Entre los árboles, una joven se acercaba sigilosamente hacia un grupo de ciervos.

Apuntando a uno con su arco, esta tomaría aire antes de disparar.

Logrando acertar en el blanco al que tenía en la mira.

Una ves que este cayo, el resto escaparía a gran velocidad y volver a la seguridad del bosque.

La joven se acercaría hasta su presa y para suerte del animal, este yacía muerto y no agonizante.

Sin perder tiempo, ataria al animal, de sus patas y lo comenzaría a llevar sobre su espalda.

Por suerte, el ciervo era de un tamaño mediano, por lo que podría cargarlo sin problemas.

Pasado unos dias, volvería a la misma rutina de siempre.

Pero esta ves no lograría cazar alguno, por lo que tuvo que regresar a casa con las manos vacías.

Por fortuna suya, aun le quedaba algo de la carne del ciervo que había cazado la semana pasada, por lo que no pasaría hambre, al menos hasta mañana.

Al día siguiente volvería a la caza, siguiendo el rastro de un grupo de ciervos más haya del río.

Sabia que debía cazar uno si quería algo con que alimentarse, antes de la llegada de las lluvias.

Rápidamente saldría en la persecución de un grupo de 5 que comenzaron a correr ni bien notaron su presencia.

Hasta que de un disparo desesperado, lograría darle a uno abatiendolo, cayendo cuesta abajo de una cascada.

La joven cazadora vería al ciervo caer, por lo que rápidamente tomaría otra ruta para alcanzar a su presa, antes que sea arrastrado por el río.

Al llegar abajo, se alegraría de que el cuerpo inerte del ciervo se hallaba entre unas rocas, sin tiempo que perder, se acercaría, cruzando las aguas para tomarlo y marcharse, pero ni bien estuvo a unos pasos, algo saldría del agua de un salto, sorprendiendo a la joven haciéndola caer de espaldas sobre el agua.

Al ver lo que había salido del agua, vería que era un murloc, lo que sin duda alarmo a la joven, ya que significaba que finalmente habían llegado.

La criatura se lanzaría al ataque, lanzándose sobre ella, pero antes de que pudiera golpearla con su mazo, ella se haría a un lado y dispararía una flecha, impactando en su cabeza matándolo en seguida.

La joven soltaría un suspiro tras librarse de la criatura, pero sus instintos la alarmaron de un peligro detrás suyo, por lo que daría un salto hacia el frente y justo en ese momento, dos murlocs más aparecieron del agua.

La joven dispararía un flecha que impactaria en medio de los ojos de uno, mientras que el otro estaba lo suficientemente cerca, haciendo que la joven soltara su arco y sacara su cuchillo de su cintura.

Empezando así una pelea cuerpo a cuerpo, la joven apuñalaria a la viscosa criatura por debajo de su mandíbula, matándolo, pero más murlocs aparecerían del río, lo que alertaria más a la joven del peligro.

Así la joven comenzaría a defenderse de los murlocs que aparecían sin cesar, obligando a la joven dejar a su presa.

A regañadientes, tomaria su arco y saldría de las aguas, corriendo a la seguridad del bosque, matando con sus flechas a los murlocs que comenzarían a seguirla.

Tras lograr ponerse a salvo, se apoyaría al tronco de un árbol para descansar y recuperar el aliento.

De pronto una gota de lluvia caería en su frente, la joven miraría al cielo y vería el cielo nublado y las gotas de lluvia caer con más intensidad.

La joven comensaria a movilizarse y a buscar un lugar donde refugiarse de la lluvia.

Logrando esconderse en una cueba y esperar a que la lluvia cesará.

Tras unas horas, la lluvia finalmente había terminado y la joven saldría para volver a casa.

Tras volver al cruce del río que ella siempre utilizaba, vería que el río había aumentado su volumen, pero algo más llamaría su atención.

Vería el cuerpo del ciervo que había cazado y que se había resignado a abandonar por los murlocs.

Al parecer había sido arrastrado por el río y por fortuna suya, se había quedado atascado entre unas ramas y troncos que el río había arrastrado también.

