Tras una hora de platica, Orgrim pondría al corriente a Ner'zhul y a los demás presentes.

Muchos estaban furiosos y consternados por todo lo que había ocurrido.

La traición de Gul'dan, la derrota en las tierras del norte.

Si los humanos y el resto de razas lograron hacerles frente y expulsarlos de sus tierras, lo más seguro es que ahora se encontraban preparando para movilisar a sus ejércitos y marchar al sur para recuperar las tierras que ellos habían conquistado durante la primera guerra.

Mientras muchos comenzaban a parlotear y entrar en la desesperación de que los humanos se encontraban en camino.

Ner'zhul solo se limitó a observar la gran fogata que había en el centro.

Orgrim por otro lado los callaria a todos con un golpe de su martillo contra el suelo.

¡¡¡Basta ya!!! ¡Hablan como si esta guerra la hemos perdido!

No hemos perdido, fuimos derrotados, si, pero eso no significa que la Horda, que yo me haya rendido ante los humanos.

Podemos ganar esta guerra, aun tenemos esa posibilidad.

(Esa última frase captó la atención de Ner'zhul) ¿Qué? ¿qué planeas hacer exactamente?

(Orgrim lo miraría) Todavía podemos contar con los clanes restantes que permanecieron en Draenor, si sus fuerzas se suman a las nuestras, entonces juntos a nuestros aliados, esta guerra sin duda se inclinará a nuestro favor (le explicó Orgrim)

Y sobre la energía que necesitamos para abrir el portal y dejar que el resto de nuestros compañeros cruce, ya fue solucionado, sin embargo para que esto funcione mucho mejor, con tu ayuda, podemos hacer que la entrada se mantenga abierta por un lapso de tiempo indefinido (comentó Gorefiend a la ves que miraba a Ner'zhul)

Y como planeas hacer eso, sin la ayuda de Gul'dan y su oscura magia??? (Se pregunto Ner'zhul)

Oh de hecho que contaremos con la ayuda de ese traidor para nuestro fin jajaja (comenzó a reírse macabramente)

Acto después, miraría a Zuluhed a lo cual este se acercaría y de un saco, sacaría un cráneo orco.

Eso es... _ si es lo que estas pensando, es el cráneo de tu aprendiz (lo tomaría de las manos de Zuluhed)

Tanto era corrupción, tan fuerte era su apego a esa magia oscura que está misma quedó impregnada hasta en sus hueso.

Si logramos usar su poder, podremos crear una conexión con Azeroth y el portal podrá mantenerse abierto todo el tiempo que queramos.

Esa cosa puede hacer eso??? (Se pregunto Orgrim) _ (Gorefiend lo miro) es su misma magia, debería hacerlo (respondió) _ entonces por que no usaste su poder, en ves de usar la energía vital de seres vivos para abrir el portal???

Por qué es un poder que está fuera de mi alcance, como podría utilizar algo que no podría controlar???

Fue por eso que decidi irme por lo seguro y que en teoría para mi, podría ser posible para abrir el portal.

Sin embargo (Miraría a Ner'zhul) tal ves haya otro que podría usar su poder para nuestro beneficio.

Quieres que yo use esa cosa??? (Cuestiono Ner'zhul) _ en antaño fuiste y creo aun que eres el chaman más poderoso y capaz para hacerlo.

Con tu ayuda, se que será posible (le entregaria el cráneo)

Ner'zhul observaria el cráneo de su aprendiz y en sus ojos dio la impresión de que el chamán consideraba esa posibilidad por un instante, pero entonces hizo un gesto de negación con la cabeza y lo apartaria bruscamente de su vista con un manotazo.

¿Y eso de qué serviría? La Alianza es un enemigo demasiado poderoso.

La Horda nunca ganará. Es como si nuestra gente ya hubiera muerto. Solo nos resta saber cómo será esa muerte.

Una vez más, se tocó con los dedos la calavera pintada sobre su cara, era como si sus dedos tuvieran una voluntad propia.

Su debilidad repugnaba a Gorefiend. Resultaba muy difícil creer que aquel despojo obsesionado con la muerte, tanto suya como la de otros, hubiera sido tan reverenciado en su día. Y que, desgraciadamente, todavía fuera tan necesario.

