Narrador omnisciente

Un chico rubio de ojos azules se encontraba en un auto junto a su madre para ir a inscribirse en el Instituto al que asistiría este, el joven no apartaba la vista de la ventana de el auto, sus ojos miraban el cielo que estaba con unas pocas nubes, nada que le impidiera a ese día ser agradable, se preguntaba como sería su nueva escuela y si las personas de esa misma serían agradables, aunque, por como eran las personas de ese vecindario tal vez no sean tan malos.

-Hemos llegado- dijo la madre de este en lo que frenabá el auto enfrente de aquella casa de estudio.

Al salir de el auto pudo ver la estructura de el lugar, no estaba nada mal, el portón de la entrada de el instituto era de barrotes de hierro con un modelo elegante, al entrar se podían ver unos cuantos árboles, la estructura de el instituto era un poco rústico, ventanas de vidrio, unas puertas de madera, en pocas palabras era un lugar lindo

Estaban caminando hacia la dirección para hablar con el director hacerca de ingresar a el rubio a tal lugar .

-Es un lugar lindo ¿No crees Mikaela?- le pregunto su madre.

-si, no esta nada mal- dijo su hijo con un tono simple.

Al entrar a la oficina se encontraron con la directora de el instituto, era una mujer de cabellos rojos, ojos violeta y piel clara, estaba ordenando unos papeles hasta que los vio entrar.

-¿Puedo ayudarlos en algo?- se dirigió a los que ahora estaban en la entrada de su oficina

-si, quería inscribirlo a el en este instituto- dijo la pelirosa.

-Muy bien, pero necesito hacerle unas cuantas preguntas, ¿le parece?- decía la directora en lo que ordenaba unos papeles para la inscripción.

-si, no veo problema- dicho esto ambos tomaron asiento, para así dar inicio a la serie de preguntas que iban a hacerles.

Luego de estar casi una hora en esa oficina, el proceso para la inscripción para aquel instituto había culminado, justo ahora aquel rubio y su madre se encontraban en el auto rumbo a el parque de aquel lugar para pasar un rato tranquilo.

Estaban sentados en una de las muchas bancas de aquél parqué esta se encontraban casi al lado de el bosque, al rubio le causaba gracia la ubicación del parque,justo junto a un bosque en el cual si un niño entra es probable que se pierda entre los muchos árboles que hay en este, o tal vez se encuentre un animal que le haga daño, ¿a qué  persona se le ocurre poner un parque junto a un lugar así?.

Eran como las dos de la tarde, el paisaje era hermoso, estaba algo soleado, pero, la banca estaba bajo un árbol así que no había problema, los pájaros cantaban, y los niños jugaban, era un ambiente agradable.

Yuichiro

A pasado un rato desde que salimos de casa, casi llegamos al bosque solo hay que cruzar el parqué.

con personas.

muchas personas.

demasiadas personas.

que conoce la actitud de nuestro padre "amoroso" y que nos miren con su lástima o que susurren cosas acerca de nuestra familia es un poco incómodo

Muy bien, el parque esta con más personas de lo normal y hay que cruzarlo, dirijo mi mirada a Asura y su cara demuestra que no le parece mucho la idea de pasar entre la gente.

-y.....¿que hacemos?- me pregunta con un tono un poco incómodo

Yo sólo me limitó a soltar un suspiró y mirar por dónde podemos pasar sin que gente nos miré y tampoco parecer unos locos antisociales.

-que tal.... ¿por ahí?- le digo señalando hacía una parte donde casi no había gente.

Pasamos a paso algo rápido, hacía un buen día, habían niños jugando y gente que paseaba por el parqué, estábamos cerca de el bosque, así que apresuramos más el pasó hasta llegar a estar dentro.

Caminamos más a fondo de el bosque, los árboles eran grandes, con pájaros en las ramas de estos, el ambiente era fresco, es relajante.

Caminamos hasta llegar a un pequeño claro, con flores, unos pocos árboles y una pequeña laguna, seguido de esto nos acostamos entre las flores de aquel claro, estuvimos callados por un rato hasta que Asuramaru  dijo algo que llamó mi atención.

- oye- me llamo sin cambiar de posición

-¿Qué sucede?- yo tampoco me había movido.

-llego una no nueva familia-

-¿Desde cuándo están aquí?-

-no lo se, desde hace poco- se quedó callada unos minutos pero de repente volvió a hablar

-yuu-

- ¿Que sucede?-

Esta vez ella se sentó yo hice lo mismo, parecía pensar lo que iba a decirme, se quedó así un rato hasta que me miró a los ojos, parecía estar preocupada.

-¿Crees que ellos lo descubran?, que se den cuenta de que aquí, tu sabes... éso-

me miraba preocupada, no la culpó, pero no creo que preocuparse sea necesario.

-Bueno-
pensé un momento la respuesta que podía darle, solté un suspiró

- puede que si se den cuenta, lo más probable es que reaccionen como los otros y luego salgan asustados y se vallan a otro lugar para vivir-

después de decirle esto volví a acostarme en el suelo restandole importancia al asunto.

-Tienes razón, nadie cuerdo se quedaría en este lugar después de saberlo- soltó una pequeña risa.

Ya era tarde y debíamos volver a casa.

Este lugar es raro, si ellos se dan cuenta es obvio que se irán, todos lo hacen.

La gente de aquí, no todos son lo que aparentan, todos saben lo que este lugar es y por ello es de callarlo.

Todos debemos guardar el secreto.

HOLAAAAAAAAAA GENTE😀,

¿que les pareció?

¿les gustó?.

Díganme en los comentarios.
Perdonen mis faltas de ortografía, en mi defensa escribo como a eso de las 12 de la noche, es que solo a ésa hora escribo o la inspiración llega.

En fin~

Espero le haya gustado sin más que decir me despido

Sindy109 fuera ;3