CAPITULO VEINTICUATRO
Francis Blood
Me cansé. Era hora de admitirlo todo; Soy culpable de casi matar a la chica que amo. Pero yo no estuve en el accidente, yo lo autorice sin saber exactamente qué sucedería
Para contar esto tengo que regresar a dos años atrás, en dónde la historia empezó:
El director me había llamado por el megáfono de la clase de literatura. Todos empezaron a repetir la palabra de que estaba en problemas, rodee los ojos porque mis compañeros eran muy idiotas
Aunque si me pregunte la razón por la, que me llamaba. ¡Me negaba a estar en problemas! ¿Acaso sería porque me defendí, cuando Colin intento empujarme? Eso sería un tanto ridículo, como dije. Solo trataba de defenderme
Cuando la profesora me dió la autorización para ir a la dirección respire profundo. En verdad rezaba porque Colin no se estuviera haciendo la víctima
El director estaba hablando por teléfono cuando la secretaria me dejo pasar, habían unos tres estudiantes a los cuales no les preste atención. Cuando captó mi presencia colgó el teléfono
-Michael, hola. Pasa hijo –Obedientemente, entre y yo e asiento
-¿Me nesecitaba para algo? -Asintio
-Veraz, Michael. Eres uno de mis mejores estudiantes y me gustaría que le mostraras el lugar a un chica nueva
Por una parte me sentí aliviado, pero por otra sentí un poco de estrés, no me gusta darles recorridos a otras personas tenía cosas mejores que hacer
No podía negarme así que solo acepte, mandaron. La secretaria le aviso que entrara y, era una de las que estaba sentadas junto a otros estudiantes
La chica era un poco seria, su pelo era castaño oscuro y tenía ojos verdes, su piel era clara. Cargaba un vestido azul con pliegues y unas converse
Se mantuvo callada todo el recorrido, no siquiera asentía, solo caminaba a mi lado sin decir una palabra. Cuando le pregunté si nombre no quiso responder
Tampoco iba a presionarla. Yo también me ponía haci en ocasiones, pero de alguna forma sentí que ya la habi visto no se en donde exactamente, solo se que si imagen me resulta familiar
Mi padre dice que cuando una persona nos resultaba familiar y nunca la conocimos, es porque tienen una conexión es algo mutuo. Pudieron encontrarse en un pensamiento ficticio o un sueño. Siempre hay sueños que se manifiestan y cuando manifiestas a una persona en tus sueños lo haces en la realidad también
Pero siempre lo sentí como baratijas, no era algo que me resultará probable
Dice que así conoció a mi madre, pero también decía que de pequeño veía hombres topo entonces, era un poco difícil creerle
Llegamos a la piscina
-Aqui es donde vemos natación, el profesor nos deja quedarnos un poco más tarde después de, clases. Siempre y cuando limpiemos -Hundi las manos en mis bolsillos y le mire
Sus frente se arrugó cuando frunció el ceño e hizo una mueca
-¿Porque hay natación en una institución? -Por fin pude escuchar su voz, me encogí levemente de hombros mientras ladeaba la cabeza
-No me lo preguntes a mi -Carraspee un poco -Preguntale al que creo el lugar, son cosas de institutos privados
No respondió, en cambio se dió la vuelta y comenzó a ver el lugar por su cuenta. Le apresure en seguir y posicionarme a su lado
-¿Se te olvida que yo soy el que te está dando el recorrido? -Enarque una ceja viendola, me llegaba al hombro. Era muy pequeña
-No, pero me gustaría que respondieran mejor mis preguntas -Continuo caminando -Ademas, solo me estás mostrando los lugares sin algún dato que deba saber. Cómo, yo que se, como debo tratar a los profesores que tipo de estudiantes debo tratar y a quienes no
Que chica. Puse los ojos en blanco menee la cabeza con un poco de fastidio
-Empiezo a creer que eres insoportable -Le heche en cara. Tampoco es que le haya afectado mucho, porque le resto importancia haciendo un movimiento perezoso con la mano
-Mola. Tampoco es que fuera mi intención caerte bien, vale -Camino más adelante
Los salones estaban identificados por placa en las puertas, bueno, ella se detuvo en cuanto vio la clase de diseño se acercó para ver mejor el lugar
Las mesas tenían máquinas de coser, habían rollos de tela o como sea que se llamen, en estanterías de detrás y modelos de cuerpo. Su mirada pareció iluminarse en cuando vio aquel lugar, se mordió el labio mientras bajaba la mirada estaba disimulando una sonrisa
Oh, entonces le gustaba la costura
Interesante. Choque nuestros hombros, me miró con algo de extrañeza borrando cualquier señal de emoción o felicidad en sus rostro
-Sigamos con el recorrido.
En el almuerzo me senté con los únicos que podía llamar "amigos". Fran me pedía ayuda con la mirada mientras Miriam hablaba
Bueno, en realidad Fran era mi amigo. Miriam no era el tipo de persona que me gustaría tener como amiga pero si habían momentos en los que apreciaba su presencia
Miriam quizo invitarme al baile que habrá en un mes, me negué porque no tenía en mis planes ir, mi amigo empezó a reírse al punto de casi atragantarse por su propia comida
Fran y yo éramos como uña y mugre. (vale, se que no es el mejor apodo pero fue lo que se me ocurrió) la mayoría del tiempo estaba en mi casa, intentaba coquetear con mi hermana
«Algo que le reprendía siempre»
Cualquier travesía que se nos ocurriese la llevamos a cabo. En Halloween del año pasado, nos disfrazamos del hombre araña, y salimos más temprano que todos los niños del barrio
Fuimos a tres barrios distintos y terminamos llenando dos bolsos enteros de dulces. En un momento le hicimos notar a los niños que teníamos más dulces que ellos y empezaron a perseguirnos
Quien diría que los niños de 7 años traen pistolas de agua en sus mochilas. Tuvimos que ocultarnos en mi casa y ocultar los dulces de mi hermana, quien tenía 12 años
Y una niña de 12 años junto a dos chicos que cargaban más de doscientos dulces en diferentes bolsos, era peligroso.
