Un grupo de 3 pequeños barcos de la Horda surcaban el extenso mar hacia una isla desconocida para los tripulantes orcos, excepto para los trolls que los acompañaban.

Entre ellos Za'Thur quien miraba el horizonte.

Entre los que se encontraban surcando los mares, estaban los hermanos Blackhand quienes comandaban uno de los navíos.

Ambos recibieron la orden de acompañar al joven troll en su viaje hacia aquellas tierras lejanas donde habitaban sus posibles aliados.

El viaje había durado unos días, lo que eventualmente causaría cierto estrés en los hermanos.

Ahora lo que más deseaban, era pisar tierra y alejarse del mar por lo menos por unos días.

Main propuso realizar este viaje en los dirigibles goblins, pero estos por órdenes de Doomhammer, serían llevados todos a mantenimiento.

Ambos hermanos se enterarían que los aliados goblins se habían vuelto esclavos de la Horda por órdenes de Doomhammer tras matar a su líder.

Sabían sus razones por el cual tomo esta acción y era algo que no les importaba.

Finalmente tras unas horas, Za'Thur y compañía pudieron sentir el aire diferente y la corriente cambiaría hacia su dirección contraria, como si lo que tuvieran al frente, los estuviera expulsando devuelta por donde vinieron.

Pronto estuvieron envueltos en una densa niebla, Za'Thur entonces daría un salto hacia el mástil del barco y trepar a la cima.

(Olfateo) humm... estamos cerca (olfateo) puedo sentirlo.

Rend observaria a aquel troll colgado sobre el mástil como un mono.

Baa... espero que ese troll no nos esté llevando a la nada (comentó para si mismo)

(Olfateo) humm... ya falta poco (Se giraria para ver a Rend) ¡hey tu el de las espadas! ¡dile a los tuyos que se mantengan alerta! (Se giraria para ver al otro barco) ¡igualmente para ti, hazles saber que...

De pronto algo llamaría su atención y pondría su vista al frente.

(Podia ver una luz parpadeante) que es eso???

En eso, tanto Rend como Maim también pudieron ver aquella luz parpadeante.

De pronto aquella luz los envolveria en su resplandor, cegando a todos los que estuvieran cerca, pero algo más haría esa extraña luz a parte de cegarlos con su resplandor.

Tras algunos minutos lograrían a volver a habrír sus ojos.

Que... que demonios fue eso??? (Se pregunto Rend quien se frotaba los ojos)

Maldita sea... esa luz casi me deja ciego (Habló casi gruñendo Maim)

Al recuperar casi por completo la visión.

Se escucharon múltiples pasos sobre la cubierta de los 3 barcos y antes de que pudieran reaccionar.

Todos serian neutralizados con suma facilidad.

Maim y Rend poco pudieron hacer, al sentir que eran sujetados y estrellados contra el piso.

Za'Thur quien aún se encontraba sobre el mástil, escucharía los estruendos de abajo y tras recuperar su visión, vería que todos habían sido neutralizados por multiples criaturas altas que portaban máscaras.

Za'Thur se daría cuenta que a los extremos de los barcos, se hallaban arqueros cuya atención estaban centrados en el, apuntándole con sus flechas, preparados para disparar por si el hacia algo.

Humm... (Za'Thur observaria a todas las direcciones, viendo que estaban completamente rodeados, por lo que rendirse, era la mejor opción si quería completar su objetivo)

Za'Thur bajaría con cuidado del mástil hasta quedar al merced de aquellos guerreros que lo sujetaron y ataron sus manos.

Uno de ellos lo vería a la cara y pese a su máscara, podía sentir sus ojos agudos puestos en el.

En eso su atención sería puesto en otra cosa, observaria el colgante de Za'Thur y lo tomaría entre sus manos.

Amani (dijo entre susurros)

En eso, miraría a los otros trolls que los acompañaban y también observaria a aquellas criaturas pieles verdes con las que viajaban.

Aquel guerrero le hablaría en su lengua nativa "Zandali" del cual Za'Thur también hablaría.

Ambos solo intercambiarian algunas palabras hasta que finalmente aquel guerrero haría un sonido extraño con su voca, llamando la atención de sus guerreros quienes rápidamente comenzaron a movilizarse y a tomar control de los barcos.

Posteriormente otras embarcaciones rodearon a los 3 barcos de la Horda y los conducieron hacia lo más profundo de aquella densa niebla.

Hasta que tras algunos minutos llegarían a lo que parecía ser una isla.

Tras estar más cerca, efectivamente era una isla.

