-¿Está usted seguro que la última vez que vio a la sra. The Fantasy fue cuando su androide amante la lanzó a la calle fuera del departamento donde ahora vive?

-No es mi amante, sólo mi amigo, ya ni su dueño soy.

-conque emancipación eh... ¿Entonces está insinuando que tal vez actuó con libre abeldrio y se llevó a la señora Sally?

-¡En ningún momento dije eso!

Silver estaba siendo retenido e interrogado en la comisaría, se le tenía como sospechoso de la desaparición de Sally Acorn The fantasy.

-El esposo de la señora Sally mencionó que su matrimonio se estaba desmoronando gracias a la infidelidad que usted descubrió y en la cual inmiscuyó a su esposa y teme que aquel androide justo como hirió de gravedad al señor The hedgehog también lo haya hecho con ella.

-¡Mentira! Shadow no le haría daño...

-Usted acaba de confirmar que Shadow lanzó del departamento a la señora, eso es herir.

-...

-Díganos dónde está su androide y facilitenos el trabajo.

-No tengo idea... Estaba con mi amigo Tails, me amenazó con llevarse a Shadow ya que tuvimos una discusión, me desmayé y de allí no supe más... Creo se lo llevó.

-Huy, que casualidad, ahora resulta que todos desaparecen misteriosamente.

Dejaron libre a Silver, pues no había pruebas de nada, aún así seguía siendo sospechoso, el mundo se le estaba yendo nuevamente encima, sus anteriores declaraciones le habían vuelto en contra, aquel video junto a Shadow ahora era para los demás una prueba irrefutable que se entendían y escondía al androide dejando así impune su abuso contra Sally. Su esposo casi ex esposo había salido a declarar sin pena y sin piedad el cómo ese androide era peligroso, incluso el director de la película que estaban rodando, acusó a Silver de envidia, por no ser el protagonista y seguro que, sabía dónde estaba la pobre ardilla; Tails no aparecía y como si se lo hubiera tragado la tierra, dejaba sólo en todo esto a su amigo, aunque tal vez ya no lo era; la última discusión parecía que había sido definitiva.

-Tails construyó a esos androides, debería dar la cara él, no tú. - Trataba de ser empatica con el desconsolado Silver; Blaze the cat era ahora lo único que le quedaba. -¿No tienes ninguna idea de donde pueda estar?

Silver hundía la cara en el sillón de su departamento donde apoyaba su cabeza y brazos, sentado en el suelo tratando de procesar todo este desastre.

-No tengo idea, ya fui a buscarlo en su casa, en el laboratorio pero no hay rastro, se llevó todo lo que parecía indispensable y dejó lo menos importante, parece que no volverá pronto.

-Esto me recuerda aquellos años en los que desapareció... ¿Recuerdas? Ya hace casi 3 años.

Silver enderezó la cabeza y miró con sorpresa a la gata violeta.

-Bueno, fue precisamente a hacer sus investigaciones, las cuales le llevaron a descubrir cómo crear sus prototipos.

-¿Nunca supiste a dónde?

-No, nunca, tengo entendido que viajó por el mundo.

-De hecho esos años dejó la tumba de mi hermana en paz, incluso... Me atrevo a asegurar que no la pisa desde entonces, era tan reacio a no dejar que nadie entrará y ahora que me dejó las llaves y el libre acceso la ha abandonado totalmente.

-Dejó todo... Yo tuve la culpa, me peliee con él...

-No te culpes- Blaze le daba una palmadita en la espalda en señal de apoyo- Ya aparecerá, estoy segura que tarde que temprano irá a ver a mi hermana... ¡Oh¡

La gata se pone a pensar algo entusiasmada, da algunos pasos por la habitación.

-¿Qué pasa Blaze?

-¿Y si ya fue a verla? Tal vez antes de irse la fue a ver y... ¡Dejó pistas!

-¿Me estás diciendo que vayamos al cementerio?

-¿Quieres encontrar a Tails?

Ambos emprendieron sus pasos al cementerio, allí Silver se daba total e inequívoca cuenta que Tails amó tanto a esa eriza rosa, su mausoleo era tan impactante y ahora podían entrar sin reservas, pero justo allí, capas de polvo y flores marchitas así como la luz interna del lugar estaba en total abandono.

-Debo aceptar que no vengo muy seguido- confesó algo apenada- Pero en definitiva la luz sigue cortada desde hace meses, y las flores son las mismas que yo dejé frescas y no se han cambiado.

-Entonces no ha venido por aquí...

Silver tomó asiento desanimado en una banca polvosa, frente a él estaba aquella consola de sonido que hasta telarañas tenía como decoración, a lado estaba un retrato que habia visto tantas veces en el departamento de la casera. Amy Rose tan jovial, llena de vida en sus ojos mostrando esa sonrisa coqueta.

-Realmente era muy bonita...

