P R Ó L O G O

Cuando entré a la adolescencia, recuerdo que una de las cosas que me caracterizaban, era que no me gustaban las fiestas, el amontonamiento de personas riendo escandalosamente, y la música haciendo vibrar mi cuerpo. Y ahora ahí me encontraba, dejándome arrastrar por mi mejor amiga a un concierto que, pese a que siempre imaginé estar, nunca creí que lo viviría tan pronto.

No cualquier concierto. Sino uno de Conan Gray.

Las personas a mi alrededor gritaban emocionadas y bailaban al ritmo de la música mientras el chico de rizos cantaba.

Estabas con tus amigos festejando, cuando el alcohol comenzó a hacer efecto.

Ashley me tomaba de la mano y me arrastraba con ella para poder llegar más cerca de Conan. En mi pecho habitaba una mezcla de emoción, nervios y ansiedad. Me moría por verlo, había pasado mucho tiempo desde que cortamos la comunicación.

Dijiste que me querías muerto.

Entonces llegaste solo a mi casa con una pala y una rosa

¿Crees que soy una broma?

-¡Ash! Detente -Forcejeé para que me soltara.

-¡No! ¡Estamos cerca! Mira, mira -Reía con emoción.

¿Cómo fue qué llegamos a esto? ¿En que momento dejé que me arrastrara aquí? Ya me estaba arrepintiendo. Y no solo por el hecho de que habían muchas personas que empujaban y gritaban a todo pulmón, sino porque... ¿Y si Conan no me reconocía?

Porque las personas como tú siempre quieren recuperar todo lo que no pueden tener

Pero yo te superé y tú lo sabes

Así que deberías volver con tu pandilla de ratas a decirles que soy una basura

En un momento llegamos hasta al frente, solo nos separaba la cinta de seguridad que no nos dejaba acercarnos al escenario. Donde Conan cantaba y venía de aquí para allá, animando a cantar también a sus fans.

Verlo de ese modo me hizo sentirme orgullosa de él. Más orgullosa que nunca de que Conan Gray había alcanzado sus sueños.

Dile a todos tus amigos que estoy loco y que te llené de locura

Que soy todo un acosador

Un observador

Un psicópata

Y luego diles que me odias y que saliste conmigo solo por diversión

Entonces ¿por qué me llamas y me dices que me quieres devuelta?

Estás demente.

Ashley comenzó a cantar como una adolescente sin importarle nada y hacer movimientos torpes simulando bailar. Yo solo rodé los ojos y sonreí. Ella me codeó para animarme a bailar, cosa que por nada del mundo haría.

La canción estaba muy buena, he de admitir. Yo sabía que Conan era un gran compositor pese a que él lo negaba.

Sentí nostalgia al recordar promesas viejas. Y entonces, en medio de un ataque de valentía y locura, cuando terminó la canción y Conan se acercó lo suficiente a nosotras sin notarnos y agradecer a sus fans; llené de aire mis pulmones y grité a toda voz:

-¡CONAN GRAY MI HOMBRE!

Fui consciente de que mi gritó se escuchó por encima de algunos (por muy poco solamente). Pero cuando aquel chico se dio la vuelta y miró entre la gente hasta que nuestras miradas se encontraron, todo el mundo se congeló para nosotros.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top