La mirada de Miriam se dirigió a alguien al fondo del comedor, con tan solo ver cómo hacia una mueca de asco
Me gire para ver de quién se trataba. Al fondo del comedor se encontraba la chica de esta mañana, estaba sentada, sola en una mesa con la comida al lado y parecía que anotaba algo
-Por cierto -Me gire hasta mi mejor amigo que empezó a hablar -¿Es cierto que te llevaron a dirección por Colin?
-No. -Respondí cortante llevándome la comida a la boca -Era para mostrarle el lugar a una chica.
-¿Es linda? -Miriam le dió un codazo -Auch. ¿Pero por que?
-No quiero saber si a Francis le parece linda otra chica -Bufo -¿Quien es?
-La misma chica, que ves con desprecio -Volvi a mirar a su dirección. Parecía muy concentrada en lo que hacía
Fran también la observó, me dió un pequeño toque en el hombro mientras se acercaba a mi oreja
-La verdad si es linda -Susurro con intenciones de que Miriam no lo escuchará, aunque eso fue en vano.
Está le dió un sape en la cabeza al cual este reaccionó con un grito
-¿¡Tia estás psicópata!? -Se sobó -Ya deja tu obsesión por Francis
-Que no es obsesión, en verdad me gusta -Lo decían como si yo no existiera en la mesa
-Mola, que lo que he dicho varias veces. Lo tuyo no es amor, es obsesión
Y así empezaron a discutir, en realidad no les preste mucha atención. Me quedé observando de manera disimulada a la chica de ojos verdes
Me preguntaba si podía acercarme
Estás demente, la tipa dijo que no le interesa hablar contigo
¿Desde cuándo yo no las órdenes de los demás?
Va. No vayas
Estaba claro que iría, tome mi mochila y la tendí en mi hombro agarre la bandeja y me levanté
-No me esperen -Y me fui.
Hará que te largues
Al menos sabré que intente acercarme
Te estás volviendo demente
Siempre he sido un demente, tampoco es que sea la gran noticia. Deje la bandeja ej la mesa y me senté frente a ella
Dió un respingón en cuando me vio, me analizo un par de segundos y cerró su libreta
-Hola -Sonreí de manera leve
-¿Que haces aquí? -Fue directa
-Esto es un país (he instituto) libre, así que puedo ir a dónde me de la gana -Volvi a sonreír. Cuando hizo un ademán de levantarse me incline y la tomé de la muñeca -Eres muy terca
-Tu muy entrometido -Se safo de mi agarre
Hice una mueca y negué, mire de reojo a Fran y Miriam quienes nos miraban sin disimulo. Volví la vista a la chica y me encogí de hombros
-No soy entrometido, solo vine a sentarme -Nos miramos y par de segundos antes que volver a romper el silencio -Bueno, ¿dejaras de ser tan terca o me odiaras en silencio?
No tuvo de otra más que aceptar,mis palabras se quedaron en el aire
Almenos la había convencido, comimos en silencio y nos echamos unas que otras miradas que, por su parte eran jugadoras y por mi lado eran analíticas
-¿Te conozco de alguna parte? -Preguntamos casi al mismo tiempo
La pregunta quedó en el aire antes de que ella negara
-Es una tontería, solo... Siento, que ya te había conocido
-Que curioso me pasa lo mismo
Y volvimos a quedar en silencio. La pregunta inundó mi mente en ese momento ¿Y si lo que mi padre me dijo, era cierto? Tal vez la conocí por medio de un sueño y... No la recordé... ¿Y si todo fuera un sueño?
Compartimos una mirada antes de volver a un incómodo y cómodo silencio.
Me gustaba ver cómo las reacciones que hacía cuando llegaba a asustarla. Siempre empezaba insultandome y luego se empezaba a dibujar en su libreta
Porque si, me di cuenta que solo estaba dibujando intente repetidas veces ver qué es lo que dibujaba, pero siempre terminaba con una amenaza sobre darme una cachetada
¡Era muy curioso! No podía pedirme que dejara de ser curiosear cuando eso solo aumentaba mi curiosidad
Aveces se quedaba en el salón de clases por horas, pidiéndome que me fuera aunque yo me recostaba de las mesas y me quedaba mirando el techo sin irme
Aún pensaba en el asunto de mi padre. Quería comprobar que todo esto en verdad, estuviera sucediendo
-¿Cómo dijiste que me haz visto? -Pregunte de golpe rompiendo el silencio
-No te lo dije -Rodee los ojos, pero que chicaaaa
-Es una forma de decir -La mire- Dijiste que me habías dicho en algun momento parecias haberme visto, pero parecía una ilusión casi un sueño
-¿Cuando lo dije? -Cerro su libreta
-Ayer
-¿Cuánto tiempo llevas interrumpiendo mi soledad? -Enarque una ceja, el comentario me hizo levantar la comisura de mis labios
-Una semana -Respondi. Se rasco. La nuca y suspiro
-Pues si. Casi parece que te he visto y, he tenido algún tipo de contacto contigo -Se acostó -Me gustaría pensar, que me fumo cosas por las noches pero no.
Me levanté y fui a su dirección. Me incline hasta quedar al frente de ella y sonreír a labios cerrados. Se limito a apartar la mirada
-Yo también te he visto en casi-sueños -Suspire al no tener respuestas- ¿Siempre eres así o te incómoda mi presencia?
Entorno sus ojos hasta mi, levanto la comisura de sus labios y me revolvió el pelo
-Me gusta tu estúpida presencia -Fue lo que respondió se frotó las manos y las soplo para tener un poco de calor -Es raro.
-¿El que? -La mire quitándome mi suéter -Ten -Lo recibió sin ninguna excusa
-Gracias. -Se lo puso alrededor -Es raro el hecho de que no te hayas ido -Apoyo los codos en el escritorio y se inclino hacia mi -No digo que sea molesto es, que otros ya se hubieran largado por como los trato y tú pareces disfrutar de ello
-No me molesta como me trates -Me encogí entre hombros -Las demás personas están acostumbradas a, no conocer a las personas realmente. Les gusta solo acercarse y que le cuentes toda tu vida
-Un poco si
-Pero, no pienses que yo seré así. -Me incline más hacia ella -¿Sabes por qué? -Susurre. Ella nego también inclinándose -Porque tienes dinero y nesecito comprar más libros -Sonreí. Lo siguiente que hizo fue empujarme y mirar a otra dirección -Porque me está gustando tu compañía y quiero descubrir cada una de tus capas, saber quién eres y porque me atraes hacia ti.
