—Oh, por el amor de-, ¿puedo hacerte una pregunta y prometes no burlarte?— Preguntó Bucky con un cierto tono nervioso en su voz.

—Ajá.— Sam asintió.

—Lo nuestro es... ¿real? O sea, me refiero, ¿de verdad te gusto o es sólo platónico? Quiero... quiero estar seguro.

Sam lo observó desde abajo, arrodillado y sosteniendo una pequeña caja con un anillo después de haberle preguntado a Bucky si se casaría con él. —Estás bromeando, ¿verdad?