustado.

Valeria: - susurrándole a Noa - Oye. Su pokémon se encuentra muy malherido, deberías intentar animarlo, no decirle esa clase de cosas.

Noa: - también susurrando - No lo he dicho a malas, ¿sabes? Solo quería que supiera que el mundo está lleno de gente así.

Valeria: Sé que no lo decías a malas, pero por lo que he visto tiene una fuerte sentido de la justicia. Diciéndole todo eso solo vas a conseguir que se sienta impotente por no haber podido estar allí.

Ambas chicas siguieron susurrándose mientras Victor las miraba indeciso en si preguntar de que hablan o solo quedarse callado.

Joy: ¿Victor?

Victor: - levantándose y caminando deprisa hacia donde estaba la enfermera - ¿Sí?

Joy: Ten - entregándole la pokeball con Robin -. Ya está mucho mejor, pero necesitará reposo.

Victor: Comprendo...

Joy: No deberías sacarlo a combatir por el momento. Dentro de una semana, habla con cualquier otra enfermera para que te diga que debes hacer.

Victor: Bien, muchas gracias.

Joy: No me las des. Es mi trabajo.

Victor se dirigió hacia la puerta, aunque una voz lo detuvo antes de que la cruzara.

Valeria: ¿Ya te vas?

Victor: Sí, es que con las prisas me dejé a un pokémon allí. Otro día hablamos, ¿vale?

Valeria: Está bien.

Nuestro protagonista se marchó del centro pokémon en busca de un taxi volador con el que viajar a Crampón.

Valeria: ¿Ves? Te dije que era un buen chico.

Noa: Sí parece bastante amable, la verdad. Pero, no sé si será capaz de cumplir la misión.

Valeria: Que desconfiada que eres. El mismísimo Lionel lo recomendó para el desafío de los gimnasios, así que fuerza le sobra.

Noa: ...
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Aspirante ♀️3: Ese era mi último pokémon.

Gloria: Vaya, Paul. Parece que solo quedamos nosotros dos.

Paul: No vamos a poder mantenerlos aquí mucho rato más. Nuestros equipos están muy débiles...

Gloria: No podemos hacer más que esperar a Roxy.

Paul: Sí, sí que podemos hacer algo. Tus pokémon aún pueden pelear un poco más, ¿no?

Gloria: Por supuesto.

Paul: Bien. Ves a buscar la comisaría. Yo me quedo entreteniendolos.

Gloria: ¡¿Estás loco?! Nos superan por mucho en número. Ni siquiera tú podrás aguantar más de unos minutos.

Paul: Me las apañaré. Venga, dependemos de ti Gloria.

Gloria: - suspiro - Parece que no tengo otra opción. Ten, esta son las últimas pociones que me me quedan, úsalas bien.

Paul: Sí.

Gloria se derrotó a un par de Thievul con Ninjask y avanzó por el callejón. Intentaron perseguirla, pero el Cinderace de Paul se interpuso cerrandoles el paso.

Paul: - pensando - ¿Qué haría Lionel? ¿Qué haría Lionel? ¿Qué haría Lionel?

Paul se giró y vio a los aspirantes que lo acompañaban. Algunos temblaban de miedo, otros intentaban mantenerse firmes.

Paul: Tranquilos. Puede que no sea el entrenador más poderoso de Galar, ¡pero seré el escudo que os defienda! Confíad en mi.

Los aspirantes miraron a Paul y empezaron a sacar todos los objetos curativos que les quedaban para dárselos a Paul.

Paul: ¡Muchas gracias!

Paul: - pensando - Con esto aguantaré un rato más, pero no podré retenerlo eternamente. Gloria, Roxy, dependemos de vosotras para que nos ayudéis.

Nota del escritor: ¿Os a gustado este formato de dividir el capítulo en fragmentos con diferentes personajes? Sí es así, puede que lo vuelva a hacer. Oh, casi se me olvida. ¿Quién esperaba que la chica encapuchada fuera Noa, la de pokémon Escarlata/Púrpura? Dejé caer varias pistas, pero como no se ha mencionado muy a menudo, igual seguía siendo un misterio.