Nos miramos unos segundos antes de que ella entreabriera los labios y respondiera
-¿En verdad estás diciendo que...? -Asenti -Es la forma más ridícula de decirlo ¿Sabías?
Me encogí entre hombros
-Nunca fui bueno para estas cosas
-¿Lo haz hecho ya?
-No, solo con las chicas de los libros -Volvio a elevar la comisura de sus labios y, esta vez sonreír -No me haz dicho tu nombre -Relamí mis labios
-Y aún así te me declaraste -Empezo a recoger sus cosas
No tardó en levantarse y salir del salón, la seguí con apuro posicionandome a su lado. Me miró de reojo y nego
Le di un pequeño choque de hombros, ella imitó el movimiento sacándome una sonrisita
Dime algo ¿Alguna vez te haz sentido compatible con, otra persona? No sé si me explico, es cuando sabes que te gusta su compañía, en ciertos puntos puede parecerse a ti pero con sus propias virtudes
Te la pasas bien, aunque estén en silencio, disfrutas de las miradas que se lanzan de manera discreta, buscas cualquier tipo de tema o acto solo para continuar con esa persona
Yo no conocía su nombre porque nunca me lo dijo, y tampoco me moleste en saberlo. Si bien es bueno saberlo para el hecho de saber cómo llamarlo
Pero en siento que no es necesario, una persona puede tomarse el tiempo que quiera para decirte su nombre o su apellido. Yo la estaba conociendo, y no tenía la más mínima idea de cómo se llamaba, ni siquiera el director se molestó en decírmelo
Y me parece bien porque no lo necesite
Si no me entiendes te explicaré mejor, ¿Para que nesecitas el nombre de una persona cuando, puedes ir conociendola a profundidad? Solo por conocer su nombre no significa que es el inicio. El verdadero inicio empieza cuando tú te propones realmente a, conocer a esa persona
Esto era algo mutuo, ella no conocía mi nombre, yo no conocía el de ella. Sabía mis gustos y yo los de ella, pasábamos horas hablando o solo nos quedabamos en silencio. Empezaba a dejar notas con poemas en su mochila, de vez en cuando me preguntaba si las leía pero luego, cuando la veía a lo lejos hacia los mismos gestos que le decía que me gustaban
Nos detuvimos en la salida, el tiempo no avisaba que pronto llovería yo no tenía ningún paraguas, tendría que ir a casa mojandome
Cuando la mire intentaba quitarse el suéter, la detuve y me miró con extrañeza
-Quedatelo, puedo tomar otro del armario de mamá
Una sonrisa se formó en sus labios, casi dejándome ver sus labios. Bajo la mirada y volvió a acomodarse el suéter
-¿Te veré mañana? -Todos los días le hacía la misma pregunta, no quería que se incomodara solo por acercarme a ella
-Aunque te dijera que no lo harías -Se acercó a mi poniéndose de puntas, hasta dejarme un pequeño beso en la mejilla -Pero tampoco sería lo mismo si, no estuvieras junto a mi.
Pude sentir mis mejillas calentarse en cuanto me dió aquel beso. Solo fue u pequeño gesto, no significa nada
Eso hubiera dicho si no fuera ella, me rasque la nuca y antes de que se fuera solté le hice una pregunta
-¿Y si todo fuera un sueño? -Se detuvo a verme-Ambos decimos que nos vimos en sueños, pero nunca en persona... ¿Y si en verdad nada de esto está pasando? -Mi voz salió más chillona de lo esperado
Pareció buscar las palabras adecuadas. Cuando las encontró, me regaló una linda sonrisa
-Entonces diré que fuiste el mejor sueño de mi vida. -Luego de eso, se fue. Dejandome allí, parado en la entrada del instituto con el corazón latiendo a mil y unas ilusiones de puta madre
-Te lo dije, se gustan -Me gire para encontrarme con un Fran sediento de chisme y, con una Miriam roja de molestia -Me debes 20$
-¡Serán guarros! -Chille- ¡Mi vida amorosa no es su telenovela!
-Todo en esta vida es una telenovela -Mi amigo le tendió la mano a Miriam esperando su paga
-Me niego a creer que esa chiquilla te gusta -Dijo Miriam dándole de mala gana, 20$ a Fran -Ni si quiera es bonita
-¿Puedes dejar de criticarla? -Hice una mueca -Ella si vale la pena.
Los días seguían pasando, y cada vez la iba conociendo más aunque se mantenía cerrada en algunas cosas
Un día nos quedamos hasta tarde en la clase de natación, era la última hora así, que convencimos al profesor para que nos dejara un rato más, si limpiabamos todo
El sol empezaba a ocultarse y los colores eran bellísimos; Habían tonalidades de; azul, rosa y naranja. Todos formaban una hermosa vista digna de admirar
Regrese de acomodar todo en el almacén y la vi
Seguía con el traje de baño de, natación pero con mi suéter puesto, su pelo estaba mojado y tenía la vista perdida en el cielo
«Asi que no soy el unico» pensé
Fran de acerco a mi dándome unas palmadas
-Oye estaremos más adelante, el profesor dice que cerremos a la hora de irnos. ¿Quieres venir? -Al no recibir respuesta de mi parte callo en cuenta de, dónde se encontraba mi mirada -Oh ya veo -Rio -Esta bien Romeo, te veré luego.
Tome aire y me acerque, estaba en la orilla de la piscina con sus pies haciendo contacto con el agua
No hizo falta que pronunciara alguna palabra todo estaba bien así, se veía hermosa de cerca. Quise saber en qué estaba pensando en ese momento, parecía perdida en sus pensamientos aunque su vista, estaba clavada en aquel espectáculo de colores que poco a poco se iba desvaneciendo
-Es muy hermoso ¿No crees? -La mire mire de reojo. Asentí con lentitud -¿Cómo pueden haber tantos colores, si solo se está acabando el día?
