https://youtu.be/fB8TyLTD7EE

April presiona sus manos con fuerza, Sheng puede notar la inquietud de la mujer.

— Oye, no estás sola en esto, puedes contar con nosotros.

La Sargenta no deja de mirar el suelo— Cuando estaba en la escuela, siempre deseaba ser elegida como delegada de la clase, imaginaba todas las grandes cosas que podría hacer, pero me daba miedo no ser apoyada, ver esa pizarra y nadie votara por mí.

— Pues ahora cuentas con nuestro apoyo, confiamos en ti —Sheng coloca su mano sobre la espalda de ella.

— Lo sé y ahora me doy cuenta que el miedo tenia era una mentira, lo que realmente me aterra —mira a los dos reclutas— es ser la responsable de que todo salga mal, no quiero que ellos mueran.

— Entonces ordénaselos —dice Sheng— indícales cual es la prioridad.

April se pone de pie— Todavía recuerdo mi primera misión, estaba ansiosa y tenía miedo, estar allá afuera no es fácil, nuestras vidas están en riesgo, pero es importante saber que estamos juntos en esto, nos cubrimos las espaldas, me esforzare en asegurarme de que todos ustedes regresen con vida, se los prometo.

El recluta Rivera también se levanta— Minha mãe me disse que união é força.

El canadiense suelta una pequeña risa— me agrada su optimismo.

— ¿Lo entiendes? —le pregunta Sheng.

— Si —contesta mientras carga su arma— dice que la unión hace la fuerza.
La nave comienza a descender, los cuatro preparan sus armas y su equipo. En cuanto la nave toca el suelo y se abre la compuerta son recibidos por el desastre, personas huyendo, autos en llamas, las tiendas destrozadas.

April se siente agobiada por un instante, se de media vuelta para observar a sus compañeros— ¡Vamos! —les dice levantando su arma.

Los cuatro se ubican alrededor de una camioneta y taxi que están juntos, un auto más allá pueden ver a una civil aterrada.

April les hace señal de que esperen— Vigilen el perímetro mientras la voy a buscar, si no veo nada sospechoso, avancen.

April se aproxima a la mujer que solo se toma la cabeza y llora.

En cuanto la rescatada se percata de la presencia de la Sargenta, la abraza con todas sus fuerzas— Los mataron a todos... yo...yo...

April le toma la cara— Ya estas a salvo, mírame a los ojos.

La mujer la observa fijamente— Yo hui —solloza— los abandone, no me deje.

— Atrás están mis compañeros —señala en dirección a la nave— corre hacia ellos y te escoltaran a la nave de evacuación.

La mujer se aleja y April señala a su equipo para que avance. Los reclutas Chris y José avanzan hasta un semáforo y se cubren con la base de concreto de este, mientras que Sheng cubre la espalda de April desde la posición en que antes estaba ella.

Dos flotadores explotan la pared derecha del restaurante para salir hacia la calle, los cuatro aprovechan para disparar y consiguen lastimar gravemente a uno de ellos. April se mueve hacia una enorme camioneta, mientras Sheng se cubre en el taxi que fue rescatada la civil, José se mueve hacia la izquierda para apoyarse detrás de un macetero de piedra enorme, levanta su fusil y elimina al flotador herido.

— Adeus —dice mientras se agacha para cubrirse.

— El Brasileño mato a uno —informa Chris después de ocupar la anterior posición de José.

April arroja una granada de humo para cubrir a Sheng y ella— no bajen la guardia, aún está el otro —se despega de la camioneta para regresar al taxi, en el viaje es recibida por una ráfaga de balas del otro flotador, gracias a la pantalla de humo estas no aciertan.

Dos flotadores más se aproximan para unirse a la batalla, Sheng sin dudar saca su bazooka y los revienta, Chris se acerca a la entrada del local, desde su ángulo el flotador restante no tiene cobertura así que le dispara, debido a su inexperiencia su ataque se desvía ligeramente causando que la criatura conozca su ubicación, José se esconde detrás de una banca que está pegada a la pared del edificio y encaja un disparo letal.

— Gangues são mais difíceis —dice el recluta, aunque nadie comprende muy bien lo que dice, parece estar pasándosela bien.

