Respire el dulce olor del café haciéndome sentir satisfecho, mire mi computador el cual tenia algunos mensajes de mi asistente sobre el trabajo.

—Dave

—Dime cariño—levante un poco la mirada para verla entrar a la habitación, el sonido de mi computador captó nuevamente mi atención por lo cual abrí el nuevo correo.

—Estoy embarazada.

Esas palabras captaron toda mi atención, Carryn no es alguien que hace bromas de hecho nunca a hecho una, la mire notando más seriedad en su rostro de lo normal, deje la taza cuando la vi tomar asiento a mi lado.

—¿Estas segura de ello?

—No presente mi periodo, al principio pensé en algún síntoma de estrés debido a los preparativos matrimoniales pero también presente mareos y náuseas matutinas, pensé en las posibilidades de este hecho y recordé la noche del sábado tras el evento familiar, no usamos protección y yo había terminado mi tratamiento de anticonceptivo pero como las posibilidades de concebir son muy bajas no preste atención al hecho al menos no hasta ahora.

—¿Realmente estas segura de esto?

—La prueba marca también positivo.

Mire la prueba que efectivamente marcaba positivo mire a Carryn luego la prueba y lo único que hice fue reírme, es decir, vaya esto es inesperado y en verdad que me dejó sin palabras.

—¿Sucede algo? ¿Por qué ríes de esa manera?

—Estoy feliz... Realmente muy feliz, tendremos un bebé.

—Parece ser una posibilidad, aunque debemos asegurarnos ya que podría indicar un falso positivo.

—Claro, entiendo tu eres el médico aquí así que tienes razón pero aún así la posibilidad de un bebé es alta, ¿verdad?

—En teoría si.

Me levante para abrazarla y darle un beso en los labios.

—Pareces bastante entusiasmado.

—Te amo, y bueno esta alta posibilidad en verdad es emocionante.

Ella me miró asintió brevemente para llevar su mano a su vientre para luego volver a verme.

—Ante la posibilidad y aunque aún estoy el periodo de formación y no tenemos un género definido estoy pensando en que podríamos llamarlo en honor a tus padres.

—Me encantaría.

—Vamos al hospital para confirmar y tomar preparativos. Si resulta un acierto debemos acomodar los tiempos con la boda.

Asentí sin parar en aceptación no podría creerlo tendríamos un bebe o al menos es una gran posibilidad. A quien engaño estoy que doy brincos pero debo calmarme, no quiero darle nervios al bebé antes de tiempo

—Carryn, Dave, pero que agradable sorpresa, ¿sucede algo? —mi suegra se acercó con una enorme sonrisa quería decirle pero no sabía si esto sería una sorpresa.

—Venimos ante la posibilidad de un embarazo.

—¿Que? —pregunto mi suegra sorprendida, me miró luego a su hija arrugó la frente y me volvió a ver— ¿Que?

—Realice una prueba de embarazo pero no siempre son viables así que vine para asegurarme de esa posibilidad.

Mi suegra me miró yo asentí y ella soltó un gran grito para abrazar a su hija luego a mi luego volvió a abrazar a su hija.

—Iris, escuche que tu grito —vi a su suegro acercarse con rapidez —¿que sucede?

—Vamos a ser abuelos—chillos haciendo un baile para luego tomar a su esposo de su bata para agitarlo.

—¿Que? ¿Nosotros? Es decir... Creo que necesito sentarme.

—Es una posibilidad, vine con Dave para confirmarlo mediante una cita y...

—Al demonio —interrumpió mi suegra—soy médico la mejor de aqui y puedo hacerlo yo, además si resulta ser así quiero ser la primera en ver a mi futuro nieto o nieta. Vamos.

Mi suegra tomó a su hija del brazo para guiarla hasta la una sala médica yo fui detrás de ellas junto con mi suegro quien tenía una enorme sonrisa, mi suegra tiene razón es de pocas palabras pero realmente no sabe como ocultar su felicidad. Al llegar se apresuró para acomodar todo, me coloque a un lado de Carryn para ver la pantalla que había encendido mi suegra.

—Veamos parece que tenemos un latido—chillo emocionada—si, estas muy embarazada pero esto de aquí...

—Espera un momento —interrumpió mi suegro para tomar ahora él el aparato—hay algo más aquí.

—Espera papá —interrumpió ahora Carryn lo cual me puso nervioso.

—¿Que sucede? ¿Por qué tanto silencio? Carryn, mi amor, ¿estas bien?

