ੈ Epílogo♡‧
-Sí, mamá- Hyejoo rodó los ojos, mirando a la chica en el asiento del pasajero. -Nosotros acabamos de salir del aeropuerto. Estaremos allí pronto-.
-Ya verás, mamá, te lo dije- Hyejoo se mordió el labio y miró a Chaewon . La pequeña en el asiento del pasajero sonrió suavemente. -Está bien mamá, tengo que conducir. Nos vemos pronto. -
Hyejoo se rió en voz baja una vez que ella colgó, dejando su teléfono en el porta vasos y entrelazando su mano libre con la de Chaewon .
-Te ves nerviosa- Chaewon inclinó la cabeza ligeramente, dejando que su cabello suelto cayera por encima del hombro. -¿Estás nerviosa?-
Hyejoo se encogió de hombros y volvió su atención de nuevo a la carretera, siguiendo la ruta familiar a su casa de la infancia. -Un poco, sí. No tengo ninguna razón de estarlo, sin embargo. -
-Va a ser divertido, ¿verdad?- Chaewon acarició con sus dedos la muñeca de Hyejoo distraídamente.
-Por supuesto- Hyejoo sonrió. -Vas a conocer a mi loca familia.- Chaewon se rió y giro la mano de Hyejoo, trazando círculos en su palma.
Semanas habían pasado desde la absolución de Chaewon. Las estaciones habían cambiado, el clima era perfecto, era cómodo no importa lo que llevaran puesto.
Después de ser liberada, Chaewon estaba obligada a iniciar sesiones de terapia de rutina. Al principio, la chica había dudado. Pero con ayuda de Hyejoo, y el tiempo, las visitas quincenales comenzaron a mostrar progreso.
Ella nunca estaría de vuelta al 100%. Pero cómo su médico le había dicho, siempre había espacio para mejorar.
Una de las principales preocupaciones de Hyejoo había sido la relación entre ella y Chaewon. Habló con el terapeuta de Chaewon directamente, disparando preguntas, una tras otra a la mujer de mediana edad.
Ella había estado saliendo con una lista interminable de términos médicos, que básicamente explicó a Hyejoo que sí, Chaewon era capaz de amar. Y una relación estaba bien, siempre y cuando tomaran las cosas a un ritmo lento, y que Chaewon fuera muy consciente de a dónde iban las cosas.
Chaewon era consciente. Definitivamente consciente. Cuando Hyejoo había discutido el futuro con ella, ella se encontró con una Chaewon muy animada, hablando y hablando sobre lo cómo iban a nombrar a sus hijos, y de qué color pintarían su casa. (Amarillo, obviamente.)
La idea de pasar el resto de su vida con Chaewon le causaba mariposas a Hyejoo cada vez que pensaba en ello. Pero ella podía esperar. Cuanta más gente conocía diariamente, más se daba cuenta de lo mucho que necesitaba a Chaewon .
Y ahora, aquí estaban. Semanas más tarde, de la mano en el coche de camino a casa de Hyejoo. La madre de Hyejoo había invitado a Hyejoo y a su 'misteriosa novia' para pasar la Navidad con ellos.
Así que, sí, Hyejoo estaba nerviosa. Extremadamente nerviosa. No tenía idea de cómo sus padres reaccionarían cuando se enteraran de quien en realidad era la misteriosa chica. Porque hasta donde sabían, Hyejoo todavía odiaba Chaewon con todo su ser.
-Aquí estamos,- Hyejoo sonrió nerviosamente. Ella apretó la mano de Chaewon y apuntó con la cabeza hacia la casa en la esquina de la calle. Un grupo de niños pequeños se reunieron en el jardín delantero, pateando una pelota inflable.
-Me gusta- Chaewon sonrió ampliamente, sentada más derecha para tener una mejor vista de la casa. Hyejoo aparcó el coche y respiró hondo, volviéndose a Chaewon .
-¿Estas lista?- preguntó, mordiéndose el labio. Chaewon asintió.
-¿Tu lo estás?- le preguntó de vuelta, con el hecho de que Hyejoo estaba más nerviosa de lo que ella había de admitido.
-Tan lista como yo nunca lo he estado- Hyejoo arrugó la nariz y besó la mano de Chaewon . -Vamos-. Ella abrió el coche y se deslizó de su asiento.
-¡Hyejoo!- una pequeña niña chilló, alejándose del grupo y corriendo hacia la niña mayor.
-Hola, pequeña- Hyejoo se rió, cogiendo a la niña que prácticamente saltó a sus brazos. -¡Estas mucho más alta!-
-¡Sí! Mamá dice que es porque yo como mis bedgetales- la pequeña rió y envolvió sus manos alrededor del cuello de Hyejoo. -¿Sabías que Santa va a venir esta noche? Él me va a traer una b-
La niña más pequeña rápidamente se calló y Hyejoo levantó una ceja. Se dio la vuelta, al darse cuenta que la niña había estado mirando a Chaewon, que estaba con timidez detrás de ellas.
-Marin- Hyejoo sonrió suavemente y le indicó a Chaewon que se acercara. -Esta es mi amiga Chaewon, ¿puedes decir hola?-
-Chaewooon- Marin rió y arrugó la nariz. -¡Hola!-
-Hola- Chaewon sonrió tímidamente, agitando su mano. Hyejoo sonrió a su novia y volvió a mirar a la niña en sus brazos.
-Chaewon, esta es Marin- asintió con la cabeza a la niña. -Es mi hermana. Bueno, adoptada-.
-Su madre era uno de los clientes de mi mamá en el trabajo. Ella murió dando a luz, y mi mamá no permitió que la pusieran en el sistema de crianza- dijo suavemente y alborotó el cabello de Marin. -Ella tiene seis.-
-Oh- Chaewon asintió, pensando en lo que acababa de decir Hyejoo.
Hyejoo se rió y dejó a Marin en el suelo, pensando que iba a reunirse con sus primos en el jardín delantero. En lugar de ello, Marin agarró de la mano de Hyejoo y tiró de ella hacia la entrada.
-¡Tienes que ver el dibujo de tiza que hice 'yer!- Hyejoo miró a Chaewon , dándole una sonrisa de disculpa antes de que ella estaba siendo prácticamente arrastrada por la niña.
Unos minutos más tarde, Hyejoo fue finalmente capaz de zafarse de la gran cantidad de dibujos de tiza y hacer su camino de regreso hacia donde Chaewon estaba. Marin saltó tras ella contenta.
Hyejoo se preocupó cuando Chaewon no estaba donde la había dejado. Ella miró frenéticamente alrededor del patio, suspirando de alivio cuando vio a su novia rodeada de niños, teniendo una amplia sonrisa en su rostro.
