-Tóxica atracción- [DakenxIceman]

Notas: Ningún personaje me pertenece, todos son obra de Marvel y Stan Lee.

Advertencia: AU (No guarda relación directa al canon), Spoilers o cameos a cómics. Pareja homosexual. Infidelidad.

-Tóxica atracción-

¿Cómo mierda llegué a esto?

Desde hace mucho que Bobby Drake vivía preguntándose eso, desde hace tanto que incluso había olvidado el motivo detrás de su duda. Venía arrastrando tanto conflictos internos desde su muy joven edad que la lista solo crecía y crecía, hasta el punto en el que buscar el origen de todo le resultaba complicado.

Por eso ya no lo pensaba en la actualidad, tan solo se dejaba llevar esperando el mejor resultado posible. Fue así como pudo mantener una relación exitosa y dentro del estándar aceptable para quienes le rodeaban, aunque... ¿Por qué no lograba alegrarse pensando en ello?

Ese era el único punto incoherente en su vida ahora, y en verdad no tenía cómo explicarlo.

No lo entiendo. Hice todo lo que debía y aún así... Se preguntaba constantemente, arrastrando sus pies por la acera rumbo a su departamento.

Tenía una linda novia, un trabajo rentable y muy buena relación familiar... ¡Incluso un departamento propio, por Dios! Entonces... ¿Por qué sentía todo tan vacío?

Literalmente podía verse claramente sin pizca de emoción si es que algo en alguno de los ámbitos citados cambiara.

Suspiró.

Tal vez se estaba comportando algo malagradecido con su suerte, pero es que simplemente en momentos como este no lograba evitarlo.

Estaba solo, sin nada por hacer ni sonrisas que forzar. Eran de aquel instantes donde sólo quedaba descansar entre la incertidumbre y sus dudas. Llamar a algún amigo no era una opción muy viable, por lo que sabía de éstos estaban ocupados o un tanto lejos para venir un rato.

Tampoco quería resignarse a solo ir a su hogar como todos los días, quería... No sabía qué, pero no necesitaba. Algo que rompiera la rutina y le permitiera olvidar al menos por unos vagos instantes el vacío dentro de su ser.

Buscando una solución para eso fue que el fuerte sonido de la música a todo volumen de una discoteca que tendía a pasar de largo llegó a sus oídos, al fin captando su atención lo suficiente como para detener sus pasos y hacerle voltear.

Eso es...

Ya había olvidado la última vez que estuvo en un sitio como ese, acompañado de sus amigos y compartiendo algunos tragos hasta no recordar nombres. Excelentes años de preparatoria que nunca olvidaría, allí cuando aun sentía que podía despreocuparse unas horas y vivir la vida.

Ahora creía ya haber olvidado cuando fue la última vez que hizo algo remotamente parecido. Era una sensación lejana y nostálgica que revivía en sus oídos a través de música estridente y el frío de una noche en New York.

Simplemente... Demasiado seductor como para decirle que no.

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Increíble...

Era tal y como lo esperaba, un sueño psicodélico envuelto en alcohol y euforia.

No fue difícil entrar, no parecía ser un sitio de exclusividad ni nada por el estilo. Tan solo un lugar que aprovechaba la oportunidad de recibir jóvenes agotados recién salidos del trabajo o clases, de esos que requieren un respiro de sus vidas...

Como él.

Yo no debería estar aquí.

Se sentía como una pieza totalmente fuera de lugar desde el primer instante, y aun así no temió avanzar hasta la barra para agarrar de los pocos asientos libres aún, observando de manera fugaz alrededor para caer en cuenta del ambiente.

Música con estribillos dudosos al máximo volumen, la mezcla ambiental de alcohol en todas sus formas y bailes tan peligrosamente apegados que no parecía coincidencia que un par de moteles se encontraran tan cerca.

¿Un negocio redondo, quizás?

En definitiva cumplía los requisitos del tipo de lugares que sus padres de seguro nunca aprobarían, aunque ya era un tanto tarde para preocuparse por ello.

Rió un poco al pensarlo antes de volver su vista a la larga lista de cócteles.

Había de todo, pero hoy deseaba recordar los viejos con una cerveza fría, tal y como se atrevió a ordenar poco después. Lentamente sentía que podía acostumbrarse al ambiente, abriendo un par de botones del cuello tras aflojar su corbata y sonreír con gracia entre su primer trago.

