Hyejoo no pudo dormir sabiendo lo que había pasado antes. Así que en vez de eso pasó la mayoría de la noche con la música a todo volumen en sus auriculares, mientras miraba al techo e intentaba evadir sus pensamientos, eso no ayudó mucho sin embargo.

No pudo evitar preguntarse lo que Chaewon había estado pensando. Ella había hecho de sus vidas un infierno los últimos cuatro años. ¿Cómo podía esperar que sean algo más que amargas con ella? Hyejoo tenía tantos sentimientos acumulados hacia la joven.

Pero se había producido un cambio en Chaewon, también. Hyejoo se seguía diciendo que Chaewon estaba fuera de sí, pero eso no era una buena respuesta para todo lo que estaba pasando. Había algo más que estaba contribuyendo en el cambio de la chica, y Hyejoo deseaba poder adivinar que era para alimentar su curiosidad.

De vuelta al instituto, todo el mundo conocía a Chaewon. Era la chica que tú amabas o odiabas, todo dependía de la forma en la que te tratase. Si a Chaewon le agradabas, tu vida era fácil, si tenía algo contra ti, estabas jodido. Chaewon tenía el poder de convertir la vida de la gente en un infierno, y eso es lo que le pasó a Hyejoo.

Las noticias se propagaron rápidamente después del incidente en la cafetería. Hyejoo pronto comenzó a recibir nombres despectivos, insultos y a veces: violencia física. Y lo peor de todo era que Hyejoo no lo había provocado, sino que lo había hecho otra persona. Alguien que odiaba con cada fibra de su cuerpo.

A raíz del incidente, Hyejoo estuvo obligada a contárselo a sus padres antes de que otra persona lo hiciese. Su madre estuvo en shock al principio, pero tanto su padre como su madre la aceptaron. Hyejoo ha estado eternamente agradecida a sus padres ya que nunca hablaba de su sexualidad. Estaba muy agradecida de tener apoyo en casa.

Sus padres se cabrearon mucho cuando les contó lo que le había hecho Chaewon. Sus padres informaron a la escuela pero Hyejoo sabía que eso no cambiaría las cosas. Chaewon vivía con su tío y siempre quería dar pena diciendo que este no se preocupaba de lo que hacía. La chica podía dejar escapar lo que quisiese y se aseguraba de que todo el mundo fuese consciente.

Hyejoo era prácticamente impotente. Pasó el resto de sus años del instituto almorzando fuera para evitar los insultos contra ella en la cafetería. Yerim, Heejin y Hyunjin eran sus únicas amigas. Hyejoo sabía que sin ellas, esos años hubiesen sido más dolorosos de lo que fueron.

Mudarse a Seúl había sido un gran cambio para Hyejoo. Decidió ser abierta con las personas respecto a su sexualidad ya que ahora tendría control sobre quién se lo dijo. Se sorprendió cuando a nadie le importó. Eso era reconfortante. Cuando hablaba con personas les decía que era lesbiana, ellas asentían en aprobación y cambiar a un tema de conversación diferente. Todo era totalmente distinto a lo que era en la secundaria.

Sus pensamientos fueron interrumpidos tarde aquella noche. Hyejoo se sobresaltó cuando vio algo moverse fuera de su alcance. Ella entrecerró los ojos para ver que su puerta había sido abierta lentamente. La luz del pasillo era la única iluminación que se veía en su habitación, y vio como una figura se movía a su habitación. Se quitó los auriculares.

-¿Heejin unnie?-, preguntó sentándose en la cama y levantando una ceja. No hubo una respuesta y Hyejoo se ponía cada vez más confusa.

-Hola-, la voz susurró. Hyejoo apretó los puños y suspiró profundamente. ¿Qué estaba haciendo Chaewon aquí?

-Estoy durmiendo. Vete-, dijo firmemente dándose la vuelta sobre sí misma para alejarse de la chica. Sus compañeras seguro que tendrían un montón de explicaciones para ella a la mañana siguiente. Hyejoo apretó su cabeza contra las almohadas para convencerse de que eso era un tipo de un jodido sueño o pesadilla. No necesitaba que Chaewon la jodiese más de lo que ya lo había hecho antes.

