Capítulo 1
Este fic, esta en proceso de corrección. Lo escribí hace mucho tiempo y quería darle un mejor desarrollo. Si hay un capítulo extraño o incoherente, sepan disculparme.
...
Yuzu: me gustas mei,mis sentimientos nunca te traicionarán, por eso ,si compartes lo que siento...bésame,porfavor
Luego de haberlo sacado de su corazón, Yuzu permaneció en silencio esperando pacientemente la respuesta de Mei, pero incluso después de haber estado tanto tiempo en la misma posición, nada pasó. Su corazón comenzó a palpitar rápidamente con nerviosismo y ansiedad. Hasta que Mei hablo.
— Hazte a un lado, por favor.
— ¿Eh? — Yuzu se quedó en blanco, no estaba segura de haber escuchado bien. No podía ser verdad luego de haber pasado tantas cosas entre ambas.
— ¿Acaso eres sorda? He dicho que te hicieras a un lado — Dijo Mei nuevamente.
Con duda y tristeza, se hizo a un lado para que Mei se pusiera de pie. Al estarlo, sacudió su falda y acomodó el resto de su uniforme. Para luego mirar a Yuzu a los ojos y decir firmemente.
— Lo lamento Yuzu, pero no puedo estar contigo. No siento nada por ti y nunca lo sentiré. Realmente me apena todo lo sucedido, quiero pedirte una sincera disculpa por mis acciones anteriores. Aún así, espero que podamos ser buenas hermanas. Por favor, déjame en paz con ese tema y no vuelvas a molestarme.— Un fugaz destello de tristeza cruzó por sus ojos violetas, pero rápidamente volvieron a ser los mismos de siempre — Si ya no hay nada más por decir, volveré al hotel.
Mei se dio la vuelta, y tras dar el primer paso, Yuzu hablo nuevamente. Quien dijo entre lagrimas.
— ¡¿Cómo puedes ser así? Tú lo sentiste Mei, no me engañes. Se que quieres esto tanto como yo. ¿Por qué es tan difícil para ti aceptarlo?
Aunque no lo demuestre, Mei estaba realmente dolida al escucharla llorar. Más si la causa de su dolor era ella, Pero tenía que mantenerse firme en su decisión, estas cosas no podían volver a suceder. Era políticamente incorrecto, y si alguien debía ser responsable, era ella. Por lo cual intentó con todas sus fuerzas actuar lo más normal posible.
— ¿Aceptar qué?
— ¡Esto! — Dijo Yuzu con notoriedad — Tu y yo. Nos queremos Mei, sé que es mutuo. Lo sentí y pude verlo en tus ojos, ellos nunca mienten.
— Estas confundida, estas viendo cosas donde no las hay.
— ¡Deja de engañarte a ti misma por una vez! Tu abuelo no está aquí para controlar todo lo que haces y no haces Mei. Esta decisión la tomas tú y nadie más.
— Estas en lo correcto Yuzu — La rubia la observo expectante, con una pequeña esperanza en su mirada. — Yo tomo la decisión, y ya lo hice. Te lo repito nuevamente, deja esto.
Yuzu respiro profundamente y habló tan bajo que casi no pudo escucharla. Pero pudo lograr entender cada palabra.
— Lo di todo por ti, se que no me lo pediste y no es algo que pueda echarte en cara. Pero tu lo quisiste, si no me quisieras como yo lo hago por ti ¿Por qué permitiste todo en primer lugar?
Los ojos de Mei se abrieron con sorpresa, aún así, se mantuvo firme.
— Realmente agradezco mucho todo lo que hiciste por mi, pero no significó nada más. Tienes razón en eso, me deje llevar por emociones extrañas y terminaste confundida. Nuevamente, pido perdón por eso. Pero tu sabes, que lo que estas sintiendo esta mal. Es algo inaceptable.
Yuzu respiró hondo, controlando sus emociones y habló más tranquila.