Me encogí de hombros
-Tanto la tierra como el espacio, son muy misteriosos, nunca sabes que puedes suceder
-Pienso que los atardeceres son único ¿Sabes? Porque, hay días en los que simplemente se oculta el sol y no pasa nada. Mientras que hay otros en los, que todo concuerda. Ya que cuando te asomas por la ventana, o sales a caminar en el cielo hay un hermoso baile, festival o, espectaculo de colores que te hacen pensar; Wow ¿Cómo es posible eso? ¿Cómo es que todo se tan fascinante? Eso hasta el punto de preguntarte si es real o no.
-Hoy el cielo hizo un pacto con el cielo y las nubes, para mostrar algo sencillo pero explosivo como si fuera único -Segui
Los dos nos miramos sonreímos un poco
Nuestros hombros casi se rozaban, había calor en nuestros cuerpos y una corriente que nos pedía a gritos entrar en contacto.
Las risas podían llegar a escucharse desde aquí, no las escuche hasta justo ahora como si algo me hiciera pensar;
«¿Porque estás aquí y, no divirtiéndote con ellos?»
Porque este tipo de momentos son más importantes que una simple echada.
Fue ella. Fue ella quien tomo mi mano, sacándome mis pensamientos, fue ella quien terminó por entrelazar nuestros dedos, fue ella quien me dejó con las ganas de besarla. Pero también fue ella quien me dejó con las expectativas de vivir momentos como ese
Me levanté de golpe, me miró con extrañeza pero la obligue a levantarse
-¿Que haces? -Se sacudió el suéter mientras se abrazaba a si misma
Corrí hasta estar un poco más lejos de la piscina, continuo preguntándome qué tenía planeado hacer
Una locura seguramente
Tome impulso y empecé a correr en su dirección. Cuando cayó en cuanta de lo que iba a suceder ya la había tomado de la cintura y había saltado al agua
No la solté ni un segundo mientras nos hundíamos, el agua estaba muy fría pero pronto mi cuerpo de acostumbro
Ella no sabía nadar, por esa razón se aferró más a mi cuerpo cuando nade hasta la superficie
Sus manos me rodeaban el cuello y empezó a tomar aire de manera desesperada. No paraba de mover las pestañas he intentar mantenerse a flote pataleando
Cuando estuvo más tranquila la mire a los ojos, preguntándole si estaba lista para sumergirse de nuevo. Cuando me dió su aprobación de aferró a nuestro a agarre
Y está vez mientras estábamos sumergidos. Ninguno tuvo miedo, por su parte no hizo algún movimiento apresurado porque confío, en qué no la soltaría y gracias a esa confianza pudimos pasar un buen rato
Porque me sentía tranquilo, me sentía seguro y sobre todo me sentía feliz. Mis padres siempre dicen que cuándo conoces a una persona especial no te importa el tiempo, solo disfrutas del momento de como te hace sentir esa persona y como puedes mejorarlo. O simplemente no arruinarlo
Tal vez no hubo beso
Pero no por eso deja de ser especial, un beso no significa que el momento será mágico es algo que das a aquella persona porque el momento lo requiere o porque simplemente quieres
Fue un beso ficticio, el verdadero momento romántico fue aquel en el que los dos pudimos confiar en el otro.
Hubo un sueño. Hubo un sueño en el que ella estaba junto a mi fue como el día en el que la conocí, cuando ninguno sabía de la existencia del otro
Pase al plano en dónde me encontraba preguntándome ¿Será una coincidencia? Abrí los ojos y Fran no paraba de decir lo bien que se la paso en una fiesta
No habíamos visto la había visto en toda la mañana, me pregunte si se sentía mal o había tenido algún problema
-Cariño deberías relajarte -Intento tomar mi mano. La aparte con algo de educación -Estas muy pensativo está mañana ¿Te encuentras bien?
Asentí
-Si, solo... Estaba pensando
-¿En qué? -Fruncio el ceño -O mejor dicho ¿En quién estás pensando?
-Miriam ya baste -La detuvo Fran -¿Porque no puedes dejar, que sea feliz y ya?
-Porque quiero que sea feliz conmigo no con una copia barata de mi
-Ella no es como tu, Miriam. Es mucho mejor que tú y sabes que te supera ¿Por eso te molesta? Te lo dije, te quiero como amiga hasta ciertos puntos pero estás pasando los límites. Por favor entiende que no me gustas, no busco herirte ni nada por el estilo pero déjate en claro que me gusta ella.
Se hizo un silencio muy denso en la mesa
Miriam no sabía cómo reaccionar, se levantó de la mesa azotando su bandeja y saliendo de la comedor. Me frote los ojos frustrado
Fran me dios unas palmadas y luego, rodeo su brazo alrededor de mis hombros
-No le hagas caso, ya se le pasará -Asenti aunque ya me estaba doliendo la cabeza -¿Cómo va todo con la chica de los sueños?
Ah si. Le había contando sobre nuestras suposiciones y la mayoría de los momentos que tuvimos
-En realidad todo va bien -Confesé -Me gustaría tener algo serio
-¿Porque no le dices nada?
-Me da miedo el hecho de que me rechace -Hice un Mohin -No es tan sencillo, tal vez a ella le gusta otro chico
-Con el único chico que la he visto es contigo. Vale, que no hay que ser tan negativos -Me sacudió
La ví entrando al comedor con... Oh mierda, estaba con Colin ¡Estaba con el maldito Colin!
Juraría que casi se me cae la mandíbula, cerré los ojos y me recosté de la mesa. Cualquier plan que tuviera para poder estar juntos se iban al caño con tan solo verlos juntos, joder. Colin era muy atractivo hasta para mí
El tipo era igual de alto que yo, tenía el pelo rubio y piel bronceada. El pelo le llegaba al cuello y sus ojos eran azules claros todas las chicas estaban detrás de el
Solté algo así como un sonido de tristeza. Carajo, iba a llorar.