Aquel guerrero quien parecía ser el líder de sus captores, miraría a Za'Thur y le diría algunas palabras en su lengua nativa.

Za'Thur daría un leve asentimiento en lo que aquel guerrero volvía su vista al frente.

Tras tocar tierra firme, un grupo de no más de 20 guerreros, bajaron a todos los trolls que acompañaban a los orcos, pero dejando a estos bajo la vigilancia del resto de guerreros que se habían quedado en sus barcos.

Za'Thur miraría brevemente hacia atrás, para luego seguir adelante.

Por otro lado tanto Rend como Maim, no les gustaba el hecho de sentirse atrapados y a la espera de quien sabe que.

Aun así, sabían que tampoco podían hacer algo.

Si esos guerreros pudieron doblegarlos tan fácil, quiere decir que eran mucho más fuertes de lo lo aparentaban ser.

A parte de ser más altos que los trolls que ya conocían, su complexión era algo robusta, a parte de pararse de una forma más erguida. A diferencia del resto de trolls que caminaban encorvados.

Las horas pasaron y tanto Rend como Maim ya estaban cansados de esperar, al igual que el resto de los suyos.

Por otro lado, aquellos guerreros seguían inmutables.

Finalmente algo llamaría la atención de esos guerreros que los hizo girar hacia la isla.

En eso escucharia un silbido que haría que aquellos guerreros bajaran su guardia y liberaran a sus prisioneros.

Cosa que los tomo por sorpresa tras ver que ahora los dejaban en libertad.

Rend y Maim se pusieron de pie y miraron la playa donde estaban reunidos todos esos guerreros.

Y entre la maleza, apareceria Za'Thur junto al resto de los suyos, pero a diferencia de como fue llevado atado de manos, esta ves regresaba sin ataduras y en libertad.

A paso firme se dirigiría al barco que era comandado por Rend.

(Al estar parado frente a él, procedería a hablar) El rey permitirá una audiencia con el jefe de guerra de la Horda.

Tu y tu hermano deben volver con su jefe de guerra y traerlo a la isla.

Ehh??? Ósea que esto trolls son de los que hablabas??? (Se pregunto Rend) _ el grupo que nos interceptaron, solo eran una pequeña parte de su ejército que se encarga de vigilar las fronteras marítimas de su territorio.

Pero en fin, cumplí con mi parte, ahora todo depende de lo que tu jefe de guerra haga o diga ante el rey de los Zandalari.

Humm... y tu??? (Se pregunto Rend)_ yo no puedo ir con ustedes, esa es una de las condiciones que el rey impuso para que todos ustedes vuelvan (respondió Za'Thur)

Humm... bien, pues no hay nada más que hacer aquí (comentó Rend a la ves que se daba media vuelta)

Así tras la liberación de todos los orcos, Rend les daría la orden de volver al continente, cosa que Maim no entendía lo que estaba pasando.

Y al observar que Za'Thur y el resto de los suyos se habían quedado, estaba confuso de la situación actual, sin embargo decidiría seguir a su hermano y saber de él lo que estaba sucediendo.

Poco a poco los barcos de la Horda se iban alejando de la costa, escoltados por los barcos de los Zandalari hasta que salieran de la densa niebla.

Y los barcos de los Zandalari detuvieron su andar y dieron vuelta de nuevo hacia su isla.

Por otro lado Maim acercaría su barco al de su hermano y tomando una soga, se columpiaria hacia la cubierta del otro barco.

Una ves abordo, se dirigiría a donde su hermano para que le informara todo lo que estaba sucediendo.

Y tras compartir los acontecimientos ocurridos Maim sólo gruñiria del enojo ya que primero fueron traídos hasta ahí como escoltas de ese troll y ahora volvían como meros mensajeros.

Es más, ni siquiera habían podido poner un pie en tierra firme y los habían mantenido en sus barcos hasta que Za'Thur terminara lo que estaba haciendo con el supuesto rey de esa isla oculta.

Algo que Rend también pensaba, pero no había de otra, era su trabajo y esperaba paciente que pronto volvería al campo de batalla donde verdaderamente ese era su lugar y no hacer más este tipo de misiones que poca gracia tenían para el.

Han pasado algunas semanas desde que Alleria se instalo en el pueblo y su nueva vida, había sido muy agradable.

Y tal como habías prometido, irías para visitarla para ver como iba su embarazo.

Y en cada visita podías ver el notorio crecimiento de su vientre.

