21. Love Me Like You Do

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Love Me Like You Do


La gorda no se ha ido de mi casa, por supuesto. Ella cree que está en su casa y que es suya. No la soporto, cada vez que intento ir a mi MALDITA COCINA ella está presente porque cree que le pertenece. Es anormal, no recuerdo que una persona sea más insoportable que Green.

—Vas a parecer una VACA si sigues comiendo —digo en voz alta sin importar que este escuchando la mosquita muerta esa. Se está preparando un sándwich con carne, salsas y se ve asqueroso, me provoca vomitar de solo verle el aspecto.

—No me haces daño con tus palabras. Sabes muy bien que no me iré hasta que Xavier acepte casarse conmigo y hasta que te diga que si estoy embarazada.

Respiro profundo porque no quiero armar escándalos. Esta estúpida me las va a pagar bien caras.

—Tus palabras son como un ruido lejano. Así que si dijiste algo, no me interesa. Apártate de mi vista o te golpeo, maldita perra —murmuro mirando a mi alrededor. Menos mal que no hay nadie—. En vez de estar en mi casa, deberías irte a otro lugar. Yo no tengo nada que ver con tus mentiras.

—Me gusta molestar a mis enemigos.

—Y a mí me encanta ser odiosa y sarcástica.

—No me hieres, mocosa.

—Prefiero ser mocosa que zorra. Apártate estúpida.

—No lo haré.

Ya sé lo que quiere esta mocosa y me haré la víctima. Creo que mi actuación puede empezar a parecer interesante en mi vida. Me retiro de la cocina con el plato de frutas en mis manos. Voy directo al sofá y prendo el televisor a todo volumen, están pasando la historia de los videojuegos y me quedo viéndolo con sumo interés. La mosquita muerta parece molestarle porque no para de quejarse.

Cambio de canal y quiero colocar algo un poco más ruidoso. Están pasando un concierto de AC/DC y es perfecta para la ocasión. Busco mi escoba y me pongo a cantar como loca desquiciada, disfruto el placer de sentir la música en mis venas y más si a la estúpida le molesta. Parece estar más enfadada de lo normal. Es divertido como la hago enojar con facilidad. Si ella quiere que la acepte, pues tendrá que irse a otro planeta, porque ni que vuelva a nacer la soportaría.

Sigo cantando la mayoría de las canciones a todo volumen. Me pongo mis cachos, esos me los regalaron el año pasado, en una fiesta de una prima y en serio desde que los tengo me los pongo cuando escucho AC/DC.

—Ya no soporto más. Te voy a apagar ese televisor.

¿Qué le pasa a esta perra? Ella viene y quiere ser el centro de atención, pues se equivoca. Yo hago en mi casa lo que me de la real gana y ella no tiene por qué estar diciéndome cualquier estupidez que se le ocurra en su estúpida cabeza.

—Oye, baja el tono. Es mi casa y está no es tu casa. Así que cállate porque no quiero escuchar tu patética voz. ¿Está claro? —frunzo el ceño y ella parece estar echando humo por todos lados.

—Le diré a mi madre de esto.

—Ella no es nadie y por lo tanto puedes reclamarle lo que desees. Y seguiré escuchando mi música porque me da la real gana, ¿tienes algún problema con eso? Pues yo creo que no. Solo vienes a fastidiar y sé lo que quieres hacer. Conozco a las de tu tipo.

Oigo el ruido de un auto. Espero que sean mis amigos, ya no quiero seguir discutiendo con esta tipita. Me cae tan mal que quiero vomitarla en la cara y reírme por el resto del día.

Abren la puerta y es mi hermana con mis amigos. Xavier parece estar hablando por teléfono muy sonriente. ¿Con quién estará hablando?

Donny quiere hablar conmigo en compañía de Peter y mi hermana, no se que se traen entre manos y me gustaría saberlo. Acepto dejando a Xavier con la insoportable, espero que se relaje y no me haga molestar. Le hago señas que vaya a mi habitación cuando termine de hablar y asiente con la cabeza.

—Creo que está embarazada —habla mi hermana con tono de voz bajo.

—Solo miente. No creo que sea en serio, ¿o sí? —dudo un poco pero quizá mi hermana tenga razón.

—Estudio conmigo un semestre, luego se salió y se cambio a otro colegio cercano al nuestro. Odia que las personas se metan en su camino y es una serpiente venenosa.

— ¿A qué vino para nuestra casa? No creo que sea casualidad —intervengo.

—Son amigos de la juventud. No la recuerdas porque la vieja se cambió el rostro. Quieren hacer un reencuentro o algo por el estilo y mamá está encantada con ello, hasta convenció a papá, lo cual es extraño —explica Summer—. Hay que vigilarla a ver que hace, y de quien está embarazada, así sabremos bien si miente o no. Lo cierto es que bueno apareció de la nada y no sabemos porque lo esta haciendo. Quizás los papás de Xavier tienen algo que ver con eso.

—Dudo que ella sea tan mongólica para hablar por acá. Todo el vecindario es chismoso y los rumores llegan rápido —es verdad lo que dice Donny—. Hay que tener un instinto muy brutal para sacar conclusiones.