Salí de clases y me lleve el susto de mi vida al ver que me, estaba estaba esperando fuera a de clases con los brazos cruzados ceño fruncido y postura recta
Sin dudas estaba molesta, intente salir rápido cuando el timbre sonó pero ella me tomo de la mochila
-Estas evitandome
-No es cierto, te estoy hablando justo ahora -Intente irme. Soltó mi mochila y me tomo de la oreja -Auch, auch.
-¿Porque me evitas?
-Que no lo estoy haci... AUCH -Jalo más la oreja -OK, OK, SI TE ESTOY EVITANDO PERO YA SUELTAME
Suspiré de alivio en cuanto lo hizo y acaricie mi oreja
-Es que te ví con Colin y no se. Sentí celos, pensé que te gustaba y no quería meterme -La mire, seguía con los brazos cruzados y con una mirada matadora -¿Que?
-Eres un idiota -Empezo a caminar, me quedé confuso y la seguí -¿Cómo vas a pensar que me gusta otro chico?
-No se... Simplemente pensé...
-Pensaste, ok. Entonces piensa en como no ser tan idiota -Camino más rápido, pronto ya estábamos las escaleras del pasillo
La tomé de la muñeca al cuarto escalón, el ruido de los demás estudiantes no era obstáculo para perdonarme
-Lo siento.
-No te disculpes -Fruncio el ceño
-¿De acuerdo? Pues entonces adiós. -Gire sobre mi eje
-Serás idiota para irte sin despedirte -Volvi a mirarla
«No entiendo a las mujeres»
-Eres muy confusa -Me volví a acercar -Oye de verdad lo sient...
Fue un moviendo rápido; Poso sus manos sobre mi camisa y me acerco a ella, unio nuestros en un beso que al principio no tuvo movimiento, cuando reaccione ante lo que estaba pasando. Puse una mano sobre su cuello y lo correspondí.
Era un beso dulce, suave de esos que te cargan de emoción casi como simples roces. Pronto se volvió un poco más profundo, como si los dos estuviéramos esperando a que eso por fin sucediera
Me perdí en sus labios mi mano se deslizó hasta que mis dedos se enredaron en su pelo, hasta que sus manos bajaron a mi pecho y hasta que tuvimos que separarnos por falta de aire
Si cuerpo estaba cerca del mío, imaginé que mis labios estarían igual de hinchados que los de ella. Nuestras respiraciones estaban agotadas, está vez fui yo quien volvió a dar el beso y ella quien lo correspondió enrollando los brazos en mi cuello y yo sujetando su cintura
No sabría decir si fue debido a mi fallida disculpa o porque no se resistió, pero acabamos de romper una barrera que sería difícil de controlar
Mi lengua delineó su labio su labio inferior después de que está me mordiera el labio
«Que mal momento para parecer dos adolescentes hormonales»
No tengo claro quien de los dos fue quien se detuvo, pero fue entrando en conciencia de que estábamos en el instituto y que algún profesor o (lo más lógico) estudiantes nos vean, algo que seguramente ya debieron aver hecho.
Hundí las manos en mi bolsillo y me relamí los labios, daba pequeño asentimientos sin saber que decir había una tensión entre los dos, que nos invadía
-Isla -Solto, no tuve que preguntar qué significaba
-Francis -Los dos asentimos y nos miramos de reojo, una sonrisa se escapó de sus labios por lo tanto de mi también
Empezamos a caminar el segundo piso. Nos chocabamos a propósito como dos tortolitos, tome su meñique con el mío, estuvimos así hasta llegar a su salón mire la puerta y era la clase de diseño
¿Recuerdas que le gusta el diseño?
Ninguno de los dos parecía querer despedirse, sobre todo cuando alguno daba un pequeño beso que el otro quería completar
Al final Isla termino entrando a su clase y yo terminé llendo a la mía (no sin antes dar saltos mientras chillaba)
Aaah ¡Por fin sucedió! Se lo contaría a Fran apenas entrara a clases.
-Un gusto, soy Santiago futuro empresario de marketing. Guapo súper modelo, es broma no soy un súper modelo (pero si soy guapo) mejor amigo y casi hermano de esta chicuela de acá -Tomo mi mano agitandola con fuerza
Mire a Isla quien estaba aguantando las ganas de reír
-Un gusto, soy Francis y soy...
-Es mi novio -Interrumpio, los dos la observamos y está me estaba sonriendo.
Pues que digo, Santiago era un chico muy gracioso y demasiado energético ¿Cómo había tanta energía en una sola persona? Dijo que tenía una relación de la cual, acababan de cumplir los tres años con una chica llamada Laly, era hijo único y siempre estaba haciendo actividades con su madre
Me pareció algo agradable el que dijera, que llevaba buena relación con su madre y siempre habían sido el y ella.
Habíamos estado en una feria intentando ganar algún tipo de juego (aquí la única que ganaba era Isla) que por cierto. Me enteré que su apellido era Thaber su apodo era Thalis
Se agradece el crédito por el apodo, muchas gracias.
Y ella me decía chico sangre, sobre todo por mi apellido
-A ver -Dejo el sumo en la mesa -El año pasado, Isla no dejaba de usar los patines de Soy Luna, dijo que le gustaba sentirse cool
La mire sentada a mi lado, se había sonrojado por lo que acaba de decir su amigo, le di un pequeño empujón que solo causo que mirara con mala cara
Pasábamos ratos contando algunas cosas vergonzosas del otro o solo experiencias pasadas, al final terminamos invitándolo al baile de nuestro instituto. Dijo que le emocionaba la idea de, infiltrarse en un instituto privado
Eran las 3:09 de la tarde cuando Isla y yo fuimos a mi casa
Mis padres habían ido a, una fiesta de mi hermana ya que dijo que no quería ir sola, habíamos comprado unas palomitas en el camino. No para ver alguna película
En realidad si, íbamos a ver Gossip Girl dijo que no conocía la serie, y yo nesecitaba mostrarle esa seríe
Nos encontrábamos recostados en mi cama viendo aquella serie.
Plante un pequeño beso en su cabeza. Me parecía un acto inocente, el darle pequeños besos a tu pareja mientras ven alguna serie o película.