Aun faltaba tiempo para el parto, pero aún no podías creer que dentro de unos meses serias padre del pequeño que estaba creciendo en su interior.

Cada ves que volvías a tus labores con el reino, era como si siguieras con tu vida normal, pero al volver aquí, te dabas cuenta que tu vida ya no era la misma.

Habían muchas emociones y pensamientos rondando tu mente, tanto buenas, pero en su mayoría malas.

Una emoción era el miedo, un pensamiento, era sobre como llevarías la situación del niño.

Lo que hiciste, lo que ocacionaste. No te referías sobre interferir con el canon original de Alleria.

Eso ya te daba igual.

El problema era sobre la identidad del niño.

Como hijo mayor y heredero al trono de Lordaeron, el hecho ahora era que esperabas un hijo.

Lo que en consecuencia, sería un gran problema a futuro.

Si la gente se enterara de esto, no importaba las cosas que hiciste y las hazañas que lograste durante la guerra, la gente no veria con buenos ojos a tu hijo y menos si se trataba un mestizo.

Habías visto con tus propios ojos el rechazo y el repudio que tenían sobre ellos, algo que te desagradaba de la gente.

Te daba igual si pensaran mil cosas sobre ti, pero no permitirías que tu hijo viviera todo ese sufrimiento, por culpa de su sangre.

Por fortuna, ahora tenía un lugar en donde podría vivir tranquilamente y con gente que lo trataría con naturalidad.

Alleria también era consciente sobre esta discriminación que sufrían los mestizo, algo que no compartía con su pueblo.

Y ahora que esperaba un niño cuya sangre era humana y también elfo, jamás dejaría que sufriera el rechazo de su gente.

Finalmente tras volver devuelta a Lordaeron, seguirías con tu trabajo cotidiano.

Uno de esos trabajos era sobre la gestión y administración de la nueva ciudad *Roma*

La gran ciudad fortaleza, construida para brindar asilo a los refugiados de Ventormenta y a cualquiera en busca de un hogar, ya sea permanente o temporal.

Roma era hogar para todos.

Así también la gran edificación en el centro de la ciudad sería la sede principal de la Orden de Caballeros de la Sombra de Lordaeron y donde se llevaba a cabo gran parte de las reuniones de la Orden, pero ahora se llevaban reuniones de todo tipo e incluia a las demás órdenes militares y también políticas.

Ya sea por su estado o comodidad del palacio, todos llevaban sus reuniones ahí.

Y ahora mismo te encontrabas en una reunión donde estaban reunidos todos los paladines de la Orden de la mano de Plata junto al gran Arzobispo Faol.

Dicha reunión era para hablar sobre la gran amenaza que representaban los orcos rezagados que aún permanecían libres en las tierras del norte.

Se habían reportado ataques a las carabanas tanto del ejército como el de los pobladores locales.

La seguridad del pueblo era primordial, por lo que cada uno sería encargado con la tarea de dar caza a los orcos.

Ya sea capturarlo o bien matarlos si no había de otra.

Aun que algunos estaban en contra de dejarlos vivir y que la mejor opción era eliminarlos a todos, tanto Uther como tu se opusieron a esa idea.

Apoyados por Turalyon quien pese a su odio hacia los orcos, no podía permitirse actuar como ellos.

Faol los apoyaría en su objeción, por lo que al ser la mayoría, los que estaban en contra, aceptarían los términos en los que debían cumplir su tarea.

Dar piedad antes de matar.

Así la reunión sería terminada tras dar las misiones a cada uno.

Sin embargo estabas excluido de esto debido a tus otras tareas.

Faol no quería sobrecargarte de más trabajo, ya que sabía bien tus otras responsabilidades.

Tu agradecerías esto y así sin más volverías a tus aposentos, pero en el camino serias detenido por Turalyon quien quería hablar contigo.

Tu te detendrías al verlo acercarse hacia ti.

Magnus, espera un momento, me gustaría hablar contigo sobre algo.

Humm... Turalyon, si claro, sobre que quieres hablar??? Es acaso algo relacionado con las campañas de búsqueda de los orcos??? (Pregunte)

Bueno... no, no se trata sobre eso (respondió) _ humm... entonces de que se trata???

Pues veras... escuche que Alleria Windrunner se unió a tu orden, es eso verdad???

Ah... si, ella se unió a mi orden, que hay con ella??? (Pregunte) _ no nada, solo curiosidad, es que esperaba volver a verla y hablar con ella.

