Capítulo 3: Algunos Problemas

Hola chicos, perdón por la tardanza, pero aquí volvemos con un nuevo capitulo de "Yo en Highschool Of The Dead".

Espero que les guste y dejen su zukhulenta estrellita ☆, que se agradece y no les cuesta nada.

Bien, comencemos...

...

-Narrador Yo-

Después de lo que pasó en aquel pasillo y que Saya se haya tranquilizado, todos nos dirigimos a la Sala que anteriormente había dicho, en donde Kyoko-sensei ya nos estaba esperando.

Ella se alivió mucho al vernos llegar.

Todo el camino fui tomando la mano de mi peli rosa, pues a pesar de que al parecer ya se había calmado, ella no me quería soltar por ningún motivo, algo que sinceramente no me molesta y la acepte gustoso como siempre, estar a su lado me hace sentir muy cómodo.

Ahora todos estábamos en la Sala de Profesores. Les había dicho que esperaríamos un poco, para así descansar y abastecernos un poco con lo que encontremos ahí, y ya después una vez preparados saldríamos del Instituto en dirección a la ciudad, a un lugar seguro.

Estaba sentado en un pequeño sofá, mientras esperaba a Saya, que había ido al baño, pues al parecer perdió sus lentes de contacto, además de que fue a limpiarse un poco.

-Gracias por dejarnos pasar-, escuche la voz de Hisashi.

Voltee a un lado y lo vi ahí parado, mientras me daba una sonrisa agradecida.

-No pasa nada-, le dije sonriendo y le señale otro pequeño sofá frente mío, a lo cual entendió y se sentó ahí. -Después de todo, entre más seamos mejor-, me encogí de hombros.

-Es verdad...-, me apoyo mientras se ponía más cómodo en el sofá. De verdad que eran cómodos, aunque prefiero los de mi casa.

Yo también hice lo mismo y cerré los ojos, últimamente me estaba sintiendo algo debilitado y relajarme después de todo el caos, sin duda que era bueno.

Por otro lado, no tengo problemas con Hisashi, de hecho, su prematura muerte en el anime me pareció un poco injusta, pues el claramente tenía los medios necesarios para sobrevivir, es fuerte e inteligente, sin duda una gran combinación. Aunque golpear a los zombies directamente no era del todo recomendado, encontraremos un arma para que pueda defenderse sin tener contacto con algún zombie.

Con que no haga nada indebido, todo entre él y yo estará bien, además de que creo que haremos un gran equipo.

-¿Que hacen?-, pregunto Takashi acercándose a nosotros, yo lo ignore, sigo molesto y aún no me las cobró.

-Sólo agradezco a Takishima-san por habernos dejado pasar-, le contesto Hisashi amablemente.

-Sólo dime Kei-, le dije, la verdad los honoríficos no me gustaba mucho.

-Claro que deberías estar agradecido de que Keí estuviera al mando y los dejará pasar, yo no lo hubiera hecho-, dijo Takashi algo molesto y resentido.

Suspire, el seguía siendo tan infantil e inmaduro como siempre.

-¿E... eh?-, Hisashi parecía sorprendido y confundido, no lo culpo, Después de todo él no tiene la culpa; sólo es feliz con Rei.

Me levanté.

Vi como ambos chicos me dirigieron la mirada; me acerqué a Takashi y lo tome por el cuello.

-Escúchame bien Takashi...-, le dije mirándolo seriamente. -El único motivo por el que a ti te deje pasar es porque Saya-chan y Saeko-san me convencieron, de otro modo tú ahora estarías convertido en uno de "ellos". Que haya dejado pasar o no a Miyamoto-san y a Hisashi-san, debería ser tu menor preocupación en este momento-, le dije molesto y recargándolo contra la pared más cercana, escuche algunos quejidos de sorpresa por mi actitud, pues yo nunca me comporto así.

Takashi me miraba con miedo, y no me importa, de hecho, esa era mi intención, provocarle temor.

-¿Por... porque estas tan molesto?-, me pregunto y yo lo mire como si fuera estúpido.

Lo azote fuertemente contra la pared.

-¿Por qué?... ¡¿ME PREGUNTAS POR QUÉ?!-, grité muy exaltado; pero rápidamente me calme. -Takashi... te pedí un favor, sólo un maldito favor... te dije cuida de Saya y no lo hiciste, te dije que dejaras tu estúpida obsesión con Rei y no lo hiciste, te dije que no la fueras a buscar, que ella estaría bien con Hisashi, y no lo hiciste, sólo la fuiste a buscar y como puedes ver, está sana y salva porque Hisashi si la pudo proteger... es hora de que dejes de actuar como un maldito niño y te des cuenta de que ella es feliz con alguien más y que tú debes seguir adelante-, le dije sus verdades en la cara, es hora de abrirle los ojos.

Estaba muy molesto, Takashi puso a Saya en peligro y eso es algo imperdonable.

Iba a seguir hablando, pero sentí unos brazos alrededor de mi pecho.

