Antes de leer el capítulo agrego una nota aquí. Y es que quiero pedir una disculpa por la confusión, Keyson, es hijo de Connor quien es hijo de Corey, el cual siguió sus pasos como profesor. Pero en punto aquí es que confundí a Connor con Lincoln, quien es el de orígenes Escoceses, tanta familia incluso a mi me tienen mareada. En fin agregó esto por el error que tuve en el capitulo anterior y así no tener más confusiones. Ahora si, el capitulo.

Keyson

Peine mi cabello con mis dedos mientras cantaba frente al espejo mientras bailaba de vez en cuando cuando el estribillo se hizo presente.

-Vaya que eres un galán Keyson.

Me dije a mi mismo mientras me observaba en el espejo antes de salir del baño para poder tomar mi desayuno. Observe a mis padres quienes daban vueltas sin parar por toda la sala mientras guardaban cosas sin parar en una caja, estaba seguro que ambos tendrían algún tipo de proyecto con sus respectivos alumnos, los vi chocar entre ellos más de una vez para pedirse disculpas y así seguir nuevamente. Ver a mis padres era como observar a un par de adolescentes, no podía creer que siguieran siendo unos tímidos cuando obviamente habían pasado por mucho, si no fuese por la abuela Itzel mis padres jamás habrían salido y bueno el universo se abría perdido de tal belleza.

-¿Estas listo hijo? -preguntó papá mientras tomaba la caja.

-Por supuesto, vayamos a jugar con un par de niños.

-Recuerda comportarte
-mencionó mi madre a lo cual lleve mi mano hacia mi pecho fingiendo dolor.

-Mi propia madre levantando falsas acusaciones contra mi ser.

-Creo en ti cariño pero a veces puedes ser un tanto explosivo, recuerda que no a todos los niños les gusta ser tan entusiasta.

-Tonterías, están en la mejor edad para cometer locuras y ser vivaz.

-Solo no seas tan vivaz.

Me aconsejo mi padre mientras salía de casa, yo ayude a mi madre con la otra caja para encaminarme hacia el auto para dejar las cosas en la cajuela y así ir al trabajo, aunque bueno yo solo era un simple asistente en práctica.
Aunque apenas había comenzado mi carrera en la maestría me encantaba pasar mi tiempo en el trabajo con mis padres pero en especial el jugar con los niños. La infancia considero la etapa más inocente y especial de todo niño pues no existe como la malicia mal intencionada, es una etapa en donde crecen de acuerdo a las enseñanzas de padres y maestros, considerado esto una gran oportunidad para hacer crecer a una gran persona.
Al llegar a la institución, ayude a mi madre con la caja de sus materiales pero en cuanto cruce la puerta me detuve para observarla de pies a cabeza, portaba un lindo vestido rosa mientras su cabello estaba peinado en una coleta alta con un listón, llevaba un mandil con estampado de animales y no pude evitar soltar una gran carcajadas.

-Esto si que es gracioso, ¿que fue lo que hiciste como para ser humillada así, Esther Cooper?

-Mi madre cree que debo aprender un trato a la altura de un infante.

-¿A quién le arruinaste la infancia esta vez?

-No considero arruinar parte de la infancia el explicar las realidades sobre las creencias de fantasía que tienen los niños.

-Si, si, claro, ¿que fue lo que le explicaste a ese infante?

-El origen de aquel a quien llama hada o ratón de los dientes.

-Ahora ese niño ya no estará feliz de que le arranquen los dientes. Sabes algunas cosas malas tienen que ser recompensada por algo bueno.

-¿Que tiene de bueno el ser creyente de una mitología? ¿O el de un animal que porta rabia y bacterias? Si lo que les resulta gratificante es el dinero pues que los padres simplemente lo entreguen.

-Vaya que le quitas la diversión a la vida. Deja entrego esto y te ayudaré a empapar tu mente de diversión.

Ella me miro con cierta incredulidad pues sabía que en su mente algo como las cosas que no tenían lógica no daba lugar, era triste que ella viera la vida con una sola regla básica de la vida. Aún recuerdo perfectamente cuando la conocí y pensé que era una niña adorable todo terminó cuando abrió la boca, era como tener a un anciano dentro de un ser tan pequeño, solo hablaba cosas sin ningún sentido o al menos asi me parecía cada palabra que salía de su boca, me era imposible el tener que socializar con una persona a la cual no podía sorprender o hacer reír con tonterías, con el tiempo aprendí que la fantasía no es para todos o al menos no lo es para Esther pero el hecho de que a ella no le resulte lógico eso no quita el hecho de que trata de entenderlo y fue ahí cuando me di cuenta que seguía siendo una niña, su inteligencia la hacía hábil en varios campos sin embargo esa misma inteligencia la hacía incompetente ante las cosas sencillas de la vida y podía ver su desesperación por querer entender algo tan simple para cualquier persona pero era todo un reto para ella, si no fuese por Greyson jamás había entendido esa parte de ella.
Una vez que deje la caja en el aula asignada de mi madre corrí por el pasillo para ir a la entrada principal donde Esther me seguía esperando, al llegar alborote su cabello, ella solo me miró antes de soltar un largo suspiro para volverlo a acomodar su cabello.

