OtaYuri
Anime: Yuri!!! on Ice

Narra Yuri:

- ¡Ah! Otabek no seas tan rudo.- me queje por el gran mordisco que dio en mi hombro.

- Lo siento.- se disculpó pero siguió mordisqueando y lamiendo esa parte. 

Realmente era una sensación muy buena y relajante. Aunque no puedo evitar estar alerta debido a que estamos en los baños de la pista de patinaje pública. 

Joder, ¿como llegue a aceptar hacerlo aquí? Probablemente sea por la desesperación de no ver a Otabek en tanto tiempo. Pero aún así, es bastante incómodo el que pueda entrar alguien y vernos así.

- Oye relajate.- dijo él mientras ya tenía su mano metida por debajo de mi camiseta.

- Estoy calmado.

- ¿Y es por eso que no paras de estar observando la puerta?- yo me quedé callado.- Oye calmate... Hace mucho que no lo hacemos y no me gustaría desaprovechar esta oportunidad porque a saber el tiempo que pasara para que pueda volver a verte así. Pero si te sientes incomodo o no quieres hacerlo no te puedo obligar.

- No es que no quiera... Pero, ¿y si entra alguien?

- No va a entrar de verdad.

Aun no muy convencido, accedí a hacerlo. 

Otabek me guió a los lavabos y antes de sentarme encima de ellos me quito los pantalones y boxers. 

- Tampoco nos entretendremos mucho, ¿vale?- yo asentí.

Él bajo levemente la parte baja de su ropa. Se metió entre mis piernas y no lo pensó para meterlo en mi interior. Yo gemí no muy fuerte, lo suficiente para que mi pareja lo oyera. Me besaba constantemente para evitar que yo levantase la voz y con sus caricias me hacia olvidar que estamos en un baño. Finalmente note como si semen inundaba todo mi interior. 

- No te corriste...- Otabek me saco de mis pensamientos.

- Ah... no te preocupes.

- ¿Será porque el lugar te incómodo? No importa, de todos modos haré que te corras.

Acto seguido me bajo del lavabo y me colocó de espaldas a la pared. Vi como él se agachaba en frente mía. 

Me sonroje sutilmente cuando me di cuenta de lo que estaba apuntó de hacer. Metió mi miembro en su boca. No pude evitar gemir suavemente cuando note su ruda lengua de esa manera. 

Jugaba con su lengua por la punta de mi pene y su boca coordinada con su mano me llevaba al séptimo cielo. Yo jalaba de su pelo y él daba pequeños gemidos, que me daban el doble de placer por las vibraciones de su voz. Comencé a respirar muy agitado cuando sentí que mi semen iba a salir de mí. Avisé a Otabek, aunque él siguió con labor.

- ¡Ah! No Otabek sabes que no me gusta hacerlo en tu boca.

Él lo saco y me miró con un leve hilo de saliva que llevaba desde la punta de mi miembro hasta su lengua. Se levanto del suelo así quedando a poco centímetros de mi cara. Llevo su mano a mi pene y posó el pulgar en la salida de mi entrepierna.

- Entonces no dejare que te corras.- y seguidamente me dijo eso.

- Joder... Otabek no me hagas esto...

- Ooh, claro que si.- apretó más aún.

A lo que yo me queje con un quejido.

- Por favor... Haré lo que quieras pero no me hagas esto...

En ese momento me di cuenta que condene mi pequeño trasero a una toda una vida al disfrute sexual de Otabek. Y como me esperé él sonrió de una manera muy sensual de lado y con un movimiento digno de un ninja me puso mirando hacia la pared. 

Gemí fuerte cuando note de nuevo su pene en mi interior. Se movía bruscamente y a mi me comenzaba a dar igual si alguien nos oye o entra. Grité, grité como jamás lo había hecho con él. No mucho tiempo después yo me corrí manchando parte de mi camiseta y la pared. Aunque no paró.

Respiré agitado, sudado y agotado. Si no recuerdo mal, se vino... demasiadas veces dentro de mí. Mis piernas temblaban levemente. Mientras Otabek se acomodaba su ropa. Cuando lo hizo, se acerco a mí y beso mi mejilla.

- Te espero en la pista.

Actualización: septiembre 2020