Hoy pasamos todo el día tirados en el sofá viendo videos de youtube y películas. Apenas he hablado con Nash y no sé, no es que haya tensión o algo entre nosotros pero me es algo raro...
Por otra parte Bart nos dijo que tendríamos una semana libre para estar en New York sin ninguna convención ni nada.

Todos nos estábamos matándonos de la risa viendo los videos de Youtube cuando mi móvil vibró, indicándome de que tenía un nuevo mensaje.
Fruncí el ceño extrañada al ver que era un mensaje de mi madre, pero en seguida se dibujó una sonrisa en mi rostro inconscientemente. Mi madre. Por fin se dignó a escribirme. Era un whatsapp, un triste mensaje, pero me daba igual. La cuestión era de que se acordaron de mí. Abrí el mensaje emocionada, pero poco a poco la sonrisa se me fue disminuyendo. Soy una estúpida. Eso es lo que soy.

Mamá: Leire, papá y yo decidimos divorciarnos. ¿Con quién quieres vivir?  ¿Con él o conmigo? Responde rápido.

No podía ser cierto... la vista se me nubló de un momento a otro y las lágrimas no tardaron en resbalarse por mis mejillas.

Yo: Hola "mamá" ¡cuánto tiempo! ¿Te acordaste de que tenías una hija? Yo ya me había olvidado de que tenía padres, que curioso... no sé por qué vais a divorciaros, si soís tal para cual... en fin, respecto a con quién prefiero quedarme, me quedaré con mi verdadera familia, que en estos pocos meses me han demostrado más que vosotros en vuestra maldita vida. Oh otra cosita, me voy a emancipar. ¿Fui rápida?

Y con todo el odio pulsé el botón de enviar. Tenía que ser una maldita broma. Se digna a escribirme solo para eso, ni un triste ¿qué tal? O ¿estás contenta? Que va, ¿para qué? Pero qué clase de "familia" tengo...

-Leire ¿qué te pasa? ¿estás bien?

Al escuchar la voz de Lox alcé la mirada para mirarla y me di cuenta de que todos me miraban preocupados. Me limpié las lágrimas con las mangas de mi camiseta y me sorbí la nariz.

-Perfectamente...-asentí y me levanté del sofá y subí las escaleras corriendo hasta llegar a mi habitación ignorando las llamadas de los chicos.

No quiero hablar con absolútamente nadie en estos momentos. Y no voy a llorar, no merecen mis lágrimas. Me lavo la cara para deshacerme de todo rastro de lágrimas y comienzo a maquillarme. Voy a salir a despejarme un poco. Necesito olvidarme de toda esta mierda. Me aplico un poco de base y corrector, me hago un delineado en la parte de arriba del ojo, me aplico rimel en las pestañas y un poco de brillo en los labios. Me hago unos rizos en el pelo con la ayuda del rizador y tras echarme un poco de perfúme me pongo unos pantalones negros ajustados, una camiseta blanca con el escote en forma de V, una chupa de cuero y las sandalias con un poco de tacón. No suelo arreglarme tanto normalmente pero hoy me apetece. Menos mal que no hay mucha altura de mi habitación, porque no puedo salir por la puerta principal, seguramente los chicos no me dejarían salir sola a la calle a las 12pm en una ciudad que no conozco, pero bueno, a mí siempre me han dicho que soy muy aventurera.

(.../...)

Después de bajarme del taxi en frente de una discoteca, camino hasta la cola, que afortunadamente y raramente no hay mucha gente. Para mi asombro no me han puesto ninguna pega a la hora de entrar, supongo que será porque no me han visto la cara por llevar tanto maquillaje, no, es broma, tampoco llevo tanto.

Dentro hay bastante gente, pero no llega a ser agobiante. Camino hasta la barra y pido un chupido de vodka. En cuanto me sirve lo bebo en seguida y aunque me ha dejado la boca ardiendo, no dudo en pedir otro, y otro, y otro...

(.../...)

-¡Hooola! ¿Que taal vaáis chicos? ¡Yo estoyy geeenial! Een la vida había estaado taan bieen. Os contaré un pooquito más de mii vida.-reí y publiqué el insta historia.