-Vayamos al salón mariposa compañera mía, es hora de hacer magia.

-La definición correcta es actividad recreativa, no hay tal cosa como la magia.

-No arruines mi momento. Dije que haremos magia y eso haremos.

La tomé por los hombros para guiarla al salón, de vez en cuando la mirada para observar ese gesto tan serio de ella a veces daba miedo.

-¡¿Quien está listo para la diversión?! -grite en cuanto entre al aula a lo cual los niños saltaron de la emoción mientras levantaban sus manos-. Pará proteger a los niños del aburrimiento.

Mire a Esther quien enmarcó sus cejas cuando comencé mi lema, ella frunció el rostro mientras negaba pero yo la seguía observando.

-Pará unir a toda la diversión en este salón.

-Pará acabar con todos los enemigos de la alegría y el amor.

-Pará extender nuestro humor más allá del espacio exterior.

-¡Keyson! -levante mis manos mientras hacía una pose pero Esther negó.

-No haré eso.

-¡Y Esther! El equipo diversión ha venido a llenar de risas el salón... No culpes a la noche, no culpes a la playa, será que no te diviertes.

Dije mientras bailaba para observar a Esther quien se dio la vuelta para marcharse en dirección al escritorio.

-Muy bien niños hoy comenzaremos con estiramientos.

Comencé a marchar en mi lugar mientras los niños también se levantaban para jugar mientras que Esther solo se limitaba a observar.

-Todos debemos participar.

-No haré eso.

-Tu eres la que tiene una maestría.

-No es mi área, ciertamente tengo una maestría pero de...

-Como sea eres la única con título universitario, de hecho varios títulos, anda de pie.

Dije mientras tomaba su mano para realizar los ejercicios junto con ella, incluso aunque no había un gran entusiasmo o una sonrisa en su rostro realizaba las actividades y a los niños no les parecía tenerle temor así que lo considero un rotundo éxito.
Una vez que terminamos los ejercicios de estiramiento comenzamos con las actividades recreativas y como lo es la música, no considero nada más alegre que un buen salseo.

-¡A bordo de transporte Copper! -grite mientras la ponía al frente para que ella guiara a los niños con la cuerda para ir al patio de juegos, los niños cantaban junto conmigo que de vez en cuando reía cuando alguien desafinaba. Al llegar al patio dejé de cantar lentamente y me detuve por completo al observar a una joven con el cabello teñido de azul, con unos blusa blanca con dibujos de estrellas un pantalón negro y tenis con estampado del espacio, ella miró en mi dirección y sonrió, nunca había visto una sonrisa tan divina como la de ella.

-Aquí estas te estuve buscando por todo Londres.

Ella se acercó en mi dirección mientras extendía sus brazos no se quien es pero creo que ya encontré a mi futura esposa, di un paso al frente con los brazos extendidos pero me quede en esa pose al ver a la linda chica azulada abrazando a Esther.

-Cuando tus padres mencionaron que te encontrabas aquí de inmediato supe que tenía que venir para verlo.

-Debo suponer que sólo buscas una manera de molestar.

-Me conoces muy bien
-ella miró en mi dirección para sonreír, incluso de cerca es bonita
-¿y quien es tu amigo?

-Soy Keyson, si ese soy yo-dije extendiendo mi mano en su dirección a lo cual ella la tomó.

-Soy Vicky.

-Tienes un nombre precioso.

-Y tu un lindo acento inglés.

No pude evitar reír un tanto avergonzado, incluso su voz es tan linda.

-Ahora mismo estoy laborando, si quieres mi tiempo espera a que termine mi turno. Ve a casa.

-Pero que fría. Pase mas de tres meses en tratar de convencer a mis padres de venir y así es como me agradeces.

-Deberías ser más considerada con tu amiga, vino de tan lejos, ¿vienes de un lugar lejos, verdad?

Pregunté a lo cual ella asintió.

