Capítulo 18: Juicio

¡Hola a todos!

Vengo nuevamente con otro capítulo.

Espero le guste mucho, pues a mí me encantó hacerlo.
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[Narrador Normal]

El tribunal militar es el edificio donde se realizan los juicios. Un gran edificio sólido y con una arquitectura sumanente cuidada, era el lugar donde se juzgará a otro sobreviviente de la Operación Reconquista, Ethiel Dreyar.

El edificio estaba custodiado por varios soldados de las Tropas de Guarnición.

Las personas más influyentes comenzaban a llegar, mientras los comandantes militares también se comenzaban a reunir en la entrada junto a sus acompañantes.

Nile Dawk, comandante de la Policía Militar, se encontraba junto a Carlo Bianchi, su mano derecha y sub comandante.

-¿Conoces a ese chico?-

Preguntó Nile con voz baja, era mejor que nadie supiera o escuchará bien de lo que hablaban entre ellos.

-Así es, es un viejo amigo-

Respondió con simpleza.

Nile supuso que en el juicio estaría de su lado.

No es que él estuviese en contra del chico, pero su postura siempre se mantendría en conjunto con la del General Zackly, una de las personas más cercanas al rey.

Si el comandante quería que el chico fuese culpable, contaría con su voto. Así es como se ganan los favores después de todo, al igual que cuando le "presto" a algunas tropas suyas.

Aunque la misión que habían realizado parecía ser demasiado confidencial, pues nadie quería hablar de aquello.

Se quedó tanto tiempo pensando que no se dió cuenta de cuando el Comandante de las Tropas de Guarnición, Dot Pixis, se acercaba lentamente a su posición.

A su lado venía una hermosa chica de pelo corto.

-¡Nile! Es bueno verte-

Mencionó Pixis llegando frente a ambos hombres.

-Pixis...-

Saludo de igual manera.

-Me sorprende lo puntual que eres-

Dijo y Pixis solo soltó una carcajada llena de gracia.

-Este chico es interesante-

Nile no pudo evitar arquear una ceja de curiosidad.

-¿Porqué?-

Preguntó.

-Tiene una gran determinación en sus ojos, además...-

Volteo a ver a su acompañante, Anka.

-Dicen que es fuerte-

Finalizó encongiendose de hombros.

-Sobrevivir a esa Operación habla mucho de su fortaleza-

Pixis asintió estando de acuerdo.

-Pero... ¿Crees que le dejen vivir?-

La mirada de Nile se había vuelto muy seria.

Pixis también lo hizo y pensó un poco antes de responder.

No lo sabía, ni estaba enterado del motivo por el cual se había citado este juicio. Ethiel lo único que hizo fue sobrevivir.

¿Acaso eso era malo?

-No lo se, pero preferiría que no muera, es un elemento importante para la humanidad-

Nile ahora tenía más curiosidad.

No conocía al chico, pero hasta ahora solo había escuchado maravillas de él, así que supone que debe ser una persona impresionante.

-Quisiera que vuelva con nosotros-

-Sino estoy mal informado, ese soldado cambio de rama-

Alguien más se unió a la conversación.

Era el nuevo comandante de La Legión de Reconocimiento, Erwin Smith.

-¡Erwin!-

Dijo Pixis mientras lo saludaba.

Este correspondió el gesto y de igual manera volteó a saludar a Neil.

-¿Vienes a defender a tu subordinado?-

Preguntó Nile con cautela, parecía estar interesado en saber de qué lado estaban todas las personas.

-Solo vengo a ver si el juicio es en verdad justo y también por curiosidad de saber sobre que se le acusa-

-¿Tu sabes algo?-

De un momento a otro, Pixis y Erwin se encontraban mirando directamente a Nile.

Era un elemento muy sospechoso y para ser realistas, ninguno de los comandantes confiaba en nadie.

Al sentirse algo acorralado, Nile dió lentamente un paso hacia atrás y se aclaró la garganta.

-No se nada, también tengo esa duda-

Dijo este.