—Son trillizos—respondió, giro para verme.

—¿Que? Son, ¿que? ¿Tr... e? ¿Trillizos?

Siento que me falta el aire.

—Eso si que es una buena puntería.

—Iris, mi amor no es el momento.

—Los veo a los tres pero —mi suegra guardo silencio, miro a su esposo y luego a su hija.

—Iré por la doctora Carmona —el padre de Carryn se levantó para salir, sentí como ella apretó mi mano y sabía que eso no significa nada bueno.

—Esta bien cariño, es el primer mes y sabes que no siempre se realiza un crecimiento estable en especial en los embarazos múltiples.

—Comprendo lo que conlleva y lo que significa...—callo un momento me miró para volver a ver a su madre —Mamá, quiero hablar a solas con Dave.

—Si, claro que si.

Sentí una gran opresión en mi pecho mire a Carryn quien solo seguía sosteniendo mi mano.

—No será un embarazo sencillo —dijo por fin tras un largo silencio a lo cual asentí.

—Comprendo, entonces vamos a posponer la boda.

—Estoy preocupada. La lista es de riesgo es grande, hipertensión a lo largo de la gestación. Riesgo de diabetes gestacional. Aumento del riesgo de muerte infantil. Posibilidad de presentar sangrado excesivo en el parto.

—No te preocupes, vamos a estar bien. Tus padres son médicos y se que te mantendrán vigilada de cerca.

Ella me miró luego a la pantalla, había algo que no me decía, lo sé pero tras un pequeño suspiro habló.

—La posibilidad de defunción es alta y...

—No digas eso Carryn, estarás bien, tu y los bebes.

—Sabes que soy una persona realista y que se rige por las altas posibilidades. Nuestra relación siempre a sido sin filtro y con una gran honestidad y debemos hablar sobre esto.

—No, no voy a perderte, vamos a estar bien.

—Dave, se que te aterra la perdida y que no quieres volver a pasar por lo mismo pero debemos hablar sobre esto.

—No voy a poder hacer esto sin ti.

—Estarás bien, eres un buen hombre y se que saldrás adelante por nuestros hijos... Si me vas a extrañar hazlo pero sigue adelante.

—Odio hablar sobre esto.

—Yo también pero debemos estar consiente por esa posibilidad y...

—Entonces no los quiero.

Un silencio y entonces ella soltó mi mano.

—No voy a perderte por ellos.

—Dave Steller, esas palabras tienen un fuerte peso, retractate.

—No, si tengo que decidir entre ellos y tu, te elijo a ti.

—Entonces estamos en un conflicto, no voy a retractarme y no voy a dejar morir a nuestros hijos solo porque tienes miedo.

—Si, lo tengo... Y tienes razón estamos en un conflicto.

—No voy a abortar Dave.

—Eres una mujer de decisiones y no hay quien cambie tu opinión.

—Parece que eres consiente de ello... Hagamos esto juntos Dave.

—No... Se que eres una mujer terca pero te haré cambiar de opinión.

Un silencio, ella soltó un largo suspiro y me miró, estaba decepcionada no hacía falta que lo dijeron pero es que esta noticia no quería escucharla, no se ella, respire hondo y le mire. La doctora entró y nos miró a ambos, el ambiente era tenso por lo cual sólo dijo su nombre brevemente se acercó para hacer el mismo proceso que habían hecho mis suegros y entonces comenzó a hablar sobre lo que pasaba y nuevamente esa maldita posibilidad donde ella no viviera, cuando terminó de hablar yo solo me levante y ella hizo lo mismo, nunca habíamos estado tan callados uno con el otro, nunca nos habíamos enojado ni tenido una disputa, nunca había querido estar tan alejo de ella como ahora pero es que me era imposible no verla y sentir que mi mundo se acababa por lo cual sin decir nada solo me fui de casa dejándola sola.
Comencé a conducir sin un rumbo fijo, ni siquiera sabía a donde iba solo quería no pensar en eso y esa posibilidad, me detuve al escuchar el sonido de mi teléfono, era una video llamada de mi tía a lo cual conteste.

—¡Hey! Mi pequeño ser de mi vida, ¿como va todo?

—Hola, tía.

—Te ves horrible, no pareces ese hombre que no dejaba de dar brincos sin parar porque va a casarse con su alma gemela.

—Carryn esta embarazada.

—Y te molesta esa noticia, ¿por qué?

—Son trillizos.

—Vaya puntería muchacho.

Solte una pequeña risa.