-No las maten- Chaewon negó con la cabeza y suavemente movió una de las manos del niño lejos de las flores. -No serán bonitas si las matas.-
-Hey Unnie, ¡atrapa!- Marin lanzó una pelota de playa en dirección a Chaewon. Esta se rió y golpeó el balón hacia atrás. Los niños chillaban con entusiasmo y corrieron tras el juguete. La pelota iba de nuevo en dirección de Chaewon, y pronto el juego de atrapar la pelota estaba en pleno apogeo.
Riendo suavemente para sí, Hyejoo trotó hasta los escalones de la entrada y vacilante tocó el timbre. Debía de enfrentarlo. Miró a Chaewon, quien se encontraba actualmente en el suelo con un montón de niños riendo animadamente sobre ella. Ella tuvo que contener su risa cuando oyó pasos que se acercaban. La puerta se abrió momentos después.
-¡Oh mira! Es Hyejoo y...- la voz de su madre se desvaneció cuando se dio cuenta que Hyejoo estaba sola. O al menos eso pensó. Hyejoo miró a Chaewon, que acababa de liberarse, poniéndose de pie y arrojando la pelota de playa al otro lado del patio.
-Oh, Dios mío- su madre jadeó en voz baja. La respiración de Hyejoo se quedó atorada en su garganta cuando ella sintió estar siendo arrastrada adentro, sobresaltándose cuando la puerta se cerró detrás de ellas.
-¡¿Trajiste a una asesina a cenar?!- su madre prácticamente gritó, señalando a la puerta principal. -¿Y dónde está tu novia?-
Hyejoo se mordió el labio. -Ella no es una asesina- dijo en voz baja, mirando por la ventana con preocupación. -Y ella es eso. Chaewon es mi novia-.
-Hyejoo, ¡hay artículos por toda la ciudad sobre la muerte de su tío! Estás bromeando, ¿verdad?- Hyejoo negó con la cabeza lentamente.
-Mamá, puedo explicarlo, ella es b-
-¡¿Oli?!-
Los ojos de Hyejoo se abrieron e hizo un movimiento para agarrar el picaporte. Sintió los ojos de su madre haciendo un agujero en la parte posterior de la cabeza y respiró hondo, abriendo la puerta.
-Wonnie, estoy aquí- ella agitó su brazo, captando la atención de Chaewon. La pequeña chica suspiro de alivio y corrió a su novia, agarrándole el antebrazo y manteniéndose a su lado.
-Uh, mamá- Hyejoo se aclaró la garganta y jaló a Chaewon dentro de la casa. -Me gustaría que conocieras a Chaewon. Chaewon, esta es mi madre-.
-Hola- Chaewon sonrió suavemente, ofreciendo un pequeño gesto con sus manos. Hyejoo contuvo el aliento cuando su madre no respondió. Después de unos segundos de incómodo silencio, se volvió a Chaewon y le apretó la mano.
-Puedes volver a jugar, tengo que hablar con mi mamá. ¿Está bien? -
-Okay- Chaewon dijo, dando a Hyejoo una suave sonrisa. La mayor besó la mejilla de Chaewon inocentemente y la observó mientras regresaba de nuevo al jardín delantero. Ella fue inmediatamente rodeada por niños una vez más, rogándole que jugara con ellos. Hyejoo se rió en voz baja, pero su risa se desvaneció rápidamente cuando ella se volvió hacia su madre y vio la expresión de su cara.
-Yo no apruebo esto en absoluto, Hyejoo- su madre se cruzó de brazos y negó con la cabeza.
-Sólo déjame explicarte- Hyejoo negó con la cabeza. Su madre la miró expectante.
-Sabe sobre el accidente de coche- Hyejoo se aclaró la garganta y con ansiedad pasó una mano por el cabello. -Ella ni siquiera se acuerda mucho de la escuela secundaria, y... su tío no era... era abusivo. Todo el asunto del "asesinato"... ella estaba tratando de protegerse a sí misma. Ellos piensan que se disparó solo cuando ella estaba luchando para quitarle el arma... y...- Hyejoo miró los zapatos y respiró hondo.
-Esto es ridículo, Hyejoo- su madre suspiró y sacudió la cabeza. -Ella es una psicótica-.
-No te atrevas- la cabeza de Hyejoo se alzó violentamente, mirando a su madre. -Ni siquiera la conoces.-
-Sigo sin aprobar esto- su madre se cruzó de brazos y levantó una ceja a Hyejoo.
-Bueno es mejor que lidies con ello- Hyejoo dijo. Ella nunca había sido de las que contestan de esa manera, por lo que las palabras que había dicho le sorprendieron. Su madre no respondió. Hyejoo no la dejó. La puerta se cerró de golpe detrás de ella antes de que su madre tuviera la oportunidad de protestar.
Hyejoo suspiró pesadamente, pasándose una mano por el cabello y escaneando el patio. Centró los ojos en Chaewon, y la pequeña de inmediato supo que algo andaba mal.
-¿Oli?- ella inclinó la cabeza hacia un lado y corrió hacia su novia. -¿Estás bien? Pareces triste. -
-Estoy bien- Hyejoo negó con la cabeza. -Sólo nerviosa.-
-¿Necesitas un abrazo?- Chaewon sonrió tímidamente con los brazos extendidos. Hyejoo se rió y abrazó a Chaewon. La niña tarareaba contenta y besó la mejilla de Hyejoo cuando se alejaban.
-¿Son mejores amigas?-
Ambas chicas se sobresaltaron, mirando a la niña más pequeña al lado de ellas. Marin inclinó la cabeza hacia un lado, esperando una respuesta.
-Chaewon es mi novia- dijo Hyejoo suavemente, arrodillándose junto a Marin.
-¿Novia?- Marin miró a Chaewon y luego de vuelta a Hyejoo.
-Sí...- Hyejoo se mordió el labio, tratando de pensar en una explicación.
-Sí- Chaewon habló. -Algunas chicas les gustan las chicas y algunos chicos les gustan otros chicos. Eso está bien. Si te hace feliz, está bien. ¿Verdad?- miró a Hyejoo, que se sonrojaba ligeramente.
-Correcto- Hyejoo asintió una vez.
Marin miró hacia atrás y hacia adelante entre ellas por un momento, pensando en lo que acababan de decir. -¡Está bien!- sonrió, agarrando la mano de Hyejoo. -¡Ven a jugar conmigo!- ella extendió la mano y tomó la mano de Chaewon también. -Tú también, Chaewon.-
-Eso fue más fácil de lo que pensaba- Hyejoo se mordió el labio, mirando hacia la puerta. Siguió a Chaewon y a Marin hacia el grupo de niños, saludando a sus primos.