Iban a decir algo más, pero un soldado se había acercado a ellos para informar que el juicio estaba por comenzar.

Los tres asintieron y entraron de forma separada a la sala de juicios.

Ya en el interior, pudieron observar bien el lugar.

La Sala de Tribunales es un lugar amplio, cuenta con una habitación subterránea donde están las personas que serán juzgadas y un pasillo que los guía hacia la sala principal, por ahí fue por dónde entraron.

En la sala principal, se haya un escritorio muy grande al frente de todos, donde hay tres sillas. Sobre todo eso, hay cuatro ventanas y los cuatro escudos de las divisiones militares: La Policía Militar, las Tropas de Guarnición, la Legión de Reconocimiento y el conjunto de las Tropas de Reclutas.

Aún no habían llegado todos, pero el juicio principal aún no comenzaría, primero pasarían civiles que sobrevivieron.

[Habitación subterránea, Narrador Yo]

Al llegar a la sala de tribunales, unos soldados que custodiaban el lugar me encerraron en una celda. Y me esposaron ambos pies como "medida de seguridad".

Casi me esposan de las manos, pero Carlo llegó y dijo que no era necesario, agradecí mentalmente ese gesto.

No sería el único enjuiciado, de hecho, eran muchas personas.

Todos sobrevivientes a de la Operación Reconquista.

Tuve que esperar por horas en la celda.

Me dió tiempo de pensar mucho, como en todas las posibles preguntas y respuestas, en todos los escenarios que puedan ocurrir y mis reacciones.

No sabía que pasaría y la ansiedad me estaba consumiendo.

Solo se que hoy no voy a perder, pase lo que pase.

De pronto escuché pasos acercándose a mi celda, era un trío de soldados quienes abrieron la cerradura y me indicaron que era hora de salir.

Yo me levanté y me encamine lentamente hacia ellos.

-"Quién nada debe, nada teme"-

Fue lo que me dije mentalmente.

Se que no soy culpable de nada, no pueden culparme por sobrevivir, pero aún así, todo esto me tenía con mucho nerviosismo.

Caminamos por el pasillo mientras yo observaba de reojo las celdas que cuando yo entre aún permanecían llenas, ahora ya no había nadie.

El sitio era frío y húmedo, por lo que cuando subimos las escaleras para salir, sentí un gran respiro de aire fresco.

Cuando comenzamos a acercarnos a a la sala del tribunal, comencé a escuchar todos los murmurllos.

Estos se incrementaron cuando pase por la puerta.

Era la primera vez que veía el tribunal y había más personas de las que me imaginé.

Había toda clase de personas, desde conservadores y progresistas, hasta religiosos y opositores, además de los comandantes de las tres ramas del ejército y algunos soldados.

El General Zackly se encontraba en medio de lo que parecía ser una mesa alargada.

Me llevaron al centro de todo, dónde había una silla en la cuál tome asiento.

Todo lo hice de forma mecánica, el nerviosismo de ese momento se apoderó de mi.

Hubo un momento en el que la gente comenzó a murmurar muchas cosas, la mayoría hablaba sobre mis posibles destinos, pero cuando quise escuchar el comandante Zackly intervino.

"TAC, TAC"

-¡Silencio!-

Dió dos golpes en la mesa mientras todos obedecían.

Luego me miró a mí.

-Soldado Ethiel Dreyar, miembro de la Legión de Reconocimiento...-

Preste total atención, este sería el momento en dónde dirían de que se me acusaba.

-Estás ante este tribunal bajo los cargos de desobediencia a las autoridades, deserción y...-

Todo era simplemente estúpido.

¿Desobediencia? ¿Deserción?, No entendía el motivo de esos cargos.

Mire de reojo al comandante Pixis, buscando alguna respuesta, pero lo pude ver igual de confundido, todos en el ejército estaban confundidos.

Pero el general aún no había terminado.

-... Asesinato-

Quedé paralizado.

[Narrador normal]

Todos en la sala se quedaron atónitos al escuchar el último cargo.