-Antes que nadaa, os quieroo decir quee entree Naash y yo no hay naada. Nadaa de nadaa así que ya podéis dormir tranquilas- solté una risita y bebí otro chupito, esta vez de tequila antes de publicar otra insta historia.

-También quieero deciros, quee les mentí. ¡Sí! ¡Les meenti! aaunque diga que no me afeectan los mensajes negativos... ¡Siip! ¡Sii que me afectan! ¡Obvio!-bebí otro chupito- ¿A quién no le dolería recibir cieentos de mensajes de odio y de ameenaza? Lloro poor las noches y después de día tengo quee volver a sonreír paraa que nadie se de cuentaa...-volví a publicar.

-Ootra coosa también... siempre me preguntáis sobre mis padres... puees, mis padres mee odian básicamente...-en cuanto pronuncié esas últimas palabras una lágrima se me escapó- Noo lo sé por qué, pero eellos no me quieren...-negué y me sorbí la nariz- me dejaaron venir del touur para librarse de mí.

-En resúmen...-bebí otro chupito de vodka- Mi viida es uuna mierda. Menos maal que les tengo a mis persoonitas. Sii no fuera por voosotros, estaría muerta.-susurré la última palabra antes de publicar otra insta historia.

Guardé mi móvil en el bolso y sin pensármelo mucho me subí a la barra y comencé a bailar al ritmo de la música que en esos momentos estába sonando Kung Fu. Le di un trago a mi Vodka negra con lima y continué bailando. La gente me estaba tomando fotos, pero en ese momento no me importaba en lo absoluto.

-¡Muéve ese culo nena!-gritó algún subnormal, le hice caso omiso y continué bailando comi si estuviera en mi habitación.

-Venga, ya es suficiente.-dijo alguien y lo siguiente que sentí fueron unos brazos rodeándome la cintura y me bajaron de la barra.

-¡¿Peero se puede sabeer qué haaces?!-grité frunciendo el ceño.

-¡Si! ¡¿Qué haces?! Estaba bailando genial- le regañó su amigo el rubio y me guiñó el ojo con una sonrisa, yo le miré con los ojos entrecerrados.

-Cállate subnormal y ayúdame a sacarla de aquí.-le ordenó el moreno.-¡Ayúdame! Es Leire.-insistió al ver las pocas ganas que tenía su amigo de hacerle caso.

-¿Leire?-repitó- ¿Qué Leire?

-Leire. La de Magcon- le dijo irritado.

-Oh, está bien, está bien...-rodó lo ojos y me agarró de la cintura al igual que su amigo.

-¡¿Qué hacen?! ¡Suéltenme!-grité histérica.

-Cálmate nena ¿quieres un porro? Te ayudará a relajarte- el rubio me ofreció un porro y antes de que pudiera negar, su amigo le dió una colleja.

-¿Eres imbécil?-le regañó- Está ebria y ¿tú le ofreces un porro? Los chicos te matarían si llegan a saberlo...-nego desesperado.- Venga, nos vamos de aqui.-en un cerrar y abrir de ojos me encontraba en los trabajados brazos del moreno, como si fuera una princesa- Llama a los Jacks- le ordenó mientras salía conmigo de la discoteca seguido por su amigo. Poco a poco se me fueron cerrando los ojos hasta que me caí en los brazos de morfeo.

(.../...)

Nada más despertar me llevé las manos a la cabeza gruñiendo. Madre mía, parece que mi cabeza fue aplastada por un elefante. Nunca en la vida me había dolido tanto.

Después de un rato en la cama me levanté de la cama de un brinco. Error. Casi me caigo al suelo por el mareo. Me dirijo al baño y casi me mato del susto al mirarme al espejo. Dios mío. Parezco una muerta. Me lavo la cara y tras hacer mis necesidades y darme una ducha para despertarme del todo me aplico un montón de corrector para disimular las horribles ojeras y un poco de colorete en las mejillas para darle un toque saludable a mi rostro. Una vez lista bajo las escaleras y en eso empiezo a pensar qué fue lo que pasó ayer, no me acuerdo de nada. Solo recuerdo que salí a una discoteca y ya no recuerdo más. Ni siquiera sé cómo llegue a casa.