—Lo mismo dijo mi suegra.

—Dave, ¿cuál es el problema? Y no trates de mentirme, recuerda que te conozco desde que eras un feto en formación.

—Son muchos riesgos, ella hablo conmigo sobre la posibilidad de perderla.

—Dave.

—No quiero hacerlo... No quiero perderla, no a ella también. No podría vivir con ello, no con su ausencia. Dime, ¿qué voy a hacer sin ella?

—A mí parecer solo tienes dos opciones, lamentar esto toda tu vida sentirte miserable hasta que llegue tu lecho de muerte o estar con ella y disfrutar de cada maldito segundo... Si llega a pasar, si ella se va, quedarán los recuerdos y podrás decir con orgullo que estuviste ahí, sosteniendo su mano, viendo sus sonrisas, amando cada segundo de su ser. No te prometo que no va a ser doloroso pero creeme cuando te digo que no vas a vivir toda tu vida con el arrepentimiento de que no estuviste ahí... Y bueno al final eres el hijo de Eliam Steller y creeme que un Steller ama con cada célula de su ser a su amada y cuando comete un error que no es reversible se arrepiente cada segundo, lo vi en tu padre cuando estuvo alejado de tu madre y claro que lo vi en mi hermana cuando tomo una decisión equivocada... No hay peor dolor que el arrepentimiento.

—¿Como es que siempre sabes que decir? —pregunté con una risa amarga.

—Yo también vive por mucho tiempo con una decisión equivocada y bueno gracias a alguien pude salir adelante.Ya era hora que yo también le regresará el favor... Dave,mi pequeño, vive feliz y amando hasta el último segundo.

Le agradecí a mi tía y entonces decidí volver a casa, ella tenía tanta razón no podía estar desperdiciando tanto tiempo lejos al menos no con esa posibilidad a la puerta.
Al llegar a casa fui directamente a nuestra habitación, ella me miró dejo a un lado su tableta y yo solo me acerque para notar que leía un informe acerca de los cuidados de un bebé.

—Dave—habló ella primero ante mí silencio.

—Lo siento... La verdad es que una disculpa no es suficiente por todas las palabras que dije, es solo que... Estoy aterrado, la idea de solo perderte nubla mi juicio por completo y no puedo imaginar una vida sin ti pero lo cierto es que tampoco puedo estar alejado de ti, no quiero que las cosas terminen de esta manera, quiero tomar tu mano decirte lo mucho que te amo y es algo de lo cual nunca me voy a arrepentir y si un día tu te vas, aunque será doloroso, aunque llore todas las noches, estaré bien porque te ame y fui amado por ti, nuestros hijos son un claro ejemplo de nuestro amor y viviré por ellos.

—Los sentimientos son complicados pero también lo siento, ese terror de no estar a tu lado, de ver a nuestros hijos crecer pero al menos no habrá arrepentimiento por haberte amado... Te amo, Dave Steller.

—Carryn—me acerque para abrazarla.

—Te extrañe.

—Yo también.

—Estoy aterrada por esta situación.

—Yo también.

—Te amo.

—Te amo con todo mi ser... Y estaré siempre a tu lado hasta el último segundo.

Me acerque para besarla y sentí el sabor amargo de sus lágrimas, me sentía como un estúpido por dejar que mis miedos me hicieran alejarme en estos momentos tan valiosos pero ahora sabía que aunque estaba tan aterrado iba a permanecer aquí a cada segundo.

⭐⭐⭐

Mire a Carryn quien dormía con tranquilidad, sonreí al verla y bese su mejilla, para  después peinar su cabello, tomé su mano y seguí mirándola.
Este proceso había sido más aterrador de lo que pude imaginar, aunque habíamos empezado con sus cuidados desde el principio y los cheques eran bastante regulares, era difícil para ella, las náuseas, los mareos, los vómitos, los desmayos, su cuerpo estaba cansado por lo que al final terminamos instalandos en el hospital tras varios intentos de aborto involuntario, era realmente agotador no sólo para mí y para ella, era difícil para todos, así que tener el apoyo de su familia me hacia darme cuenta que no estaba solo en esto y era un gran consuelo.
Pero aún con todo este terror valía la pena pues también había cosas buenas, como escuchar sus primeros latidos, ver de cerca su crecimiento, sus primeros movimientos, como ella sonreía al tocar su vientre, los amaba sin conocerlos y era una felicidad que incluso era tan inexplicable para ella que me encantaba ver como sentía cierta emoción en cada segundo.