-En realidad somos primas-aclaro la linda azulada-pero bueno es de esperar que ella sea si, tiene todo la seriedad de los Cooper corriendo por sus venas.

Mencionó juguetona mientras apretaba las mejillas de Esther quien solo la alejo por un momento, yo le mire con una sonrisa.

-Los niños están en su hora libre, ¿quieres comer algo?

-Ves linda, así se atiende a una visita.

-Claramente lo hace porque siente una atracción hacia a ti. En fin, no me entrometere, yo cuidare a los niños.

Esther se alejo para tomar asiento en una de las bancas del patio y observar a los niños yo por otro lado observe con nerviosismo a la joven azulada y este creció cuando ella me miro de una manera tan juguetona.

-¿Realmente sientes una atracción?

-Bueno sin duda, eres bastante hermosa.

-Eres bastante adorable pero lamento arruinarlo, tengo novio.

-Bueno eso no impide que seamos amigos.

-Touche chico inglés. ¿Y de donde conoces a mi encantadora prima?

-El hermano de su mamá está casada con la hermana de mi abuelo. Es un poco enredoso ahora que lo pienso, solo digamos que nuestra familia se conoce por ende la conozco.

- Tranquilo entiendo perfectamente, también provengo de una familia bastante grande. Tan solo imagina a todo un hospital repleto de doctores Cooper.

-Pues si toda tu familia es así de atractiva como tú creo que es algo bastante llamativo.

Ella me sonrió antes de soltar una carcajada.

-Eres un encanto.

-Gracias por notarlo.

-Entonces, ¿vas a enseñarme donde queda la cafetería?

-Por supuesto, yo...-calle al oír uno de los niños llorar gire para observar a Esther quien se había acercado -. En un momento te muestro el camino debo ir e encargarme de esto.

-No te preocupes, Esther puede hacerlo después de todo es una genio.

-Tal vez pero no está área.

Comente mientras giraba pero me detuve al escuchar un quejido, gire para ver a la peli azul quien me sonreía creo que fue mi imaginación.

-Chaka, kacha, bulla, que el dolor quede fuera.
Mi hechizo a sido realizado ahora todo estará bien.

La pequeña solo me miró en silencio antes de soltar una risa, mire a Esther quien le había colocado un curita con dibujos de conejos para después mirarme cuando la pequeña se fue.
La mire para colocar mi mano sobre su frente.

-Deja de arrugar la cara de esa manera te saldrán arrugas pronto. Deberías cuidar tu belleza inglesa.

-Y tu deberías cuidar tu alrededor cuando estés cerca de Vicky, suele ser una persona fariseísta.

Yo la mire en silencio.

-Traducción. Recuerda que debes usar palabras simples conmigo.

-Me refiero a que es una persona falsa.

Gire a ver a la peli azul quien seguía sonriendo e antes de volver mi mirada a Esther, normalmente me gustaría bromear con la verdad diciendo que era una persona celosa pero estaba hablando de Esther la persona con más brutalidad de honestidad en el mundo.
¿El amor de mi vida resultó ser una chica mala? ¿Debería preocuparme ese hecho?

-Entiendo, gracias por el consejo.

Dije mientras alborota a su cabello nuevamente, ella solo suspiro antes de volver a acomodarlo para seguir vigilando a los niños. Me acerque nuevamente a esa belleza americana pero solo para disculparme pues tenía que hacer mi trabajo.

-Pero puedo enseñarte la ciudad despues.

-Suena grandioso, estaré en casa de Esther así que si quieres buscarme sabes a quien recurrir.

Dijo mientras me guiaba su ojo antes de salir, vaya encanto de señorita, no cabe duda que me gustan las chicas malas aunque ahora necesito la ayuda.

-Oye Esther, ¿que tal si...

-No.

Dijo firme y sentí como mis sueños junto con mis esperanzas se derrumbaron en una simple palabra. Pero no pensaba rendirme así que solo insistirá hasta fastidiarla.

-¡Por favor! -le grite mientras caminaba detrás de ella, la observe girarse para mirarme furiosa -¿Por fis?

-¿Que sucede? -escuche preguntar alguien a mis espaldas.

-Greyson, mi amigo con una terminación igual del nombre, tu querido mejor amiga no quiere ayudarme a conseguir el amor verdadero.

-No entiendo -mencionó su novia quien nos miraba a ambos para después mirar a Greyson.

-Encontré al amor de mi vida que resultó ser prima de Esther y ella no quiere ayudarme.

-Si quieres una cita solo ve a mi casa búscala y pideselo.

