Hola de nuevo, amor:

Han pasado varias semanas desde la última vez que te escribí una carta. He estado ocupado, enfrentando obstáculos, y tu padre ha intentado alejarme de ti, eliminando mis contactos para conseguir empleo. Sin embargo, no me he dado por vencido. Tengo noticias emocionantes que compartir contigo: una editorial está dispuesta a publicar mis libros. ¿Recuerdas todos esos manuscritos que pensé que nunca verían la luz? Por fin tendrán su oportunidad.

Me siento sumamente emocionado, y también estoy trabajando en un nuevo proyecto para evitar bloqueos creativos. Hace aproximadamente dos días, te vi camino a tu trabajo y noté que te ves más saludable y relleno. Sin duda, tu esposa debe ser una excelente cocinera. Siempre has disfrutado de la buena comida, aunque lamento no haber sido un chef tan talentoso como ella, a pesar de que siempre afirmabas que mi comida era tu favorita.

Durante este tiempo, he sentido mucho tu ausencia, pero sé que aprenderé a sobrellevarlo. No deseo que te sientas culpable, pues ambos cruzamos límites que no debíamos. Mi amor por ti permanece inquebrantable.