Me gustaría aclarar las cosas con ella y disculparme por lo que paso en Quel'Thalas... (Suspiro) sin embargo, creo que mientras más intento hablar explicar las cosas con ella, más siento que se distancia de mi y su odio hacia mi, aumenta más.

Sinceramente no se que más hacer para que ella pudiera escucharme y entender... o más bien creo que si lo entiende, pero esta molesta por que falle a mi promesa...

Humm... (lo mirarias inexpresivo) _ oh, lo siento, creo que aún eres muy joven para entender lo que pasó entre ella y yo jaja y tampoco quiero molestarte contándote mi problema (suspiro) da igual, por favor ten esto (te entregaria una carta)

Tu la tomarías.

Por favor dáselo cuando la veas, solo eso te pido, podrías hacerlo Magnus???

Humm... (Suspiro) bien, se lo daré cuando la vea, sin embargo será cosa suya si decide no aceptar tu carta o decide tirarla o romperla (comente)

Jaja, espero que no lo haga, al menos espero que la lea siquiera (respondió Turalyon)

Humm... bueno, si eso es todo, me retiro_ si y Magnus, gracias por ayudarme.

Humm... claro (respondí a la ves que me giraba y continuaba con mi camino)

Al pasar algunos días, me prepararía para visitar a Alleria en el pueblo.

Y como siempre, mi primer destino era la base costera de *Alta Marea*

Tras llegar, me informarian que algunas cartas habían llegado por lo que pediría que me las trajeran.

Dichas cartas provenían de Quel'Thalas, eran cartas enviadas por la familia de Alleria quienes seguramente escribían para preguntar sobre cómo estaba y lo que estaba haciendo, así como otras cosas seguramente.

En total eran 5 cartas, por lo que podías deducir que cada una era perteneciente a un miembro de su familia.

Tras 24 horas retomarias tu viaje hacia el bosque susurrante.

Para los habitantes del pueblo, les agradaba el hecho que los visitaras con frecuencia, pero también se preguntaban la razón de tus visitas.

Más que nada observaban que pasabas el tiempo con la mujer elfa que trajiste contigo hace semanas.

Lo que ocasionaría ciertos rumores sobre la paternidad del bebé que esperaba.

Era lo más lógico después de todo, por que si no el príncipe estaría empeñado en cuidarla y ver como andaba.

Después de todo la razón de sus visitas era ella.

Al llegar a su casa, serias resivido por Alleria quien te abrazaría y te daría un beso.

Beso que corresponderias. Pese a todo lo que sucedió, pese a tus intentos por alejarla. Ya todo eso no importaba, sin embargo, aún que habías aceptado estos cambios, lastimosamente jamás podrías corresponder a sus sentimientos y establecer una relación marital con ella.

Cosa que Alleria sabía y lo entendía, pero su confort, era que aún así estabas con ella y velando por su bienestar.

Tras una breve comida, le entregarias las cartas enviadas por su familia a lo que Alleria las recibiría con una sonrisa.

Podias ver lo feliz que estaba al saber que su familia le escribió.

Sin embargo algo dudoso estabas en si debías entregarle la carta que Turalyon te había encomendado, pero al final también le harías saber sobre dicha carta.

Alleria, hay otra carta más a parte de las que te envio tu familia (le entregaria la carta sobre la mesa)

(Alleria lo tomaría curiosa al verte entregarla al último) de quien es esta carta??? (Se pregunto) _ Turalyon (respondiste) el me pidió que te la entregará.

Humm...

Alleria observaria la carta por un momento y aún que podias ver cierto disgusto en su rostro, lo que te dio curiosidad por saber, de que había pasado entre ellos para que Alleria ya no quisiera verlo.

¿Qué decides hacer?

A) preguntar la razón de su molestia con Turalyon.

B) ignorar ese tema con ella.

El capítulo será actualizado conforme a la opción con mayor número de votos

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(Tu te sentarias en una silla y tomarías un sorbo del baso de agua que estaba sobre la mesa) puedo saber que paso entre Turalyon y tu??? (Pregunte)

(Alleria te miraría tras escucharte) es complicado... ni si quiera se si es ideal mencionarte esto... _ hubo algo acaso??? (Pregunte)

Que insinúas??? (Cuestino Alleria alzando ligeramente la voz) _ nada, no estoy insinuando nada, pero si te comportas así, puedo pensar que si hubo algo entre ustedes dos para que decidieras estar enojada con el (respondí a la ves que tomaba otro sorbo de agua) En fin, si no quieres contarme, no insistire...

