Lo que más me duele de todo es que nunca pudimos despedirnos, nunca tuvimos la oportunidad de decirnos un último "te amo" cara a cara, y eso me carcome profundamente. Después de unos días, finalmente logré completar mi libro, todo esto mientras estaba internado en el hospital y lidiando con crisis diarias que han convertido mi vida en un auténtico infierno. Sinceramente, deseo morir en este punto para finalmente encontrar descanso. Cuando todo esté en orden, emitiré una orden para que en mi próxima crisis me permitan partir. Nunca imaginé que llegaría a decir algo así. Es irónico, ¿Verdad? Pensé que viviría una vida larga y próspera.

Al menos, TaeTae, sé que vivirás por mí. Confío plenamente en ti.