—Jess, no quiero que pelees con ella pues afecta al bebé. Sé que es difícil para ti, porque la detestas, pero debes calmarte un poco. Recuerda lo que dijo la doctora —me aconseja mi hermana y asiento con la cabeza. No me queda de otra que callarme cuando la vea, pero es imposible que esa mujer no me saque de mis casillas, me hace matarla con lo que tenga en la mano. En serio me provoca matarla.

—Está bien. Pero sabes que si exploto, no hay quien me pare. Soy demasiado impulsiva y ella en serio me saca de quicio rápido.

—Eso es lo que quiere. Trata de no pararle mucho.

La voz de mi hermana la escucho desde lejos. Muero por saber con quién habla Xavier. Actúa muy simpático con la persona del teléfono y no me gusta para nada. Si es una chica quiero saber quién es la estúpida para escupirle en la cara.

— ¡JESS EMMA STONE! —grita Donny y vuelvo en sí—. Se lo que piensas. Tranquila no es nadie especial.

Duramos hablando por más de dos horas, ideando un plan para ver si descubrimos a la estúpida esa de su mafia. Cada idea es un poco loca y es casi imposible, y a la final estamos cantando. Xavier se une luego de colgar el teléfono, pero esta distraído con su celular y no deja de pasar mensaje. ¿Qué le sucede? ¿Estará preocupado por culpa de la mosquita muerta?

¿Le creerá? Entiendo que debe estar preocupado por mi situación, solo que es inusual que sea tan serio. Siempre cuenta chistes y sonríe mucho.

— ¿Estás bien? —le pregunto.

—Sí. Todo bien.

¿Ah?

—Mejor vete a casa, estás distraído —sugiero. Todos se salen de mi habitación dejándome sola con Xavier—. Algo sucede contigo y me gustaría saberlo en este instante —esta vez mi voz es más seria y cruzo los brazos. Cuando hago ese gesto, es porque estoy siendo ruda y él sabe como soy yo. Me mira al rostro y solo me lo acaricia.

—Toda esta situación me enloquece.

— ¿Embarazaste a la mosquita muerta, Xavier Alexander? Dime la verdad, porque muero por saberlo.

En realidad no es así. Siempre he creído que está mintiendo, pero prueba un poco su valentía. Si hace el gesto con la nariz, —la arruga un poco y hace como que se sacude los mocos, dice la verdad—, si se rasca las orejas miente. No hace ninguno de esos gestos y se limita a mirarme.

— ¿Xavier Alexander, embarazaste a la estúpida esa? ¿Sí o no? —sigo insistiendo y no dejare de hacerlo. Tiene que decirme la verdad porque no me cansare de preguntarle y él sabe que soy un fastidio con eso. Odio que me oculte cosas y no me agrada que lo haga.

—No, Jess.

— ¿Entonces, qué carajos te sucede? Generalmente cuando estas así, es porque algo malo está sucediendo o es porque perdiste algo.

—Un amigo me invito a tocar con ellos durante un mes entero en varias partes del país —explica. ¡Vaya!

— ¿Y entonces qué sucede con eso?

—No creo que pueda, Jess.

—Haz lo que quieras.

Prendo el televisor de mi habitación y me coloco la cobija, me concentro en la programación.

— ¡Jess! —la voz de Donny me hace entrar en el presente. Le abro la puerta y se queda viendo a su amigo y luego a mí. Con gestos, quiere saber qué está pasando entre Xavier y yo, pero no le explico del todo bien—. ¿Qué carajos sucede, brother? —se dirige a su mejor amigo.

—Nada está pasando.

—No me mientas. Claro que pasa algo y quiero que me digas que es. No dejare que le hagas daño a Jess y lo sabes.

—Me invitaron a un concierto fuera de la ciudad y es por un mes entero.

Donny al igual que yo, se sorprende.

— ¿Prefieres ir a un estúpido concierto y no estar con Jess? Eres un verdadero imbécil.

—No he dicho que vaya. Solo es una oferta que me hicieron.

— ¿Y entonces por qué estas tan serio? Tú no eres así, amigo.

Donny cambia la cara y sé lo que significa. Es una chica, seguramente una que le gusta a Xavier y que han estado hablando de ella por varios días seguidos. ¡LO SABIA! Soy un verdadero genio.

—No me interesa si hablan de Amanda Whez, déjenme sola en mi habitación —hablo sin controlar mis lágrimas y emociones encontradas—. Váyanse y déjenme sola. Es más quédense aquí, iré a tomar aire fresco.

Amanda Whez, es una roquera fanática extremadamente ridícula que imita a cualquier cantante de rock para parecer interesante. No se viste como hombre, sino más bien es femenina. Su cabello largo es irreal ya que es de plástico.

Xavier y ella tuvieron algo extraño. Lo sé porque él mismo me lo conto y esa mujer lo hizo llorar una vez.

Coloco mi suéter de invierno y mis botas para el frío. Xavier me detiene cuando voy saliendo.

— ¡DÉJAME MALDITO MENTIROSO DE MIERDA!