¡no hubo nada y no paso nada! (Respondió Alleria enojada)_ entonces por que actúas tan distante con el, si no paso nada entre ustedes dos??? (Cuestione)

En serio quieres hablar de eso??? _ no, si no quieres (respondi) eres libre de hablar si lo deseas, pero si no quieres contarme nada, entonces dejemos el tema hasta aquí.

Ambos se quedarían en silencio por unos segundos hasta que tomarías nuevamente la palabra.

Bien, creo que si es mejor que no hablemos más sobre el asunto, no ganamos nada con discutir sobre esto, lo que menos quiero ahora es que te estreces... *a parte creo que no fue buena idea entregarte esa carta* (comente eso último en mi mente)

Volverías a tomar un sorbo de agua de tu vaso.

Ambos se quedarian en silencio una ves más.

Alleria al verte inexpresivo y con la mirada hacia otro lado, pensó que tal ves estabas molesto e incluso creyó que estabas celoso.

Por lo que tomaría tus manos.

Magnus, mírame, no paso nada entre Turalyon y yo, por favor, te pido que no pienses en eso.

Ehh??? (Confundido) No estoy molesto Alleria, yo solo... _ (Alleria te tomaría del rostro y haría que la miraras a la cara) no quiero que estés molesto por cosas que no ocurrieron.

Todo lo que ocurrió, todo lo que pasó entre nosotros, fuiste el único con quien tuve todos esos momentos únicos de mi vida, incluso ahora (Se tocaría el vientre con una de sus manos)

(Tu la mirarias inexpresivo ya que no sabias que cara poner ante tales declaraciones) Creo que tienes una idea equivocada... (tomarías su mano y la apartarias de tu rostro)

(Suspiro) Alleria no estoy enojado, es solo que lo que menos quiero ahora, es que pienses en cosas que te generen estrés o que te hagan pensar demasiado, ahora mismo tu embarazo es más importante que quiero que cada día sea un día de paz, alejado de todo el conflicto del exterior y malos pensamientos.

Y al entregarte esa carta, cause lo que quería evitar. Eso podría decirse que es mi molestia en este momento.

Pero en fin, las cosas están hechas, si hay asuntos de las cuales, debes encargarte, temas de las cuales quieres hablar, solo pido que sean después del parto (me arrodillaria y pondría una de mis manos en su vientre) mientras tanto, quiero que te cuides, si tu estas bien, el bebé también lo estará. Si???

Alleria se sentiría conmovida por tus ultimas palabras, por lo que daría un asentimiento.

Al momento de ponerte de pie, Alleria tomaría tus manos y las entrelazaria.

Tu observarias su rostro y la calida sonrisa que te mostraba.

Su cabello largo y dorado, sus ojos azules y brillantes, llenos de vida.

Así como la suavidad y calidez de su piel al pasar una de tus manos por su rostro.

Esa sensación de culpa y enojo que sentías al no poder evitar caer ante sus encantos, se hacían cada ves más distantes y ahora solo sentías cierta alegría al tenerla a tu lado.

Por otro lado en Alterac, tras la última reunión entre las casas nobles de Alterac.

Beve junto al resto que decidió mantenerse leales a la corona, discutian ahora de como se llevaría el gobierno de Alterac.

Con el regreso al poder político de la casa de los Whitewolf liderados por Robert Whitewolf.

Exigía el regreso de las antiguas tierras que pertenecían a su familia y que se les fue arrebatado tras su exilio.

Beve respetaría los acuerdos que había establecido con su abuelo, por lo que dichas tierras serían devueltas, sin embargo, sólo podría ceder las tierras que su propia familia había reclamado, pero el resto estaba dividido entre las demás casas nobles y 2 de ellas habían desertado y no cederian parte de ese territorio por las buenas.

Aliden por otro lado observaria las acciones de su hermana y de como la mayoría pedían su aprobación.

Estaba claro que ella tenía más voz que el, en lo que decisiones se referían. Sin embargo era entendible.

Desde que su padre había decidido traicionar a la Alianza, Beve actuó de inmediato y juntó aliados con las cuales derrotar a su padre.

Formó alianzas y pactos, además de hacerles jurar lealtad a su orden.

El en cambio no había hecho nada y no tenía mando sobre nadie.

Aun cuando había luchado por su reino y su pueblo contra la Horda, nadie lo tenía en cuenta.

Incluso cuando deseaba exigir y reclamar las acciones que estaba tomando su hermana ahora, no se atrevía a hablar.

Ahora mismo solo era una sombra, distante bajo los pies de su hermana menor. Tal como esos nobles desertores dijeron ese día.