-Kei-kun cálmate por favor...-, murmuro Saya abrazándome, yo sólo me relaje y solté a Takashi, haciendo que este cayera al suelo.

Me di la vuelta y también la abrace.

-Lo siento...-, murmure a su oído y ella sólo negó.

-Está bien...-, me dijo y yo me separe un poco y me acerqué a sus labios, al parecer ella sabía mis intenciones así que hizo lo mismo, hasta que nos besamos.

El beso fue algo lento, pero a la vez apasionado, pues Saya rodeó mi cuello con sus brazos y yo rodee su cintura con los míos.

Una vez nos separamos, un pequeño hilo dé saliva nos unía.

-Vaya eso fue genial-, le dije mirándola, ella estaba sonrojada.

-Ba... baka-, me dijo avergonzada y hundiendo su cara en mi pecho mientras me daba leves golpes.

Yo sólo me reí bajito, era gracioso y tierno verla sonrojada.

Ahora que la miro bien, ahora trae anteojos, se ve mucho más linda que antes, Kohta no es el único adorador de las chicas con lentes, yo también lo soy, y de hecho también los ocupó, pero traigo unos de contacto en este momento.

-Oye...-, murmure para que me hiciera caso. -Te vez muy sexy con esos lentes-, le dije a su oído. Ella se volvió a sonrojar, pero no dijo nada. -¿Qué te parece si vamos con los demás?-, le dije y ella asintió, dejamos de abrazarnos y nos tomamos de la mano mientras íbamos con los demás del grupo.

Al llegar note como como todos estaban muy sonrojados y Kohta tenía un pequeño hilo de sangre saliendo de su nariz.

Al parecer vieron lo que estábamos haciendo.

-Chicos-, llame su atención. -Por favor presten atención, les diré lo que haremos a partir de ahora-, le dije y todos volvieron a la normalidad y me miraron.

Camine hacia la mesa que había en el centro de la sala y me senté en una silla, todos hicieron lo mismo que yo.

-Bueno...-, murmure poniendo mi mano debajo de mi barbilla, estaba tratando de recordar mi Plan B, pues ya que el plan anterior no salió como yo esperaba, ya tenía otro plan por si algo así pasaba, por lo cual estoy recordando lo que había planeado.

Cerré los ojos y suspiré.

-Bueno, primero quiero que usted Kyoko-sensei, intenté sincronizar un canal en la televisión-, le dije mirándola y ella asintió y se levantó a hacer lo pedido, me alegra que sean obedientes y creo que comprendo un poco el motivo por el cual lo son. -Marikawa-sensei, usted busque algunas medicinas, vendas y todo lo que nos pueda curar por los cajones de ahí-, le señale unos cajones que estaban al fondo de la sala y ella se levantó y fue.

Iba a seguir hablando, pero un fuerte mareo me llegó, haciendo que me tome la cabeza, pues aparte de eso, también me dio un fuerte dolor de cabeza.

-¡Kei-kun!-, escuche decir a Saya. -¿Estas bien?-, me pregunto preocupada, sentí sus manos sobre mis hombros.

Respire un poco, la verdad es que desde que salí de casa me sentía así de mal, pero este precisamente no era el mejor día para estar en cama y no hacer nada, primero todos tenemos que estar en un lugar seguro.

Deje de tomarme la cabeza, intentando disimular el dolor, tome su mano y la mire.

-Estoy bien-, le dije sonriendo, aunque la verdad era que los ojos me ardían demasiado, sin contar el estúpido dolor de cabeza.

Ella me miro, no muy segura de lo que dije, ella sabía que yo no estaba bien, pero a veces puedo ser muy terco, algo que ella sabe bien, así que sólo asintió y se volvió a sentar, pero sin dejar de tomar mi mano.

Le sonreí por eso, me encanta que se preocupe por mí, la amo tanto.

Carraspee la garganta, haciendo que todos nuevamente me prestarán su atención.

-Como decía, Kohta y yo iremos a buscar algo de agua y comida en la pequeña bodega de allá-, dije señalando una puerta detrás de mí. -Saya-chan-, llame su atención. -Quiero que tú y Saeko-san busquen alguna ruta de escape-, ella asintió y me beso.

-Vamos Busujima-senpai-, la escuche decir y Saeko me miro un poco para después ir con ella.

No entiendo por qué se quedó mirándome por un tiempo, su mirada era sería. No le puse demasiada atención.

-Hisashi, Takashi y Rei-, les llame. -Ustedes por favor vean en que pueden ayudar a los demás-, les dije y ellos asintieron. -Bien, vamos-, me levanté haciendo que Kohta haga lo mismo.

Me sentía tan mareado, en la mañana y hasta hace unos minutos no me sentía así, me sorprende lo rápido que los síntomas aumentaron.

Tal vez sea por el estrés de la situación en la que estamos, y también por la preocupación que tengo porque Saya y los demás estén bien, y porque aún no sé nada de mi hermana.