Anka Rheinberger, mano derecha del Comandante Pixis e íntima amiga de Ethiel... Simplemente no podía creer ninguno de los cargos.

A pesar de ser siempre alguien tranquila y analítica, Pixis noto un comportamiento extraño en ella.

Parecía querer actuar, y justo cuando iba a hablar, la detuvo apretando firmemente su brazo.

Anka le miro tratando de encontrar una respuesta, pero el Comandante solo negó con la cabeza en señal de que esa era una pésima idea.

Solo podría empeorar las cosas.

Por un momento quiso forcejear un poco, pero luego se tranquilizó y respiro.

Era cierto, las cosas ya estaban demasiado tensas, además, seguro Ethiel saldría de todo esto.

-"Es peor de lo que imaginé"-

Fue el pensamiento de Carlo.

Tampoco podía creer tales cargos.

Nile solo lo miro extrañado, tenía muchas dudas sobre que rumbo va a tomar el juicio.

-Espero que estés consciente de que debes decir solo la verdad ante este juicio, decir falacias será castigado con una pena de muerte-

-"Hablando de falacias"-

Ethiel sonrió irónicamente.

-Estoy consciente-

Dijo asintiendo.

-¿Qué dices ante estos cargos?-

Ethiel lo pensó un momento.

Debía ser cuidadoso, pues una mala palabra podría hundirlo.

-Me declaró inocente ante los cargos-

La cara de Zackly se torno más seria, parecía molesto.

-Según tu reporte...-

Tomo unos documentos que estaban a un lado de la mesa.

Ethiel solo se extrañó mucho, él nunca dió ningún reporte, todo fue por palabras.

-Despertaste en medio del bosque completamente desorientado, es muy improbable que sobrevivieras en esas condiciones aún si fueras un soldado muy capacitado. Te encontrabas completamente solo y totalmente alejado de todos los demás en un territorio lleno de Titanes...-

Era cierto, para la mayoría sería un reto imposible sobrevivir y despertar lo suficientemete fuerte después de pasar días sin comer y después de tantas heridas.

El general no conocía la vida de Ethiel, no del todo, así que no estaba completamente enterado de las capacidades físicas y metabólicas que poseía debido a las dificultades que tuvo que pasar.

-¿Porqué estabas tan alejado de todos?-

Cuestionó.

-Tal como menciona, desperté completamente desorientado, para mí también es un misterio-

-Eso nos lleva a pensar que posiblemente huias...-

Ethiel asintió en silencio, era probable que huyera de los Titanes, es humano después de todo.

Un humano con miedos e instinto de supervivencia.

-Pero no está del todo claro, según reportes eres un soldado muy valiente y atacas Titanes sin vacilación... ¿Había otro motivo para huir?-

-Emm...-

El comandante no lo dejo terminar.

-¿Acaso escapabas después de cometer un crimen tan sangriento para evitar levantar sospechas?-

-Creo que...-

-Después te heriste intencionalmente y volviste aquí como un héroe de batalla ¿Quién sospecharía de ti?-

Nadie más lo hizo.

Pero Ethiel pudo ver claramente una pequeña y sutil sonrisa en la cara del general, eso y su mirada de superioridad.

Lo comprendió.

Esto no era un juicio, simplemente era una reunión de personas que estaban ahí para condenarlo y darle un castigo.

Todo sin tener la capacidad de defenderse.

Ethiel apretó la mandíbula lleno de furia.

-Son acusaciones que pueden sonar muy coherentes, general...-

Escupió su título con algo de odio.

La gente comenzaba a murmurar.

Los soldados, es especial aquellos que conocían al chico, tenían un mal presentimiento.

-Pero, en el lugar hubo hallaszgos de pólvora. En ese "informe" que usted tiene, el cual no recuerdo haber escrito y tal vez alguno de sus espías filtro mis conversaciones... Dice claramente la presencia de polvora-

-Eso es...-

-¡QUE YO RECUERDE...!-

La gente dió un suspiro de sorpresa ante la forma que tuvo de interrumpir al general.

