Llorar y llorar, era lo que hacía aquel Silver junto a una cascada artificial que se hallaba cerca del templo dónde una boda había Sido arruinada; en los brazos de su amigo, Tails lo consolaba como una abuelita a su nietecito regañado, ¿Por qué quería tanto a ese erizo torpe? ¿Por qué le daba coraje verlo sufrir? Le estimaba mucho, casi como un hermano, que incluso sentía la necesidad de resolver la vida de éste.

—Me llamó travesti de la alcantarilla... Y ¡No lo defiendas!...

—No planeaba hacerlo— contestó rápidamente con un rostro lleno de ira.

—... Sólo Sally Acorn y él, a quien yo le dije mi pasado sabía de ese detalle tan específico, así que él fue quien más me ha traicionado, Sally está bien que no es santo de mi devoción, pero no sería tan vil para hacerme eso.

—Ya olvídalo, debemos irnos, aunque... Ya llevamos rato aquí y no veo llegar al preocupado y arrepentido novio.— eso último lo dijo entre dientes, Silver seguía gimoteando, aferrándose a él.— Silver... ¿Quién sería tu "pareja ideal"? ¿Qué buscas en una pareja?

Las preguntas hicieron olvidarse un poco de su tristeza y un Silver esperanzado describió a su amor ideal.

—No pido mucho, sólo quiero sentir paz en sus brazos, sentirme protegido, y que me tenga confianza y haya comunicación, que no se avergüence de mi origen y me deje ser yo.

—¿Tú ofrecerias lo mismo?

—¡Claro! Pero... Ya sabes, no hay relación perfecta, uno siempre ama más que el otro.

—Tal vez en una relación biológica...

—¿Qué?

—Olvidalo, olvídalo Silver — Le acaricia las púas como de un bebesito se tratara— Quien debe amarte no tardará mucho en entrar a tu corazón.

—Pues es Mephiles, él se que puede ser todo aquello que busco, es más ¡Es! Soy un tonto por dudar de él, seguramente si fue Sally quién regó el chisme.

—Ahhh— suspira agobiado el zorro— ya empiezas a defenderlo, tenías que ser Silver.

—Veras que con el tiempo, el se convierte en ese ideal.

—El tiempo que hayas vivido con esa persona, no te asegura que vayas a ser feliz si o si porque ya llevas años a su lado, eso es como "acostumbrarte a lo que hay".

—Sé que él es el indicado, no existe alguien que lo sea más que él.

—Por ahora...

La boda se canceló y se decidió tomarse un poco más de "tiempo" el que decidió aquello fue Mephiles al sentir que aunque era de lo más normal tener una pareja de la raza que fuese y del sexo que fuese para la "alta alcurnia" aún le era difícil a los "normales" no menospreciar a los "diferentes" y algo dentro suyo le seguía recordando que el origen y la forma de ser de Silver siempre estarían allí, aunque, qué más daba... Por eso se había enamorado, amaba la personalidad de Silver, él era aquel pedazo de su vida que estaba bien y feliz, era su lugar seguro, por eso le amaba tanto.

Mientras el tiempo pasaba y el mal rato se hacía lejano gracias al calendario, Tails había logrado que Blaze dejase de molestarlo, ahora podían entrar hasta donde yacía la tumba de Amy sin pedirle permiso, había hecho unos cambios radicales pero nada que la gata se diera cuenta, esa parte estaba cubierta, ahora bien, debía solucionar la vida de su amigo, aún cuando la suya no lo estaba.

— Para que se le quite haré que se parezca a él, jajaja, no se lo verá venir el pendejo.

Un poco de esto, un poco de aquello, un tornillo aquí, un tornillo allá, Tails creaba al tipo perfecto para Silver, y su venganza sería que sí o sí Mephiles se arrepentiría.

— Y cuando Silver logre enamorarse de mi creación.... Muahahajajajja

Casi casi un rayo se veía caer mientras esa risa malévola se escuchaba en el laboratorio, pero Tails sólo quería ayudar, ayudar a hacer sufrir al erizo negro ingrato.

—Tails, ¿Qué es eso?

—¿?

El zorro sintió un escalofrío detrás de él, dió la media vuelta y tras suyo se encontraba un Sonic bastante diferente al que en unos años existirá.

—A...A...mm ¡Sonic! ¡Me asustaste!

—¿Qué es eso?— preguntó de nuevo, con una mirada fría y concentrada en aquello que parecía un robot.

—Es un proyecto que estoy desarrollando, nada que te importe en realidad, deberías descansar, recuerda que aún no puedes moverte mucho.

—Quiero ser esa cosa.

—...

—Si soy un robot... ¿Podré dejar de sentir todo este dolor?

Sonic comenzaba a llorar, sus ojos rosas parpadeaban en una luz roja que comenzaba a asustar al doctor.

—¡Sonic!... Por favor— dejó de hacer lo que hacía y trataba de alcanzar sigilosamente a su invento— por favor cálmate, respira profundo y trata de pensar en otra cosa, verás que ese dolor desaparece.

—Tú me encerraste aquí, quiero salir, quiero salir, ¡Quiero salir maldito zorro!

Enloqueció entre gritos golpeándose la cabeza contra el suelo, rompía sus guantes y con sus uñas se desgarraba la cara, Tails lo  trataba de atar de manos, volvió a tomar su maletín que se creía que era de herramientas pero, había algo más que eso; una inyección penetró la piel del erizo azul el cual siguió gritando hasta que su cuerpo lo sintió pesado y duro.

— Tails... Déjame ir... Por favor...por...por...favor...

Sonic cayó inconsciente entre los brazos de Tails quien lloraba en silencio.

—Perdoname... Aún no soy capaz de hacer que olvides, ni yo he podido olvidarte...

Dos años antes del presente, por fin una boda se celebraba, Silver seguía convencido que aquel ahora esposo suyo, era su alma gemela, salían felices ambos a su recepción de boda, tan pocos invitados parecía que ese salón de baile era sólo para ellos, Silver era tan feliz en aquel momento, sin imaginar que el futuro le deparaba tantos grandes cambios.

Continuará...

Bueno, mientras haya tiempo habrá capítulos seguidos sino pues máximo al mes señoras y señores.

Saludos.