La muerte no es la única opción que los aguarda si utilizamos el portal (rebatió Gorefiend, haciendo acopio de mucha paciencia)

Y aun si pudiera usar su poder, ¿¡que te hace pensar que quisiera emplear esa misma magia que corrompió a nuestro pueblo, que condenó a nuestro mundo!?

Aun en la muerte de ese traidor, nos vemos obligados a usar esa magia para nuestra supervivencia... tan bajo hemos caído??? Tan dependientes nos hemos vuelto de lo que nos condenó???

Lo mejor es aceptar nuestro destino y morir junto a nuestro mundo, ya que somos los causantes de su marchitamiento.

No merecemos una segunda oportunidad (con eso dicho Ner'zhul se dispondría a dejar el lugar, hasta que escucharía la voz de Orgrim)

¡Me niego!

¡me niego a aceptar ver a nuestro pueblo caer en esta tierra agonizante!

Es cierto que somos la causa de la destrucción de Draenor, pero eso fue por que fuimos utilizados por Gul'dan y sus amos oscuros.

Aun cuando muchos vimos la verdad sobre sus actos y verdaderas motivaciones personales, decidimos seguirlo, incluyéndome.

Pero se me dio la oportunidad de librarnos de su control, mate a Blackhand y a su consejo de las sombras y decidi continuar con la guerra que Gul'dan había comenzado por sus propias ambiciones.

Yo en cambio lucho por el bien de nuestra gente, para darles un hogar y una tierra nueva y poder comenzar de nuevo.

Tengo esa responsabilidad en mis manos, para volver a nuestro pueblo a lo que era antes, de volver a los tiempos que todos nosotros recordamos con pesar.

Y si tu, te niegas a eso, entonces te vuelves mi enemigo, ya que al igual que Gul'dan, nos estas condenando a todos a una muerte lenta y agonizante en esta tierra (le apuntaría con su martillo)

Ner'zhul pensaría en sus palabras y observaria el rostro de sus seguidores, cansados y demacrado por la hambruna que azotaba su mundo.

Y luego pensaría en los más pequeños que morían de hambre y sed.

Ellos no tenían la culpa de los errores que cometieron los adultos.

Ellos no merecían este cruel destino marcado por la sangre.

Si un futuro merecía su pueblo, era para aquellos pequeños que nada tuvieron que ver con su corrupción.

(Suspiro) bien, lo entiendo, te ayudare en lo que necesites, pero solo lo hago para asegurar la supervivencia de aquellos que no tuvieron nada que ver con nuestros errores.

Orgrim reflejaría una sonrisa y le extendería una mano, acto que Ner'zhul repetiría, estrechando sus manos y pactando así una alianza.

Mientras tanto en los reinos del norte, varias naciones se encontraban preparando para la guerra.

Forjando armas y armaduras, construyendo máquinas de guerra así como reclutar nuevos soldados para engrosar sus filas.

Por otro lado en Alterac, la situación en el reino pasaba por un período inestable en la que las demás ciudades y las respectivas casas que gobernaban esos dominios se hicieron presentes para exigir una audiencia con el rey.

Y aunque se les fue informado sobre su traición, aún exigían su liberación.

Algo que más exigían, era la expulsión de los Whitewolf quienes habían vuelto del exilio que el rey Aiden había impuesto sobre ellos.

Aliden tenía que lidiar con las múltiples cartas y mensajeros que llegaban de los 3 casas.

Como futuro rey debía apaciguar estos reclamos.

Por otro lado más al norte, en el bosque susurrante.

Alleria pasaba sus días en la pequeña comunidad de los hijos del sol.

Tal como le habían prometido, todos los habitantes le ofrecerían la mayor hospitalidad.

Alleria era consciente de que su pueblo no miraba con buenos ojos a los semi elfos, acto que a ella no le gustaba para nada y menos ahora debido a su condición.

Pensaba que los semi elfo tendrían rencores hacia ellos, y que el buen trato que tenía, por parte de ellos era forzado. Sin embargo con el pasar de los días, se dio cuenta que ellos no tenían odio alguno contra ella o con los de su raza.

