https://youtu.be/nkogNDpk0lg

— Me muevo hacia adelante, no veo a ningún de los bichos por el perímetro señora —la voz de Maxime no suena como si se tomase en serio la situación.

Ludmilla agudiza su oído, no escucha señales de ninguna amenaza, solo el sonido de las ramas moverse y cuervos que los observan, esperando poder presencial la masacre— April, quiero que te quedes a cubierto por la pared de piedra de la izquierda —luego se dirige a todos— lo mas probable es que el enemigo nos este esperando, debemos ser precavidos.

— Precaución es mi segundo nombre —contesta Rachid mientras se ubica al lado de April— ¿que te parece si después de esto salimos?

— Concéntrense —ordena Ludmilla— esto no es como en las practicas, si no se lo toman en serio les aseguro que regresaran en una bolsa.

— Lo que digas jefa, estoy vigilando —contesta Maxime.

— Espero que te quede claro Rachid —dice April mientras se aleja un poco de su compañero.

Ludmilla observa la meseta de su derecha— nos moveremos por el costado derecho, así solo nos preocuparemos de posibles ataques por el lado izquierdo.

Todos avanzan acorde a las instrucciones, Maxime se esconde detrás de un árbol derribado, mientras que April lo hace en uno que aun sigue en pie, Rachid se queda debajo de ella y unos pasos atrás de Ludmilla que se cubre con una roca.

— Adoro como se ve su trasero desde acá jefa —dice Rachid poniéndose cómodo.

— Permiso para volarle la cabeza —dice April apuntando desde arriba de él.

— Deja que lo hagan los bichos —contesta Maxime mientras se pone en guardia.

Ludmilla cambia del francotirador a la pistola, avanza mas adelante, detrás de otra enorme roca, desde allí puede ver rastros de fuego, lo mas probable es que en esa dirección allá caído la nave— avancen a la cobertura inferior, permanezcan detrás mio.

— Jefa —dice April— acabo de escuchar un sonido extraño, no sabría describirlo, pero no es humano.

— Nos estamos acercando, posición de linea recta —Ludmilla saca su francotirador— me preparare para cubrirlos, avancen con cuidado.

— Afirmativo —dicen los tres mientras buscan cobertura un poco mas adelante.

— Veo la nave —dice Maxime— no encuentro rastros del enemigo, pero acabo de escuchar el sonido extraño —avanza un poco, ahora puede ver escombros, piezas de la nave desparramadas por el suelo— no puedo creer que gran parte sigue intacta.

— También la quiero ver —Rachid corre a una cobertura mas próxima— es como en las películas, esa cosa es grande.

— Grande y todo, nosotros lo bajamos —contesta April— y ahora vamos a borrarlos de este planeta.

— Mezclémonos con los arboles quemados de la izquierda —ordena Ludmilla— al parecer se han atrincherado al interior de su nave.

— ¿Que rayos?

— ¿Que pasa Maxime? ¿ganas de ir al baño? —dice Rachid.

— acaba de aparecer un enemigo, era una mancha brillante que se acaba de convertir en un soldado.

— ¡April, Maxime! Permanezcan a cubierto entre los arboles, Rachid prepárate a disparar por si sale de la cobertura, haré lo mismo con mi arma.

Mientras permanecen a cubierto Rachid observa con atención el lugar en que la nueva criatura se ha puesto a cubierto— sal de allí chivito, chivito, sal de allí chivito.

En cuanto aparece desde la cobertura se queda impresionado, su cuerpo emana energía, es como si una armadura estuviese siendo sujetada por el brillo, debido a la impresión no reacciona a tiempo y recibe un disparo.

— ¡Ah! ¡Joder! —se coloca a cubierto, golpea el árbol con su puño— espera a que te pille, te voy a partir el cráneo, si es que tienes uno.

— April, explota la cobertura con una granada, Rachid, Maxime, prepárense para disparar en caso de que no muera —ordena Ludmilla.

— ¡Comete esta piña! —grita April al tiempo que lanza la granada.

La cobertura se destruye en gran parte pero el alienigena sigue en pie, las balas de Rachid fallan pero Maxime logra acertarle.

— No era digno de mis balas —dice Rachid.

— Sectoides moviéndose, son dos —avisa April— uno se ha perdido de vista.

— Yo me encargo —dice Ludmilla preparando el francotirador, un disparo certero— baja confirmada.

— Sabia que esto seria fácil —dice Maxime mientras se adelanta un poco mas— acabemos con los que quedan y regresemos, estas botas me causan dolor de pies —rápidamente se dirige para abrir la puerta de la nave— no están acá adentro.

— ¿Que? —dice Ludmilla— ¿donde se...

— ¡A la izquierda! —grita Rachid, poniéndose a cubierto.

— ¡Maldición, estoy sin cobertura! —Maxime se agacha para usar el menor espacio posible.

— ¡Rachid, granada! —ordena la líder de la operación.

— Negativo, estoy fuera de rango.

— Entonces acaba con uno —reclama April.

— En eso estoy —su disparo se desvía hacia arriba —¡Maldicion!

— ¡Mierda! —grita Maxime al sentir como las balas cruzan su pecho.

Por la mente de Ludmilla viene los recuerdos de la muerte de McGregor— ¡Mantengan la calma! —ordena antes de que cunda el pánico— Rachid, retrocede y recarga tu arma, April, preparate para disparar en caso de que se muevan, lo mismo hare yo.

— se aproxima uno —Rachid apunta hacia el interior de la nave, la oleada de balas acierta pero no logra liquidar a su objetivo— traga plomo cabezón— un disparo pasa desde la izquierda pero no alcanza a tocar su espalda— ¿tu también quieres un poco? —dispara en respuesta pero falla.

El de la nave nuevamente intenta salir con la intención de flanquear a Rachid pero Ludmilla lo elimina con un disparo de su pistola, la batalla entre el sectoide y Rachid sigue en un concurso de quien falla mas disparos. Rachid avanza un poco mas adelante, para que sus compañeras se aproximen a apoyarlo.

Ludmilla nuevamente prepara su pistola— podemos derrotarlos —la bala da en uno de los brazos del sectoide.

La herida es regenerada por un sectoide de mas atrás, al instante en que se recupera avanza para semiflanquear a Ludmilla pero la soldada se hace a un lado para esquivar el disparo.

— Con ella no —dice Rachid avanzando y disparando al mismo tiempo, las balas cruzan la cabeza del alíen, dejando su cadáver en la entrada de la nave.

Ludmilla observa como a la izquierda aparece otro sectoide, dispara su pistola para acabarlo pero es inútil, solo consigue herirlo, la criatura apunta con su otro brazo y cruza el pecho de Rachid con una bala.

— ¡No, no, no! —April se descontrola y dispara sin apuntar al sectoide, el disparo acierta en el hombro de la criatura, pero está aún puede disparar.

— Contrólate April —Ludmilla apunta con su francotirador, debe acabar esto ahora.

La bala cruza el campo de batalla y revienta el pecho del sectoide.

— Aquí soldada Ludmilla Vinogradova, operación potro perdido acabada, solicito extracción, también tenemos dos bajas.