Con la cabeza gacha, vería lo importente que se sentía.

Todo esto observado por aquella mujer pelinegra y ojos violetas, quien observaria al afligido príncipe.

Esto reflejaría una ligera sonrisa en su rostro como si su angustia de cierto modo le parecía divertido, sin embargo, otros pensamientos más pasaron por su mente.

Llegada la noche, el joven príncipe se encontraba caminando por los pasillos del castillo, aun pensativo por lo inútil que se sentía.

Hasta que se quedaria viendo el cielo nocturno por un momento.

Tras contemplar las estrellas, escucharía unos pasos aproximándose hacia el y al mirar a aquella dirección donde provenía el sonido de aquello pasos, vería a la joven Katrana Prestor acercarse.

Oh que sorpresa, no esperaba encontrarlo por estos pasillos alteza (Habló aquella mujer con una voz suave y melodiosa)

Lady Katrana, que hace aquí hasta estas horas de la noche??? (Se pregunto el joven príncipe) _ (La joven daría unos pequeños pasos hasta estar cerca del príncipe) pues solo dando un breve paseo, lastimosamente no logro conseguir dormir esta noche. Y usted???

jaja, pues estoy igual, no logro dormir... (Aliden volvería a mirar el cielo nocturno)

Humm... lo veo algo decaído majestad, esta usted bien??? _ ehh??? No, estoy bien, estoy perfectamente bien, que acaso no lo parezco (Aliden daría una sonrisa forzada) _ humm... pues no, no lo creo (respondió la joven) puedo ver más haya de lo que una persona común solo puede ver y en usted veo que algo lo inquieta, o mejor dicho que algo lo molesta.

Yo??? Para nada, no hay nada que moleste (respondió Aliden)

Humm... puede negarlo si así lo quiere, pero no puede engañarme, majestad (le tocaría suavemente el rostro con una de sus manos)

El tacto de su piel era suave y tibia, como a su ves relajante.

Puede contarme lo que lo aflige, estaré dispuesta a escucharlo y si esta en mis manos, aconsejarlo.

Después de todo, estoy a su servicio, como el futuro rey de nuestro pueblo, es mi deber ayudarlo en lo que necesite.

Aliden la vería al rostro, podía ver como la luz de las estrellas iluminaban su piel blanca y el brillo de sus ojos que eran hermosos e hipnotizante

Sin duda era una bella mujer.

Aliden tomaría su mano y dando un profundo suspiro, decidiría abrirse ante ella y contarle lo que lo afligia mentalmente.

Y tal como había prometido, ella lo escucharía.

Los dias pasaron y Beve notaria el cambio de su hermano, se lo veía más feliz a diferencia de como estaba antes.

Desde esa reunión entre las casas nobles, Beve pudo notar a su hermano cabizbajo y pensativo.

Y en cada reunión, pese a estar presente, siempre se mantenía distante y en silencio.

Esperaba hablar con el y saber lo que le pasaba, sin embargo, tenía otras responsabilidades que necesitaban su atención.

Finalmente tras idear muchos planes y crear soluciones que sacarian al reino de su estado vulnerable, convocaria a todos los nobles y oficiales del ejército para informar sobre las cosas que tenía planeado hacer de ahora en adelante.

Aliden sería uno de los primeros en ser informado y tras escuchar la convocatoria que estaba haciendo su hermana a todos, reflejaría una sonrisa y esperaria paciente hasta el día de la reunión.

Tras algunos días, el día de la reunión llegaría y todos serian reunidos en la sala del trono que como todas las reuniones desde el derrocamiento del rey Aiden, se encontraba vacío.

Tras estar todos reunidos, daría comienzo a la reunión.

Beve procedería a hablar sobre sus planes a futuro así como las acciones que pensaba tomar acerca de los desertores de la corona.

Todo sería muy bien visto y aprobado por todos en la sala, dando elogios y asentimiento por parte de cada uno.

Entre ellos Aliden quien aplaudiria sus acciones futuras.

Bravo, no esperaba menos de mi hermana, siempre dando soluciones para todo, actuando un paso antes del ocaso.

Como tu hermano mayor no podría estar más orgulloso de mi hermanita.

Todos se girarian para ver al príncipe quien caminaria al centro de la sala.

Hermano??? (Beve lo observaria curiosa por su actuar)

Como ven, el futuro del reino parece aproximarse a una etapa estable y prospera, gracias a los esfuerzos de mi hermana por alzarnos en alto una ves más.