•••
-¡Encantada!- Chaewon se rió, saltando desde detrás de un árbol y tocando el hombro de Hyejoo. La niña mayor salto, dándose la vuelta y juntando las manos sobre su corazón.
-¡Me asustaste!- ella arqueó las cejas a la chica riendo. -¡Eso no es justo!-
-¡Atrapas!- Chaewon arrugó la nariz. Hyejoo negó con la cabeza y dio un paso hacia Chaewon .
-Entonces será mejor que corras- ella sonrió. Chaewon chilló y se fue por el patio, siguiendo el grupo de niños que corrían en la misma dirección.
-¡Wonnie, mira!- Hyejoo llamó. Chaewon se dio la vuelta, mirando de un lado a otro para tratar de ver lo que Hyejoo estaba señalando. Momentos más tarde, ella estaba prácticamente en el suelo.
-Encantada- Hyejoo sonrió, sosteniendo a la niña en su regazo y tumbándose en la hierba para recuperar el aliento.
-¡Eso no fue justo!- Chaewon se rió, rodando sobre su espalda junto a Hyejoo. -¡Me engañaste!-
-Estamos justas- Hyejoo se rió.
-¡Atrápenlas!-
Hyejoo y Chaewon se miraron cuando escucharon una estampida de pasos en su dirección. Antes de que pudieran reaccionar, el grupo de niños estaban amontonados en la parte superior de ellas, riendo sin parar.
-¡Me ahogo, no respiro!- Hyejoo se rió, tratando de empujarse en una posición sentada. Ella peleó sacando a Marin fuera de Chaewon y haciéndole cosquillas a la niña pequeña hasta que se rindiera.
-¡Ustedes son despiadados!- Hyejoo agarró la nariz de su hermana, por lo que Marin se hecho a reír y se sentó en la hierba junto a los otros niños.
-Me salvaste- Chaewon se rió, poniéndose de pie y sacudiéndose la hierba de sus pantalones. Hyejoo saltó sobre sus pies y, pasándose una mano por el cabello.
-Creo que he ganado- bromeó Hyejoo, dando un paso más cerca de Chaewon y entrelazando sus dedos juntos. -Creo que la ganadora se merece un beso- ella sonrió, volviéndose y señalando su mejilla. Sin embargo antes de que Chaewon pudiera corresponder, los ojos de Hyejoo aterrizaron en la persona de pie en el camino de entrada.
-¿Papá?- ella respiró, apretando la mano de Chaewon que significaba que se detuviera. La niña más pequeña se apartó y siguió la mirada de Hyejoo al hombre en el camino de entrada.
-Ahora vuelvo- Hyejoo se mordió el labio, dando Chaewon una sonrisa de disculpa antes de correr hacia su padre.
-Puedo explicarlo- ella resopló, estudiando su rostro con nerviosismo. -Lo siento si me-
-He hablado con tu madre- dijo, mirando a Chaewon Hyejoo asintió, mordiéndose el labio. Esto no iba a terminar bien.
-Lo siento- ella negó con la cabeza y miró hacia abajo.
-Ya sabes, que iba a venir aquí y hablar contigo acerca de esto- dijo, acariciando la parte posterior de su cuello con la mano. -Pero entonces te vi...- asintió en dirección a Chaewon . -Con ella. Y supongo que lo que estoy tratando de decir es... Creo que eres perfectamente capaz de tomar sus propias decisiones -.
Hyejoo miró en estado de shock. -¿Q-qué?-
-A tu madre... dale tiempo. Ella no está acostumbrada a que estés tan crecida- continuó. -No puedo decir que estoy completamente cómodo con esto, pero creo que todo el mundo merece una oportunidad, ¿verdad?-
-Gracias- Hyejoo dejó escapar el aliento que había estado conteniendo. -La amarás, te lo prometo- sonrió con timidez antes tomarlo en un fuerte abrazo.
-Confío en ti- se rió entre dientes, apretando su hombro cuando se alejaban del abrazo. Hyejoo tomó su labio inferior en medio de los dientes y miró detrás de ella.
-Wonnie- ella hizo un gesto a la chica. Chaewon miró, sonriendo suavemente y corrió hacia las dos figuras en el camino de la entrada. Hyejoo deslizó un brazo alrededor de la cintura de su novia y la atrajo a su lado.
-Papá, esta es Chaewon - ella asintió con la cabeza hacia la chica más joven. -Mi novia.-
-Es un placer conocerte, Chaewon - su padre sonrió cálidamente, extendiendo su mano a Chaewon. La pequeña sonrió, extendiendo su puño y mirando con expectación. Hyejoo contuvo la risa.
-Se supone que tiene que chocar- susurró Chaewon, moviendo su puño hacia atrás y hacia adelante. Hyejoo asintió a su padre, lo que significa que le siguiera el juego.
Él golpeó su puño contra Chaewon, y la chica hizo un ruido con la explosión con su boca, mirando a Hyejoo con orgullo. Hyejoo se mordió el labio, mirando hacia a su padre y estudiando su rostro. Ella dejó escapar un suspiro de alivio cuando él se rió en voz baja.
-Tu madre hizo una gran cena de Nochebuena- su papá se rió, apuntando con la cabeza hacia la puerta principal. -Yo ni siquiera sabía que era una gran cosa, honestamente-. Se dio cuenta de la mirada nerviosa en el rostro de Hyejoo.
-Vamos chicas, las llevaré al comedor- guiñó a Hyejoo en apoyo. Ella suspiró suavemente, manteniendo su brazo alrededor de la cintura de Chaewon y siguiendo a su padre en la casa.
-Espérenos, Chaewooon!- uno de los niños más jóvenes llamó, olvidándose de su juego de atrapar siguiendo a los otros niños dentro de la casa.
-El comedor esta por este lado- Hyejoo se rió cuando Chaewon comenzó a subir las escaleras. -Tienes que conocer a todos.-
-Oh- Chaewon sonrió y saltó de nuevo al lado de Hyejoo, entrelazando sus manos y siguiéndola por el pasillo. -¿Conocer a quién?-
-La familia de mi madre siempre viene y se queda en nuestra casa la noche antes de Navidad para poder despertar y abrir los regalos juntos- explicó Hyejoo, girando en la esquina y entrando al comedor.
-¡Hye!- su hermano saltó de su lugar en la mesa y envolvió sus brazos alrededor de su hermana. -Te ves diferente.-
-Minis el extra humano se ha unido a mí, no cree que he cambiado mucho- Hyejoo se rió, levantando los dedos entrelazados con Chaewon. Sunwoo levantó una ceja, estudió a la chica que Hyejoo había traído con ella.
-Hola- Chaewon sonrió tímidamente, levantando su puño entre ellos. Sunwoo miró inquisitivamente a Hyejoo, pero chocó su puño con Chaewon. Ella hizo un ruido con la explosión de su boca antes de reír en voz baja.