— ¿Sabes algo Mei? Hay muchas cosas que están mal en el mundo, cosas peores e inaceptables como dices. Pero ¿De qué sirve vivir con miedo si al final de cuentas, no se disfruta la vida que nos queda? ¿No es mejor vivir al máximo por el tiempo que nos queda, sin pensar en lo que dirán?
Mei permaneció en silencio hasta que Yuzu volvió a hablar.
— ¿En verdad no me estas mintiendo Mei? ¿Realmente quieres esto? — Preguntó una última vez.
— Es la verdad, así que no insistas más — Le dio una reverencia a Yuzu y se fue silenciosamente.
Yuzu estaba destrozada, su corazón lloraba con ella. Dio todo, pero fue en vano. Tal vez, querer a Mei fue su mayor error. Estuvo creyendo en una persona imaginaria. Fue una idiota de principio a fin. Con pereza, comenzó a dirigirse al hotel donde se hospedaban. Rezándole a todos los dioses existentes, pidiendo un poco de suerte por primera vez. Si bien esto fue el final, podía ser el comienzo de algo mejor. Pese a su dolor, creía profundamente en que podía mejorar y ser mejor de lo que alguna vez fue.
Desgraciadamente, las cosas no siempre salen como uno desea. Esta vez, fue el turno de ella. No era consciente de la hora, el lugar y las personas. Una noche fría era su acompañante en el desolado lugar, y al parecer, un hombre completamente cubierto. La tomaron por sorpresa, la sujetaron de la cintura tapando su boca con un trapo, amortiguando sus gritos desesperados de ayuda.
Yuzu lloró nuevamente, pataleando de un lado a otro sin resultados. Con impotencia, acepto su destino. Las cosas no salieron como ella esperaba ansiosa esa mañana.
...
Al llegar al hotel, Mei verificó junto a los profesores y Himeko cada una de las alumnas que habían asistido al viaje, pero algo no andaba bien. Estaban todas menos ella, Yuzu. Pero descartó su miedo, seguramente estaba por llegar. Luego de su charla era probable que no quisiera toparse con sus ojos y lo entendía completamente a pesar de querer llorar libremente. Le dolía haber dicho todo lo que dijo, pero ya estaba hecho y no podía remediar ninguna de sus acciones. Suspirando, esperó media hora más. Pero nada sucedió. Los profesores se encontraban preocupados ante la ausencia de Yuzu, pero Mei los tranquilizó diciendo que probablemente llegaría en unos momentos. Realmente, no estaba preparada para nada de lo que sucedió a continuación.
— ¿Esa no es Yuzu? — Dijo Himeko.
Todos dirigieron su mirada con coordinación al lugar señalado por Himeko. En ese momento, el alma se escapo del cuerpo de todos. Y Mei se dirigió a Yuzu con sus emociones rebosadas. Estaba aterrorizada, su corazón se contrajo con rudeza y podía jurar que se detuvo mientras caminaba hasta Yuzu.
Ella tenía toda su ropa desgarrada. Su torso estaba cubierto por un simple sostén rosa pastel, su falta estaba rota y sucia mientras su cuerpo entero poseía cortes en cada ángulo posible junto a moretones violetas y rojos. El ojo derecho se encontraba cerrado, en el cual se notaba un duro golpe. Su labio estaba partido y sus muñecas tenían marcas.
La marca de sus lagrimas secas se encontraban por su rostro y sangre caía del interior de sus muslos.
Mei se detuvo a una mediana distancia, cubriendo su boca y dejando caer sus lagrimas.
— ¡YUZU! — Harumi corrió con rapidez hasta llegar a su lado, tomo su chaqueta y la cubrió sin esperar más.
Pero nadie esperó lo siguiente.
Yuzu se alejo rápidamente con miedo, su rostro fue testigo. Comenzó a llorar nuevamente y a gritar pidiendo auxilio. Mei reaccionó y se acercó lentamente con las manos en señal de paz.
— Yuzu, tranquila. Ahora estas segura, déjame ayudarte — Habló a duras penas, dando todo lo que su temblorosa voz le permitía. Pero Yuzu volvió a alejarse de ella con temor, hasta caer desmallada. — ¡LLAMEN A UNA AMBULANCIA!