Gracias a ella, el honor de nuestro pueblo se ha mantenido y fortalecido.

Y demostramos ser un fiel aliado a la Alianza contra la mayor amenaza de la Horda.

Y se que cuando el reino sea unificado nuevamente todos estaremos agradecidos con ella.

Sin embargo, aún cuando el reino vuelva a ser fuerte, deberemos volver a la lucha contra nuestro verdadero enemigo.

Pero para ello, necesitaremos a alguien a la cabeza de nuestro reino que sea capas de sobrellevar esta carga.

Es por eso que yo, como futuro rey de Alterac, les juro cumplir con ese deber.

Pero incluso ahora con los rebeldes necesitaremos a un líder para unificar al reino.

Aliden se giraria y caminaria hacia el trono de Alterac.

Es por eso que tomaré el manto que me corresponde ahora (pasaría una de sus manos por el trono, hasta finalmente sentarse en el)

Beve observaria esto y no esperaba esta acción de su hermano.

Concuerdo con usted majestad, es tiempo que el trono de Alterac sea ocupado por su sucesor y que el reino de Alterac tenga un nuevo rey, un líder para guiarnos un protector para nuestro pueblo (comentaría Katrana quien se pararía al frente del trono y se arrodillaria en son de reverencia)

Todos en la sala del trono se vieron entre sí y también pasaron a arrodillarse, excepto por algunos, entre ellos Beve quien seguía sin entender lo que estaba pasando.

Esa noche tras finalizar la reunión, Beve se encontraba con su hermano y tratar de entender lo que el acababa de hacer.

Hermano explícame, que fue todo eso??? _ que fue de que??? (Cuestiono Aliden quien observaba las estrellas desde su ventana)

Eso, no entiendo por qué decidiste actuar de esa manera en la reunión...

(La interrumpe) Que??? Acaso esperabas que me mantendría en silencio como siempre??? Que dejaría que tu actuaras y tomaras las decisiones???

Mira, deje que hicieras las cosas a tu manera, por que se que eras la única la que podría solucionar el desastre que cometió nuestro padre, pero llegaría un punto en las que yo debería asumir toda esa carga.

Oh, así que ahora decidirás pararte al frente y tomar las decisiones por ti mismo y yo pasaré a un segundo plano??? (Cuestiono Beve)

No, no quiero que pienses que ahora te estoy haciendo a un lado, al contrario, quiero llevar esta carga contigo, juntos para que el reino pueda prosperar.

(Tomaría sus manos) Pero ahora como rey. Tu los escuchaste hermana, ese día en la reunión de las casas nobles.

Ellos dijeron que yo no tenia voz ni voto aún cuando yo era quien debía tomar el mando.

Y que en su lugar eras tu a quien todos respondían.

Sin embargo no es así, verdad??? Sigo siendo yo quien tiene el control y solo me estas ayudando a llevar esta carga verdad??? (La sujetaria de los hombros)

Beve solo lo miraría.

Así que es por eso que tomaré acción, les demostraré que quien realmente es el gobernante de estas tierras soy yo.

(Se alejaría de su hermana y volvería a observar el cielo nocturno) Es momento que el trono sea ocupado por su rey.

En unos días se llevará a cabo mi coronación, estarás a mi lado ese día???

Beve no sabria que hacer o decir. Era verdad que legítimamente el trono le correspondía a su hermano y que estaba en su derecho reclamar la corona.

Y ella no podía hacer nada para impedirlo.

(Dando un suspiro, solo daría un leve asentimiento) Entonces que así sea hermano.

(Aliden reflejaría una sonrisa al contar con el apoyo de su hermana) te lo agradezco, ahora puedes irte, estoy seguro que durante los últimos días no has podido descansar y dormir bien, te aconsejo que lo hagas ahora, ya que las cosas se aligeraran a partir de ahora puesto que no tendrás que cargar con todo el peso del trono.

Humm... (Beve se quedaria unos segundos en la puerta hasta finalmente salir)

Una ves afuera, se dispondría a volver a su habitación mientras aún se encontraba pensante en todo lo que había ocurrido, hasta que en el camino se cruzaría con Katrana.

Vaya, princesa (daría una ligera reverencia) _ (Beve la observaria) Lady Katrana, pensé que se encontraba en su habitación.

Oh, de hecho estoy de camino, supongo que viene después de hablar con su hermano.

Humm... (Curiosa) como sabes que vengo después de hablar con mi hermano??? (Cuestiono)

Pues la habitación de su hermano esta en esa dirección de la que viene, por lo que lógicamente me da esa idea (respondió Katrana) _ humm... y como sabes tu que la habitación de mi hermano esta en esa dirección???