-Pero tu padre estará ahí y me aun me provoca pesadilla. Anda Esther ayudame-dije mientras me ponía de rodillas -prometo recompensar este favor.

-Eres tan molesto-mencionó mientras se alejaba para tocar el timbre del departamento de sus abuelos.

-Lo se, soy un molesto y un tarado, por eso necesito tu ayuda.

Dije mientras me abrazaba a su cintura, la puerta del departamento se abrió y pude ver al señor Shuster.

-Vaya Keyson, no lo esperaba de ti. Supongo que nadie ganó la apuesta está vez, Espera un momento, ¡cariño! ¿quién apostó que Keyson iría tras Esther?

-No es lo que parece abuelo, sólo es una mala interpretación de los hechos. Keyson está enamorado de Vicky y solicita mi ayuda.

-Oh, ¡olvidalo cariño! Ya puedes colgar el teléfono.

-Siempre me es agradable el verlo señor Shuster.

-Pasen, pasen, mi esposa preparo galletas.

-¡Si!

Me levante con rapidez para correr dentro del departamento, vi a la señora Shuster la cual salude antes de tomar un par de galletas, me senté y vi a Esther quien también saludo a sus abuelos antes de tomar asiento.

-¿Donde esta Greyson y su novia?

-Tenían cosas que hacer.

Contestó con simpleza y no pude evitar soltar una risa burlona junto con el doctor Shuster.

-Si claro, cuando escuchemos algo de música debemos asegurarnos de poner nosotros también.

-Cariño no digas esas cosas.

-Ambos sabemos que es verdad, ¿que clase de persona no lo sabe? Es bastante obvio, dos jóvenes con las hormonas a flor de piel, solos en un departamento, nadie es un santo en esta vida, bueno excepto Corey, ese chico si que es una gran excepción mundial.

Vi a Esther levantarse y yo tome un par de galletas para ir detrás de ella hasta la habitación de huéspedes.

-Oye por favor, ayudame con el amor de mi vida. Esther, Esther, Esther.

-¿Que no utilizo contigo la excusa del novio? Eso debería detenerte.

-¿Es una excusa lo del novio? ¿Osea que es mentira? Me has iluminado, sabes lo grandioso que es eso, yo solo quería que me ayudaras a ser su mejor amigo, para después de que ella terminará con su novio estar yo como siguiente opción y aprovecharme de su dolor.

-Eso tan poco realista y saludable emocional su percepción de amor.

-Obviamente estaba bromeando, tal vez.

Dije mientras me sentaba a un lado de ella, la escuche soltar un largo suspiro mientras se acomodaba en la cama, de pronto el sonido de una canción captó mi atención seguido de la carcajada del señor Shuster quien al parecer también coloco música tras gritar un gran "te lo dije" mire a Esther quien arrugó más su frente.

-Deja de hacer eso, es malo para las arrugas.

-Ah Vicky le gusta obtener todo lo que es mio.

-¿A que viene eso?

-Solo necesito fingir un poco de interés en ti, ella sentirá una falsa atracción hacia ti. Así ambos obtendrán lo que quieren, así que solo guarda silencio por el día de hoy.

-Suena a un excelente plan, lo haremos. Te llamaré para realizar los detalles después.

-Yo te llamaré, ahora dejame sola.

-Me parece un trato justo.

Dije mientras me levanta de un salto con total alegría aunque una parte de mi se sentía mal por haber fastidiado hasta tal grado a Esther quien se veía bastante cansada aunque otra parte de mi también quería quedarse ya que presentía que algo andaba mal pero con Esther era difícil definir lo que realmente pasaba así que solo lo dejé estar y la deje sola.

🌠🌠🌠

El gran día llegó y estaba totalmente nervioso por lo que fuese a ocurrir pero como todo lo había planeado Esther sabía que sería un rotundo éxito y no me equivoque, tal como ella había dicho bastaba con que ella fingiera un poco de atención en mi para que Vicky se fijará en mi, sabía que de alguna forma estaba mal pero me sentía al mismo tiempo bien, el amor si que es bastante estupido o al menos hace a uno de esa manera.

-Vaya no pensé que aún hicieran estos tipo de espectáculos -me acerque al cartel que Esther veía acerca del espectáculo de estrellas.

-¿Que tiene eso de interesante? -interrogó Vicky.

-Supongo que es atrayente el observar de cerca una belleza lejana
-dije mirando a Vicky quien me sonrió con cierta coquetería.

-Entraré al espectáculo, disfruten el resto del recorrido.