-¿Por qué?-, la joven se frustró cuando vió a Chaewon sentándose en la cama de Hyejoo con las piernas cruzadas.

-Porque no te quiero aquí-, Hyejoo dijo sin rodeos. No vió ningún punto en ocultar sus sentimientos hacia Chaewon. Se merecía saber todo el rencor que le tenía Hyejoo.

-¿Por qué?-, Hyejoo bufó y se dió la vuelta. Sentándose y agarrando a Chaewon de los hombros.

-Porque no me caes bien-, dijo alto, pero no demasiado ya que si no despertaría a sus amigas. -Vete de aquí-, dijo entre dientes agarrando su móvil y colocándose de nuevo los auriculares.

-¿Por qué no te caigo bien?-, Hyejoo ignoró a la chica con la esperanza de que la chica se dejase de preguntas. ¿En qué estaba pensando? llegar a la habitación de Hyejoo en el medio de la noche parecía una sentencia de muerte para Chaewon. Hyejoo rodó los ojos.

Hubo un golpecito en el hombro de Hyejoo y ella se quitó los cascos. -¿¡Qué!?-, espetó sentándose y mirando a Chaewon. -Pensé que te había dicho que te fueras.-

Chaewon se echó hacia atrás, pasando rápidamente hasta el final contra el tablero de la cama y la celebración de sus manos en frente de ella. -Por favor-, ella murmuró sacudiendo la cabeza. Hyejoo estaba confusa.

-¿Por favor?-, preguntó ella tratando de mantener la compostura, a pesar de haber acabado de ver un destello de vulnerabilidad en la chica.

Chaewon asintió lentamente y dejó sus manos en su regazo. -Quería hablar.-

Hyejoo levantó una ceja. -¿Qué?-, se rió con amargura. -¿Finalmente vas a pedirme disculpas por haber hecho mi vida miserable? Porque sinceramente, creo que es tarde para eso, Park -, Chaewon la miró totalmente confundida.

-¿Eh?-, Hyejoo rodó los ojos.

-¿Por qué sigues aquí?-, preguntó intentando cambiar de tema. -Pensé que ibas a casa.-

-Esta es mi casa-, Chaewon afirmó. Aplaudió con las dos manos mientras miraba la habitación oscura. -Ustedes son mis amigas.-

-No vives aquí Chaewon-, reiteró. Ahora sabía que ni siquiera las drogas o el alcohol podrían hacer a alguien así. La estaba empezando a asustar. Estaba... ¿preocupada?

-¿Podemos hablar?-, Chaewon preguntó como si no hubiese escuchado lo que dijo antes Hyejoo. La chica de ojos verdes rodó los ojos y se sentó, cruzando las piernas y mirando a Chaewon.

-¿Por qué quieres hablar?-, preguntó pasando su mano por su pelo. Parecía que Chaewon estaba pensando la pregunta.

-Oh, sí-, levantó su dedo índice en el aire.-Somos amigas ¿no? Las amigas ayudan a amigas-, Hyejoo tuvo que aguantarse la risa. ¿Amigas? Eran lo más lejano a ser amigas.

-¿Por qué?-

-Porque estoy asustada-, ella asintió.

Hyejoo frunció el ceño. ¿Asustada? En todo caso Hyejoo debería ser la que estuviese asustada de Chaewon. Incluso fuera del instituto Hyejoo seguía sintiendo miedo hacia la otra chica, pero en este caso Chaewon parecía de todo menos intimidante.

-¿Por qué?-, preguntó pareciendo desinteresada.

-No puedo dormir-, Chaewon asintió una vez y miró alrededor de toda la habitación. -No puedo ver nada.-

-Eso es porque es de noche-, Hyejoo rodó los ojos. -Cierras los ojos y entonces duermes, es de sentido común-, ella sacudió la cabeza.

-Pero estoy asustada-, Chaewon juntó las manos despacio y suspiró lentamente. -No me gustan las cosas nuevas.-

-¿Cosas nuevas?-, Hyejoo levantó una ceja.

