Se dice por muchos que las coincidencias no existen, pero en este basto árbol, las coincidencias son más que solo una realidad, son un hecho más que inevitable, ahora mismo se estaba repitiendo la misma situación a unas cuantas mujeres, las cuáles no tuvieron un buen final.

~Hazbin Hotel~
(Lilith)

Estaba de rodillas, llorando a más poder, había sentido como su existencia había sido reducida a nada, se odiaba a su misma, todo lo que habia hecho, abandonar a su primer esposo por solo mentiras y palabras vacías.

Que extraño... -

(¡!) - Se dió la vuelta rápidamente, había estado en ese lugar completamente vacío por varias décadas.

¿Quien demonios eres...? -

Yo...?, yo soy El Escritor - Se nombró a sí mismo el encapuchado, sin que la mujer rubia con cuernos lo hubiera notado, unas cuantas raíces azul marino combinado con lo que parecía ser algo parecido al hueso salían por debajo de la túnica del Escritor.

Y Parece que necesitas otra oportunidad... -

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~Hazbin Hotel~
(Eva)

Estaba con una mirada perdida, sus ojos ya le ardían de tanto llorar, solo ocultaba su rostro entre sus brazos, estaba cansada de escuchar lo mismo de su mente.

Ya cállate... -

"No gracias, me gusta molestarte" -

¿Por qué me atormentas...? -

"¿Por qué abandonaste a tu marido perfecto?" - Respondió con otra pregunta, al escuchar eso Eva solo quiso llorar más.

"¿Por qué le hiciste eso?, ¿por qué le diste esa maldición?, ¿por qué lo hiciste sufrir?" -

... -

Vaya, vaya... otra más... -

¿Otra voz...? -

No, soy algo superior, soy El Escritor -

¿Quieres otra oportunidad? -

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~Hazbin Hotel~
(Lute)

Veía con ojos cansados otra escena, veía a su ex-señor teniendo un momento familiar con su tercera esposa y su hijo, su mente ya estaba más que quebrada, desde que llegó aquí, su mente no paraba de armas situaciones en donde su señor era feliz con otra persona.

Aquí va la tercera... - Al escuchar esas palabras volteó su mirada lentamente, sus ojos ya no tenían una pisca de brillo.

Creo que quieres una nueva oportunidad -

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~Hazbin Hotel~
(Vaggie)

El espacio en el que se encontraba era raro, era gris, sin un atisbo de brillo o oscuridad, confundida, pero algo inquieta caminaba sin rumbo amparente, eso hasta que escuchó una voz.

Aquí va la cuarta... -

¿Adam...? - Trató de voltear a dónde se escuchó la voz, pero se le era imposible, sus ojos fueron desgarrados por Miguel al tratar de ayudar a Adam en su lucha contra este mismo.

No, soy El Escritor -

¿Que quieres de mi? -

Nada en especial, solo quiero darte una nueva oportunidad -

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~Naruto~
(Haku Yuki)

Estar en el mundo puro era una sensación muy calmante, pero no para ella, estaba sumamente frustrada, cuando llegó aquí pensó que todo había acabado y su descanso sería eterno, hasta se le dió el privilegio de poder seguir observando el mundo shinobi.

Ella lo veía ya que no había nada interesante más que el, Naruto Uzumaki, un chico muy especial para ella.
Vió como le guardaba luto, como recordaba su memoria con gratitud, eso la conmovía por dentro.

Pero su corazón y alma le dolían, ver cómo los años pasaban y como este pasaba por tantas experiencias, dolores, sufrimiento y para que, para que al final viviera en una mentira.

Su enojo y furia por verlo en esa falsa vida se podían sentir por casi todo el mundo puro, verlo tantos años, recordar su bondad, su chacra, sus ojos, su cabello.
Ahí escucho su boleto de partida.

Esto si que es eso raro, tu aquí... -

¿Eh...? -

Normalmente tú en este árbol estás con ese rubio, esto si que es único -

Pero, ¿quieres otra oportunidad? -

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~Kimetsu no Yaiba~
(Shinobu Kocho)

Verlo con esa maldita cazadora en el otro mundo la frustraba, había desperdiciado toda su vida en una venganza, que aunque se completo, no sintió nada. Ni una pisca de placer o satisfacción, solo se sentía tan vacía.

Ver cómo luchaba contra el rey de todos los demonios, como perdía un brazo, como incluso seguía luchando en contra de la posesión del cuerpo del Kamado mayor.