Oh, no se haga ideas equivocadas princesa, simplemente recuerde que no es la primera ves que vengo paso la noche en el castillo, es lógico que pasado algunos días aquí, conozca el lugar, no lo cree???

Humm... (Beve no sabria que decir) _ fufu, bueno me retiro, que tenga una buena noche princesa

Beve la observaria alejarse en lo que después ella también procedería a marcharse.

En su mente circulaba la idea de que algo no le gustaba de esa mujer, de hecho el malestar que tenia sobre ella le resultaba muy familiar.

Los días pasaron y se daría a conocer en todo el reino sobre la coronacion del nuevo rey.

Lo que haría que muchos fueran a la ciudad capital para ver la coronacion.

Las calles estaban repletas de gente quienes se habrían camino hasta el castillo.

Y en el interior, los salones relucian los adornos colgados en las paredes y pilares de la sala del trono.

La gente se acomodo donde pudo hasta que dieron comienzo a la ceremonia.

El joven príncipe ingresaría por la puerta vestido con ropas ceremoniales para su coronacion y se podía escuchar el coro de su nombre haciendo eco en el gran salón.

Cada paso era lento, pero lleno de confianza y seguridad. Sus ojos observaban el trono que yacía a tan solo unos metros de el.

Al subir cada escalón, vería a su hermana quien lo miraba inexpresiva pero tal como había prometido, se encontraba a su lado.

Aliden reflejaría una sonrisa y su atención cambiaría a la otra joven que se encontraba al otro extremo, quien lo miraba con una sonrisa en el rostro.

Aliden finalmente estaría frente al trono el cual ahora era suyo y sin más, se daría media vuelta y se sentaría en el.

Así procederian a dar las oraciones y juramentos hasta que la corona posaría sobre su cabeza.

Larga vida a su majestad Aliden. Rey de Alterac. Soberano de las Tierras altas y protector del pueblo.

Todos en la sala gritarian su nombre.

Y ahora el príncipe, sería conocido como rey de Alterac.

Todos pasarían a dar una reverencia como aceptación a su coronacion.

Beve solo daria una leve reverencia.

Aceptando a su hermano como el nuevo rey de Alterac.

Un saludo para las 5 primero personas que dejaron su estrella en el cuarto capitulo del Vol.7

Han obtenido 1 puntos como fan destacado.

Bueno gente, la parte 1 / 2 / 3 corresponden a un capítulo completo, por lo que en otras palabras el cap. 100 está conformado por 3 capítulos en uno.

Decidí hacerlo así, ya que a partir de aquí comienza el lapso de tiempo de un año.

Osea que en el próximo capítulo ya ha transcurrido un año entero.

Originalmente tenía planeado que el salto en el tiempo se haga en el cuarto capítulo de esta segunda parte, pero si lo hacía, estaba seguro que dejaría varios huecos argumentales como los semi elfos, el hijo del protagonista, y demás cosas por lo que decidí no hacerlo y que todo vaya de una forma más fluida y entendible para los lectores, aun así deje varias cosas al aire, pero espero contarlas en los capítulos próximos.

A parte que esta segunda parte está cargada de varios cambios argumentales y tendremos la introducción de varios personajes,

De las cuales será complicado sobrellevarlo a todos.

Un claro ejemplo es la introducción los Zandalari y Katrana *Onixia* quienes lógicamente tenían que aparecer ya que la mera presencia del prota y sus acciones hicieron que la historia tomara ese rumbo naturalmente.

Y no es que yo me tome la libertad de meterlos en la historia por adelantado.

Simplemente sucedió y ya.

Y no se imaginan lo demás por venir.

Aveces pienso que mi fic tiene vida propia lo cual es aterrador xd.

Bueno dejando de lado ese asunto.

Agradezco a todos mis lectores, tanto a los más viejos como a los nuevos.

Ya que cumplimos 100 capítulos publicados.

Lo cual es mucho para mi y para otros tal ves sea poco.

Pero les confieso que cada capítulo publicado es un logro ya que significa que mi cariño por el fic sigue latente y dan ganas de seguir escribiéndo y no dejarlo en el olvido.

Y esas ganas y motivaciones crecen conforme el número de lectores aumenta y dejan su estrella.

Y más si dejan su comentario y opinan sobre la trama de la historia.

Bueno con eso dicho gracias por leer. Les mando un abrazo desde la parte del mundo donde se encuentren.