Pov: Naruto

Me senté en el centro del bosque para empezar a reunir chakra. Kurama que había tomado el tamaño de un león y caminaba a mi alrededor.

-Kurama me estas estresado

-Te toma demasiado tiempo reunir chakra- dijo molesto.

-Estoy intentando reducir el tiempo- dije sin abrir los ojos.

-Ya, con ese chakra basta-

-¿Seguro?-

-Si, no te preocupes cachorro hoy entrenaremos taijutsu-

-¿Entonces para que el modo sabio?- pregunte confuso.

-Vas a pelear con mi cuerpo humano cachorro- dijo Kurama con una sonrisa sádica.

Abrí los ojos con sorpresa, nunca había visto a Kurama como humano. Kurama me indicó los sellos y ahí lo tenía frente a mi.
Un hombre de unos 25 años de edad, de cabello naranja y ojos rojos. Al igual que yo tenía los tres bigotes.

En cuanto se puso de pie salto hacía mi, sus movimientos eran veloces, aun más rápido que Lee con el loto primario activado. Me lleve unos cuantos puñetazos y paradas pero también logre asestar algunos, en zonas como el abdomen y la mejilla.

Aunque al principio logre igualarlo su resistencia era impresionante, al final acabe tumbado en el piso sin poder moverme.

-Cachorro te hace falta entrenar aun mucho más-

-Lo se.... Es solo que.... Eres muy bueno.... En peleas cuerpo a cuerpo....-

Pov: Gaara

El papeleo me tenía harto, llevaba más de 10hs frente al bendito escritorio. Opte por seguir mañana y salí de la oficina.

-Temari, ¿donde esta Naruto?-

-Según los ANBU sigue en el campo de entrenamiento 7-

-¿Aun?-

-Pues no han reportado otro movimiento-

Me extraño un poco ese hecho por lo que opte por ir hacía el campo de entrenamiento 7.

Camine todo el recorrido entre mi oficina y los campos de entrenamiento. Cuando llegue a la entrada los ANBU seguían ahí, les indique que se retiraran y entre al campo.

La escena que me encontré casi me deja sin aliento, un zorro de nueve colas del tamaño de un león se limpiaba las patas ensangrentadas, mientras que Naru se encontraba inconsciente, tendido en el piso sobre un charco de sangre.

Corrí rápidamente hacía él, me sorprendí al escuchar su respiración tan tranquila.

-No te preocupes niño mapache, el cachorro esta bien. Solo un poco cansado por el entrenamiento-

Volví a quedar en shock el maldito zorro había hablado.

*Gaara ese zorro es el Kyubi*

Regrese mi mirada a Naru, su cuerpo cubierto de sangre me estresaba. De repente Naru abrió los ojos y sonrió.

-Gaara, ¿qué haces acá?-

-Es que era de noche y aún no se sabia nada de vos, así que vine a ver si estabas bien-

-Perdón si te preocupe, no esperaba perder la conciencia por tantas horas

-Perdón cachorro, creo que me excedí-

-No te preocupes Kurama, en algún momento tengo que mejorar mi taijutsu-

El zorro asintió con la cabeza y desapareció.  Mire a Naruto a los ojos, parecía tranquilo, como si despertar en un sarco de sangre fuera algo de la rutina.

Lo tome de la cintura y lo ayude a pararse.

-¿Vamos a casa?- pregunté.

Él asintió rápidamente, reí por su actitud y nos encaminamos hacia nuestro hogar.