Otra vez empieza la semana. Una semana nueva que ataca a la pereza e incluso aparente aburrimiento de Amy por encontrar ahora su ya no tan nuevo trabajo una autentica joda.

Siguiendo el ritmo de la tarde, compra artículos de higiene e incluso mandado para llenar la alacena y el refrigerador. Cuando termina de guardar todo, todavía quedan tres horas antes de alistarse para marchar al club, así que, llama a Sally, recordando que ha estado trabajando medio día:

—¿Hola? ¿La ardilla está ocupada?

—¡Ey, Amy! Estoy en la zona de Walter's, ¿Vienes? Seguro te llama lo que hay aquí... —Esa propuesta a sonado rara, ¿Qué hay en dicho lugar? Sea como sea Amy no pierde el estilo metiche, por lo que acepta pícaramente.

—¿Donde te veo? No conozco la zona muy bien...

—Te mandaré la ubicación, es un edificio grande y en cuanto llegues, timbrame para que salga por ti a la recepción. —No deja de sonar raramente auténtico.
Eso le gusta cada vez mas.

No pierde más el tiempo y cuelga saliendo con su bolsa en mano hacia la zona.

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—No me creo eso de Fiona...puta rencorosa de mier...

—Okaaaaay, Sally, relajate -El erizo soba su nuca tratándola como criatura mientras bebe de un termo y respira un poco—. Ya tiene tiempo que ocurrió eso, pero supongo es...todos terminamos por sacar lo que nos agobia así que, fue bueno que Fiona me confirmara esos detalles.

—¿Piensas localizar a ese tipo "ex" de Amy? —Muy insistente, desea un "sí" confiado de su amigo, pero por esos segundos, el oscuro se limita a pensar con un gesto molesto en sus labios.

—No haré eso. Considero que ha llegado el momento de esa sesión de psicoanálisis.

—¿Qué? ¿Eso resolverá el problema? ¡Los culpables deben d-!

—Sally caza malvados, las cosas no funcionan así, ¿de acuerdo? —Exige con aire estresado—. Todo esto lleva hasta un proceso judicial que no lograremos llevar acabo por la falta de pruebas, pistas, sospechosos y el tiempo que ha ocurrido desde el posible suceso.

La chica marrón suspira sacando un leve berrinche, uno que a ambos les golpea la mentalidad.

—Entonces... —Alarga la ultima silaba colgándose de su brazo mientras la escena detrás de él es acomodada con mandatos elevados del director—, ¿Le dirás a tu amigo que "revise" a Amy?

—Es más complejo. Haré yo la sesión pero sí, necesito revisar bien cómo hacerlo para... —Y el timbre escandaloso de Sally interrumpe la explicación de Shadow. La chica revisa el teléfono con obviedad y se aparta pidiéndole a su amigo erizo que no se desespere, pronto a de regresar.

Bajar las interminables escaleras por despiste de ignorar el elevador; llega hasta la fachada en donde se encuentra la chica rosada confundida por el sitio en el que se haya.

—¿A donde mierda me has traído? Espero que esto no sea una de tus sorpresas extrañas.

—Oh, no, tranquila, este lugar te causará mucha curiosidad. —Y con esa ligera introducción, Amy y Sally van del brazo hacia una entrada de elevador nada sofisticada.

Hay gente paseando por los pasillos, con maletas y artículos que parecen de grabación. Amy no aparta la mirada de cada artículo que capta sus ojos, y es entonces cuando es halada del brazo por la ardilla para atravesar un cancel de aluminio con más gente dentro que parece aprisada.

—¿Qué es este lugar? —Su amiga no le responde, pero sus ojos pronto entienden que, aquél lugar no es muy "normal" para alguien como ella.

Pero tampoco su cara es un poker face, estar en la discoteca la ha curtido un poco.

—¿Consideras que una ensalada de frutas es lo ideal para nosotras?~ —Oye con ligero asco pero, prontamente, la joven marrón le hace señas de que no hable y solo la siga.

Cruza un set parecido a un restaurante, sus orbes verdes miran como aquellas chicas juguetean con el perro fortachón, acariciando sus bíceps y tríceps. ¿Pero cómo es que ese sitio se logra ver tan naturalmente erótico? No es tonta, ni tan ingenua ahora, pero, le cuesta imaginar que todo eso que Sally le mandó hace un mes y más estén frente a sus ojos sin la existencia de una pantalla de por medio.

—Sall...¿Cómo puedes estar aquí?

