Verdades.
Entramos a la masía y no pude evitar abrir mi boca,cerrarla, y volverla a abrir. Las palabras no salían de mí. Mi cara lo decía todo. Acabé de entrar y ellos se pusieron delante mío, avancé observando todo a mi paso, era una casa preciosa, piedra, madera y vidrio lo formaban todo, un gran salón con una chimenea enorme se encontraba delante de mí, con unos sillones enormes de cuero blanco entre un sofá bastante grande y una mesita larga de madera delante suyo. A la izquierda se encontraba un gran espacio con una mesa para cuatro, también de madera y cristal.
A mi derecha, se encontraban unas escaleras y dos puertas, estas estaban abiertas, dejaban ver un baño grande y espacioso, y una cocina tambien grande, con todo lo necesario.
Avancé unos pasos mas y pude ver los grandes cuadros colgados de la pared, eran fotografías mias, fotografías de ellos con migo, caballos y mas caballos.
Me pare en una, donde yo salia llena de paja al lado de un bonito semental negro, y con una gran sonrisa en mi rostro. Esa fotografía me sentó como un puñal en mi pecho, me sentía tan mal por no recordar nada, por no saber que decir...
-Tara - Luz llamó mi atención - Ven.
Nos sentamos en el gran sillón y los demás se juntaron a mi alrededor, con expresiones apenadas, con tristeza. Yo no aguantaba mas.
- Lo siento -Dije.
-Lo siento por no recordar nada, por haceros sufrir de esta manera. Pero no entiendo que esta pasando, porque hemos tenido que salir de allí corriendo y escapando de esas personas, me querían ayudar! -Mi tristeza se iba transformando en odio a medida que las palabras salían de mi boca.
-No -me corto Angelo- Esas personas no te querían ayudar, es por eso que hemos tenido que salir corriendo de allí. Tara, eres una chica muy especial, no se cómo decírtelo, yo...
-Esos señores te iban a matar - Salto Luz- Te querían hacer unas pruebas, ya que en este ultimo mes, una extraña fuerza ha empezado a salir de ti, has empezado ha hacer cosas que ningún jinete ha logrado jamas. Has saltado sin decir nada, los caballos han acudido a ti, con tan solo una mirada. Entonces, un dia que habiamos salido a dar un paseo, protejiste a tu caballo de un cazador furtivo, lanzándote delante de la bala que iba a impactar en él, y justo cuando tu cuerpo choco contra la pequeña bala, salió una luz muy potente de tu interior, creando un escudo a tu alrededor protegiendo a ti y a tu caballo. - suspiro- cuando levantaste la cabeza, el cazador estaba paralizado, tenia los ojos en blanco y tu luz se había desvanecido, entonces empezamos a oír unas sirenas acercándose y gritos, con lo que montaste y salimos todos al galope, pero aunque ya llevábamos diez minutos cabalgando, las sirenas no se dejaban de oír y apareció un helicóptero por encima nuestro, y ahí fue donde tu, galopando, miraste hacia arriba y una pelota de goma impactó en tu pecho, haciéndote perder el equilibrio y callendote.
Te oímos gritar y giramos, viéndote en el suelo, sin reaccionar.
Nos aercamos corriendo hacia ti, desmontamos y te empezamos a gritar, ah levantarte pero tu ibas cerrando los ojos...- *Sollozos* - Y Llamamos a la ambulancia, el helicoptero se habia ido y ya no oíamos nada, tu ya no reaccionabas.
-Cuando llego la ambulancia - Siguio Tyler- Oímos un fuerte relincho y el arrancar de unas ruedas de camion, habian cojido a tu caballo.
No podia creerme lo que estaban contandome, no podia ser real, era un error, yo no recordaba nada de eso.
-Yo...- no me atrevia a decir nada pero...
-Como se llama ese caballo? Es mi caballo?
-Si Tara, lo es. Y se llama, Galán.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top