Decidí levantarme y hacer mi trabajo, sé que Mio estará bien, ella es fuerte, inteligente y muy capaz, es casi como yo, pero en versión femenina, aunque con Tsunoda a su lado, tal vez le sea un poco difícil, pero sé que lo logrará.

-Ugh...-, de repente me dieron muchas nauseas. -Kohta-, llame, el me vio y vi que puso una expresión preocupada. -A... adelántate, yo necesito ir al baño-, y sin más salí corriendo al pequeño cuarto de baño que había.

Una vez llegue, cerré la puerta con fuerza y me hinque frente al inodoro para después vomitar en él.

-"¿Por qué ahora?"-, pensé molesto, este no era un buen momento.

Como todo humano, a veces me puedo enfermar, pero, ¿Enserio?, ¿en medio de una Apocalipsis zombi?, sin duda este no es mi mejor día.

Termine de vomitar y decidí levantarme e ir hacia el lavabo para limpiarme.

Una vez ahí, encendí el grifo y comencé comencé enjuagar mi boca.

Escupí en el lavabo una vez que termine, para después tomar un poco de agua y lavarme la boca y la cara.

Me mire al espejo.

Mis ojos estaban rojos, tengo fiebre, pero no se dé cuanto es mi temperatura, espero aguantar al menos hasta que estemos un poco más seguros. Aunque era muy difícil pensar y actuar en este estado.

-¿Seguro de que estas bien?-, escuche una voz femenina preguntar detrás mío.

Voltee a mirar y vi que era Saeko, la cual me miraba seriamente y me estaba ofreciendo una toalla.

Tome la toalla y me seque la cara.

-Estoy bien, gracias por la toalla-, le dije sonriendo.

Escuche unos pasos y cuando voltee la vi demasiado cerca de mí, no sé cómo se vea desde otro ángulo, pero creo que da la impresión de que nos estemos besando, algo que me pone nervioso, pues si llega Saya, la cosas se pondrán feas para mí y tal vez para ella.

-¿Enserio?-, me pregunto muy cerca de ml cara, pude sentir el dulce aliento a cereza de su boca, era tan parecido al de Saya que parecía embriagarme.

-Si-, volví a afirmar, para luego ver mejor la posición en la que estábamos. -Sa... Saeko-san, no es que me moleste, pero podrías...-, no termine de hablar, pues una voz más se escuchó en el lugar.

-¿Qué está pasando aquí?-, para mi horror, la dueña de esa voz no era otra que mi novia Saya, ella estaba en la entrada.

-Sa... Saya-chan-, dije su nombre. -E... esto no es lo que crees, ¿verdad Saeko-san?-, la mire con ojos suplicantes, pidiendo su apoyo.

Ella me miro y sonrió, yo también sonreí de alivio al pensar que me ayudaría, si no fuera por lo siguiente, pues pasaría algo que nunca pude imaginar.

-No sé de qué hablas Kei-kun-, se hizo la desentendida.

Yo la mire con mucha sorpresa, no podía creer lo que estaba pasando justo en este momento.

Mi mundo se derrumbó al escuchar eso, no me lo podía creer, ¿enserio?, ¿no ve que me está metiendo en grandes problemas?

Escuche los pasos e Saya aproximándose para salir de allí.

-Entonces quédate con ella-, me dijo retirándose.

-¡No! ¡Espera Saya, puedo explicarte esto es un malentendido!-, le grité desesperado, mientras me alejaba de Saeko.

Ella sólo salió y cerró la puerta, ignorándome por completo.

Me tome la cabeza con ambas manos, frustrado por esto, sé que no me va a dejar por esto, pero eso no evita que ella este enojada.

O espera, ¿ella me dejaría por esto?

No, no quiero pensar en eso, no quiero terminar con esto, no quiero que termine nunca.

-No...-, dije desplomándome contra la pared ante tales pensamientos, mire a Saeko que todavía seguía ahí, estaba muy molesto con ella, pero debía calmarme. -¿Por qué lo hiciste?-, le pregunté con seriedad.

No la escuche contestar y solo la vi acercarse a mí.

-¿Porque?-, pregunto arrodillándose a mi altura, ahora estábamos frente a frente. -Porque te quiero Kei-, después de eso me beso.

...

Se prendió esta mierda jeje.

Bueno, ¿Porque tan corto?, pues porque me pareció adecuado terminarlo ahí, además de que creo que ya está bien y si lo hubiera continuado, no se, no se hubiera sentido la misma emoción.

Pero bueno, otro de los motivos del porqué es tan corto, es porque me han presionado mucho con que ya actualice, y creo que deben saber que no me gusta que me presionen, yo hago las cosas a mi ritmo.

Esto ha sido todo y el capítulo 4 lo publicaré la semana que viene, a más tardar el viernes o el sábado.

Ah y antes de que se me olvidé, les quiero comentar que me hr creado una nueva cuenta para subir las imagenes Hentai, pero ya les avisaré cuando tenga todas las partes nuevamente y subiré todo al mismo tiempo.

Bye bye

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