Usando su agilidad y fuerza, lograría recuperar el cuerpo del ciervo a la ves que cruzaba al otro lado del bosque.

Haciendo que la joven soltara un suspiro de alivio y reflejaría una sonrisa, tras ver que el día no había sido una perdida al final.

Así la joven cargaría al ciervo y se lo llevaría a casa.

Tras caminar, se detendría un momento para observar el paisaje.

Quitándose la capucha, dejaría que el viento helado soplará sobre su rostro, mientras que su cabello se agitaba con dirección al viento.

El lugar era tan tranquilo y solitario, tan solitario como ella en este bosque.

*TIEMPO PRESENTE*

Ambos seguían movilizándose entre las copas de los árboles a gran velocidad, la semi elfa miraría en algunos momentos hacia atrás, para cerciorarse de que le seguías el paso, pero vería que no tenías problemas para desplazarte por el bosque sin problemas.

Finalmente tras una larga marcha llegarían a su destino.

La semi elfa se detendría en seco a lo que tu también lo harías al sostenerte de una rama.

Ya llegamos (comentó la semielfa, a la ves que daba un salto hacia abajo)

Tu mirarías al frente y verías una pequeña cabaña.

Tu vives aquí??? (Me pregunté a la ves que daba un salto hacia abajo)

La semi elfa daría un leve asentimiento a la ves que ingresaban a la cabaña.

Al ver la cabaña por dentro, aun que pequeña, podías observar que el lugar era bastante acogedor.

Ya esta por anochecer, puedes pasar la noche aquí (comentó la semi elfa) _ Oh, gracias (te sentarías sobre una silla) agradezco tu hospitalidad, pero me sorprende que decidieras permitirme cruzar al otro lado del río y dejarme pasar la noche en tu casa, eso no me lo esperaba jaja.

(La joven se quitaría su capa y dejaría su arco colgado a una columna de la cabaña) las lluvias llegaron, en este época del año, el bosque se vuelve más peligroso por la migración de los murlocs.

Ósea que en épocas de lluvia, el bosque es plagado por murlocs??? (Pregunte) _ (la semi elfa asentiría) mayormente se atrincheran en los ríos, pero otros deciden aventurarse en lo profundo del bosque, aprovechando las constantes lluvias, pueden desplazarse por todos lados sin preocuparse por el agua.

Ya veo, entonces eso quiere decir que vendrán también por aquí (Comentaste) _ (la semielfa negaría con la cabeza) no, por suerte los murlocs no cruzan esta parte del bosque, desconozco las razones pero es la parte más o menos segura hasta que acaben las lluvias. Sin embargo, no descarto la posibilidad de que lleguen hasta aquí.

Y eso por qué??? (Pregunte)

Todo depende de cuanto duren las lluvias, mientras más tiempo sea, más los murlocs se adentraran en esta parte del bosque (respondió)

Y cuanto tiempo suelen durar las lluvias??? (Pregunte) _ el periodo de lluvias puede variar cada año, hay veces que dura 2 meses, o 4, el más corto fue de un mes y el más largo fueron de 6 meses, el año anterior fue el más largo.

El año pasado??? Ósea que llevas aquí toda tu vida y tienes que lidiar con los murlocs tu sola??? _ al menos los primeros 30 años creo... (se tocaría la frente) lo siento pero no tengo claro cuanto tiempo llevo viviendo en este bosque, solo se que nací y crecí aquí.

Y tus padres??? _ ellos murieron ya hace un tiempo... o al menos se que mi madre lo está.

Ella... murió a causa de una enfermedad... mi padre decidió salir al bosque y buscar una medicina para curarla, pero jamás regreso.

Recuerdo que el día que se fue, fue cuando las lluvias ya habían comenzado... tal ves fue asesinado por los murlocs o tal ves le habrá pasado otra cosa.

Mi madre no pudo resistir mucho tiempo y algunos días después de que se fuera, mi madre murió...

Ahora su cuerpo yace enterrado ha algunos metros de la cabaña.

(Suspiro) Bueno ya paso mucho tiempo desde la partida de mis padres.

Y que hay de ti??? Que hace un joven humano, casi niño por estos lares, acaso te perdiste??? (Se pregunto la semi elfa)

Yo??? Bueno... por donde empezar???