-La pólvora es exclusiva de las armas de fuego, las cuales ninguno de aquellos que fuimos a la misión llevábamos... Y esas armas de fuego son esclusivas de...-

-¡SUFICIENTE!-

Zackly hablo con fuerza y golpeó la mesa para detener todo discurso.

La gente no paraba de murmurar entre sí, Ethiel no termino sus palabras, pero la mayoría supuso a dónde iba.

Los soldados volteron a ver inmediatamente al Comandante Nile, el cual parecía tan sorprendido como ellos.

El General Zackly parecía molesto, algo no estaba bien.

-Creo que no comprendes tu posición, muchacho-

Ethiel guardo silencio, pero su mirada reflejaba que también estaba molesto.

-No solo le faltas el respeto a la autoridad, también dices falacias... No hay más diálogo, serás inmediatamente condenado a...-

-Si me disculpa-

Ethiel miro a todos.

-Se olvida que también soy un soldado y conozco las leyes que nos rigen, los soldados presentes aquí no me dejarán mentir, pero debido a que no tengo un abogado representante ni testigos, tengo derecho a elegir mi manera de ser juzgado...-

-¡Este muchacho está loco, encierrenlo!-

Grito uno de los civiles, todos los demás comenzaron a hacerlo.

Parecían guardar cierto rencor por familiares perdidos en la misión que necesitaban un chivo expiatorio para desquitar su furia.

El General Zackly sonrió ante eso.

Luego miro a Ethiel nuevamente sintiendo que recuperó el control de la situación.

-Así es... ¿Quieres cadena perpetua, la horca o fusilamiento?-

Preguntó sonriendo sin esperar la abrupta respuesta de Ethiel.

-Solicito un juicio por combate...-

Gran parte de la sala nuevamente soltó suspiros sorprendidos.

Hubo un breve momento de silencio, el comandante estaba sorprendido.

-¡¿Como se atreve a pedir algo así?! ¡Ejecutenlo!-

Eran algunas cosas que comenzaron a gritar los civiles influyentes.

Zackly tenía una mirada de pocos amigos, pero suspiro.

"TAC, TAC"

Sus golpes fuertes calmaron toda la situación.

-El soldado Dreyar está en su derecho-

Dijo a regañadientes, los soldados asintieron en aprobación.

-La Ley del Estado dictamina que el sujeto condenado sin ninguna de las cosas que mencionó anteriormente, puede solicitar un juicio por combate usando su propia fuerza para determinar su inocencia-

Los soldados estaban al tanto de ello, por lo cual no se sorprendieron mucho, pero el juicio por combate no había sido usado en mucho tiempo.

Ese chico debía ser inocente.

-Muy bien, tu juicio por combate será concedido y tendrás que enfrentar a mi campeón-

Todos estaban expectantes ante las palabras del General.

¿Quien será ese campeón?

La gente comenzó a murmurar sobre posibles nombres.

Muchos apuntaban a que algún comandante sería elegido, tal vez el comandante Erwin debido a su experiencia con los Titanes, no era lo mismo, pero debía ser fuerte.

Otros decían que tal vez eligirian a algún soldado al azar, de todos modos el chico no parecía ser fuerte.

Algunos más fantasiosos apuntaban a que sería el propio General.

-Un paso adelante...-

La sala guardo silencio para escuchar atentamente.

-¡Mike Zacharius!-

-...-

La sorpresa ahora no provenía de los civiles.

Fueron los soldados quienes se habían quedado completamente paralizados.

Escuchar el nombre le helo la sangre a más de uno.

No era para menos, incluso aquellos que no pertenecían a la Legión de Reconocimiento, sabía que Ethiel se enfrentaría a un monstruo.

-"Veremos que tan fuerte eres, chico..."-

Fue lo único que pudo pensar el Comandante Pixis.

Mike Zacharius, considerado por muchos como el segundo soldado más fuerte de la humanidad.

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Gracias por leer y espero que les haya gustado.

Hacer el siguiente capítulo será complicado debido a las expectativas que tengo del juicio por combate, pero haré lo mejor.

Bye bye ^^.

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