Sunwoo intercambió miradas con Hyejoo. -Me gusta esta- asintió con la cabeza en señal de aprobación. Hyejoo se rió, arrugando la nariz desordenando el cabello de su hermano.
-A mí también, chico- se volvió a Chaewon y le dio un beso en la mejilla, justo en el tiempo que su madre entraba en la habitación con un plato de comida. Ella ni siquiera miró en dirección a Hyejoo. Hyejoo tragó nerviosamente.
-¿Tienes hambre?- Hyejoo levantó una ceja a Chaewon, que estaba mirando la comida en la mesa. Chaewon asintió y tiró de la mano de Hyejoo, tirando de ella para sentarse.
-¡Quiero sentarme junto a Chaewon!- Marin rió, corriendo al comedor y luchando para sentarse encima de la silla al lado de Chaewon .
-Parece que alguien ha hecho una nueva amiga- un hombre sentado en la mesa sonrió a Marin. Chaewon miró a Hyejoo nerviosamente.
-Ese es mi tío Soohyun- explicó Hyejoo con una suave risa. Vio la cara helada de Chaewon y rápidamente le agarró la mano. -Él no es un tío malo, Wonnie.-
-Oh- Chaewon respiró hondo. Hyejoo pasó su pulgar sobre el dorso de la mano para tratar de consolarla. -¿Él es bueno?-
-Sí, ¿ves?- Hyejoo se volvió hacia él. -Tío Soo, esta es Chaewon. Mi novia-. Chaewon sonrió tímidamente.
-Así que esto es de lo que Joohyun estaba hablando- el hombre se echó a reír, extendiendo su mano. -Él hablaba y hablaba sobre "Chaewooon", quien era la chica más cool que conocía- se rió entre dientes. Chaewon sonrió ampliamente y le tendió su puño.
-Se supone que tiene que golpear- Hyejoo se rió, dándose cuenta de su confusión. Él asintió con la cabeza en la comprensión y chocó el puño de Chaewon, haciendo que la chica hiciera un ruido de explosión con la boca y una sonrisa orgullosa.
-¡Joohyun! Ven siéntate a mi lado y Chaewon unnie!- Marin saludó al niño más pequeño que acababa de entrar en el comedor. Pronto, los familiares de Hyejoo comenzaron a llenar las sillas vacías alrededor de la mesa y participar entre sí en la conversación.
Sorprendentemente, todo el mundo parecía más que a gusto con Chaewon . A excepción de la madre de Hyejoo. A lo largo de toda la comida, ella apenas y miraba en su dirección. Hyejoo estaba agradecida de que Chaewon no se diera cuenta de eso.
-¿Cómo va la escuela, Hye?- su padre habló a mitad de la comida. Hyejoo tomó un sorbo de su bebida y se encogió de hombros.
-Mi profesor me subió a clase avanzada- ella sonrió tímidamente. Chaewon miró a Hyejoo felizmente.
-Ella cree que es mala, pero ella es muy buena- Chaewon habló, girando su tenedor alrededor de sus dedos. -La he visto.-
-Creo que es un rasgo común entre la mayoría de los artistas- su papá se rió entre dientes. Hyejoo arrugó la nariz ante Chaewon, quien se rió y miró hacia otro lado.
-Es mejor que estés centrada en tu educación, Hyejoo- su madre habló por primera vez desde que se sentaron. Ella miró a Hyejoo y a Chaewon y levantó una ceja.
-Oh, ella lo está- Chaewon habló antes de que Hyejoo pudiera. -Ella no se deja abrazar hasta que hace su tarea, yo se lo dije.- La cara de Hyejoo creció con un rojo brillante.
La madre de Hyejoo guardó silencio durante el resto de la comida, y Hyejoo tuvo que contener su risa sobre el hecho de que Chaewon había destrozado todo de las sospechas de su madre.
-Mamá, yo y Joohyun podemos ir al arroyo?- Marin habló, señalando su plato vacío y luego al niño sentado a su lado. -¿Por favor?-
-No pueden ir por ustedes mismos, y no creo que a-
-Yo puedo ir- Sunwoo se puso de pie, limpiándose las manos. Marin y Joohyun chillaron con entusiasmo, saltando de sus sillas y corriendo hacia la puerta de atrás.
-¡Son Marin, escucha a tu hermano!- su madre la llamó. La pequeña niña chilló en acuerdo, y momentos después los tres pares de pisadas desaparecieron en el exterior. Hyejoo se rió en voz baja por su emoción.
Pronto, todo el mundo terminó su comida y la madre de Hyejoo comenzó llevando platos a la cocina. Chaewon se levantó en silencio, vagando a la otra habitación. Hyejoo rápidamente la siguió y se detuvo en el marco.
-¿Necesita ayuda?- preguntó con timidez Chaewon, tocando el hombro de la madre de Hyejoo. La mujer se volvió y le levantó una ceja a Chaewon.
-Lo tengo- dijo con frialdad, dando la vuelta y dejando a Chaewon allí de pie en silencio. Hyejoo saltó rápidamente.
-Vamos afuera, Wonnie- dijo en voz baja, agarrando el brazo de su novia. -Está muy agradable como para permanecer aquí dentro.- Chaewon asintió y permitió que Hyejoo la condujera por la puerta trasera.
-No le agrado- dijo Chaewon en voz baja una vez que la puerta se cerró detrás de ellas. -¿He hecho algo malo?-
-Por supuesto que no- Hyejoo suspiró y sacudió la cabeza. Entrelazó sus dedos y llevo a Chaewon hacia el viejo columpio en su patio trasero. -Ella sólo necesita un poco de tiempo.-
-Le podemos dar eso- Chaewon asintió una vez, sentada en uno de los columpios junto a Hyejoo. Ella se acercó y encontró su mano una vez más, oscilando lentamente. -Yo sólo estaba tratando de ayudarla.-
-Lo sé, Wonnie- Hyejoo suspiró. -A mi papá realmente parece que le agradas. Y a Sunwoo. Y a Marin. Y a todos los demás- ella apretó la mano de Chaewon, haciendo a la otra chica sonreír.
-Nunca te di tu premio- Chaewon se dio cuenta, se puso de pie y camino delante de Hyejoo con una suave sonrisa en su rostro.
-¿Mi premio?-
Chaewon asintió, colocando sus manos sobre las rodillas de Hyejoo e inclinándose. -Sí. Has ganado las atrapadas, por lo que ganaste un beso- ella se rió en voz baja antes de inclinarse y capturar sus labios de la chica mayor dentro de los suyos.
Mientras tanto, dos pares de ojos los observaban en silencio desde la ventana de la cocina.