Mencionó Esther mientras me marchaba en dirección hacia el lugar que indicaba el cartel, yo mire a Vicky quien me seguía sonriendo para caminar al lado opuesto donde Esther se había marchado.

-¿Tu y mi prima son buenos amigos?

-Eso creo, realmente es difícil definir lo que ella siente.

-Lo se, parece una robot. Fría y sin sentimientos.

-Bueno su manera de ver la vida es diferente a la nuestra.

-¿Que tiene de bueno ser un genio si no lo pareces?

No comente nada al respecto pues el comentario de Vicky me resultó un tanto grosero.

-La verdad es que ella es muy inteligente y supongo que por eso su actuar es diferente.

-Ja, solo es una presumida.

-Eso no suena como Esther.

-Es que realmente no la conoces tan bien como yo. Todos se asombran y creen que es genial solo porque es una niña genio pero ni siquiera comprenden cosas tan simples como los sentimientos.

-Solo porque no los comprenda no significa que no los tenga ella también los tiene.

-¿Y alguna vez lo has demostrado? Dudo que sepa lo que es la felicidad o algo como experimentar el amor. Cuando mi novio terminó conmigo fue realmente una grosera conmigo, no dejaba de decir que yo había la causante de ello por que lo había herido, ¿como si ella conociera el dolor de un corazón roto?

-Tal vez no pero estoy seguro que...

Guarde silencio por un momento cuando frente a mi observe a Greyson con su novia, recordé como fue que los encontramos al llegar aquí pero Esther insistió en continuar nosotros tres desde para el plan funcionará sin embargo algo andaba mal, ese gesto de arrugar su frente cada vez que algo le molestaba, esa manera en la que fingía más indiferencia cuando algo le dolía y de repente todo de alguna forma cobro sentido.

-Debo irme.

-¿Que? -pregunto Vicky molesta.

-Debo irme, recordé algo. Adiós, eres linda pero malvada y mi corazón merece algo mejor, tal vez cuando seas mejor persona merezcas mi amor.

-¿Que? Vuelve aquí, ingles idiota.

Dijo pero yo corrí en dirección hacia el espectáculo, la señorita había mencionado que ya había comenzado pero no le preste atención sólo compre la entrada para ir dentro. Al entrar me encontré con el espectáculo digital de las estrellas pero no preste atención mientras trataba de buscar entre las personas a Esther, hasta que la encontré sentada sola en la fila de enfrente, tomé lugar a su lado para escuchar como soltó un suspiro.

-¿Por qué me han seguido hasta ahí?

-De hecho sólo yo, dejé a Vicky.

-Eso no estaba en el plan, ahora ella debe estar furiosa.

-Si que lo está, me insulto mientras me dirigía hasta aquí.

-¿Por qué hiciste algo así?

-Tenías razón, ella es una fariesa cosa, en fin no merece el amor de alguien tan vivaz como yo.

-Salvado por tu egocéntrismo, irónico.

-Digamos que por suerte... Lo lamento Esther.

-Se especifico no entiendo la razón de tu disculpa.

-Se supone que somos amigos o al menos eso quiero creer, incluso aunque soy molesto me ayudas sin embargo yo no me di cuenta cuando necesitabas ayuda.

-No e requerido ti ayuda.

-En estos casos nadie la requiere pero es necesario, nadie quiere estar realmente solo cuando tienes el corazón roto.

Mencione y ella guardo silencio, no dijo nada solo soltó un suspiro y entre la oscuridad la escuche llorar.

-Lo lamento.

-No puedo ser como ella, algo como la comparación entre dos seres es irracional pero aún así no puedo evitar hacerlo, la quiere por lo que es. No importa la cantidad de tiempo que estuvimos juntos eso no tuvo valía cuando él se decidió por ella.

-El amor a veces es estúpido.

-Es el sentimiento más horrible.

-Si pero también es maravilloso.

-Eso es no tiene lógica.

-Así es el amor... Chaka, kacha, bulla, que el dolor quede fuera.
Mi hechizo a sido realizado ahora todo estará bien.

- No lo está y es irracional creer que un par de palabras falsas ayudarán.

- Tienes razón, siempre la tienes pero al menos sirven de consuelo. No quiero que sigas llorando, eso también deja arrugas.

- ¿Cuando dejara de doler?

- No lo sé, pero ten por seguro que algún día dejará de hacerlo... Además no tienes porque compararte con ella, eres una belleza inglesa al igual que una belleza americana.

-¿Se supone que son palabras de consuelo?

-Puede decirse que si.

-Las palabras no son tu fuerte pero tu actitud vivaz si es de ayuda.

-Lo se, soy un encanto.