A ella parecía gustarle porque cada vez que lo hacía se aferraba más a mi cuerpo, en ese momento su pelo era lo que más me entretenía porque mientras ella veía todo lo que yo me sabía de memoria, le hacía trencitas y algunos peinados extraños.
-¿Sabías lo afortunada que soy de estar a tu lado? -Me susurro
-Tu no tienes idea de lo agradecido que me siento porque, el director me llamara para darte el recorrido -Me acerque a sus labios
Antes de poder besarla me volvió a dar la espalda mientras veía la serie, se encontraba sentada entre mis piernas. Así se me facilitaba más el poder hacerle peinados
No es por presumir pero, soy un estilista demasiado bueno. Si no quisiera ser escritor me dedicaría a esto
Gemido... Un maldito gemido, fue lo que hizo que dejara de jugar con su pelo
No me había dado cuenta de la escena que había en frente ¿Cómo me iba a dar cuenta? ¡Yo estaba jugando con el pelo de mi novia!
Al parecer no fui yo el único en tensarse, si no también la chica que estaba sobre mis piernas ¿Porque mejor no puse el lorax? Era mejor que ver una serie de adolecentes hormonales. Trague grueso y continúe con las trenzas
La escena seguía y tener a una chica que casualmente es mi novia sentada en mis piernas no era bueno. Sobre todo sí empezaba a tener una tensión (saben a lo que me refiero)
Isla simplemente se acomodo entre mis piernas hasta tenerme de frente, nos miramos un par de segundos, sus manos estaban sobre mis hombros y las mías empezaron a acariciar sus piernas
Ella fue quien empezó el beso, pero fui yo quien detuvo las manos sobre sus muslos. Empezaron siendo besos cortos y repetitivos hasta que se fueron convirtiendo en unos más profundos y provocativos
Mis manos se aferraron más a sus muslos, nuestras respiraciones se alineaban al tiempo íbamos provocando al otro, empezó a moverse de manera lenta bajo una de sus manos hasta rozarla con una de las mías
Quite una mano de su muslo y tome la suya entrelazando nuestros dedos. Mi lengua invadió su boca robándole un jadeo, sus caderas se movían en círculos queriendo torturarme
¿Porque el sexo se encontraba tan quemado? Era algo comun que solo se hacía con la persona correcta. O tal vez eso quería hacerme creer
Las ganas estaban y se evitaban
En ese momento solo las estábamos liberando, las liberamos cuando la habitación se llenó de besos y suspiros, las soltamos cuando empezaron a convertiste en una tortura, las soltamos cuando todo empezó a sentirse con desesperación. Cuando su mano bajo hasta mi pantalón y cuando la mía solo subió.
Si bien habíamos tenido una relación buena, la mayoría de veces la sacaba a pasear, le hacía regalos ¡Hasta la lleve a conocer a mi padres!
Llevábamos un mes de relación, habíamos tenido algunos problemas pero eran cosas que se resolvían después de clases íbamos a la feria o, a la ciudad
Conocí a sus padres (que la verdad no me causan buena espina)
Habíamos entrado en pánico porque, a Isla no le bajaba desde hace unos días, pero luego de eso vimos que no estaba embarazada. No volvimos a tocar el tema.
En casa había empezado a tener problemas con mi hermana. Estaba empezando la secundaria y mis padres querían que fuera como yo, aunque toda la vida la he tratado como si la odiase, había estado esperando a mostrarle como funcionaban alguna cosas en sus nuevas materias o a darle consejos
Cuando eres el hermano mayor tus padres siempre tienen dos opciones: Te dejan de lado por el hermano menor o te dejan como idolo y, restándole importancia al hijo menor
No era de más decir que mis padres me daban más atención que a mi hermana, siempre tenía que estar en los eventos familiares para que pudieran presumir que quería ser escritor
Zoe quería ser veterinaria, pero últimamente la había visto perdida en sus deberes. Acababa de cumplir los 13 y la ví con algunos amigos que no había conocido. Ella no era muy sociable que digamos, pero no le había prestado mucha atención porque pensé que estaba empezando a hacer amigos
La mayoría del tiempo me evitaba o cuando le decía apodos, se estresaba. Empezaba a decir que le dejase en paz y que no me, metiera en su vida
Empecé a reducir las bromas o los comentarios de odio, pero eso no significaba que no lo seguía haciendo. No tenía intenciones de dañarla
Un día le dije que, debía dejarse crecer el pelo porque se veía ridícula con el pelo así.
La había encontrado en la sala a mitad de la noche, viéndose al espejo mientras acariciaba su cabello, nunca supe si estaba llorando o no. Me había descubierto observándola y me tacho de metido.
A pesar de todo eso estaba teniendo una buena relación con Isla, solo faltaban tres días para el baile
Mi pregunta empieza aquí; ¿Por qué? ¿Por qué cuando eres una persona complemente feliz con su vida y, con la persona que tiene alado comienzan los errores? ¿Por qué el universo no quiere ver a dos personas ser felices?
El día del baile. La busque en su casa y joder. Se veía hermosa con aquel vestido verde, les prometí a sus padres traerla temprano ellos no eran los típicos que le tomaban fotos a su hija con su cita.
Por eso decidí ser yo quien sacará el teléfono y nos tomara una foto. Está noche mis padres me habían dejado usar el auto
Así que pasamos por Santiago en cuanto subimos
El auditorio había quedado muy bien, habían mesas cargadas de comida y bocadillos en las esquinas, habían algunas cosas de neon y luces de distintos colores. Me asegure comprarle una rosa (falsa) a Isla para la muñeca
Santiago se habia quejado por el hecho de no haberle comprado una a él.