-Sí-, asintió. -Esta casa-, Hyejoo estaba cada vez más confusa. Estaba empezando a estar preocupada por la otra chica. Hyejoo sabía que tenía que poner fin a la conversación.

-Sal de mi habitación-, dijo firmemente apuntando a la puerta.

Chaewon miró la puerta y sacudió la cabeza. -Pero es tu turno-, ella dijo mirando a Hyejoo, colocando su dedo índice en el punto anterior del corazón de Hyejoo. Hyejoo se acercó y empujó la mano de la chica fuera de ella.

-¿Mi turno?-, dijo empujando la mano de Chaewon ya que ella intentaba hacer contacto otra vez.

-Sí-, asintió. -Los amigos hablan con sus amigos cuando están asustados. ¿Tú estás asustada?-, Hyejoo estaba muy frustrada.

-No Chaewon, no somos amigas-, rodó los ojos y se alejó de la chica lo máximo posible.

-Pero teníamos química juntas...-, ella dijo más suave, arrastrándose hasta donde Hyejoo. La otra chica apenas tenía espacio personal. -Así que... somos amigas.-

-¡No somos amigas Chaewon!-, Hyejoo espetó, sentándose al lado de la chica y agarrándola por los hombros. -Aléjate Chaewon-, dijo firmemente. -Saca ese pensamiento de tu mente. No soy tu amiga-, su voz era más alta en su garganta.

Chaewon se estremeció y levantó las manos. -Por favor-, sacudió su cabeza muy rápido. Hyejoo la ignoró, saliendo las dos de la cama y llevando a Chaewon de los hombros al pasillo.

-Aléjate, Chaewon-, dijo firmemente empujando a la chica al pasillo y cerrando la puerta con coraje.

-Okay-, la voz sonó detrás de la puerta. Después de asegurarse de que la puerta estaba cerrada, se arrastró a la cama y se volvió a poner los auriculares. Sabía que no iba a dormir mucho esa noche.

Y estaba en lo cierto. No pudo pegar ojo así que estuvo viendo capítulos de Netflix y criticó a toda su biblioteca de música, tratando de alejar cualquier pensamiento sobre la chica que había ido antes a su habitación.

Fue sacada de su aturdimiento antes de esa mañana cuando la puerta se abrió. Hyejoo retiró los auriculares contemplando a Yerim con una mirada de confusión. La chica mayor parecía de todo menos contenta.

-¿Qué le has dicho a Chaewon?-, Yerim preguntó entrando y sentándose en el borde de la cama. Hyejoo rodó los ojos.

-Hay una pregunta más importante-, Hyejoo levantó una ceja. -¿Qué hace Chaewon todavía aquí?-, Yerim suspiró pesadamente y puso una mano en su hombro.

-Sabes que no podemos..ya sabes mandarla afuera a la ciudad como...-, dijo señalando la puerta. -Obviamente ella ha cambiado-, Yerim se mordió el labio.

-Espera... ¿con que estás considerando que se quede aquí?-, Hyejoo se sentó notablemente tensa. Yerim pasó la mano por el brazo de Hyejoo dejándolo en su regazo y tomó una respiración profunda.

Yerim asintió estudiando la cara de su amiga. -Al menos hasta que averigüemos que está pasando con ella-, dijo cautelosamente.

-Probablemente esté drogada-, Hyejoo murmuró sacando su móvil de debajo de las mantas. Cuando volvió la mirada a Yerim esta la estaba mirando incriminadamente. -¿Qué?-

-Ambas sabemos que ese no es el motivo.-

-Está bien-, sacudió su cabeza. -Pero no me voy a hacer responsable si algo pasa con ella si entra a mi habitación de nuevo.-

-Sólo.. intenta darle una oportunidad, Hyeju-, Yerim dijo agarrando la mano de Hyejoo. -No tienes que olvidarla, no espero que lo hagas. Ahora mismo tienes que ser una persona más grande y tratar de entenderlo.-

Hyejoo asintió después de suspirar. -Sí...como sea-, se encogió de hombros.

-Hyunjin está haciendo panqueques, por si quieres alguno-, Yerim dijo despues de levantarse. Hyejoo levantó la cabeza dándose cuenta de lo enfadada que estaba.