—Hola, hola, ¿como esta? —vi a mi suegra entrar con una enorme sonrisa, observó a Carryn para besar su frente para luego sentarse a su mano.

—Esta bien, pero agotada.

—Si, era de esperarse.

—Te ves muy agotado también, deberías dormir un poco, yo cuidare de ella.

—Le agradezco el ofrecimiento pero quisiera estar un poco más a su lado, quiero seguir sostenido su mano.

—Lo entiendo... Como sabes, perdí a mi madre cuando era pequeña, no fue nada sencillo pero sabes aun así fue agradable estar con ella sosteniendo su mano hasta el último segundo—mire a mi suegra cuando ella guardo silencio y note como varias lágrimas brotaron —fue difícil en verdad que si y tras su despedida pensé que no quería perder a nadie más pero lo seguía haciendo y bueno esto, pensar en esa idea es tan aterrador es decir es mi hija, se supone que debo morir primero yo y bueno esto me hace pensar en mi madre ahora entiendo que todo su miedo nunca fue morir mas bien era el de irse y bueno si yo estoy aterrada no puedo imaginar como se estará sintiendo mi hija... Y yo, solo quiero decirte que en verdad te agradezco que seas tu el que esté a su lado porque aunque esto es difícil ella sonríe es decir mi hija en verdad es feliz por esto y como madre no puedo pedir nada que la felicidad de mi hija, gracias Dave.

Negué para entregarle un pañuelo y tomar su mano.

—Gracias a usted, por tener a una hija tan maravillosa.

—Ahora entiendo porque mi hija se enamoro de ti, yo sabes, esto es difícil. Saldré un momento.

Asentí a lo cual ella se levantó para salir, al abrir la puerta se encontró con su esposo con el cual compartió un par de palabras para luego irse, él me miró brevemente para tomar asiento.

—Es mi turno de cuidarla y se que quieres estar aquí pero debes estar bien para ella, no quiero que se preocupe por si algo te pasa.

Mire a Carryn, me levante para besar sus labios luego su barriga.

—Papá volverá pronto, así que no le causen problemas a mamá tiene que descansar, se que son buenos niños.

Escuche una breve risa de mi suegro y lo mire para notar como incluso el contenía sus lágrimas.

—Que mi hija te encontrará es una posibilidad una de entre miles y lo cierto es que agradezco ese hecho pues es feliz.

Asentí brevemente y salí de la habitación, lo cierto es que me era difícil alejarme mucho tiempo pero sabía que debía descansar para ella y estar bien pero al dar un par de pasos escuché una pequeña alarma, varias personas corrieron hacia la habitación y entonces yo también.

—¿Que pasó?

—A entrado de parto, preparen la sala.

—Dave.... Papá, ¿donde está Dave?

—Estoy aquí, amor—me acerque para tomar su mano para correr junto con los enfermeros quienes la movían en una camilla.

—No me dejes.

—Nunca.

—Señor no puede entrar, debe prepararse primero.

Me detuvo una enfermera a lo cual asentí, la seguía para obedecer todas sus instrucciones, el lavado, el cambio de ropa, la mascarilla para poder finalmente entrar a esa sala, mi corazón latía sin parar, sentía tanto terror pero no podía dejarla sola, ella me necesitaba así que entre, había muchas personas pero aún con ello me brindaron un espacio para poder tomar su mano. Ella me miró y sonrió brevemente, se veía más tranquilo, apretó mi mano.

—No es posible, tenemos que intervenir —escuche hablar un médico pero yo solo podía ver a Carryn.

—Dave... Recuerda Aimie, con ie en vez de doble e—mencionó con dificultad antes de soltar un quejido a lo cual asentí —Elián, con n en vez de m y Ostyn, con os en vez de au—su respiración se estaba complicando —en honor a tus padres pero de manera original para ellos.

Entonces un llanto llamó mi atención, mire a Carryn con una sonrisa, bese su frente diciéndole que todo iba bien, seguido otro llanto, le brindaba animo mi corazón se sentía más tranquilo pues ella estaba bien, entonces un tercer llanto se hizo presente.

—Te amo.

Escuche decir en un susurro gire a verla, había cerrado sus ojos entonces ese pitido.

—Carryn—sostuve su mano pero ella no me respondía —Carryn.

—Señor, debe salir.

—No, no, esperen debo estar a su lado.

—Señor salga.

Una enfermera me hizo salir y yo solo pude verla desde lejos deseando ver sus ojos abiertos.