Nos acercamos a mis amigos, Miriam llevaba puesto un vestido plateado y corto su cabello peligro estaba ondulado y un suelto. Me calme en cuanto noté que miraba a Isla con una sonrisita amigable
Fran llevaba puesto unos lentes raros junto un esmoquin negro y corbata de cuadros de, distintos colores
Me encargue de presentarlos de la mejor forma, le agradecí a Miriam no haber hecho algún escándalo con Isla y comportarse de buena manera
Si pensabas que esto sería algo como los bailes de Disney estás equivocado. Cuando los profesores de distrajeron empezaron a verter alcohol en las bebidas, ocultando las botellas debajo del mantel
Nunca fui una persona de socializar, me gustaba creer que las personas que tenía en mi vida eran por algo. Hasta ahora no había tenido más amigos aparte de Fran y Miriam (eso sigue dudoso) ahora era Santi, que era un chico muy social
Y ahora tenía a Isla, que hasta ahora es lo mejor que me ha pasado. Últimamente había tenido sueños distorsionados ella aparecía en ellos pero su imagen apenas era clara, y apenas podía moverse
No sabía que significaban pero preferí no tomarles mucha atención
-¿Le gustaría bailar señorita? -Sonrío en cuando tendí mi mano
-Por supuesto -Se levanto y nos dirigimos a la pista
Deje caer mi mano en su cintura para empezar a bailar, en ese momento sentí que éramos ella y yo nada más. Estábamos dando torpes pasos sin sentido, pero divirtiéndonos
-He tenido sueños raros en los que tú no estás -Me miro -¿Crees que signifique algo?
Di dos pasos hacia adelante pensando
-No lo sé -Me encogí entre hombros -Yo también los he tenido solo que tú imagen me es un poco distorsionada -Le di una vuelta antes de volverla a acercar -¿Irás a algún lugar en vacaciones? Tal vez sea eso
-Creo que iré a California para visitar a unos parientes
-Alli está, seguramente es eso -Sonreí -¿Cuando volverás?
-Aun no lo sé. -Se recostó en mi pecho aún bailando -No quiero dejarte solo
-Si me llamas sería feliz -Deje un beso en su mejilla -Asi no perderíamos el contacto, seguiríamos hablando y podríamos contarnos las cosas que nos pasan
-Mmh tienes razón. -Dejo un beso en mi barbilla -¿Quieres que salgamos mañana?
-¿Como podría decir que no?
La verdadera pregunta aquí es ¿Cómo puede ser tan idiota?
10:45 dela noche, Fran estaba un poco borracho por el alcohol pero lo disimulaba debido a los profesores.
Santiago había estado pasando toda la noche con Fran así que por sud pasos pude notar que también estaba borracho
Huelen asqueroso
-Ya deberíamos irnos -Le dije a Isla -Le prometí a tus padres, que te traería temprano
-Vale. -Asintio y recogió su bolso para colgarlo del hombro. Puso dos dedos en su boca y, le silbo a su mejor amigo -Nos vamos
-Noo, quedemonos un rato más -Se recosto del brazo de Miriam
-Tu también tienes que llegar temprano así que -Le hice un gesto con la mano -Vamonos amigo
-Si se van a ir -Aparecio Fran sin parar de parpadear -Yo los llevo
-Tio estás borracho -Señale -No puedes conduci...
-Sh. Silencio -Puse un dedo en mis labios -Todavia puedo manejar o no Miriam
Todos la miramos a esta que se encontraba mirando su teléfono, hizo una pequeña mueca
-Ves
-¿Que Miriam no te está prestando la más mínima atención? Si vale, lo veo. -Sonreí de manera irónica -Te digo que no puedes conducir borracho, tu quédate aquí
Me tomo de los hombros y me obligó a observarlo
-Tu sabes que no bebo más de tres vasos ¿Cuántos me bebi?
-¿Tres?
-Exacto. Ahora vamos, yo los llevo Miriam irá con nosotros
-¿Yo por que? -Bajo la vista de su celular -Lo menos que quiero es estar en un auto contigo -Hizo una mueca de desagrado -Que eres muy pervertido
-Creeme, a ti ni te veo
Suspiré frotándome los ojos
-Vale. Pero el auto de mis padres es muy pequeño, solo tiene dos asientos -Mire a Isla quien estaba arreglandole la corbata a Santi
-Pues la llevo a ella y después a ti, y al otro chico. Listo.
Me lo pensé, si era cierto que Fran no bebía más de tres vasos y se veía algo sobrio. Suspiré antes de asentir he acercarme a Isla
-Thalis -Se acercó a mi- Oye, Fran te llevará a casa, luego a mi y a Santi ¿Estás de acuerdo con eso? -Tome sus manos
-Claro -Entrelazo nuestras manos y me dió un pequeño beso -¿Nos vemos mañana en Jeft's?
-Si, te veré a las 9.
Salimos del Instituto de manera en que los profesores no sospecharan (y tampoco olieran) a los dos chicos, medio borrachos que iban con nosotros
No era la primera vez que Fran usaba el auto de mis padres tambien, así que le cedi las llaves con mucha facilidad. Thalis le diría, su dirección y el volvería por Santi, luego por mi y Miriam
-Te quiero -Susurre
-Te quiero -Me dió un último beso -Nos vemos mañana -Entro al auto.
¿Porque no supe que eso sería una despedida? Miriam se había dado cuenta de, que Fran había olvidado el permiso
-No deben ir tan lejos -Aclaro Santi -Si vas en un Uber puedes alcanzarlos
-Gracias -Tuvimos suerte de que estaba pasando uno por esos lados -Les llamo cuando regrese -Asenti y el Uber arranco.
Hundi las manos en mis bolsillos mientras me recostaba de la pared, hacia mucho frio, aún podía escucharse el ruido de la música pero también nos encontrábamos en silencio.
Santi se quedó a mi lado cerrando los ojos, con algo de frustración, ya no parecía tan activo o borracho
-¿Te pasa algo? -Me incline -Pareces algo frustrado
No respondió al instante. Se encontraba perdido en sus pensamientos, lo ví respirar profundo antes de abrir los ojos y negar
-No pasa nada. -Paso su dedo índice por el labio inferior antes de sonreir -Solo estoy cansado ¿Crees que, tú amiga le haya podido dar el permiso?
-Es lo más seguro -Me encogí entre hombros -Si no mata a Fran en el proceso, por ser tan despistado yo creo que todo está bien. -Rei un poco ante imaginar esa escena
Miriam golpeando o insultando a Fran mientras lo baja del auto y lo hacía pasar al de vergüenza entre las personas
-¿Te gusta? -Lo mire- Isla... ¿Si en verdad te gusta?