-Estaré allí en seguida-, dijo esperando a que Yerim dejara la habitación. Bien. ¿Qué se supone que iban a hacer con Chaewon ahora? Hyejoo no podía mostrar hospitalidad a la chica que odió durante muchos años.

Hurgando entre los cajones, Hyejoo se comenzaba a frustrar porque no encontraba nada que ponerse. Finalmente se decidió por un par de leggings y un suéter de color melocotón, sabiendo que el tiempo empezaba a estar más frío.

-Caliente-, ella oyó la voz de Chaewon cuando descendía por las escaleras de espiral y tuvo que pararse a rodar los ojos una vez más. Una vez que ya estaba en el piso de abajo se paró por un momento y vió a las chicas que estaban en la cocina.

-Hey, no-, Hyunjin agarró la mano de Chaewon y la apartó de la plancha. -Está caliente.-

-Caliente-, Chaewon asintió una vez más pero, obviamente, no entendía porque ella fue por la sartén una vez más. Hyunjin suspiró y dio un manotazo la mano. Chaewon se quedó sin aliento y sujetó la mano en frente cara de Hyunjin. -Ouch.-

Heejin dio la vuelta desde su lugar en el mostrador, al ver a Hyejoo en la parte inferior de las escaleras.

-¡¡Está viva!!-, Heejin rió saltando al suelo y caminando hacia la chica. -¿Cómo has dormido?-

-No lo hice-, Hyejoo murmuró rasgando sus ojos lejos de la cocina. No esperó a que su amiga le contestase y se fue al salón cuando llegó se lanzó al sofá.

-No creo que ninguna lo haya hecho-, Heejin suspiró sentándose al lado de Hyejoo. -No sé qué la tiene tan molesta.-

-¿Eh?-, Hyejoo preguntó confusa ya que no sabía de que estaba hablando la otra chica.

-¿No escuchaste el jaleo de anoche?-, Hyejoo sacudió su cabeza. Ella había estado con los auriculares toda la noche después de que Chaewon había ido a su habitación.

-¿Por qué? ¿Qué pasó?-

Heejin suspiró y se tiró en el sofá. -No lo sé. Yerim dijo que Chaewon había ido a su habitación a mitad de la noche y estaba molestada por algo, pero no le dijo nada-, Heejin miró a su amiga.-Seguía diciendo que si éramos sus amigas-, Heejin notó la mirada de su amiga y levantó una ceja. -¿No sabés porqué pasó todo esto, verdad?-

-Ella vino a mi habitación ayer y no quería dejarme sola. Así que le dije que no éramos amigas y le dije que se fuera.-

-Ese debe de ser el motivo por el cual está así-, Heejin dijo suavemente. Hyejoo la miró y se mordió el labio preguntándose si sus amigas iban a estar molestas en la forma que trató a Chaewon. -La verdad, no te culpo-, Heejin se encogió de hombros y apoyó su cabeza en el respaldo del sofá.

-¿De verdad vamos a dejar que se quede aquí?-, Hyejoo preguntó después de momentos de silencio.

-No lo sé-, Heejin miró a Hyejoo. - Creo que la única cosa que podemos hacer ahora es darle una oportunidad ¿no?-, Hyejoo simplemente se encogió de hombros.

La azabache se sobresaltó cuando vió a Chaewon sentada detrás de ella, sujetando un plato de panqueques. Llevando puesta su camiseta. La que estaba buscando esta mañana.

-¿Cómo la conseguiste?-, Hyejoo preguntó apuntando a la camiseta. Chaewon miró a donde estaba apuntando y luego miró de nuevo a Hyejoo. Parecía casi asustada.

-La..la encontré-, ella asintió.

-¿Dónde?-, Chaewon se lo pensó por un momento.

-En la habitación-, ella finalmente habló apuntando a la escalera.

-¿Mi habitación?-, Hyejoo preguntó y Chaewon se encogió de hombros.

-La encontré-, ella repitió. Hubo un silencio durante un momento antes de que llevase el plato de panqueques a la cara de Hyejoo. -Felicidades-. Hyejoo empujó el plato fuera de su cara.

