Capítulo 39: "Promesa"


Los días de esos 7 días se terminaron, la princesa lo despedía gustosa y Tails regresaba con un apoyo que llegaría días después a Mobius, maquinaria para su proyecto, y financiamiento. Era lo que quería, pero, no se sentía como una victoria, no sentía felicidad.
Sonic se habia ido un día antes que él, apoyado por la princesa se fue sin decirle adios, cuando se enteró, comprendió que el erizo le importaba demasiado, pero ya lo había lastimado ilusionando sus sentimientos.
Voló controlando sus deseos de ir lo más rápido posible, tenía que ser objetivo y no perder la cabeza, queria ver a Amy, abrazarla y concentrarse en su objetivo, tenía que dejar ir a Sonic, porque, era mejor así.

Al llegar, notó que el clima era muy inestable para la avioneta, decidió aterrizar algo lejos para entonces contratar un auto y llegar de esa manera a la ciudad, llovia a cantaros y la ciudad se veia triste, o tal vez, era el cristal con el que la miraba, su propia percepción.

Llegó entonces a la casa de Amy Rose, no se bajó del auto, se quedó pensando si ir allá y tocar.

-¿Si es aquí señor? - Preguntó el chofer.

-Lo siento, me confundí, es otro sitio.

Se arrepintió, no tuvo el valor de comprobar que sus sentimientos seguían intactos por ella.

Al día siguiente, la lluvia habia cesado, en su mansión miraba a través del ventanal, había una arcoiris en el cielo que le recordaba aquel momento exacto entre ellos, dolió, dolió que todo hubiera acabado y no poder haberlo controlado ¿Por. qué decidió emborracharse? ¿Por qué no pudo controlar sus palabras y sus acciones y echó todo a perder? Perder... ¿En verdad lo echó a perder? Significaba que él ansiaba tanto esa noche y que en verdad deseaba estar con él, entonces ¿Qué sentía por él?

Se dirigió horas después al estudio donde trabajaba Amy y Sonic, esperaba encontrar primero al erizo, quería hablar con él y dejar de sentirse culpable.
Lo buscó con la mirada y primero encontró a Amy, estaba distraída, así que decidió esconderse de ella, siguió buscando, su desesperación aumentaba al ritmo de su corazón, no podía esperar más y allí, limpiando su equipo y saludando a unas chicas lo vio, su corazón dio un vuelco y sin pensarlo mucho se dirigió hasta allí.

—So...

El erizo lo vio acercarse y se fue rápidamente, no quería verlo, y era entendible para Tails. Pero no iba a dejarlo ir.

—¡Espera Sonic! ¡Debemos hablar!

—¡Ya hablamos en Soleanna! Ya todo quedó claro.

Zorro persiguiendo a erizo, entre los pasillos del estudio, los demás preguntándose qué estaba pasando, sólo los veian pasar, uno tras otro, mientras se gritaban.

—¡Aún no queda claro para mí!

—Ya no quiero participar en tus dudas, ya lo intenté y no gané.

Tails usó sus colas para volar y así alcanzar a Sonic quien frenó en seco al toparse frente a frente con él.

—Por favor... Escúchame.

—¿Qué pasa?

Una voz femenina muy conocida los interrumpió, era Amy Rose, le extrañaba que el Doctor no haya ido a verla primero a ella, y que además ahora estuvieran discutiendo ellos. Amy llevaba en su cabeza una pañoleta.

—¡Ah, Amy! — Sonrió el erizo acercandose a ella y dándole unas palmaditas en la espalda— Es Tails que me preguntaba como darte una muy buena noticia, ya no será necesario que tu personaje se encuentre hospitalizado por un terrible accidente.

—¿En verdad si pudo traerme la peluca que dice Sonic, Doctor?

—Ehh... Sí, me alegra que en tu trabajo te apoyen y cambien el guión de esa manera.

—Ha sido horrible, las personas murmuran, y las que me tienen envidia siguen diciendo que yo ya no debería ser una estelar. <<un momento... ¿Me ha tuteado?>>— Amy pensó eso último dandose cuenta de ese pequeño detalle— Sonic me dijo que su viaje tuvo que extenderse un poco más y él tenia que volver más pronto por el trabajo. Me adelantó muchas cosas de las que hizo para mí en ese viaje.

Amy se veia tan feliz, llena de esperanza y Tails, lleno de desesperación, claro que queria curar a Amy y verla feliz, pero justo ahora, tenía que aclarar toda esa maraña de emociones que sentía en su interior.