Al menos ya no era así, actualmente, lo único que ahora les importaba, era el bienestar de los suyos y la prevalecion de su nuevo hogar.

Hogar que Alleria comenzó a apreciar también.

Algo que notaría, era que nadie preguntaba sobre su embarazo, en concreto, sobre quien era el padre del niño que esperaba.

No sabía si eso era algo bueno o malo, hasta que un día Descubriría el por qué.

Y la razón era más significativa de lo que pensaba.

Un día se encontraba platicando con Abelin y por curiosidad, preguntó sobre la razón del por qué no preguntaban sobre su vida.

A lo que Abelin respondería que era vida de cada quien.

Muchos en la Aldea provenían de lugares y entornos diferentes, cada uno había vivido a su manera, teniendo experiencias buenas y malas, sin embargo era algo propio de ellos por lo que no tenían derecho a saber sobre lo que vivieron.

La aldea era un nuevo comienzo, una nueva vida, para comenzar desde cero.

Todo lo que vivieron afuera ya no importaba aquí.

Pero si esa persona no le importaba compartir su pasado, entonces escuchariamos lo que tenía que decir.

Pero no es necesario que toda la aldea lo sepa, si formas lazos de amistad o de amor aquí, puedes compartir esa historia con ellos.

Si tu quieres compartir tu historia conmigo y sobre tu bebe, escucharé y es algo que mantendré para mi misma si es lo que deseas.

Y agradeceré tu confianza en mi por contarme, ya que eso significa que me tienes en alta estima (reflejaría una ligera sonrisa)

Con eso dicho, los días siguieron pasando y el embarazo de Alleria comenzó a hacerse más visible.

Mientras tanto volviendo con Alterac.

Tras el retorno de Beve hace unos días.

Beve junto a su hermano comenzarían a trabajar juntos para solucionar los problemas del reino.

Empezando a realizar una gran reunión en la ciudad capital donde se reunirian las demás casas nobles, para discutir y solucionar sus disputas.

Así tras recibir el mensaje, los líderes de cada familia se pondrían en marcha.

Al ser un problema interno, no solicito la intervención de las demás naciones, concretamente de Lordaeron.

Para Beve, era un asunto del mismo reino de Alterac.

Problemas que tanto ella como su hermano debían solucionar y limpiar el desastre que su padre había cometido.

Fue así que el día de la reunión llegó y las 3 casas llegaron a la ciudad capital.

Todos se encontraban en la sala del trono.

Bien ya que estamos todos, comencemos con esto de una ves (Habló un tipo gordo quien miraba con indiferencia a todos)

Aun no, aun falta alguien (respondió Beve)

Jum... parece que la princesa perdió algo de su visión, ya que no se fijo bien, que estamos todos presentes (Habló una mujer que no era ni joven, pero tampoco muy vieja, con su abanico en mano que no dejaba de agitar como si el frío en esta sala fuera algo inexistente para ella)

Mi visión está perfectamente bien, Condesa, en cambio le pediría que dejara de agitar su abanico, con tanto aleteo y con el frío que hace, hará que nos congelemos todos aquí.

Esto causaría algunas carcajadas entre los presentes.

Jum... Insolente (dijo en voz baja, a la ves que paraba su abaniqueo y miraba hacia otra dirección)

En eso las puertas serían abiertas y ingresaría un hombre mayor acompañado de otros 2 hombres.

Los presentes reconocerían a aquel hombre y en sus ojos se podía ver la ira.

Lamento mi tardanza, tuve algunos inconvenientes en el camino (Habló aquel hombre) _ no se preocupe Lord Robert, me alegra tenerlo presente con nosotros.

Que, que hace ese hombre aquí??? (Cuestiono aquel hombre gordo)

(Robert lo miraría) ah, pero si es usted Canciller Wilkin, veo que creciste desde la últimas ves que nos vimos y veo que no en altura tal parece.

(Esto enojaria a Wilkin quien rechinaria los dientes al escuchar su comentario)

Jaja, bueno, ahora si estamos todos, demos comienzo a la reunión de las 5 casas gobernantes de Alterac (comentó Beve)

Un saludo para las 5 primero personas que dejaron su estrella en el segundo capitulo del Vol.7

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