-Ella la ama.-
La madre de Hyejoo, Hyemi, giró la cabeza para mirar a su marido. -¿Qué?- ella levantó una ceja, con preocupación en su voz.
-Hyejoo- asintió con la cabeza, señalando a las dos chicas en los columpios. Chaewon había vuelto a sentarse y se tomaron de la mano, riendo por algo. -Ella la ama.-
-¿Y cómo lo sabes?- Hyemi puso una mano en la cadera, estirando el cuello para tener una mejor vista de su hija.
-Yo sólo hago- Hyunsuk se encogió de hombros. -Cuando la vi por primera vez, había algo en la forma en que la miró. No podía apostar eso al principio. Pero nunca la he visto así con nadie más-.
-¿Estás seguro?-
-Positivo- asintió con la cabeza una vez y se apoyó en el mostrador.
Suspirando, Hyemi se volvió hacia él y se pasó una mano por el cabello. -Es sólo que no quiero que salga lastimada.-
-Ella es lo suficientemente mayor como para tomar sus propias decisiones- el padre de Hyejoo se encogió de hombros. -No estoy muy preocupado. Chaewon parece una buena chica. Confío en el juicio de mi hija-.
Hyemi sólo suspiró y se volvió hacia los platos, mirando a las chicas fuera una vez más.
-¿Sabes que día es hoy?- Hyejoo sacó su labio inferior entre sus dientes, recordando que la Nochebuena también pasó a ser el día en que Chaewon había perdido a sus padres. No podía imaginar tener un trágico accidente como el que le sucedió a sus padres el día antes de lo que se suponía que era un día de fiesta feliz.
Chaewon inclinó la cabeza hacia un lado un poco y pensó por un momento. -¿Mañana es Navidad?- dijo interrogante.
-Sí, pero...- Hyejoo respiró hondo. -Es el aniversario de tus padres... su accidente...- ella se mordió el labio. Chaewon pensó por unos momentos.
-¿Crees que... que les agradaría?- preguntó en voz baja. Hyejoo se acercó, metiendo un mechón de cabello detrás de la oreja y asintiendo con la cabeza de Chaewon .
-Por supuesto que lo harían, tonta- ella le dio una suave sonrisa. -Tú eres su hija. Y también eres una persona bastante impresionante. -
-Pero yo estoy...- Chaewon se miró los zapatos y los arrastró en la hierba mientras ella formaba sus siguientes palabras. -Estoy rota.-
El corazón de Hyejoo dio un vuelco en su pecho y rápidamente negó con la cabeza. -Estás muy lejos de estar rota, Chaewon- se volvió un poco y tomó el rostro de la niña en sus manos. -Escúchame, ¿de acuerdo?-
Chaewon asintió suavemente.
-Tú no estás rota, ¿de acuerdo? Eres Chaewon. Eso es todo lo que eres. No se puede definir a sí mismo con una palabra que otra persona compone- Hyejoo pasó su pulgar por la mejilla de la chica. -Todo depende de ti para definir quién es Chaewon. Y ella no está rota-.
-Oli- Chaewon miró hacia el cielo.
-No he terminado- Hyejoo agarró la mano de Chaewon para tratar de llamar su atención, pero la niña más pequeña estaba mirando hacia el cielo. Un momento después, sintió una gota de lluvia en el brazo. Luego otro, y luego otro, y otro.
Pronto estaba lloviznando ligeramente. Chaewon se rió y se volvió hacia Hyejoo, secándose los ojos.
-¡Hyejoo!-
Ambas chicas saltaron cuando oyeron un grito detrás de ellos. Dos figuras se aparecieron por el bosque, corriendo hacia ellos.
-¿Sunwoo?- Hyejoo se puso de pie rápidamente. La lluvia comenzó ganando velocidad. Chaewon camino en silencio detrás de Hyejoo al igual que Sunwoo y Joohyun se les reunía.
-Marin se ha ido- Sunwoo jadeó, inclinándose y poniendo sus manos sobre sus rodillas.
-¿Qué?- Hyejoo levantó sus cejas, escaneando el patio para ver si estaban jugando una broma.
-No sé, dimos una vuelta y se había ido. La llamamos por su nombre y mire a mi alrededor pero no pudimos encontrarla en ningún lugar- Sunwoo negó con la cabeza y se limpió la boca con el dorso de la mano. -Tienes que ayudarnos.-
-Tengo que decirle a mamá- Hyejoo negó con la cabeza, corriendo dentro y limpiando las gotas de lluvia de la frente.
-¿Mamá?¿Papá?- gritó una vez que ella estaba en la cocina. Oyó pasos detrás de ella significando que la habían seguido.
-Hyejoo, ¿qué pasa?- su madre corrió a la habitación, tomando nota de la preocupación en la voz de su hija.
-Marin se perdió en el bosque en algún lugar- Hyejoo se mordió el labio.
Su padre apareció en la habitación momentos más tarde. Después de explicarles lo que Sunwoo le había dicho, su padre marcó la policía en su teléfono.
Hyejoo podía oír la lluvia constante en el exterior y se mordió el labio. Un trueno la hizo saltar y de inmediato se dio la vuelta para consolar a Chaewon.
Pero no estaba allí.
El estómago de Hyejoo insanamente cayó y se volvió hacia Sunwoo. -¿Dónde está Chaewon?- preguntó, sosteniéndose sus manos y mirándolo con desesperación.
-No lo sé- sacudió la cabeza y miró afuera, donde el cielo se estaba oscureciendo.- Ella no entró con nosotros.-
-Mierda- Hyejoo negó con la cabeza y pasó junto a él. -Mierda, mierda, mierda- ella salió corriendo, haciendo caso omiso de la lluvia torrencial. ¿Dónde se podría haber ido Chaewon? Estaba a su lado hace un segundo. Esto no era bueno.
-¿¡Chaewon!?- Hyejoo llamó, de pie en medio de su jardín y rodeando el perímetro. Al no obtener una respuesta, ella respiró hondo y corrió hacia el bosque.
-¡¿Wonnie?!- gritó, tratando de hacer oír su voz sobre el ruido de la lluvia. -¡¿Marin?!- se abrió paso a través del bosque, tratando de re hacer el camino Sunwoo y los niños habían caminado.
Esto le recordaba demasiado del primer día que Chaewon se había quedado con ellas, donde Hyejoo la había encontrado en el bosque en el parque. Sólo que ahora, había más que perder para ella.
Ella continuó diciendo en voz alta su nombre, tratando de cubrir cada pulgada del bosque detrás de su casa. Otro trueno la envió hacia atrás, casi cayendo. Ella se agarró a un árbol para recuperar el equilibrio.