—Porque conozco a gente de aquí, ¡Hasta tengo membresia gratuita de la página! —Vuelve a retorcer su boca la rosada por el éxtasis de miedo que muestra la ardilla—. ¿Crees que esos enlaces que te mandaba salían de cualquier lado?

Y sus comisuras se alargan y caen más por ver a su amigo oscuro cargando a una joven lechuza atlética, de hombros anchos pero un plumaje canela brillante.

Rose no se inmuta, permanece detrás de ese equipo ultra profesional que le da ordenes con respecto a sus movimientos, incluso oye indicaciones exuberantes de posiciones las cuales no tiene la menor idea de cómo han de ser por los nombres estrambóticos que retumban en sus tímpanos.

¿Cómo había llegado a un sitio donde se graba porno?

—Y ahí está la estrella numero uno... —Le murmura Sally en el oído, risueña. Sus movimientos de él se vuelven impactantes, más bien, ella lo ve en una tercera faceta que no conocía y era la actuación. Otro tipo de actuación que incluía un carácter mayoritariamente absurdo.

—¡Vamos! Ambos preparence para el desenlace. No se les olvide: de dos a tres orgasmos. —El aparente director revisa unos papeles mientras Amy husmea dichos detrás, con mínimo disimulo.

—Oye, ¿Eres la nueva? —Los piquetes en el brazo la espantan de su ruin hazaña chismosa, pero gira con molestia a ver a ese coyote con una tabla de datos y un micrófono manos libres.

—No, para nada. —responde tajante, típica de pocos amigos.

—Es una amiga, John, no es nada de este mundo... —Sally intenta salvar la charla sin que termine mal, más el peludo grisáceo se rasca la cabeza confundido.

—Lo lamento, es que cumplías con la descripción que mandaron en el correo...

—¡John! ¡Vamos! ¿Donde está mi actriz? —Ese jefe intolerable aparece golpeando la tabla con su mano, mientras los tres se encogen en hombros. Posterior a su "escenita", mira a Amy con satisfacción y pronuncia—. ¡Eres perfecta! Creí que mentías cuando te describiste en el correo.

—¡Alto! Hay una equivocación, yo no mandé ningún correo. Estoy aquí por curiosidad y...

—Vamos, no seas tímida, aquí nadie juzga a nadie por lo que desea ser. —Y entonces, el zorro productor termina por halar a la rosada del brazo, adentrándola más al nuevo set que muestra una clásica sala de estar, en una choza campestre, muy a vacaciones de diciembre. Sally no intenta mucho por aclarar la confusión, mas le preocupa que pronto Shadow la vea con súbito temor de que se halle ahí, viendo su otro empleo.

—¡Rose! ¡Esperen! -Termina por correr detrás de ella.

—¡Ey, Pinche Sally, ayudarme!

—Espere, espere, creo que hay una equivocación —Sujetando al zorro, ambos se detienen en medio de la próxima escena—, ella no es actriz. —expulsa tranquila la ardilla.

—¡Como no va a serlo! Tiene la descripción de la nueva.

—¡Ya le dije que no soy una pinche nueva! —Retira su mano bruscamente del agarre del productor. Con recelo, este también frunce el ceño por la acción—. Vine a verlo a él, de hecho. —Señala al azabache del otro extremo, quien no se ha dado cuenta de su presencia y alborote por estar recibiendo instrucciones de otra eriza con auriculares.

—¡Señor! La chica real acaba de llamar y ha cancelado, mire... —El pobre coyote, algo agobiado, muestra la pantalla de su celular al zorro que, suelta un monosílabo de rabia para volver a azotar la tabla contra sus manos—. Ella no mentía, pero entonces no tenemos a la actriz para grabar la escena.

—Maldita sea... —bufa una vez más el jefe.

—Em...¿De qué se trata la escena? —Increíblemente, la joven de ojos verdes pregunta en un tono sutil al zorro, dando toquesitos en su hombro para que le brinde atención.

Lo que tiene en mente no es para nada "sano".

—Una salida invernal, tenemos el calefactor y decirme si la cosa no se pondrá caliente.

—Pero, ¿Es 100% explicita? Quiero decir... —Agita su cabeza por darse cuenta que dijo una tontería dado el sitio en el que se halla—. ¿Sólo es coger y ya? ¿O existe una "historia" o unos "pasos" más que seguir?

—Me has dicho hace segundos que no eres actriz, ¿por qué preguntas eso, eriza?

—Usted me dijo hace segundos que cumplía con el perfil, ¿No quiere salvar su "escena"?