-No es mi cumpleaños-, ella rodó sus ojos. La expresión de la cara de Chaewon fue de vacilación durante unos momentos y miró nerviosa a la cocina.

Hyunjin vió la mirada de suplicación de Chaewon y caminó hacia ella. -Ella quería darte panqueques-, Hyunjin explicó a Hyejoo. -Cree que no eres su amiga.-

Hyejoo ignoró la mirada de suplica de Hyunjin y se levantó. -No soy su amiga-, dijo firmemente antes de agarrar su mochila y ponérsela en sus hombros. -Voy a salir-, murmuró antes de abrir la puerta y salir del apartamento tras cerrar la puerta detrás de ella.

Hyunjin hizo un movimiento para salir detrás de ella pero Heejin la agarró del brazo. -Dale algo de espacio, Jin-, la chica le dijo. Las tres amigas sabían que Hyejoo estaba cabreada y lo mejor era darle algo de espacio.

-¿Por qué?-, Chaewon habló todavía aguantando el plato de panqueques. Caminó hacia la puerta y se quedó mirándola, como si estuviese esperando a que Hyejoo regresara. Después de un rato levantó sus puños y tocó la puerta.

Hyunjin rápidamente trotó hacia Chaewon y le quitó el plato de las manos dejándolo en la cocina antes de agarrar la mano de Chaewon y hacer que se siente en el sofá. -¿Chaewon?-

-Sí- Chaewon asintió.

-¿Por qué has venido a aquí?-, Hyunjin preguntó intentando no parecer muy frustrada. -¿Te ha pasado algo?-, el rostro de Chaewon era pensativo. Se mordió el labio y miró al techo por un momento antes demirar el rostro de Hyunjin.

-Tenía que irme-, ella dijo suavemente como si estuviese insegura de sus palabras. Entonces ella aplaudió y asintió. -Tenía que irme.-

-¿Por qué te tenías que ir?-, Yerim habló caminando y sentándose al lado de Hyunjin. Chaewon se lo pensó por un momento antes de encogerse de hombros. Yerim suspiró y pasó una mano por su pelo. -Supongo que tendremos que creer en que nos lo contará cuando llegue el momento-, dijo tranquilamente mirando a Hyunjin quien se encogía de hombros.

-Oh mierda, Hyunjin-, dijo Heejin levantándose y mirando el reloj. -Tenemos que prepararnos para ir a clase-, ella empezó a caminar y subió las escaleras.

-¿Quién tiene clase en sábado?-, Yerim rió mirando a Hyunjin quien bufó alto.

-Alguien que está suficientemente loco como para ser alguien importante en el mundo del baile-, Hyunjin rodó los ojos en tono de broma. -Era la única vez que nuestra profesora podía pillar el auditorio vacío, tenemos un gran show pronto-, miró arriba, donde Heejin tuvo que salir corriendo. -Heekkie, agarra mi mochila.-

-Ahí va-, una voz resonó, y una bolsa de lona negro grande se arrojó sobre la barandilla. Aterrizó en el suelo con un ruido sordo.

-¡¡Por favor!!-, Chaewon lloró tapando sus orejas y acurrucándose detrás del sofá. Yerim y Hyunjin intercambiaron miradas antes de que Yerim mirara detrás del sofá.

-¿Estás bien?-, preguntó la chica más baja a la otra chica la cual seguía con los oídos tapados. Ella levantó la mirada lentamente a Yerim e inmediatamente sonrió.

-Sí-, ella asintió. Chaewon se levantó mirando a Hyunjin caminar hacia la puerta detrás de Heejin después de haber agarrado su mochila.

-Adiós Yerim-, Hyunjin gritó dándose cuenta de una Chaewon expectante al lado de ella. -Eh...Adiós, Chaewon-, dijo tranquila sujetando la puerta para que saliese Heejin y después ella.

La cara de Chaewon se iluminó y agitó ambas manos en frente de ella. -¡Buenas Noches!-, ella gritó a pesar de que la puerta ya se había cerrado. Yerim miró a la chica confusa preguntándose qué le había pasado. Era como si Chaewon fuera una persona completamente diferente.

Un capítulo más para que sus dudas aumenten jsjaj
Lippie ✨