-¡Hyejoo!- oyó un auge de voz a través de la tormenta y se mordió el labio.
-¡¿Sí?!- gritó, ahuecando las manos sobre su boca.
-¡Necesitas volver dentro!- gritó su padre. Hyejoo corrió fuera del bosque, abrazando sus brazos alrededor de su torso cuando vio a su padre esperándola.
-No puedo, tengo que ir p- ella fue interrumpida.
-No es seguro estar allí, Hyejoo, la policía está en camino- él la agarró del brazo y comenzó a llevarla al interior. Hyejoo miró hacia el bosque, sintiendo su estómago hirviendo en la ansiedad.
Una toalla se envolvió de inmediato por los hombros cuando regresó de nuevo dentro de la casa. Se estremeció y se dirigió de nuevo hacia la puerta, mirando la lluvia caer y gotear por las ventanas de cristal.
-¡Tenemos que ir a buscarlas!- Hyejoo tiró la toalla y se dio la vuelta, frente a su familia, que se habían reunido en la cocina. -¿Qué pasa si alguien las tiene? O... O...? -
Ella sacudió la cabeza, apretando los ojos cerrados y cayendo de rodillas. No podía perder de nuevo Chaewon. Chaewon odiaba las tormentas. No iba a estar en una de forma voluntaria. El silbido del viento fuerte afuera no ayudó a calmar sus nervios.
-Cariño, realmente deberías sentarte- su madre acompañó a su hija en la sala de estar, haciéndola sentarse en el sofá. Hyejoo tomó una respiración profunda temblorosa, mirando por la ventana una vez más.
Observó a sus otros miembros de la familia haciendo lo mismo que ella estaba haciendo, mirando por las ventanas por cualquier señal de vida. Las manos de Hyejoo temblaban, y las apretó en puños para tratar de calmarse.
De repente, las luces parpadearon, haciendo que los niños más pequeños chillaran. Unos segundos más tarde, toda la casa estaba encerrado en la oscuridad. Hyejoo inhaló bruscamente, parpadeando un par de veces y mirando alrededor del cuarto oscuro.
-¡Está bien!- uno de sus tíos dijo, mientras hacía brillar su linterna del teléfono alrededor de la habitación. -Es sólo un corte de energía. No es gran cosa. -
Hyejoo tragó saliva y hundió la cabeza entre las rodillas, pensando en que Chaewon estaba bien. Un ruido la hizo alzar su cabeza.
-¡Son ellas!- alguien chilló. Hyejoo de inmediato se puso de pie, corriendo a la cocina justo cuando alguien abrió la puerta de cristal. Segundos más tarde, Chaewon entrando en la cocina con Marin en sus brazos, cayendo de rodillas tan pronto como todo el mundo las rodeaba.
Marin fue tomada casi al instante por los adultos. Hyejoo corrió al lado de Chaewon, deslizándose de rodillas al lado de su novia.
-Oh, Dios mío, ¿Chaewon?¿Estás bien?- Hyejoo le apartó el cabello mojado de la cara a su novia. Chaewon estaba empapada de pies a cabeza, temblando violentamente.
-S-sí- Chaewon asintió lentamente, secándose los ojos. -Esta f-f-frío- se estremeció, castañeteo de dientes.
Sin decir una palabra, Hyejoo se levantó, colocando a Chaewon en sus brazos. La niña más pequeña envolvió sus brazos alrededor del cuello de Hyejoo y se estremeció.
-¿Qué estabas pensando?- preguntó Hyejoo, llevándola por el pasillo y las escaleras. Con cuidado, se la llevó a su antiguo dormitorio, acostado Chaewon en la cama matrimonial. La habitación estaba en penumbra por la poca luz que quedaba afuera.
-Tuve que ayudar- Chaewon se secó los ojos. Se incorporó lentamente, envolviendo sus brazos alrededor de su torso y mordiéndose el labio.
Hyejoo suspiró, acercándose a su tocador y sacando un cambio de ropa. Ella los puso en la cama junto a Chaewon y le indicó a la chica levantar los brazos.
-Podrías haberte hecho daño- dijo Hyejoo, quitando la camisa mojada de Chaewon fuera de su torso y ayudándola a ponerse una sudadera seca.
-Lo sé- Chaewon jugo con las mangas de la sudadera, pensando por un momento. -Pero yo no quiero que se lastime, tampoco. Tenía que ayudar-.
-¿Dónde la encontraste?- preguntó Hyejoo, mordiéndose el labio y lentamente tirando de Chaewon para ponerla de pie.
-Ella estaba herida- señaló Chaewon la cabeza. -Pero se despertó cuando la llevaba.-
-¿Su cabeza?- preguntó Hyejoo. Chaewon asintió.
-Ella estaba sangrando. Pero sólo un poco - Chaewon hizo un movimiento con los dedos y se estremeció ligeramente.
-¿Frío?- Hyejoo levantó una ceja.
-Sí- Chaewon se rió en voz baja. -Mucho-.
Hyejoo le dio una suave sonrisa, abrumadoramente agradecida de que tanto Chaewon y su hermana estaban bien.
Un trueno hizo que ambas saltaran. Chaewon gimió, mirando alrededor de la habitación oscura, nerviosa. Hyejoo corrió a su cuarto de baño, buscando alrededor en sus armarios hasta que encontró lo que necesitaba.
Dejó la vela en la mesita junto a la cama, encendiendo un fósforo y sosteniéndolo por encima de la mecha. Una vez que la vela se prendió, ella apagó la cerilla y la tiró a la basura. Ahora la habitación estaba un poco iluminada.
Al segundo Hyejoo se sentó en la cama, ella se acercó más a Chaewon, quien prácticamente se metió en su regazo. Riendo suavemente, Hyejoo se recostó y Chaewon inmediatamente apoyó la cabeza en su pecho, acurrucándose junto a ella.
-¿Todavía hace frío?- preguntó Hyejoo, sintiendo la pequeña niña temblando a su lado. Chaewon asintió lentamente, y segundos después Hyejoo tiró una manta sobre ambas.
-Gracias, Oli- Chaewon suspiró suavemente, enterrando su cabeza en el cuello de Hyejoo. La niña mayor pasó los dedos de arriba a abajo de la espalda de Chaewon distraídamente.
-Voy a tenerme que acostumbrar de tu siendo más independiente, ¿no?- Hyejoo se rió suavemente.
-Sí- Chaewon se rió, moviendo su pelo mojado de la cara. -Pero voy a seguir siendo tuya- levantó la cabeza, besando la mejilla de Hyejoo suavemente. La mayor se sonrojó.
-Eso es todo lo que pido- Hyejoo agarró la nariz de Chaewon y se echó a reír. Chaewon arrugó la nariz, dando vueltas y escondiendo la cabeza en la almohada. Hyejoo se dio cuenta de que ella no temblaba más, y suspiró agradecida.