Cuando termino de bajar las escalerase me doy cuenta de que todos están en los sofas y en cuanto se percatan de mi presencia se callan y se voltean a mirarme.

-Hola- saludé un poco incómoda sacudiendo la mano.

Todos me miraban un tanto extraños...

-Ya despertaste...-comentó Nash y asentí.

-Siéntate Leire, que tenemos muucho de qué hablar- Cam ladeó la cabeza y palmeó el sofá a su lado indicándome que tomara asiento.

Le hice caso y me senté a su lado bajo la atenta mirada de todos.

-¿Nos puedes explicar por qué te escapaste ayer a la noche a una discoteca?-Aaron frunció el ceño molesto.

-Ah sí eso...- reí nerviosa y me rasqué al nuca- Por cierto ¿cómo sabéis eso?-fruncí el ceño sorprendida.

-¿Lo dices en serio?-Shawn alzó una ceja- Todo el mundo sabe que saliste de fiesta.

-¿No te acuerdas de absolútamente nada verdad?-me preguntó Hayes al ver mi cara de confusión y negué.

-Cómo se va a acordar...-negó obvio Caniff.

-¿Me pueden explicar de qué va todo esto?-pregunté alzando las cejas- Si sólo bebí una cerveza.-mentí.

En cuanto dije eso todos soltaron una carcajada.

-¿Qué?-entrecerré los ojos.

-Una cerveza dice...-negó Carter gracioso.

-Creo que dejaste solo una cerveza en la discoteca.-le siguió la broma Matt.

-Chicos esto no es para bromear- les regañó Johnson.

Y en eso tuve un flashback. Recuerdo a alguien regañar a otro por algo a la noche, pero no recuerdo nada más... qué extraño.

-Por cierto Leire, estos son Sammy y Nate- Gilinsky señaló a un chico medio castaño medio rubio y a otro moreno que me saludaban con la mano y una sonrisa. Me suenan de algo, como si les hubiera visto antes pero no se dónde...-Los que te trajeros ayer a casa.

Abrí los ojos como platos. ¡Ahora si que recuerdo!

-Oh eres tú el que me bajó de la barra-señalé a Nate- y tú eres quien me ofreció un porro- señalé esta vez a Sammy.-Gracias chicos.-les agradecí con una sonrisa.

-¡¿Cómo que un porro?!-gritaron todos alarmados.

-Sabía que se iba a liar...-negó Nate desesperado y sonreí graciosa.

-Chicos por favor, si vosotros también fumáis.

-Sammy, solo tiene 16 y además estaba ebria. ¿No tuviste una idea mejor que ofrecerle un maldito porro?-le regañó Lox.

Pobre chico, si no es uno es otro quien le regaña.

-¡¿16?!-abrió los ojos como platos y me miró sorprendido- ¡No jodas! ¡Pero si está buenísima! No puede ser que con 16 tengas un culo así de redondito...-negó incrédulo.

-¿Perdona?-pregunté incrédula.

-Déjalo, es así de capullo- negó Aaron.

-Dios que tiene mi móvil que no para de sonar...-dije irritada.

-¿Si?-contesté la llamada.

-¿¡Estás mal de la cabeza o qué?!-alejé el móvil de mi cabeza al escuchar el grito de mi mejor amiga-¡¿Cómo se te ocurre emborracharte de esa forma?! ¡¿Desde cuándo bailas encima de la barra?! ¡¿Desde cuándo cuentas toda tu vida por instagram?!

-Buenos días a tí tambien Maider- le dije sarcástica- ¿Se puede saber cómo coño sabes que salí de fiesta?-pregunté extrañada.

-¿Es una broma no? Hay fotos tuyas bailando en la barra, borracha, saliendo de la discoteca con Sammy y Nate y publicaste un montón de insta historias contando todas tus problemas con tus padres, con Nash y también dijiste que te afectaban los comentarios negativos. ¿Quieres que siga?

-Dime que es una broma- supliqué con los ojos muy abiertos horrorizada.

-Lo siento pero no, comprúebalo por tí misma.-y sin más colgó la llamada.

Vale, creo que se molestó...

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¿Que os ha parecido el cap? Esta ha sido más largo eh! Jajaja

Gracias por los 10K leídas!!

Os amo más que a la nutella personitas!! ♡♡