-Sí, como tú, tu eres muy guapo, tienes esa sonrisa coqueta que enamora a tantos., así era ella, la amaban tantos, la admiraban muchos, pero ella no amaba a adsolutamente a nadie, solo su carrera, se sintió morir cuando esa carrera quedaba frustrada con su enfermedad, Tails la amaba tanto que dejó todo por salvarla, y ella allí, aceptaba todo incluso se dejaba un poco querer platonicamente por el interés de salvarse.

-Ojalá hubiera logrado salvarla, tal vez así Tails...

-¿Tú también sientes que Tails está mal?

-Sí, esta ultima vez que lo vi me inyectó algo para que me durmiera,

-Está loco... Primero pensé, cuando lo conocí, que era un doctor muy comprometido con sus pacientes, luego comenzamos a sospechar que realmente estaba enamorado de Amy, lo dejamos pasar, porque qué mejor que el doctor no nos cobrara nada por sus investigaciones y tratamiento, no eramos ricos y todo lo que intentamos para salvar a Amy drenó lo poco que teniamos de dinero y estabilidad; casi nos quedábamos sin casa... Al final, cuando Amy pereció, Tails no permitió que ni una veladora fuera pagada por la familia, todo pagó, todo administró y dejó a su gusto, nosotras nos extrañamos un poco pero... Seguimos como aves de rapiña dejando que otro hiciera el trabajo. Muchos lo admiraban, le decian un romántico empedernido, un loco enamorado que trascendió su amor más allá del tiempo y la vida. Tan celoso de que alguien pisara el sagrado sanguario de su amada y ahora... Ni siquiera lo mantiene limpio y funcionando, supongo que... Ya la olvidó y superó.

Silver se quedó en silencio, recordó los tratos de Sonic con Tails, tal vez era verdad, ya habia superado a la difunta, -porque no hay dolor que dure 100 años, ni cuerpo que lo aguante- pensó, había sido una perdida de tiempo haber ido a ese lugar.

La ciudad sólo hablaba del reciente incidente, pero habia un nicho pequeño de un chisme muy interesante, el señor eggman reaparecia en el ojo público para dar su opinión sobre el caso, y de paso, hacer promoción.

—El doctor Tails no pudo crear a sus robots sin perder la fina linea del libre albedrío— Presumía orgulloso de lo que estaba por decir un eggman ante la presentadora de  noticias — Yo especialmente estaba seguro que crear androides cómo los que hizo sin que fueran un problema en el futuro era una total y erronea falla de mentira, ¡eran demasiadas libertades! Y ademas de todo eso, era un terrible negociador.

—¿Lo dice por la venta frustrada que tuvo usted con el androide azul que era uno de sus prototipos?

—Así es, ya estaba yo en la entrega y... De repente se puso como loco y me corrió vilmente, aunque ahora debo agradecerle que me haya salvado de su locura.

—¿Locura?  Señor eggman ¿por qué dice que locura?

—Porque ese zorro traicionero solo planeo junto con su amigo destruir a la elite de Mobius, ya lo hizo con Mephiles, con Sally y su esposo y planea hacer más.

La presentadora hizo un gesto de horror, los espectadores igual, eggman estaba manipulando mediaticamente a su favor todo.

—Y yo, les prometo que podré hacerle frente al malévolo Tails y sus prototipos fuera de control.

—¡¡¿Cómo?!!

—Yo también puedo hacer robotsitos, pero estos si respetan las leyes de la robótica.

—JA JA JA JA ¿Qué te parece señorita? A que me lucí en esa entrevista, todos hablan de lo asustados que estan que ese zorro no aparezca y tú tampoco.

Eggman apagaba la tv, y en su guarida con varios sirvientes robots a su alrededor tenia cautiva a la ardilla desaparecida, esta luchaba por liberarse, no podía creer que ese hombre que parecía un chiste en verdad fuera peligroso.

—Aún estoy algo temeroso, los imbeciles de mis secuaces no pudieron hacer bien su trabajo, secuestraron al "modelo" equivocado, ¡Yo queria nuevamente a Silver! ¡Así el tal Shadow vendría a mí, y por salvar a su querido dueño me apoderaría de su sofware.

—¡Ya te he dicho que me liberes!  Silver no vendrá por mí.

—Bueno, Silver ya ni siquiera tiene al androide, pero sé que no te dejaria aquí sola, tal vez te ordene sacar como costal de basura a la calle, pero, te estima, te estima ardillita.

—Grrr, y ¿qué con eso?  ¿Crees que te servirá un Silver sin androide? ¿Te servirá quedarte con el sofware de Shadow? Despues de todo, saldrá a la luz tus planes, no puedes retenernos por siempre.

—Haré lo siguiente— habló el bigotón, ignorando a la ardilla— Silver es mi objetivo, caerá si lo atraigo contigo, shadow tal vez venga y si no es él seguro vendrá Tails, ese zorro tal vez ahora le esté dando la espalda al erizo, pero estoy seguro que en peligro de muerte no lo hará muahahahahahahaha.

—Estás loco Eggman.

Continuará...