Un zumbido apareció, al igual que las luces parpadearon de nuevo. Hyejoo se sentó y parpadeó un par de veces para ajustar a la luz brillante.
-¿Ella está bien?- preguntó la madre de Hyejoo, apareciendo en la habitación y apuntando con la cabeza en dirección a Chaewon. Hyejoo estaba completamente sorprendida.
-Sí, sólo un poco conmocionada- Hyejoo sonrió suavemente, tomando la mano de Chaewon para consolar a la joven. -¿Esta Marin bien?¿Qué pasó? -
-Ella dijo que estaba jugando donde no debía y se deslizó, supongo que se golpeó la cabeza y cayó- la madre de Hyejoo se sentó en el lado opuesto de la cama. -Chaewon debió encontrarla desmayada en alguna parte.-
Hyejoo miró a Chaewon y le dio una sonrisa reconfortante. La chica más joven le devolvió el gesto, arrugando la nariz juguetonamente.
-Gracias, Chaewon - Hyemi volvió a mirar a la novia de Hyejoo. -Creo que te debo una disculpa.-
-Esta bien- Chaewon se encogió de hombros -Gracias, de nada.-
Hyemi miró a Hyejoo, que se encogió de hombros y se rió. Hyejoo se sorprendió cuando su madre se volvió a Chaewon y le tendió su puño. Chaewon inclinó la cabeza hacia un lado.
-Pensé que se suponía que tenías que chocarlo- la madre de Hyejoo sonrió. El rostro de Chaewon se iluminó y miró a Hyejoo antes de chocar su puño con Hyemi y haciendo su firma de la explosión con la boca.
'Gracias', Hyejoo articuló a su madre, y ella sólo hizo un gesto comprensivo.
-Supongo que las veré en la mañana- Hyemi asintió, poniéndose de pie. -Descansen ahora, Santa viene- se rió, inclinándose y besando la frente de Hyejoo.
-Buenas noches, Chaewon - Hyemi sonrió, besando la parte superior de la cabeza de Chaewon y dando un apretón en su hombro reconfortante. La mandíbula de Hyejoo casi se abrió, ella y Chaewon se miraron cuando estuvieron solas una vez más.
-Tú sí que sabes cómo ganarte a las mujeres Son- Hyejoo bromeó, guiñándole un ojo a Chaewon. La niña más pequeña rió tímidamente.
Hyejoo volvió a caer sobre la cama, tirando del brazo de Chaewon para que hiciera lo mismo. Acababan de acurrucarse cuando oyeron pasos que se acercaban a la puerta. Hyejoo se quejó y se incorporó rápidamente.
-Shhh- la niña más pequeña asomó la cabeza por la puerta y la cerró silenciosamente detrás de ella. -Estaba segura de que estaban durmiendo- Marin rió, mirando a las dos chicas en la cama.
-Hey Rinrin- Hyejoo dio unas palmaditas en el espacio en la cama entre ellas para la niña más pequeña. Marin sonrió feliz, arrastrándose junto a ellas y se sentó con las piernas cruzadas. -¿Cómo te sientes?-
-¡Bien! Todo está mejor, ¿ves?- Marin señaló la bandita de color rosa en la frente. -Chaewon me salvó- sonrió, señalando a la otra chica en la cama.
-Sé que lo hizo- Hyejoo sonrió, apretando la mano de Chaewon .-¿Le agradeciste?-
-¡Oh, sí!- Marin prácticamente tacleó a Chaewon en un abrazo, riendo en voz baja. -Gracias, Chaewoooon-
-De nada- Chaewon se rió. Hyejoo la atrajo de nuevo en una posición sentada y la besó en la mejilla.
-¿Sabías que mañana es Navidad? Yo pedí una bicicleta, y un castillo, y un perro, y un caballo- comenzó Marin, contando a su lista de regalos en sus dedos. Hyejoo bostezó y Chaewon lo notó.
-Entonces hay que ir a dormir- Chaewon miró a la niña más pequeña. -Santa va a venir pronto, ¿verdad?- se volvió y guiñó un ojo a Hyejoo, que tuvo que reprimir la risa.
-¡Verdad!- Marin asintió una vez. -Es mejor que vuelva a la cama- dijo y se arrastró fuera de la cama. -Buenas noches Hyejoooo. Buenas noches, Chaewooon-. Ella les dió a ambas un beso en la mejilla, haciendo una pausa por la cara de Hyejoo por un momento.
-Pienso que deberías de casarte con ella- susurró, sonriendo cuando la cara de Hyejoo se tornó en un brillante rojo. Sin decir una palabra, Marin corrió fuera de la habitación al pasillo.
-Estoy cansada- Chaewon bostezó, por lo que se dió la vuelta y miró a Hyejoo con esperanza -¿Cantas?-
-Sólo para ti- dijo Hyejoo suavemente, inclinándose para apagar la luz antes de acostarse en la cama junto a Chaewon .
Take my hand and let go
(Toma mi mano y déjalo ir,)
I just want you to know
(Solo quiero que sepas)
You're the only one that pulls me in
(que tú eres la única que me empuja dentro,)
You changed everything
(Tú cambiaste todo)
Like one small shaft of light
(Como un pequeño rayo de luz,)
Flooding into my eyes
(Entrando en mis ojos como una inundación.)
I will never see things just the same
(Nunca veré las cosas igual)
But I'm not afraid
(Pero no estoy asustado.)
And all I have doesn't seem so significant
(Y todo lo que tengo, no parece tan importante,)
And at the drop of a hat
(y a la mínima provocación)
I could leave almost everything
(podría abandonar casi todo)
That I've ever known, so here we go
(lo que he conocido, así que allá vamos.)
Step out into the wild
(Da un paso hacia lo salvaje)
There's a beautiful storm in your eyes
(hay una hermosa tormenta en tus ojos,)
We're perfectly intertwined
(estamos perfectamente entrelazados,)
And if it's quite alright
(y si está bastante bien,)
You could be my way of life
(tú podrías ser mi forma de vida.)
Hyejoo terminó la canción sabiendo que Chaewon ya se había quedado dormida. La respiración de la pequeña estaba reducida en la velocidad y sus manos tomaban lentamente su camino debajo de las mangas de la sudadera de Hyejoo.
Algo sobre esta hora de la noche hizo a Hyejoo sentirse nostálgica. Todo estaba tranquilo y silencioso, y ella pudo sostener a Chaewon en sus brazos sin ninguna interrupción. En estos momentos, podía olvidarse de las cosas que habían sufrido en los últimos meses.
