6 MESES DESPUÉS

Yoongi

Al inicio del año escolar, pensé que todo sería igual que los últimos años, pero creo que en este punto sabrán que no fue así.

Empecé a salir con Jimin desde aquella vez, donde hecho un remolino de emociones le confesé mis sentimientos y él los suyos, aclarando nuestras dudas e inquietudes.

Me esforcé cada día por hacerlo feliz y recompensar las mil y un veces que me equivoqué, aún si eso implicara verme como un idiota.

Luego de dos meses, le pedí ser mi novio, y obviamente él aceptó.

Al inicio fuimos el tema de conversación de la escuela por una semana, no fue del agrado de muchos, en especial de cierto tipo que no voy a mencionar, pero no fue un problema.

Conocí a los padres de Jimin, estaba muy nervioso al inicio, puesto a que no me sentía lo suficientemente bueno para ser el novio de su hijo, pero para mi fortuna les caí bien, incluso me han invitado a comer un par de veces.

Y si hablamos de mi madre... Ugh, qué vergüenza.

Con sólo decir que la noche que lo llevé a cenar le mostró el vergonzoso álbum de mis fotos de pequeño, ¡Incluso le ofreció algunas para que las tuviera!

Mi relación con Jimin ha ido mejor de lo que pensé, pero ahora que acabaron las clases, llegó el momento que había temido desde el inicio.

...

—Mamá —llamó el pelinegro acostándose en las piernas de Chae Rin quien estaba viendo la televisión.

—¿Saldrás con Jimin? Procura no venir después de las once, ya empezó a hacer frío —dijo mientras seguía mirando el televisor.

—No, no es eso —Yoongi se sentó, muy dudoso por lo que iba a decir—. Nosotros... ¿Nos iremos?

La mujer volteó a ver a su hijo, bajandole volumen al televisor y poniendo toda su atención en él.

—¿Irnos? —preguntó con una ceja alzada.

—Es decir, que si nos vamos a mudar...

—Aún no me han dicho nada sobre irnos a otro lado, ¿No te quieres ir? —el pelinegro negó con la cabeza gacha.

—No, me gusta estar aquí, tengo a Jimin y a mis amigos, me siento en casa y no me gustaría dejarlos —confesó con las mejillas sonrojadas, decirlo en voz alta le parecía muy cursi.

La mujer miró con una sonrisa, jamás pensó ver a aquella faceta de su hijo, y le gustaba ver que al fin había encontrado su lugar.

—Pues, puedo hablar con mi jefe y tener mi puesto fijo aquí y así no tener que mudarnos otra vez, ¿Te parece? —propuso, amando el brillo que se formó en los ojos de su pequeño.

—¡Si! —exclamó con una sonrisa, levantandose de golpe—. D-digo, sí, me parece bien —se recompuso de inmediato—. Saldré con Jimin —informó llendo hasta la puerta.

—Está bien, no olvides lo que te dije —le recordó con una sonrisa, su hijo era muy tierno aunque quisiera evitarlo.

...

Jimin esperaba a su novio en uno de los columpios del parque mientras miraba su teléfono, se sobresaltó al sentir un repentino beso en su mejilla, pero la sonrisa de su novio lo tranquilizó.

—El cielo está hermoso, ¿No crees?—dijo Yoongi mientras se sentaba en el otro columpio.

—¿Y esa sonrisa? —preguntó curioso.

—¿Qué? ¿No puedo estar feliz por ver a mi hermoso novio? —Jimin le dió un golpe en el brazo haciéndolo reír.

—Obvio que puedes, pero algo me dice que no es por eso.

—Mm, ¿Qué tal si compramos un helado y luego te digo? —propuso mientras se levantaba y extendía su mano al rubio.

—Eso es trampa, pero acepto —tomó la mano del pálido mientras esté lo veía con una sonrisa victoriosa.

Luego de comprar los dichosos helados, buscaron un banco para sentarse.

—¿Ahora sí me vas a decir?

—Hablé con mi mamá sobre quedarnos —explicó, Jimin se tensó—. Cálmate, nos quedaremos, hablará con su jefe le pedirá un puesto fijo aquí.

—¡Te quedaras! —eso fue lo único que escuchó Jimin.

Él también había pensado sobre eso los últimos días, no sabía cómo abordar el tema con Yoongi y escuchar que se quedaría hizo que se sintiera aliviado.

—¿Pensabas que me iría?

—Mm, puede ser, tal vez... —confesó algo apenado por tener esos pensamientos.

Yoongi tomó la mano de Jimin y la entrelazó con la suya, el rubio lo miró a los ojos.

—Jimin, jamás me iré sin ti, quiero que siempre lo tengas en mente —dijo sin despegar su mirada de esos ojos color avellana—. Eres el sol amarillo que ilumina mis días grises, sin ti, mis días volverían a ser opacos, sin brillo, hiciste que encontrara mi lugar en el mundo, no podría dejarte nunca.

Jimin sonrió mientras algunas lágrimas se escapaban de sus ojos, Yoongi podía ser muy romántico en varias ocasiones.

—Deja de hacerme sentir que no te merezco y mejor bésame, por favor —pidió haciendo reír al pelinegro.

—Soy yo el que no te merece, pollito —respondió para luego juntar sus labios en un amoroso beso.

A Yoongi jamás se le cruzó por cabeza terminar enamorado de un chico de cabellos rubios con sonrisa bonita, tampoco pensó que este le hiciera ver lo bonito que podía ser el amor, y lo vital que pueden ser los amigos en tu vida.

Jamás se le cruzó por la cabeza llegar a ser tan feliz como lo es actualmente, el Yoongi de hace unos meses no se creería las cosas y un cosas que pasaron.

Pero el Yoongi de ahora agradecía todo aquello que pasó en el pasado, porque ahora, en la actualidad, podía disfrutar de de lo que trajeron aquellas cosas.

FIN

N/A: Finamente, este es el final de Yellow :)

Luego de re-subirla por cuarta vez la pude terminar, un logro 💪🏼

Gracias a todas las personitas que estuvieron apoyando la historia, los tqm 💗💗

Espero volver a vernos en otro historia <3

— MININCHIW