-Por supuesto -No tarde en responder -Ella es lo mejor que me ha pasado en la vida, haría lo que fuera por tan solo verla feliz.
Asintio
-La conozco de toda la vida, y es como mi hermana. No me gustaría que salga con el corazón roto -Admitio -¿Prometes cuidarla?
-Lo juro. -Asentimos al mismo tiempo y nos quedamos en silencio
La pregunta me dejó pensando «¿Te gusta?»
¿Que si me gustaba? Estaba enamorado... Isla iba a ser mi perdición, iba a ser la única persona capaz de destruirme. Quiero que esto funcione, no me importa si los demás dicen que es un romance adolescente y que nunca se va a dar, no me importa si habrán mil y un obstáculos. Pelearia porque esto funcionara porque empezaba a amarla y querer vivir una vida sin ella no estaba en mis planes.
Mi teléfono empezó a vibrar como loco, lo saqué de mi bolsillo y ví que eran mensajes repetidos de Miriam. Santi se acercó a mi para ver
Le marque para saber qué sucedía, contesto al primer tono;
-Miriam ¿Que pasa? -Silencio, pude escuchar su respiración pero no su voz -Miriam ¿Esta todo bien?
Su respiración se hizo más agitada, mire a Santi que estaba igual de confundido que yo
-Miriam por favor dime qué pasa -Nada seguia sin responder -¿Paso algo? Dime por favor que no pasó nada malo, Miriam.
-Francis... -Sus voz sonaba quebrada -Acaban de chocar... Acaban de de chocar contra otro auto...
Mi corazón dejo de latir por unos segundos, mi mente quedó en blanco, las manos empezaron a temblarme... El teléfono callo contra el piso, Santi empezó a llamarme pero ni siquiera podía escuchar su voz.
Mi pecho subía y bajaba. Mi respiración se volvió cada vez más agitada una ola de sentimientos me inundo el cuerpo, no se que fue lo que me hizo moverme en ese momento pero empecé a caminar despacio. Santiago recogió mi teléfono y me siguió
La salida a la feria...
Mi cumpleaños...
La habitación...
Las flores...
La piscina...
La reunión con mis padres...
Mis pasos empezaron a ir más rápido mientras recordaba todo
El atardecer...
Aceleré.
La fuga...
La primera vez...
Santiago empezó a gritar mi nombre
El día que la conocí...
Sin darme cuenta estaba corriendo en medio de la calle, dónde los autos empezaban a sonar sus cornetas y el viento movía mi saco y mi pelo
Mi pecho empezó a arder. Santiago se encontraba al otro lado de la será corriendo y gritando mi nombre.
Mis lágrimas no salieron hasta que me detuve en el acto. Hasta que ví a todas las ambulancias y autos policiales rodeando aquella escena. Hasta que ví el auto de mis padres destrozado y de cabeza. Hasta que Miriam se acercó a mi explicándome todo lo que pasó. Hasta que Santi empezó a aferrarse a mi hombro. Y hasta que los ví llenos de sangre en una camilla...
Los hospitales nunca fueron mi ligar favorito. Los odiaba, pero en este momento tenía que tenerles algo de esperanza
Ambos se encontraban en revisión en diferentes habitaciones. Tenis la mirada en el piso con los ojos más que hinchados, los doctores se negaron a hablar a menos de que fuera un familiar
La única que pudo entrar para ver a Fran fue Miriam, tenía casi una hora sin salir de allí.
Santiago había llamado a sus padres, dijo que venían con unas amigas. Me pase la mano por la cara sin decir ninguna palabra
«Es tu culpa»
Lo es.
«Sabes que es tu culpa»
Lo sé.
Lo que inundó la sala de espera en ese momento fueron unos gritos preguntando en "En dónde está" junto a varias veces femeninas. Sabía lo que me esperaba, me estaba preparando mentalmente
Ni siquiera tuve que levantar la vista. Aquel hombre me levanto con sus propias manos, y comenzó a agitarme con fuerza
-¿¡QUE LE HICISTE!?
-¡Señor Erick! -Dijeron varias chicas a la vez
-¡Bajelo! -Pidio Santi
-¿¡DIME QUE LE HICISTE!? -Me agito más fuerte -¿¡QUIEN ESTABA CONDUCIENDO!?
-¡¡Señor Erick!! ¡¡No fue e...
-¡Yo estaba en el auto! -Menti -¡Yo fui quien causo el accidente! ¡Choque contra ese auto!
El hombre alzó las cejas pasmado, examinandome
-¿Porque no estás herido? -Clavo más sus manos en mi- ¿Porque si tú chicas te el auto no estás allí adentro? -Pregunto con acidez
-Los doctores se encargaron de coser mis heridas... -El hombre no me estaba creyendo nada -Estaba un poco tomado y...
Me tiró contra la pared, las enfermeras y Santiago se encargaron de ayudarme, el golpe me causo zumbidos en los oídos
-Eres un idiota -Hablo una chica castaña -¿Cómo se te ocurre manejar borracho?
-Max es suficiente
-¿Y tú qué hacías con el? -Hablo una chica pelinegra, Santi bajo la mirada y no respondió -¿Con que por eso me cancelaste?
Su padre volvió a acercarse a mi con los ojos hechos irá, los músculos tensos y el pecho subiendo
-No quiero que te acerques a ella -Me señaló -Si te veo cerca de ella, me encargaré de matarte yo mismo -Tenia un nudo en la garganta no podía si quiera abrir la boca -No me interesa saber quiénes son tus padres, si te veo con ella vas a morir.
Esa noche no pude despedirme, esa noche había acabado la relación, esa noche no supe más de ella, esa noche Fran casi fallece, esa noche casi perdía al amor de mi vida y a mi mejor amigo. Me heche la culpa de algo que no sabía correctamente que había pasado, pero me heche la culpa porque yo tenía el cargo de cuidarla y protegerla.
Lo mínimo que podía hacer era hacerle caso a lo que decía su padre. Si no quería tener problemas y así podía protegerla, no me acercaría más.
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