—¡Amy, estás loca! —Sally la jala por su brazo, rebajándola a su estatura y murmurandole aquello con mucho miedo—, ¡No puedes hacer esto, es absurdo y arriesgado!

—No eres actríz, pero si logras sacar la escena con creces te pagaré...la mitad de lo que le iba a pagar a la nueva. —Ofrece tentativamente el director, rascando la parte anterior de su barbilla.

—¿Y eso es...? -Sisea con picardía, apartando el rostro de Sally que muere por interrumpir.

—4000 rings.

—Acepto, ¿Quién me va a coger? -Y el grito agudo de espanto por parte de la marrón no se lo contiene, mientras el Zorro abre cancha a una panorámica contraria para señarle a la persona menos obvia para sus ojos:

—Él, el vetas rojas ha sido de los más versatiles que me ha tocado dirigir. Irle a platicar para que tengas mejor conexión con él.

—¿¡Qué!? Esperen, ¡Esperen! Ella no puede... —Sujetando su pecho con irritación, es ignorada hasta por Amy que ahora, no sabe en el lío que se ha metido.

No cree ahora que sea tan fácil dominar la situación de adrenalina en la que se ha metido.

—¡Ey, Shadow! ¡Aquí está la nueva ya! Se llama... -Para sus gritos el coyote y mira a la joven esperando a que lo pronuncie, pero ella ahora está asustada y muda—, bueno, es ella.

Los ojos se cruzan de forma espeluznante, lo suficiente para incomodar a los peludos y decidir apartarse para que se dieran privacidad.

Tanto el oscuro como Amy se acercan, y ante lo que se convierte en un Shadow iracundo por todo lo que parece está por sucitarse, sus ganas de jalarla del hombro para llevársela a las escaleras del edificio son opacadas por un apretón en su espalda alta con los brazos melón de ella. El abrazo es fugaz, uno que ni él se espera para el lugar en el que se hayan, pero siente cada fibra de sus púas vibrar y sentir los nervios que le recorren la espina dorsal.

Es un momento incomodo para él, demasiado.

Musita en su oreja izquierda, cabreado—. ¿Qué acabas de hacer, estúpida?

—Siento...siento dolor...como si...¡Hace segundos estaba segura de esto y ahora tiemblo como gelatina!

—¿Por qué has venido aquí? —Decide poner mayor empeño en sacarla de su agobio con regaños—, ¿Cómo carajos se te ocurrió mandar esa mierda de correo...? ¡¿Tan siquiera como supiste de...?!

—¡Alto! No tengo 100% la culpa. Sally me llamó para pasar la tarde, y yo...cuando el zorro ese dijo que cumplía el perfil...me sentí alagada al final y... —Suspira tomando sus sienes y viendo el suelo, organizando todos los sucesos rapidamente—, ¡agh! Yo, yo no siento nada...esto no me gusta y si me van a pagar mejor que en tres días de antro por solo esto creo que...

—No te quieres nada. No se trata de la condición y aprovechamiento a tu malestar, ¡No es algo digno para sacarle provecho, Amelía! Lo que viviste es delicado y veo que te tomas todo esto a la ligera. —Esa reprensión cruza su pecho y agacha ligeramente las orejas por oírle—. ¿Acaso pretendes seguir torturándote por esto?

La algarabía de toda la producción moviendo artículos, acomodando luces y hasta organizando el set hace que su charla de reprensión se convierta en privada.

Más no dura mucho tiempo, por desgracia.

—¿Listos? Es algo rápido, solo de 10 a 15 minutos de coqueteo y 20 minutos de erotismo...

—¿Va a haber penetración? —Interrumpe Rose sosteniendo el hombro de Shadow, apretándolo ligeramente.

—...¿Tienes algún problema? —Frunce el ceño ante el carácter que ahora la chica tiene. Muy pero que muy cambiante ya, como no—, ¿Eres virgen o...?

—Ella tiene una tendencia asexual...complicada —Intenta explicar Shadow, confiado en su timbre de voz-. Es posible que esto no salga tan "creíble", sé que lo entiende.

—Ash, bien... —Anota con frustración algo en la tabla para barrer a la chica con sus ojos magenta—, dejemoslo hasta la parte de cortejo, ¿Sí? Pero voy a considerar otra vez la paga.

—Ok, no hay problema. —Tranquila, responde ello. El productor manda a llamar a una coneja con auriculares para que la lleve al raquet ropa.

La situación empieza a ponerse buena.