...
Espero durante mucho tiempo en aquel pasillo blanco y vacío. Siendo sus pensamientos y un silencioso profesor sus únicos acompañantes. Llena de culpa, ignoró todo a su alrededor aislándose completamente del mundo exterior. Hasta que el doctor tocó su hombro levemente.
— ¿Usted es Mei Aihara?
Mei espabiló y se puse de pie con urgencia.
— Lo soy ¿Cómo está ella?
— Escuche señorita Aihara, necesito que venga un tutor legal para poder explicarle la situación. Usted es menor de edad y lo lamento profundamente, pero no puedo darle esos detalles.
— Soy la profesora Yamada, vengo en compañía de ambas alumnas.
— Disculpe señora Yamada, pero no puedo darle detalles a una persona que no sea un familiar de edad mayor.
Mei respiró tres veces para calmar el fuego que se formaba en su interior y la profesora se tragó el resto de sus palabras. Entonces Mei hablo.
— Lo entiendo doctor, pero en este momento nuestra madre esta viajando hasta aquí y dado que no llegara hasta un par de horas no hay nadie más en este lugar, a excepción de mi y la profesora Yamada. Se lo ruego, necesito saber cómo está ella.
El doctor pensó unos minutos y hablo.
— Bien, no puedo darle detalles específicos señoritas. Pero ella esta bien en este momento, tuvimos que anestesiarla para que pudiera descansar. Estaba claramente asustada de todos a su alrededor. Lo cual es una señal de estrés post traumático. — Explico — Cuando llegue su tutora, dígale que vaya a recepción y pregunte por el doctor Himada. Por favor, intenten descansar un poco señoritas. Sin nada más por decir, me despido. — El doctor hizo una reverencia y se fue.
Mei tomo su abrigo y se dirigió al baño del hospital dejando sola a la profesora. Cerró la puerta con seguro y se agacho frente al retrete para vomitar lo que sea que se encontraba en su estómago. Sus lagrimas volvieron a escaparse de su ojos. Se sentía enormemente culpable por todo lo sucedido. Si ella no hubiera dejado a Yuzu en primer lugar, nada de esto hubiera sucedido.
Tomo su cabeza con frustración y sujeto fuertemente su cabello llorando desconsolada. Dos profesores fueron a hacer la denuncia mientras ella junto a la profesora Yamada subieron a la ambulancia. Quería estar completamente sola, pero no tenía la edad suficiente para hacerlo.
Estuvo durante mucho tiempo en la misma posición, hasta que la profesora golpeo la puerta anunciando la llegada de su madre. Se puso de pie rápidamente y fue corriendo hasta el pasillo blanco, hasta visualizar a Ume y abrazarla con fuerza dejándose proteger por alguien después de un largo tiempo.
Le comentó todo lo sucedido, notando los cambios en el rostro de su madrastra. Posterior a su charla, llegó el doctor y dio la noticia que para su desgracia, esperaban. Habían abusado de Yuzu, y era algo que Mei no podía revertir por el resto de su vida. Ume se desplomó en el suelo con fragilidad y el dolor de una madre.
Al pasar varias horas, les permitieron ingresar al área en el que se encontraba Yuzu.
Estaba conectada con diferentes cables y cosas que ella no comprendía. Tenía una mascarilla de oxígeno en su rostro. Mei cerró los ojos con fuerza y recordó lo que el doctor le había dicho.
"Ella esta estable, tiene dos costillas rotas pero no se encuentra ningún órgano comprometido, necesitamos que firme unos papeles así podremos realizar la cirugía lo antes posible".
Continuará....
Espero le guste el primer cap :3
Comenten que les parece la trama y sin más me despido
Pd:actualizaré cuando pueda ya que los estudios me dejan sin tiempo v:
Si hay algún error díganme xd
Gracias por leer!❤
Nos leemos luego!❣
Mata ashita!💓
Canción del principio
Tone by Aimer (エメ)
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