No me suelta y sus ojos se enfocan en los míos.

— ¿Crees que soy capaz de engañarte? ¿Sabes con quién estaba hablando? Pues si te digo, arruina mi sorpresa y seria aburrido que lo supieras porque no es la idea. Nena, eres mi vida y si sigues con la pendejada te voy a besar ajuro y sé que detestas que lo haga de esa forma.

Idiota de porquería.

—No sé si serias capaz. Pero me parece extraño tu asunto de irte de gira con gente desconocida. Y también me parece extraño que te rías con alguien por teléfono y también muy extraño que la tipa esa este aquí en mi casa. Así que explícate bien y déjate de rodeos —lo enfrentó.

—Nena, si me ofrecieron irme con ellos pero no pude aceptar. Con respecto a quien hable por teléfono, es que mi primo es malo contando chistes y me daba mucha risa. Quiere que lo acompañe a comprar su esmoquin, porque se va a casar el fin de semana próximo y pues vamos a cantar en su boda —me muestra su celular, las conversaciones y las últimas llamadas—. Y ya tu hermana te explico —estornuda dos veces seguidas. Se acerca hacia mí y me besa.

Es la primera vez que su beso es real para mí. Nos sumergimos en un sentimiento único y diferente.

Aun quiero saber la conversación con la persona extraña y la sorpresa que me tiene. Tengo que ser cuidadosa con todo y detallar muy bien mi investigación. No puedo desviarme de mi objetivo y me gusta que sea más claro y preciso.

Se despide de mí, pues tiene que volver a su casa junto a sus padres. Además la tarea de Biología está retrasada y no quiere reprobar. Me dice que nos vemos al día siguiente en clases y que soñara conmigo.

"Ya estoy en mi casa, nena bella. Ya me haces falta" me pasa un mensaje con un montón de caritas felices al terminar su oración.

"Bien. Yo estoy vomitando por tercera vez y me maree tres veces. Esto de embarazarse es repulsivo. Y no puedo dormir casi"

"Tranquila. A mí me dan nauseas no sé por qué y me siento un poco mareado. Creo que estamos conectados en cuanto a los síntomas"

"Eso espero. Me desespera todo y quiero descansar pero no puedo hacerlo"

"No rompas mi alma, no rompas el estilo de vida. Te extraño. Es una parte de la canción que ando escribiendo"

"Me iré a dormir. No aguanto el sueño"

"Descansa. Mañana te pasare buscando. Recuerda seguir las instrucciones y si te pierdes, no es mi culpa"

En toda la noche pienso en los acontecimientos del día. La pelirroja es demasiado anormal, su actitud se debe a algo y quiero saber por qué. Si no es mentira lo del embarazo, ¿entonces que puede suceder?

Dejo mi teléfono en la mesita de noches, apago la lámpara y prendo el televisor para ver cualquier cosa. Estoy cansada, y no tengo casi sueño.

—Eres un maldito bastardo —oigo a mi hermana gritar y me asomo por la ventana. Brandon está parado junto a mi hermana, y ella parece estar llorando—. ¿Cómo pudiste hacerme esto?

¿Qué está pasando? Me desperto el interés y bajo las escaleras sin hacer mucho ruido. Mi madre está tejiendo en la sala y parece estar concentrada, no veo a la gorda ni tampoco a su madre.

—Madre, ¿dónde están tus invitadas? —pregunto para no insultar a la gorda mamarracha y tener su atención.

—Están afuera con tu hermana, cariño.

— ¿Afuera?

—Si, al parecer Brandon estaba con ella.

¿Qué? No puede ser. Es imposible. Un tonto como él, además de su físico estando con la pelirroja. Eso es bastante extraño.

— ¿Cómo sabes tanto, madre?

—Jess, solo lo sé.

— ¿Por qué vinieron a nuestra casa?

—Ellos están sufriendo económicamente y por eso los invite a la casa. Se quedaran por un tiempo, cariño.

Ahora si lo veo muy claro. Se quiere aprovechar de todos los hombres para obtener lo que quiere.

—Su hija quiere a Xavier y a un montón de chicos más.

—Pendeja.

—Cuida el vocabulario.

—Lo siento, pero tenía que decirlo. Es una bastarda. En vez de trabajar y hacer algo, lo quiere todo fácil.

— ¿En serio te gusta Xavier, hija?

¿Qué clase de pregunta es esa? ¿A mi mamá que le sucede últimamente? Está demasiado preguntona y ella no es así. Nunca se preocupa por mi y no es que me deja hacer lo que quiero, pero no me para mucho. Es a Summer a quién vigila siempre y veo que está en la sala solo por eso.

Summer debe cuidarse de esa gorda, porque le puede arruinar su vida al igual lo que está haciendo con la mía. Esa pelirroja es un peligro y un veneno. Diría que es idéntica a un escorpión.

— ¿Te gusta Xavier, Jess? —repite la pregunta.

— ¿Qué pregunta es esa?

—Solo respóndeme.

—Yo creo que me gusta, mamá y es bastante incómodo confesarlo contigo. 


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