Así pasaría el resto de las horas hablando con ella y sobre quien era, a parte de también saber un poco más de ella, el cual no se molestaría por compartir parte de su vida aquí.

Así sabría que su madre era humana y su padre un alto elfo, este último le había enseñado todas sus habilidades, a usar el arco y como cazar para sobrevivir.

Tal parece que sus padres se amaban mucho y por eso decidieron criarla en un lugar el cual podrían protegerla, lejos del rechazo de la gente y aislados del mundo.

Su padre al parecer era un viajero que visitaba las tierras humanas para comerciar y en uno de sus viajes, conoció a una mujer humana, ambos se enamoraron y la tuvieron, pero sabían sobre la discriminación que sufrían los niños nacidos por estos amoríos.

Por lo que ambos decidieron abandonar sus hogares y refugiarse en lo profundo de estos bosques, el lugar era agradable y seguro por lo que sus padres construyeron está cabaña para tenerla.

Los años siguientes vivieron en completa paz, pero como antes ella había mencionado, su madre enfermo y su padre en su desesperación, decidió salir del bosque en busca de una medicina para curarla.

Lastimosamente su padre nunca volvió y su madre no resistió más y falleció.

Te quedarías pensando sobre lo que dijo.

El hecho que su padre se marchara al comienzo de las lluvias. Si había la posibilidad de que su padre fuera asesinado por los murlocs, o tal ves por bandidos, sea como fuera la cosa.

La posibilidad de que su madre fuera salvada a tiempo, era casi 0, después de todo, no haya casi pueblos o aldeas cercanas por esta region y si buscaba alguna medicina para su esposa, entonces tendría que ir a una ciudad para obtenerla.

Y ese viaje seria de varias días, incluso semanas.

Los días siguientes ayudarías a tu ahora amiga, a lidiar con los murlocs que se aventuraban cerca de su hogar.

Librando pequeñas batallas y escaramuzas.

Te sorprenderías bastante sobre el gran número de murlocs que se hallaban por la zona, cosa que la semi elfa lo vería como algo normal, claro que para ella era molesto y muy cansado lidiar con tanto cada año.

Tu le tendrías un gran respeto de que pudiera manejarselas sola algo que a la semi elfa le agradaba el hecho de que la vieran como alguien fuerte.

Finalmente tras varias semanas, la que en un inicio se mantenía callada y mantenía una expresión seria, ahora era más conversadora y expresaba sus emociones con más frecuencia.

Un día la semi elfa se encontraba sobre la copa de un árbol con su arco en mano, apuntando a un ciervo que se hallaba pastando.

Al disparar, no lograría darle por que el ciervo caería antes por el impacto de otra flecha. Ella miraría hacia la dirección donde salió disparada la otra flecha.

Ahí vería a un joven sobre la copa de otro árbol quien la miraría con una sonrisa.

Ambos bajarían y se dirigirían al ciervo, el cual yacía muerto.

Jaja parece que fui más rápido esta ves jaja (miraría orgulloso) _ humm... solo fue suerte (respondió la semi elfa) _ así??? Pues yo creo que he mejorado, además me lo debías.

Deberte??? (Se cuestiono) _ si, acaso no te acuerdas nuestro primer encuentro???

La semi elfa recordaría la primera ves que se encontraron y se daría cuenta que esa ves ella había sido más rápida y le había quitado la presa, lo que ocasionaría una ligera sonrisa en su rostro.

Si, es como aquella ves (guardaría su arco) bueno tal parece que esta ves el ciervo es tuyo (Se haría a un lado y se sentaría sobre un tronco)

Un saludo para las 5 primero personas que dejaron su estrella en el treceavo capitulo de esta segunda parte.

Han obtenido 1 puntos como fan destacado.

*Nota*

Finalmente pude publicar la otra parte.

Por alguna extraña razón Wattpad no me dejaba publicar el capitulo completo.

Cada ves que lo publicaba, revisaba el capitulo y me salía solo hasta la mitad.

Decidi esperar algunas horas haber si más tarde se solucionaba eso, me alegra saber que si.