Bebida de dioses que encendió sus sentidos junto a recuerdos pasados.

A Prior, Kate y John les encantaría este sitio, siempre andan quejándose sobre trabajo y la falta de cerveza al final del día. Rememoró cierta vieja charla, dejando al fin escapar un largo suspiro, sin percatarse que el asiento vacío al lado suyo había sido ocupado.

De haberlo previsto, tal vez la noche pudo haber seguido otro rumbo.

Pero no fue así.

- ...Hey ¿No es algo solitario para un buen trago? -Escuchó una voz a un lado, robando su atención desde el primer instante.- Nunca te había visto ¿Nuevo en la ciudad?

Se trataba de un joven, probablemente de más o menos su misma edad. Alto, rasgos asiáticos a pesar de un falta de acento, con un tatuaje muy peculiar recorriendo la zona izquierda de su hombro y brazo, absolutamente atractivo y con una presencia tan atrayente que podría desnudar a alguien con solo respirar.

Ni siquiera terminaba de creer que era a él quien le hablaba, no tendía a tanta suerte.

- ¿Ah? Bueno, yo... No, solo no acostumbro venir. -No pudo controlar su voz al principio, pero es que el impacto lo tomó de sorpresa.

Nunca lo había visto antes. Lo recordaría sin duda alguna de haber sido así.

No era del tipo de persona que uno olvidaría fácilmente.

- Lo noté. -Ladeó la cabeza tras ordenar su propia bebida con un simple gesto, con tal confianza que dejaba claro cuanta frecuencia rodeaba sus pasos por allí.- Un cara bonita como la tuya ya la hubiera conocido.

Directo y encantador, además de no prejuicioso.

- Tú, eso es...

¿Coqueteo? Quería creer que se lo imaginaba, pero la expresión divertida del contrario ante su burdo intento por responder le dio su respuesta.

Él también es...

Alguien difícil de encontrar en un sitio tan... Genérico.

- Daken Akihiro, pero puede llamarme por el nombre de pila. No me molesta. - Comunicó sin que se lo hayan pedido, aunque el rubio lo agradeció internamente.

Facilitaba las cosas.

- Bobby Drake, es un placer. -Ese fue el inicio real de su charla, así como de su noche.

Ambos lo sabían.

A partir de allí todo fue como un viaje en tren; rápido, entretenido y tan fluido como nunca antes pudo experimentar.

Ni siquiera con su actual novia cuyas llamadas ya predecía desde el disimulado vibrar de su bolsillo. Normalmente lo configuraba en silencio hasta quedar libre y entonces dejaba en normal; de esa forma, tenía la posibilidad de ser consciente de cuando alguien le escribía o llamaba en lo que regresaba; pero hoy olvidó hacerlo.

Era consciente de igual modo de la llamada, pero aun así la ignoró con total naturalidad en lo que la amena charla con aquel hombre continuaba.

No pudo evitarlo, es que él simplemente tenía algo que no podía ignorar.

Hablaron de una y mil cosas a la vez, tanto que llegó al punto en el que Bobby ya no percibió ningún intento de llamada más, y no le importó ni preocupó. Los temas fueron interesantes, pero ello tampoco fue lo importante como para robarle tantas horas durante aquella noche.

No, era él.

Daken era... Único en su clase. De ese tipo de encuentros que sientes diferente a cualquier otro.

No sabía explicar cómo o por qué, solo estaba seguro de que así era después de las primeras cinco oraciones compartidas. Tenía un algo que despertaba su curiosidad e interés lo suficiente como para olvidarse de responder a su novia luego de 10 llamadas pérdidas, así como también sus planes sobre ir a su departamento a descansar tras una larga semana.

Al final, no hizo nada de eso.

En lugar de ello, terminó "soltándose" un poco tras unos tragos, dejándose llevar por la adrenalina y el alcohol hasta un motel, en donde despertó varias horas después junto al mismo hombre que conoció antes, su número de teléfono ya registrado en su móvil y más de 12 mensajes de voz de la novia con la que no se atrevería a hablar desde hoy.

¿Qué demonios había hecho?

A partir de esta noche esa pregunta adquiriría un nuevo significado, así como la extraña satisfacción que llenaba el hueco en su pecho de pensar en una próxima vez.

Notas finales: Llevaba tiempo deseando escribir algo así, por lo que no imaginan lo satisfecha que me siento xd

¡Logro desbloqueado! (?)

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