Ahora solo veía con una expresión vacía a su amado teniendo su vida tranquila con esa cazadora, su disgusto por ella solo crecía, pero ahí escucharía una voz misteriosa.

Una mariposa, que raro, estás no tienen tanto veneno en su cuerpo... -

¿…? -

Pareces querer otra oportunidad, no es así? -

~Kimetsu no Yaiba~
(Aoi Kansaki)

Su arrepentimiento era inmenso, pensó encontrar al hombre correcto pero al final solo resulto ser un cerdo que a los pocos años la dejo tirada sola por tantos años, lo único que hacía era pensar en una persona.

Ese rubio con olor a melocotones...
Cómo la consolaba, como la ayudaba, como se divertía con el, como lo ayudaba con sus heridas, como respeto su decisión de no estar con el, como se arrepentía de esa decisión, esa estúpida decisión.

Y escuchó una voz...

Vaya, vaya, que mariposa más rara... -

... -

Pareces desesperada por otra oportunidad -

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~Hazbin Hotel~
(Lilith)

Su sonrisa era más que enorme, si lo que el encapuchado le estaba diciendo era verdad, podría tener una nueva oportunidad para estar con su amado finalmente.

Entonces... ¿aceptas? -

¡Si!, ¡Acepto! -

Solo una condición... -

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~Hazbin Hotel~
(Eva)

Prácticamente tenía la misma sonrisa que Lilith, podía tener una nueva oportunidad, volver a estar con su Adam, sin que nadie la pudiera detener.

¿Aceptas madre de la humanidad? -

¡Si!, ¡Haré lo que sea! -

¿Lo que sea? -

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~Hazbin Hotel~
(Lute)

Sus ojos estaban cubiertos con una felicidad enfermiza, podría tener a su señor a su lado, está vez no se equivocaría, no sería una estúpida.
Antes de que pudiera decir palabra alguna El Escritor, este sería interrumpido por la mujer de cabellos plateados.

¡Acepto! -

De acuerdo, solo una última cosa... -

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~Hazbin Hotel~
(Vaggie)

Solo miraba al Escritor con una enorme felicidad, de todas las mujeres a las cuáles se les fue entregada está nueva oportunidad, ella era la que mentalmente estaba mejor, pero no por mucho tiempo.

Parece que aceptas... -

¡Si, acepto!, quiero volver a estar con el -

Escucha mi condición primero... -

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~Naruto~
(Haku Yuki)

Ahora se encontraba arrodillada, sus ojos caían pequeñas lágrimas, había visto todas las versiones suyas las cuáles se quedaban con su amado, ella era la única que no lo hizo y solo porque...

Porque te rendiste... -

Yo... - No podía pronunciar palabra alguna, un fuerte nudo en su garganta no la dejaba ni balbucear.

¿Que quieres de Naruto? -

Yo lo quiero a el... -

... -

Quiero que sea mío... -

Por eso estoy aquí -

Y ahí, al escuchar esas palabras la sonrisa en su rostro era una llena de una alegría y felicidad, aunque esos sentimientos no eran más que un, podía tener a su amado a su lado.

¿Aceptas? -

¡Si!, no importa lo que pasé, yo estaré con mi Naruto -

Creo que mi condición te gustará mucho... -

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~Kimetsu no Yaiba~
(Shinobu Kocho)

(Tranquilo mi Tomioka, tu Shinobu ya va por ti~) - Pensaría con una enorme sonrisa, el trato que le proponía este encapuchado era muy tentador.

Parece que aceptas, pero primero escucha mi única condición -

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~Kimetsu no Yaiba~
(Aoi Kansaki)

(Encerio que estaba desesperada... da igual, ya acepto de igual modo) -

Escucha niña, está es mi única condición -

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Al mismo tiempo El Escritor diría la única condición que tenían que cumplir estás mujeres si quisieran tener a sus seres amados a su lado.

Sin importar que, sin importar las personas que se interpongan en su camino, hagan de todo para poder tener a su ser amado -

Las siete mujeres también dijieron las mismas palabras, al mismo tiempo.

Aceptó, mi Adam/Naruto/Zenitsu/Tomioka será mío -

El Escritor por debajo de su capucha sonrió, su trabajo había terminado.

Esas mujeres si que están locas jejeje -

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Seras Mío Adam -

Seras Mío Naruto-kun -

Seras Mío Tomioka-san -

Seras Mío Zenitsu-kun -

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Espero que les guste el capítulo de hoy cualquier recomendación, sugerencia o critica que tengan siempre será bien recibida, los quiero.

Yanderes al pasado - Capitulo 1