April avanza hacia los restos de la pared que los flotadores destruyeron, mientras Sheng permanece un poco más atrás.

— Prepárense para ingresar —les dice April, su corazón va a mil horas, puede escuchar gritos de ayuda en el tejado del edificio y también desde su derecha, pero antes que todo debe asegurarse de que el área está limpia— ¿Señales de enemigos?

— Negativo —responden todos.

April corre hacia la derecha, detrás de dos macetas de cemento se encuentra un hombre tirado en el suelo agarrando sus piernas con ambos brazos para ocupar el mínimo espacio posible.

— Sálvame Dios, sálvame, por favor —repite el hombre una y otra vez.

— Oye —le dice April mientras revisa a su alrededor— levántate pronto, estamos evacuando.

Los ojos del hombre se llenan de esperanza— eres un ángel —se le acerca a las piernas de rodillas.

April se agacha para estar a su altura— No hay tiempo, corre en esa dirección, tenemos el área asegurada, la nave te evacuara —April se toca la oreja para hablar en el comunicador— ingresaremos en el edificio, asegúrense de tener cobertura.

Chris patea la puerta continuamente para romper el pestillo, en cuanto ingresa se oculta en un mostrador, más adelante y la derecha puede ver a una civil que contiene la respiración, el recluta avanza lentamente cuando le toca el hombro la mujer da un grito ahogado, el hombre se percata de que dos enemigos se han movido a algún lugar, le hace la señal a la mujer para que abandone el edificio por un agujero que hace en la pared con su granada, la entrada ya no es segura.

— ¡¿Que ha sido eso?! —pregunta April alterada.

— Saben que estamos adentro —advierte Chris— la entrada no es segura.

José se aleja de la entrada y se reagrupa con Sheng y April, el primero puede ver a Chris si este se asoma por el borde de los libreros.

— José, Chris, vengan a nuestra derecha —les ordena April— Sheng y yo avanzaremos hacia la izquierda, cubran nuestro costado y espalda.

April sale del edificio, observa como una civil se arroja lastimándose la pierna, a pesar de ello se intenta colocar de pie, la Sargenta avanza lentamente, la mujer se da cuenta y le señala el tejado, lentamente ella levanta su cabeza, la criatura de cuatro patas y garras en las manos la observa abriendo su boca que tiene enormes dientes.

— Esta en el borde de la terraza —dice susurrando.

Todos corren hacia afuera mientras April le dispara, la criatura resiste los ataques y se abalanza a toda velocidad, ella intenta retroceder mientras dispara pero resbala, la criatura se apoya en sus patas traseras para clavar las delanteras en el cuerpo de la mujer, pero el resto del equipo revienta el torso de la criatura en disparos, la Sargenta se hace a un lado evitando que el cadáver caiga sobre ella.

— Eso ha estado cerca —dice Sheng.

— Gracias —April se coloca de pie— ya me daba por muerta.

Sheng se aproxima para rescatar a la mujer de la pierna herida, desde la ventana pared puede observar a otro de esos acercarse, José le dispara pero falla, April solo consigue hacerle un rasguño.

— Prepárense —advierte la Sargenta— no son fáciles de eliminar

Nichols comienza con la ráfaga de disparos, pero la criatura continua avanzando hacia ellos, April le dispara lastimándole uno de sus brazos pero no se detiene, José apunta a las piernas provocando que se tambalee y finalmente Sheng dispara igualmente a las piernas derribándolo, estando en el suelo todos apuntan a su cabeza para eliminarlo.

Los cuatro se quedan en silencio, más allá del caos no escuchan a ningún enemigo.

— ¿Ganamos? —pregunta Sheng extrañado— ¿detuvimos el ataque?

— Y nadie acabo muerto —dice Chris aliviado— eso merece una ronda de tragos.

— Minha mãe me disse que o álcool é ruim.

— Tenemos que enseñarle español a este —dice Chris.

— Ya veremos eso en la base —comenta April— ahora debemos acabar la evacuación —tras decir eso desconecta su micrófono, sus ojos se empañan en lágrimas mientras escolta a una civil.

— ¿Esta bien? —le pregunta el hombre escoltado.

— Si —dice ella quitándose las lágrimas de los ojos— solo me alegra que todos están bien.