Ella suspiró suavemente, presionando un beso suave en la parte superior de la cabeza de Chaewon. La niña más pequeña olía a una mezcla de lluvia y del champú de Hyejoo. Con una sonrisa suave, Hyejoo permitió que el sueño la alcanzara.
•••
Hyejoo fue despertada por el sonido de risas suaves. Antes de que tuviera tiempo de reaccionar, ella oyó una estampida de pasos acercarse a la cama. Momentos más tarde, fue abordada por una multitud de niños risueños.
-¡Oli, despierta!-
Y Chaewon.
Quejándose, Hyejoo se dio la vuelta, sólo para encontrarse con Chaewon, sonriendo ampliamente. Marin y Joohyun se rieron, saltando sobre la cama.
-¿Qué estás haciendo tan temprano?- Hyejoo se volvió hacia su hermana menor, acomodando su cabello. Marin se rió y negó con la cabeza.
-Yo no fui. Fue Chaewon- Marin señaló la chica que estaba sentada al lado de Hyejoo.
-Santa vino- Chaewon se inclinó, susurrando al oído de Hyejoo.
Sentándose, Hyejoo se frotó los ojos y vió el reloj. -¡¿A las seis de la mañana?!- se quedó boquiabierta, ampliando sus ojos a Chaewon. La pequeña asintió contenta.
Antes de Hyejoo pudiera decir nada más, la puerta de su habitación se abrió lentamente.
-Ah bueno- la madre de Hyejoo sonrió. -Pensé que iba a tener que arrastrarte fuera de la cama. Todo el mundo está despierto ya, gracias a estos tres- apuntando con la cabeza hacia Chaewon y los dos niños, que se miraron tímidamente.
-Bien podría conseguir una ventaja en esos regalos, ¿no?- Hyemi sonrió. Marin y Joohyun chillaron con entusiasmo, luchando fuera de la cama y por el pasillo. Chaewon saltó a seguirlos, pero Hyejoo la agarró de la muñeca antes de que ella pudiera.
-Estaremos abajo en un segundo- Hyejoo dio a su madre una suave sonrisa. Afortunadamente, Hyemi no las cuestionó. Una vez que la puerta del dormitorio de Hyejoo se cerró, Chaewon se dio la vuelta, haciendo pucheros.
-¿Por qué me detuviste?- Chaewon inclinó la cabeza hacia un lado y se sentó en el borde de la cama. Hyejoo sonrió y se puso de pie, tomando las manos de Chaewon en las suyas.
-Quería darte tu regalo primero- ella le apretó las manos. El rostro de Chaewon se iluminó y se puso de puntillas.
-¿Dónde está?- preguntó ella con entusiasmo, mirando alrededor de la habitación. Hyejoo se rió y negó con la cabeza, soltando las manos de Chaewon y dando un paso hacia atrás.
Chaewon se confundió cuando Hyejoo se quitó la sudadera, dejándola sólo en una camiseta sin mangas. Sus ojos se abrieron cuando Hyejoo deslizó el tirante de su camiseta hacia abajo.
-Ouch- Chaewon negó con la cabeza, dando un paso adelante y presionando sus dedos por debajo de la clavícula de Hyejoo. -No lo entiendo- dijo en voz baja, mirando hacia Hyejoo.
-Es un tatuaje- Hyejoo se rió suavemente y movió los dedos de Chaewon fuera de su hombro. -¿Recuerdas el día que recogiste las flores y me enoje contigo?-
Chaewon pensó por un momento antes de asentir con suavidad. -Dijiste que yo maté a las cosas bonitas.-
-Era bastante grosera- Hyejoo admitió, mordiéndose el labio y mirando hacia abajo en el tatuaje. -Pero esto es diferente-. Ella extendió la mano, tomando la mano de Chaewon y colocarlo de nuevo en la parte superior del tatuaje.
-¿Sientes eso?- preguntó, sonriendo suavemente. Chaewon asintió.
-Es tu corazón- ella dio unos golpecitos en el pecho de Hyejoo. -¿Por qué?-
-Son dos margaritas, Chaewon - Hyejoo señaló su tatuaje. -Soy yo y eres tú. De esa manera puedes tener tus cosas bonitas-.
-Oh- los labios de Chaewon curvos lentamente en una amplia sonrisa, y ella trazó el contorno del tatuaje. -Me encanta- ella se rió, mirando a Hyejoo lentamente.
-¿En serio?- Hyejoo se mordió el labio para ocultar su sonrisa. Chaewon asintió de inmediato, siguiendo el contorno de las flores una vez más.
-Sí- Chaewon puso sus manos sobre los hombros de Hyejoo y le dio un beso suave en los labios.
-Pensé que podría ser como un anillo de promesa- Hyejoo se encogió de hombros. -Porque sé que el uso de joyas te molesta, así que pensé que sería algo más significativo si tengo algo permanente-.
-¿Un anillo de promesa?- Chaewon inclinó la cabeza hacia un lado y levantó su dedo meñique, recordando su versión de una promesa.
-Sí- Hyejoo se rió, juntando sus meñiques y manteniéndolos entrelazados. Ella colocó sus manos hacia atrás y hacia adelante con suavidad y estudió el rostro de Chaewon . -Básicamente significa que me comprometo a estar a tu lado pase lo que pase.-
-Es una promesa de ser siempre paciente contigo, incluso si a veces es difícil para mí entender. Es una promesa de cantar para ti no importa lo cansada que este. Es una promesa que te compre tantas cosas amarillas como tu corazón desee. Es una promesa de sostenerte a través de la mayor cantidad de tormentas eléctricas que se nos presenten. Es una promesa de que funcionemos-.
Chaewon estaba sonriendo como una idiota por ese punto. Ella miró con timidez. -¿En serio?-
-Por supuesto- Hyejoo besó la frente de Chaewon y presionó sus frentes juntas. -Somos nosotras, chica. Siempre-.
-¿Tú y yo?- Chaewon se encontró con los ojos de Hyejoo.
-Sí- susurró Hyejoo. Se encontró perdida en los ojos de Chaewon por un momento antes de que ella se inclinara y suavemente conectara sus labios.
Sintió chispas estallar en el momento de que sus labios se encontraron, y no pudo evitar las mariposas en el estómago cuando sintió a Chaewon sonreír en el beso. Ella se apartó, manteniendo sus frentes presionadas juntas y mirando a los ojos de Chaewon. Fue en ese momento que Hyejoo se dio cuenta de que esto era lo más feliz que se había sentido en mucho tiempo.
-Tú y yo–
Fin
ªªªªª terminó, voy a extrañar mucho la historia e interactuar con ustedes </3
Recuerden que es una adaptación, todos los derechos a su autora :]
Bueno, me despido, espero que nos encontremos en otra adaptación <3
Lippie ✨
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