Advertencias: Spoilers del manga // Capítulos cortos // SenGen // Lenguaje vulgar // El color de pelo de Xeno será blanco, mientras que el de Stanley será rubio y el de Luna será rosa.

Era inusual, muy inusual y raro. Pero ahí estaba Senku Ishigami lejos de todos esperando a Luna, su novia a quien no amaba, pero ella a él sí. Caminaba lado a lado contando los segundos que esta chica tardaba en llegar, pensó que sería más rápido de lo que imaginaba, pero le parecía una espera eterna para su muerte. 

— "Saludarla, pedirle que se case contigo y te vas" — Se decía así mismo, repasando el corto plan que tenía, tampoco quería darle muchas vueltas al asunto.

— ¡Senku, ya llegué! — La chica venía agitada y más arreglada de lo normal, cosa que al científico le dio igual. — Es raro que tu me invites a caminar... o a cualquier otra cosa que no sea trabajar. — Se rió la chica, Senku se sentía mal, pero ya había dicho que se iría al infierno con el mentalista, así que esperaba que aquella promesa con el mentalista siguiera en pie después de lo que haría.

— No importa... — Se aclaro la garganta y sin mucho animo tomó de la mano a la chica frente a él. — ¿Te quieres casar conmigo? — Soltó sin nada de entusiasmo mientras que con su otra mano limpiaba su oído como si nada. Luna se congelo, incluso Senku tuvo que contar los segundos en los que su novia tardaba en despertar. — Si no quieres lo enti-

— ¡Esto no puede estar pasando! ¡Por supuesto que quiero, sí! — Chillo emocionada abrazándolo con fuerza. — ¡Seremos la primera pareja en casarnos en este mundo de piedra, acepto! 

A la chica poco pareció importarle que a Senku le faltara el anillo, arrodillarse o si quiera mostrar felicidad. Ella lo sentía por ambos cosa que era otra apuñalada al corazón frío de Senku, pero no lo suficientemente dolorosa como para cancelar el trato. 

— Sí, bueno. La boda será en un mes, hasta pronto. — Bostezo y comenzó a caminar hacía la fabrica o esa era su intención, pero Luna lo tomó nuevamente de la mano. 

— ¡Espera! no puedes simplemente soltar algo así e irte, ¿Un mes?, ¿Acaso estas tan desesperado por casarte conmigo que ya hasta pusiste fecha? — Paso sus brazos por los hombros del científico ahora con más confianza, la cercanía sorprendió al oji rubí, pues la chica no solía acercarse tanto sin apenarse en el proceso. 

— Solo quiero que esto acabe rápido... — Murmuro alejando su rostro aunque seguía atrapado en los brazos de la chica.

Detrás de ellos una tos los interrumpió, Senku empujo de inmediato a la pelirrosa y aclaro su garganta inquieto.

— ¿Interrumpo? — Gen cubría la sonrisa de sus labios con la manga de se traje, ambos se quedaron callados así que el mitad albino ahora molesto hizo un mohín y continuo con lo que iba a decir. — Francois terminó la comida, pero le diré a los demás que comerán solos. 

— ¡No! — Gritaron Luna y Senku al mismo tiempo, la chica se emociono y el científico sintió una terrible corriente recorrer su cuerpo por dicha sincronización, lo que menos quería era espantar a Gen. 

— Comeremos con los demás... Contigo. — Dijo Senku tratando de actuar normal, iba a caminar al lado de Gen hasta que la pelirrosa se interpuso entre ambos con una sonrisa.

— ¡Senku y yo tenemos un anuncio que darles a todos! — Le dijo a Gen.

— ¿De verdad? — El mentalista miro a Senku con duda y este solo pudo responderle con un suspiro derrotado. — No puedo esperar para escucharlo. 

Aquí era cuando todo se complicaba para el joven científico.

Senku nunca olvidara la reacción de Gen cuando Luna anuncio su compromiso delante de todos en la comida.

El mentalista quedo congelado, ambos de hecho. Se veían entre la multitud alegre y borrosa, Gen separaba sus labios en busca de algo, se notaba que no era una felicitación lo que quería decir en aquel momento y sin embargo lo hizo, Gen le sonrió a su amigo después de tragar pesadamente y ahogar sus sentimientos. Senku definitivamente supo que iría al infierno, pero solo.

— Senku-chan... — Murmuro Gen cuando se acerco a este. — Te... Yo te...

— Es solo... no — Sintió la mirada de Xeno sobre ellos y decidió callarse, esperando que Gen lo salvara con un par de palabras. — "Por favor di que me amas, solo dilo." — Pensaba Senku mirando de reojo a Xeno. Sintió la delgada mano de Gen tomar la suya, ambas manos lastimadas por tanto trabajo, pero aún así al joven científico le agradaba la sensación de ellas unidas. — ¿Tu me...?

— Te felicito.