—Si, si, son muchas sorpresas Amy, pero debo irme, debo ir por unas cosas para ti y eso incluye tu peluca, así que... ¿Me ayudas Sonic?

Sonic lo miró disgustado, pero accedió asintiendo con la cabeza, ambos se fueron en silencio mientras Amy Rose notaba que esos dos se traian algo.

— ¿Por qué quieres hablar conmigo? Creo que es mejor así, dejar las cosas como están, seguiré haciendome el tonto con Amy y te hablaré como siempre pero, me iré retirando, no es bueno que esté con ustedes.

—Esa noche...

—Esa noche deberias olvidarla Tails, lo que pasó, pasó, pero sabes bien que no fue lo correcto para ti. Te obligué de alguna manera y merecido tengo que tu ebriedad me recordase mi lugar.

Llegaron al auto de Tails, quien solo abrió la puerta de la cajuela pero no saco nada.

—No, no fue lo correcto, porque esa noche estaba tan confundido como ahora, pero se algo, algo que no puedo seguir negando.... Creo que me gustas.

Sonic cambió su semblante, estaba sorprendido.

—Como dices, no puedo olvidar a Amy de la noche a la mañana, y creo en verdad que estoy sintiendo por ti cosas cada día más fuertes, me arrepiento tanto de no poder haber continuado esa noche contigo... El haber claudicado a causa de mis dudas... Perdóname Sonic, en verdad disfruté tanto estar contigo.

—Y.. ¿Qué hay de Amy? Tu diligente cuidado, tu promesa de mantenerla viva.

—Aún así voy a protegerla y tratar de salvarla, eso no ha cambiado, y en definitiva, quiero entender qué pasa conmigo.

—Yo ya no quiero ilusionarme, pero... También quiero creer que esa bendición sirvió de algo.

—¿Bendición?

Sonic se llevó las manos a la boca, de nuevo ésta lo traicionaba.

—¿Acaso  la bendición de la princesa Tikal, la que tuve que pagar a un alto precio tuvo que ver conmigo?— preguntó muy seriamente.

—¡Lo siento! Pero es que Tikal se dio cuenta de mis sentimientos y me amenazó que si no te diría todo.

Sonic hacia reverencias una tras otra, en signo de disculpa.

—Aún así me lo dijiste idiota.

—¡Oye! ¡El que estaba enojado era yo, no me ofendas!

—Bueno, ahora entiendo que esa bendición tal vez ayudó en verdad.

Ambos se miraron con una sonrisa en el rostro, era la reconciliación que ambos estaban esperando.

—Bueno— se dirigió a tomar las cosas de Amy, y Sonic le ayudó — Vayamos a dejarle esto a Amy y esta noche quiero que aceptes una salida conmigo.

—Ya no seré tan fácil y me dejaré seducir eh

—Quien me sedujo fuiste tú, tonto.

—jajaja cierto.

Esa noche ambos se vieron en un restaurante hawaiano, disfrutaron la velada y entonces, Tails tomó la decisión más seria e importante hasta ahora en su vida.

—Sonic, gracias por darme esta oportunidad, por favor acepta este regalo.

—¿Uh?

Era una pequeña caja,  sospechosamente del tamaño de un anillo.

—¡¡¿Me vas a pedir matrimonio?!! —El grito lo escuchó todo mundo.

—¡Cállate noooo!— el zorro tapaba con una mano la boca del erizo, se ruborizó al ser el centro de atención, aunque, ya se estaba acostumbrando.— Ábrelo.

—Ok, ok, ¡¡!!

—Es un anillo de promesa, quiero que seas mi novio, e intentemos tener una vida juntos.

Sonic de inmediato se lo puso, sobre su guante y feliz aceptó la propuesta.

—¡Aunque quien debía pedirte eso era yo!

—No hay que ser tan tradicionales erizo.

Se dieron un beso frente a todos, felices de su nuevo comienzo, la gente a su alrededor, miró tiernamente el momento.

Los días pasaron, ambos hacian planes para vivir juntos, seria Sonic quién se mudaria y temerosos practicaban la manera de confesarle todo a Amy Rose. La eriza ya sospechaba algo, pero no estaba segura de qué se traían entre ellos, y entonces, el destino le mostró qué era.

Los vio besandose en la calle.

Continuará....

Pues resulta que si se hicieron novios, viva el noviazgoooo. 😶😶😶

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